VISIÓN ACTUAL

Posmodernidad y salud bucal

 

Postmodernism and oral health

 

 

Jorge Luis Bécquer Águila,^I Ana Margarita Mayor Puerta^II

^IUniversidad de Ciencias Médicas de La Habana. Facultad "10 de Octubre". La Habana, Cuba.
^IIUniversidad Central de las Villas. Facultad de Ciencias Médicas. Villa Clara, Cuba.

 

 

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RESUMEN

Introducción: en el curso de la historia de la humanidad se han producido numerosos cambios sociales. En el siglo XX, en los países desarrollados de occidente surgió una nueva forma de pensar y de entender el mundo, llamada posmodernismo, la cual difiere de lo que hasta entonces se llamó "espíritu de la modernidad". Al abordar este tema se pretende aproximar a los profesionales de la Estomatología al conocimiento de los enfoques de esa corriente filosófica, para su aplicación en la docencia en particular, y en la práctica de esta profesión en general.
Comentarios principales: la posmodernidad no es susceptible de una definición clara ni de una teoría acabada que la explique. Es, ante todo, un nuevo estilo de vida. Podemos hablar de que hay una posmodernidad de la calle, y otra de los intelectuales. Estamos refiriéndonos a lo más contemporáneo de lo contemporáneo. La posmodernidad es el tiempo del "yo", del intimismo. También el individuo quiere salud desde la tecnología de punta, porque "es mejor salud". El profesional anhela estar pertrechado de lo último, conocerlo, poseer el más moderno de los adelantos.
Consideraciones globales: es imperativo abrir los ojos a esta realidad. El posmodernismo ofrece oportunidades al análisis de la realidad; un aprendizaje en este camino debe llevar al sentido común, buscando que la creatividad sea acompañada de sensibilidad, humanismo y solidaridad, de manera que se aporte a lo que enriquece la vida.

Palabras clave: posmodernismo, contemporáneo, estomatología, salud bucal.

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ABSTRACT

Introduction: in the course of the history of humanity, numerous social changes have taken place. In the twentieth century, in developed Western countries, a new way of thinking and understanding the world emerged, postmodernism, which differs from what until then was called "spirit of modernity". In addressing this issue, it is intended to bring Stomatology professionals to knowledge of the philosophical approaches for application in teaching in particular and in the practice of this profession in general.
Relevant comments: postmodernism is not susceptible of clear definition or a finished theory to explain it. It is, above all, a new lifestyle. We can say there is a street postmodernism and other intellectual postmodernism. We are referring to the most contemporary. Postmodernism is the time of "I", the intimacy. Also the individual wants health from the technology, because it is "better health". Professionals long to be armed with the latest technology, master it, and possess the most modern advances.
Global considerations: it is imperative to open eyes to this reality. Postmodernism offers opportunities to the analysis of reality; learning in this path should lead to common sense, seeking creativity to be accompanied by sensitivity, humanism and solidarity, so as to contribute to what enriches life.

Keywords: postmodernism, contemporary, dentistry, oral health.

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INTRODUCCIÓN

La modernidad fue el período histórico que transitó entre la edad media y la edad contemporánea. Se caracterizó por la secularización del saber, la consolidación de la ciencia, el avance del librepensamiento, los avances tecnológicos, la urbanización, la apertura de nuevas rutas de navegación, la creciente actividad mercantil y artesanal, la configuración del estado moderno, el progreso como ley social, la primacía del sujeto y la infinita fuerza de la razón.

En la edad contemporánea se destacaron la Revolución Industrial y el desarrollo del capitalismo, acentuando grandes desigualdades entre el primer y el tercer mundo. Aparecieron y se desarrollaron en esa época el marxismo y la concepción materialista de la historia.

