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Revista Cubana de Cirugía

versão On-line ISSN 1561-2945

Rev Cubana cir v.39 n.2 Ciudad de la Habana maio-ago. 2000

 

Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeiras", Ciudad de La Habana

Resultados del tratamiento quirúrgico de los aneurismas múltiples del polígono de willis

Dr. Humberto Hernández Zayas,1 Dr. Justo Luis González González2 y Dra. Carmen Pérez Nieves3

RESUMEN

Se realizó un estudio retrospectivo de 54 pacientes con aneurismas múltiples del polígono de Willis, intervenidos quirúrgicamente en el Servicio de Neurocirugía del Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeiras", desde enero de 1985 hasta diciembre de 1996. Se diagnosticaron mediante estudios angiográficos 121 sacos, de los cuales 115 se trataron quirúrgicamente en un tiempo y 4 en 2 tiempos. Dos sacos intracavernosos asintomáticos no fueron abordados. El abordaje de los 23 aneurismas situados bilateralmente fue unilateral en 19 casos (82,6 %) y bilateral en 4 (17,4 %). Se presillaron un total de 115 sacos y 4 fueron reforzados. Se determinó que el grupo de edad entre 41 y 50 años (33,3 %) y el sexo femenino (75,9 %) fueron los más afectados. La asociación de sacos situados bilateralmente en la circulación anterior fue la que más se observó (38,9 %). No se pudo demostrar que los resultados fueran dependientes del tipo de asociación, pero la combinación sacular anterior y posterior, así como los pacientes con multiplicidad sacular unilateral en la circulación anterior fueron los de mayor mortalidad (40 y 13,3 %), de lo que se infiere que el abordaje unilateral no influyó de forma negativa sobre los resultados, en los pacientes con aneurismas situados a ambos lados de la línea media. La mortalidad general fue de 9,25 % y la quirúrgica de 5,5 %.

Descriptores DeCS: ANEURISMA CEREBRAL/cirugía; CIRCULO DE WILLIS/cirugía.

Según Fager, Sir Geoffrey Jefferson en 1934 realizó la primera craneotomía bilateral para el tratamiento de 2 aneurismas, mientras Hamby atribuye la primera intervención de ese tipo a Schwart, en 1948.1 En 1951 Basset trató quirúrgicamente un aneurisma de la arteria cerebral media derecha mediante presillamiento del cuello y otro de carótida supraclinoidea mediante atrapamiento. Baker en 1953, reportó el tratamiento quirúrgico de 2 aneurismas de la carótida interna derecha y Gass publicó el tratamiento de 3 aneurismas intervenidos en operaciones sucesivas; pero no fue hasta 1957 en que Biguelow da a conocer una extensa serie de pacientes con esta afección tratados quirúrgicamente.2 En 1971 Moyes informó sobre el tratamiento quirúrgico de aneurismas incidentales en 5 pacientes con diagnóstico de multiplicidad.1,2

Hasta hace pocos años el diagnóstico de aneurismas múltiples en un paciente era un hecho de pronóstico sombrío y en la mayoría de ellos una contraindicación quirúrgica, pero la acumulación de experiencia práctica, la introducción del microscopio quirúrgico, los instrumentos de microcirugía, presillas de diseño variado y los grandes avances en las técnicas de neuroanestesia han hecho que la evolución y el pronóstico de vida hayan mejorado en los últimos años.

En Cuba la primera referencia sobre el tema data de 1963, año en el cual el profesor Roger Figueredo trató quirúrgicamente a un paciente con un aneurisma de la arteria cerebral anterior derecha y otro de la arteria cerebral media izquierda en 2 tiempos. En 1978 Molina reunió toda la experiencia acumulada por los cirujanos del Instituto de Neurología y Neurocirugía hasta ese momento y describió el manejo de 87 pacientes con aneurismas intracraneales múltiples.

