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Rev Cubana Med Gen Integr 2005;21(1-2)

Editorial

Papel del médico y la enfermera de la familia en la actual batalla de ideas

Ana Oliva Ramos Rodríguez1

En los últimos años la política agresiva del gobierno de los Estados Unidos y de algunos sectores ultraderechistas de Miami, se ha manifestado en su mayor agudeza, a través de continuas agresiones y hostilidades en el marco de la política internacional contra el pueblo cubano, todo lo cual ha motivado la respuesta enérgica de todos los sectores de la población en combate continuo. La batalla de ideas, que realmente comenzó desde el propio triunfo de la Revolución, ha alcanzado su mayor auge en los últimos tiempos, y a ella se ha sumado de manera multitudinaria toda la población.

El sector salud, como uno de los más sensibles y de mayor sentido humanista e internacionalista, se une a nuestro pueblo en esta batalla, apoyando y participando de disímiles formas.

Teniendo en cuenta este proceso de profundización de las ideas que libra el pueblo cubano y el significado que tiene en el sector sanitario, al ser una de las principales conquistas de la Revolución, se impone profundizar la situación actual de trabajo político - ideológico con acciones prácticas y concretas.

Los Médicos de Familia, en su contacto directo con las comunidades se comportan como los principales comunicadores en este sentido. Desde el espacio del consultorio se fortalece la salud cubana con el perfeccionamiento en su preparación integral, el combate por mantener los indicadores de salud favorables que hoy se muestran al mundo, y el interés creciente por elevar cada vez más la satisfacción de la población.

El estrecho contacto con las masas permite a este ejército, que posee una formación de valores en correspondencia con nuestra sociedad socialista, influir de manera positiva en aquellos sectores de la sociedad que puedan quedar a la zaga y ser víctimas de la confusión que estas agresiones ideológicas puedan generar.

La participación de los Médicos y Enfermeras de Familia de manera masiva y destacada alzando su voz en cada una de las tribunas, desfiles o marchas a las que somos convocados por la dirección del país, es de las primeras muestras de la decisión de defender las conquistas de la Revolución en cualquier trinchera. También se ha llevado a cabo un proceso de revitalización de los consultorios, y se ha logrado mantener, a pesar del riguroso bloqueo, los principales programas como el de vacunación, la atención a pacientes de primer nivel de manera diferenciada y acorde con sus necesidades, entre otros más. Igualmente contamos con un considerable número de Médicos y Enfermeras de Familia que ya cumplen misión internacionalista en países de Centro América, África y América Latina, particularmente en Venezuela, los cuales divulgan la verdad del sistema social cubano por todo el mundo, la igualdad social a la que estamos acostumbrados, y el espíritu internacionalista y humano de nuestros profesionales.

El Ministerio de Salud Pública, redoblando sus esfuerzos, ha situado medios para la divulgación de la Batalla de Ideas en salas de hospitales, casas de abuelos, salones de espera, hogares maternos, etc., con el fin de mantener informada a la población y desenmascarar cada una de las patrañas perpetradas en contra nuestra. Se han creado también estrategias a todos los niveles, tanto por parte de las direcciones provinciales, municipales, como a nivel de base, todo para dar a conocer con claridad y nivel de detalle los logros del territorio, valorando los avances obtenidos, de tal manera, que sirvan para analizar la capacidad de respuesta real ante las distintas situaciones a que nos enfrentamos.

Los trabajadores, dado el momento en que vivimos, se han convertido en el centro del trabajo político-ideológico, valorando e identificando las dificultades de su centro, desarrollando una educación al respecto, tomando medidas para impedir que conductas o actitudes inadecuadas queden impunes, y se ha logrado que la crítica y la autocrítica sean el instrumento diario.

A través de nuestra organización sindical se discuten sistemáticamente documentos de trabajo político-ideológico, y se mantiene vigente el cumplimiento de la Resolución 232, que garantiza la prestación del servicio al pueblo. Igualmente, se trabaja en la identificación de las debilidades para su erradicación y lograr así la condición de Colectivo Moral, así como la ratificación y rehabilitación de consultorios que han sido declarados con la categoría Guardián por la Salud.

Dra. Ana Oliva Ramos Rodríguez

Recibido: 6 de enero de 2005. Aprobado: 6 de enero de 2005.
Dra. Ana Oliva Ramos Rodríguez. Policlínico Docente "Camilo Cienfuegos". San Cristóbal, Pinar del Río, Cuba.

1 Especialista de I Grado en Medicina General Integral.

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