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Revista Cubana de Obstetricia y Ginecología

versão impressa ISSN 0138-600Xversão On-line ISSN 1561-3062

Rev Cubana Obstet Ginecol v.25 n.3 Ciudad de la Habana set.-dez. 1999

 

Ginecología

Hospital Ginecoobstétrico docente "Ramón González Coro"

Síndrome de disfunción cervical con reversión menstrual

Dr. Nelson Rodríguez Hidalgo1

RESUMEN: Se describe el síndrome de disfunción cervical con reversión menstrual como causante de muchos cuadros de dolor pélvico crónico e infecciones como la endometriosis. Ya que el cuadro clínico de estos trastornos está bien establecido pero poco estudiado, se estudia su identificación, diagnóstico, etc., para poder establecer el tratamiento adecuado.

Descriptores DeCS: TRASTORNOS DE LA MENSTRUACION; CUELLO UTERINO/fisiopatología; ENFERMEDADES DEL CUELLO UTERINO.
 

Desde hace muchos años se plantean una serie de alteraciones de la función menstrual que por su importancia hemos querido describirlas como "síndrome de disfunción cervical con reversión menstrual", para darle independencia e identificar sus síntomas, de forma tal que permitan un mejor diagnóstico, pues se ha considerado que su presencia sea el factor etiológico de muchos cuadros de dolor pélvico crónico, así como de afecciones tan importantes como la endometriosis. En la actualidad y debido quizás al incremento en el número de abortos y dispositivos intrauterinos, y en ocasiones a factores constitucionales hereditarios o genéticos, es muy frecuente que se establezca este síndrome, al existir una estenosis u oclusión anatómica o funcional del orificio cervical interno o de todo el canal cervical que hace que la sangre menstrual fluya hacia la cavidad abdominal en lugar de vertirse al exterior, lo que con el paso del tiempo provoca grandes trastornos a la mujer. Como consideramos que estos trastornos ofrecen un cuadro clínico bien establecido, pero a veces poco identificado, diagnosticado, investigado y tomado en cuenta, es que hemos decidido reportarlo como un síndrome para establecer todos los elementos que deben ser buscados con acuciosidad, tanto para orientar su tratamiento como para controlar su desaparición1,2 (fig.).

Figura1
FIG. Estenosis marcada del orificio cervical interno y porción alta del canal cervical



El elemento fundamental de este síndrome es el dolor pélvico, originado con más frecuencia por 4 causas fundamentales:
 

  • Infección genital.
  • Trastornos funcionales del ovario (quistes foliculares o del cuerpo amarillo).
  • Afecciones asociadas (tumoraciones genitales, endometriosis u otras).
  • Estenosis anatómica o funcional del cuello uterino con reversión menstrual.


Las infecciones son la causa que primero se invocan ante un dolor pélvico y aunque se ven más cada día, no siempre son quienes lo motiva. No obstante ello, deben ser tratadas en cuanto se diagnostiquen y seguida su evolución hasta estar seguros de la curación total, lo que definirá si eran responsables del cuadro doloroso lo que nos creará las condiciones para que podamos realizar cualquier intervención o prueba invasiva necesaria.

Los trastornos funcionales del ovario motivan con mucha frecuencia dolor y pueden ser diagnosticados si se realiza una cuidadosa historia clínica, que precise el momento en que aparecen, la duración y el tipo de dolor. En el caso de los quistes de retención folicular comienza como una molestia después del 14to. día del ciclo, que va aumentando de intensidad ligeramente a medida que pasan los días, se retrasa la menstruación hasta que se produce un cuadro agudo de dolor con irradiación hacia la parte baja del abdomen y que posteriormente motiva deseos de defecar con algunos pujos. A partir de ese momento comienza a mejorar el cuadro, ocurre la menstruación, y en unos días desaparece el dolor. Con frecuencia se acompaña de un ligero retraso menstrual.

Son muchas las afecciones ginecológicas que producen dolor con distintas características e intensidad y por ello no podríamos pretender establecer un patrón para éste; lo importante es que descartemos la existencia de estas afecciones o hagamos una buena encuesta sobre las particularidades y características fundamentales del dolor, que quizás nos lleve a ubicarlo en una de estas afecciones.

La disfunción del cuello uterino es una de las entidades que con más frecuencia produce trastornos ginecológicos importantes y la consideramos la menos diagnosticada. Tiene una gran ventaja: cuando se diagnostica tempranamente es relativamente fácil de tratar y evita mucho dolor y evoluciones terribles como la endometriosis avanzada; me atrevo a asegurar que es la causa de esta afección y que el dolor que en ella ocurre, es muchas veces más por la retención de sangre en el útero y la lucha que se establece para expulsarla a través de un cuello bloqueado, que por los otros mecanismos que se indican para explicar el dolor en la endometriosis, como la irritación de filetes nerviosos, producción de prostaglandinas y otras sustancias, inflamación local del peritoneo u otras. La sangre menstrual contiene células endometriales viables, que cuando pasan del útero a las trompas y por ellas a la cavidad peritoneal, se fijan y originan los focos endometriósicos.