La multiplicidad reportada en diferentes series entre el 14 y el 33 %, otorga al tratamiento quirúrgico de la afección aneurismática mayor complejidad y menor probabilidad de éxito.3-8

El presente artículo ofrece una evaluación de los resultados del tratamiento quirúrgico de esta enfermedad en el Servicio de Neurocirugía del Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeiras", en un período de 12 años, donde los aneurismas intracraneales múltiples representaron el 18,4 % de la casuística.

MÉTODOS

Se realizó un estudio retrospectivo de 54 pacientes con aneurismas múltiples del polígono de Willis, tratados quirúrgicamente en el Servicio de Neurocirugía del Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeiras", en el período comprendido entre enero de 1985 y diciembre de 1996. Se evaluó el comportamiento de una serie de variables tales como edad, localización de los sacos, presencia de vasoespasmo angiográfico preoperatorio, tamaño del mayor saco, estado neurológico preoperatorio y momento quirúrgico, así como su influencia sobre el estado al egreso.

El estado preoperatorio se determinó según la escala de la World Federation of Neurosurgical Societies modificada por Sano y Tamura en 1984, y el estado al egreso por la escala de Glasgow para resultados.9,10

Salvo en 2 pacientes que presentaron dificultades durante el cateterismo, en todos se realizaron angiografías de los 4 vasos.

La técnica que se empleó para el abordaje quirúrgico fue la craneotomía frontolateral en 48 pacientes, creaneotomía pterional en 5 y half and half en 1. Además, uno de los casos, al cual se le practicó una craneotomía frontolateral, también fue objeto de una craneotomía posterolateral para el abordaje de un aneurisma de la arteria cerebelosa posteroinferior (PICA).

La información recogida se procesó y analizó mediante los programas FOX Base y SPSS sobre Windows v.6. Se obtuvieron los porcentajes para evaluar la relación entre las variables cualitativas, y se compararon éstos por la prueba de chi cuadrado. Los resultados se muestran en tablas de distribución de frecuencia simple y tablas de contingencia.

RESULTADOS

Ciento veintiún sacos se diagnosticaron en 54 pacientes, de los cuales 42 presentaron 2 aneurismas, 11 de 3, y en 1 enfermo se apreciaron 4. De estos pacientes, 51 (94,4 %) fueron abordados en un mismo tiempo quirúrgico. De ellos 2 con aneurismas de cerebral media en espejo necesitaron abordaje bilateral. Los 3 restantes, 2 de ellos con aneurismas en espejo de cerebral media y comunicante posterior, y otro con aneurismas en la circulación anterior asociado a uno de la PICA, se abordaron en 2 tiempos. Ciento quince de los sacos diagnosticados se presillaron (95 %), 4 reforzados con poliuretano por la emergencia de vasos perforantes del propio saco, y 2 sacos intracavernosos no se trataron quirúrgicamente.

El sexo femenino representó el 75,9 % de la casuística (41 casos).

Las localizaciones más comunes fueron en la carótida supraclinoidea (comunicante posterior en espejo, el 13 % y comunicante posterior-oftálmica, el 11,1 %). La asociación de aneurismas en el complejo cerebral anterior-comunicante anterior, con otros situados en una arteria cerebral media tuvo también en nuestra serie una alta incidencia (tabla 1).

TABLA 1. Distribución de pacientes según localizaciones saculares
Localizaciones saculares 
No.
%
Comunicante posterior-cerebral media
5
9,3
Comunicante posterior bilateral
7
13,0
Comunicante posterior-oftálmica
6
11,1
Comunicante anterior-cerebral media
5
9,3
Cerebral media bilateral
3
5,6
Comunicante anterior-oftálmica
5
9,3
Otras asociaciones
23
42,6
Total
54
100,0

El 81,5 % de los pacientes en la serie (44 sacos) egresaron con buen estado neurológico (grado 1 de Glasgow), y el 9,3 % de ellos fallecieron (5 pacientes).

En el análisis bivariado se detectó asociación entre la edad y los resultados, donde los 5 fallecidos correspondieron a los grupos de edades más frecuentes (de 41 a 60 años) (tabla 2).