La disfunción o insuficiencia anatomofuncional del cuello uterino se puede deber a múltiples causas, dentro de las cuales consideramos como más frecuentes:
 
 

  • Estenosis congénita o constitucional del canal cervical.
  • Estrechez secundaria a aborto provocado o manipulación para colocar DIU.
  • Menstruación excesiva y anormal (con coágulos).


El cuadro clínico típico estaría dado por:
 

  • Inicio del dolor menstrual sin que aparezca sangrado (ha comenzado a acumularse la sangre menstrual en el útero pero no puede salir por el cierre del cuello).
  • La menstruación aparece como manchas obscuras, por varios días, con aumento progresivo del dolor (al acumularse mucha sangre pequeñas cantidades logran salir por el estrechado canal).
  • El dolor inicial, de tipo cólico uterino disminuye ligeramente mientras se instala una molestia con sensación de inflamación en hipogastrio y deseos de defecar (la sangre almacenada en el útero busca salida por las trompas a la cavidad abdominal donde irrita el peritoneo y el recto).
  • Sangrado menstrual muy obscuro, brusco, con alivio importante del dolor (se abre el cuello uterino y deja salir la sangre almacenada).


Es muy significativa la constancia de este cuadro, y puede ser recogido perfectamente con un interrogatorio bien realizado. Una vez detectada la afección debe ser confirmada con una ultrasonografía que demuestre el canal cerrado y el hematómetra, lo cual es suficiente para que procedamos a permeabilizar el canal cervical, drenar la sangre acumulada y dilatar el cérvix, con pinzas portagasas o con bujías, hasta los 8-10 mm.

Aún en los cuellos más pequeños y estenosados se logra la dilatación, aunque no se debe sobrepasar los 8 mm, y alcanzar los 10 mm sin que se produzca un desgarro o una laceración cuando con las bujías logramos la mayor dilatación atraumática posible nos gusta introducir las ramas de la pinza portagasas en el canal cervical y abrirlas, pues así forzamos un poco más el orificio cervical interno, que en ocasiones puede ser el único punto cerrado.

El elemento fundamental de este síndrome es que si se diagnostica y trata en cuanto se presenta se logra su reversión total, pero si se demora puede establecerse el cuadro clínico típico e incluso la endometriosis. Una vez realizada la dilatación del cuello se debe citar a la paciente después de cada menstruación para confirmar que han desaparecido los síntomas, y aconsejarle que en caso de que reaparezcan nos vea de inmediato para revisar la permeabilidad del canal y repetir la dilatación si es necesario.

Mecanismo de aparición de la endometriosis

La entrada de sangre menstrual y de fragmentos de tejido endometrial al abdomen desencadena un mecanismo de defensa inmunológica con afluencia hacia ese sitio de gran cantidad de leucocitos, fundamentalmente macrófagos, e inicio de una respuesta inflamatoria hística con concentración local de prostaglandinas, interleukinas y otras sustancias que contribuyen a favorecer la fagocitosis y destrucción de todos los tejidos invasores. Cuando la entrada de estos elementos es muy grande o se asocia con la existencia de una pobre respuesta de defensa inmunitaria quedarán células que no son devoradas y que por pertenecer al endometrio poseen una gran capacidad de multiplicación; así, se establecen focos de este tejido en el peritoneo, el tejido celular laxo de la pelvis, las trompas, etc., y al ocurrir la deprivación hormonal del ciclo ovárico, que motiva el sangrado del endometrio normal, también se produce sangrado en los focos endometriósicos, que si están en el espesor de un tejido sólido irán creando un hematoma en su periferia, que crecerá con cada ciclo, pero que a la vez se organizará y motivará una reacción de fibrosis y solidificación en los límites del hematoma, que favorecerán la constitución de la controvertida cápsula de los endometriomas, que donde más se origina es en los focos que crecen en el espesor del tejido ovárico.

SUMMARY: Cervix dysfunction syndrome with menstrual reversal was described as the cause of many chronic pelvic pains and infections such as endometriosis. Since the clinical picture of these disorders is well-established but scarcely researched, we studied their identification, diagnosis and other aspects to set the most suitable therapy.
 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

  1. Rodríguez Hidalgo, N. Cirugía ginecológica y obstétrica. T I. Editorial Pueblo y Educación, La Habana, Cuba, 1993;330-45.
  2. . Cirugía laparoscópica ginecológica. Editorial Vigo, Madrid, España, 1999. 321-52.


Recibido: 24 de agosto de 1999. Aprobado: 27 de agosto de 1999.
Dr. Nelson Rodríguez Hidalgo. Hospital Ginecoobstétrico Docente "Ramón González Coro". Ciudad de la Habana, Cuba.
 
 

1 Doctor en Ciencias. Profesor Titular, Especialista de II Grado en Ginecoobstetricia. Jefe de Servicios de Cirugía, Endoscopia e Infertilidad.

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