TABLA 2. Distribución de pacientes según grupos de edades y estado al egreso
Estado al egreso
Grupos etáreos s 
Buenos resultado
Secuelas mínimas
Secuelas graves
Fallecidos
Total
(años) 
No.
%
No.
%
No.
%
No.
%
No.
%
Menos de 31 años
3
75,0
0
0,0
1
25,0
0
0,0
4
7,4
31-40
14
100,0
0
0,0
0
0,0
0
0,0
14
25,9
41-50
13
72,2
3
16,7
0
0,0
2
11,1
18
33,3
51-60
12
75,0
1
6,3
0
0,0
3
18,8
16
29,6
61 y más
2
100,0
0
0,0
0
0,0
0
0,0
2
3,7
Total
44
81,5
4
7,4
1
1,9
5
9,3
54
100
X2= 20,53.
p < 0,05.

Al analizar la asociación detectada entre el estado clínico preoperatorio y los resultados quirúrgicos, se observa que éstos fueron mejores en los pacientes operados en los grados I, II y IIIa y que los operados en el grado IIIb, aunque sólo fueron 2, evolucionaron desfavorablemente (tabla 3).

TABLA 3. Distribución según estado neurológico preoperatorio y estado al egreso
Estado neurológico 

Estado al egreso

preoperatorio 
Buenos resultados
Secuelas mínimas
Secuelas graves

Fallecidos

Total

 
No.
%
No.
%
No.
%
No.
%
No.
%
Grado I
29
67,9
1
3,0
0
0,0
3
9,1
33
61,1
Grado II
14
77,8
3
16,7
0
0,0
1
5,6
18
33,3
Grado IIIa
1
100,0
0
0,0
0
0,0
0
0,0
1
1,9
Grado IIIb
0
0,0
0
0,0
1
50,0
1
50,0
2
3,7
Total
44
81,5
4
7,4
1
1,9
5
9,3
54
100,0
X2= 34,97.
p< 0,05.

DISCUSIÓN

No se demostró relación significativa entre la localización de los sacos y los resultados al egreso, y la mortalidad de los pacientes fue inferior en los aneurismas bilaterales de la circulación anterior (4,8 %), así como en las asociaciones de aneurismas lateralizados en la circulación anterior con otros ubicados en posición axial, donde no hubo fallecidos (fig.1).

FIG. 1. Territorio vascular y estado al egreso.
FIG. 1. Territorio vascular y estado al egreso.

El hecho de que en el 18,4 % de los enfermos operados por aneurismas intracraneales en el Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeiras" estuviera presente la multiplicidad de estas lesiones reafirma la elevada frecuencia de aneurismas silentes observada por numerosos autores y enfatiza la importancia del estudio angiográfico del sistema vascular intracraneal completo, en pacientes con hemorragia subaracnoidea.3-8,11-16

La estrategia de abordar preferiblemente en un tiempo todos los sacos respondió al objetivo de evitar el sangramiento o resangramiento de los sacos no presillados en el primer intento, sobre lo cual existe consenso en la actualidad.17-22

El franco predominio del sexo femenino reportado por la mayoría de los autores en series de aneurismas en general, parece hacerse más manifiesto cuando se trata de aneurismas múltiples, según sugiere el análisis de los resultados en nuestra casuítica.4,5,19-23

En relación con las asociaciones saculares, las cifras en la presente serie son similares a las citadas por los autores consultados. Locksley observó aneurismas en espejo en los segmentos comunicantes de las carótidas supraclinoideas en el 49 % de sus angiografías.24 Otros reportan la asociación de comunicante anterior-cerebral media como la más frecuente.17-19

El incremento del riesgo quirúrgico con la edad es aceptado por la mayoría de los especialistas en el tema, al igual que la fuerte dependencia que los resultados quirúrgicos tienen del estado preoperatorio.9,25 El deterioro de la circulación cerebral y las enfermedades asociadas, más frecuentes por encima de los 60 años, hacen que en estos pacientes los resultados que se esperan sean más desalentadores que en los de menor edad; no obstante, el perfeccionamiento de los métodos anestésicos y de los medios quirúrgicos, así como los avances en cuanto a la protección cerebral, han posibilitado que cada vez se operen con menos riesgo los pacientes de mayor edad, lo que eleva constantemente el límite de ésta para contraindicar la intervención quirúrgica. No puede decirse lo mismo en relación con el estado clínico preoperatorio, cuya influencia sobre los resultados es determinante y ha motivado que algunos autores sólo intervengan en los 2 primeros estadios y emplear medidas enérgicas para revertir los grados más desfavorables.7,14,25-26

La observación más sugerente en el presente trabajo la constituye sin dudas el hecho de que al haberse utilizado un abordaje unilateral en 19 de los 23 pacientes con aneurismas situados a ambos lados de la línea media en la circulación anterior (2 de ellos asociados a aneurismas en posición axial), no se pudo demostrar dependencia entre los resultados y las asociaciones aneurismáticas, y se observó además que la mortalidad fue inferior en este grupo que en los aneurismas unilaterales, de lo que podemos inferir que el abordaje unilateral en estas localizaciones no repercutió desfavorablemente sobre los resultados y constituye un elemento que se debe considerar para recomendarlo, si tenemos en cuenta que esta conducta elimina los riesgos de un segundo acto quirúrgico. Estos resultados niegan lo planteado por Cervoni y otros, que afirman que los resultados dependen estrechamente de la uni o bilateralidad de los sacos,27 y se ajustan a los criterios de Khanna y Drake,28,29 para quienes un aneurisma en la circulación posterior supone un peor pronóstico (fig.2).

FIG. 2. Abordaje a aneurismas bilaterales.
FIG. 2. Abordaje a aneurismas bilaterales.

En nuestra serie no se demostró influencia del tamaño del mayor saco, la presencia de vasoespasmo angiográfico y el momento quirúrgico sobre los resultados, aunque es conveniente aclarar que la mayoría de los pacientes (94,5 %) fue objeto de cirugía tardía (más de 7 días) y ninguno de cirugía precoz (en las primeras 72 horas), por lo que nuestro trabajo no nos permite llegar a conclusiones en este sentido.

SUMMARY

A retrospective study of 54 patients with multiple aneurysms in the circle of Willis, who had been operated on from January 1985 to December 1996 in the Neurosurgery Service of «Hermanos Ameijeiras» Hospital, was performed. Angiographic studies detected 121 sacs of which 115 were surgically treated in one attempt and 4 in two attempts. Two intracavenous asymptomatic sacs not approached. The approach of 23 bilaterally located aneurysms was unilateral for 19 cases (82.6 %) and bilateral in 4 (17.4 %). A total of 115 sacs were clamped and 4 reinforced. It was determined that 41-50 year age group (33.3 %) and females (75.9 %) were the most affected. The association of bilaterally located sacs in the anterior circulation was the most observed association (38.9 %). It could not be proved that the results dependen on the type of association but the highest mortality was recorded in anterior and posterior saccular combination and in patients with multiple unilateral sacs in the anterior circulation (40 % and 13.3 %). It can be inferred from this that the unilateral approach does not have a negative impact on the results achieved in patients with aneurysms at both sides of the midline. General mortality was 9.25 % and surgical mortality amounted to 5.5 %.

Subject headings: CEREBRAL ANEURYSM/surgery; CIRCLE OF WILLIS/surgery.

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Recibido: 3 de febrero de 1999. Aprobado: 1ro. de marzo de 1999.
Dr. Humberto Hernández Zayas. Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeiras". San Lázaro, esquina a Belascoaín, municipio Centro Habana, Ciudad de La Habana, Cuba.
 
 

1 Especialista de II Grado en Neurocirugía. Jefe del Grupo Nacional de Neurocirugía. Profesor Titular.
2 Especialista de I Grado en Neurocirugía. Jefe del Servicio de Neurocirugía del Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeras".
3 Especialista de I Grado en Bioestadísticas.
   

 
 
 

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