Con todo este bagaje, la humanidad enfrentó el siglo XX con la mayor esperanza de mejoría. El desarrollo del pensamiento y la revolución tecnológica le ofrecieron las posibilidades de bienestar y prosperidad jamás alcanzadas.¹

 

El ESPÍRITU DE LA MODERNIDAD

Aunque la posmodernidad es un fruto del pensamiento en los países desarrollados de Occidente, la tecnología y la globalización la han difundido por todo el planeta y se muestra incluso en países con una realidad social diferente a la de los países ricos. Internet y la televisión –básicamente– difunden a todas las latitudes los avances tecnológicos, de manera que muchas personas poseen información al respecto. La Estomatología –que es una disciplina bastante nueva, y alcanza prosperidad en el siglo XX– no se ha quedado detrás en la tecnología de punta (el desarrollo de la estomatología estética y cosmética es un ejemplo de ello).

Conjuntamente con la influencia internacional, se ha producido en la sociedad una decadencia y crisis de los valores; la comunidad y la familia pasan a planos menos importantes, y hay una marcada inclinación al individualismo. En general, las personas denotan rasgos de falta de compromiso social, se critican la razón y la ciencia, y esta última es sustituida por el pensamiento débil (facilismo). Existe dificultad para razonar lo que no se siente.

En algunos círculos, el ataque contra la razón y la objetividad ha alcanzado dimensiones de cruzada, algunos jóvenes hacen suya la afirmación de Nietzsche “Todos los pensamientos son malos pensamientos… El hombre no debe pensar”. Los posmodernos niegan los grandes discursos de la modernidad sin refutación, porque emprender el trabajo de refutarlos supondrá que siguen tomando en serio la razón. En la posmodernidad no queda más remedio que acostumbrarse a vivir en la desfundamentación del pensamiento; únicamente hay lugar para un pensamiento débil y fragmentario: "Yo, aquí, ahora, digo esto".²

Con la pérdida de confianza en la razón, se ha perdido también toda esperanza de alcanzar el consenso social.

Los posmodernos ni creen alcanzar el grado de integración social ni tampoco lo desean en absoluto. Como afirmaba Nietzsche: "Mi juicio es mi juicio (...) y otro no tiene derecho a él". Un bien, en boca del prójimo ya no es un bien. No puede haber, por lo tanto, un bien común. Esa expresión encierra una contradicción en sí misma.

La posmodernidad es, ante todo, un nuevo estilo de vida, una nueva actitud ante la cual el hombre contemporáneo enfrenta la sociedad, la cultura, la religión, la propia vida personal (su salud, su cuerpo, el sexo, el consumo, etc.).

No es posible que el hombre pueda vivir en el vacío toda la vida, la pregunta aparecerá irremediablemente: ¿dónde está el sentido de la vida?

El hombre posmoderno es también un hombre en búsqueda de respuestas que la propia posmodernidad no es capaz de dar.

Ya se han empezado a levantar las voces en contra de la posmodernidad, pero ¿no será mejor no atacar el hecho sino afrontarlo con astucia e inteligencia? Esa corriente está entre nosotros, y el hombre posmoderno está buscando respuestas. Pero, ¿cómo dialogar con la posmodernidad? Este es, sin duda, el mayor desafío.

 

INFLUENCIAS EN LA SALUD BUCAL

En el campo de Estomatología, los profesionales tienen inclinación por disciplinas como la implantología, que cuenta con el reconocimiento popular de tecnología de punta; entrar en el mundo tecnológico de última generación produce mayor satisfacción profesional que brindar salud. Y para los beneficiarios, ser atendido con esa tecnología ultramoderna significa tratarse con la tecnología adecuada; la atención por un especialista de práctica general es cuestionada en su impacto y resolutividad.³ Las proyecciones de ambas posiciones se realizan a corto plazo. No es posible hablar de salud bucal cuando se desconocen cuáles son las actitudes que deben asumir las personas en determinados momentos y que deben ser transmitidas en función educativa a su familia y a la comunidad donde se desarrollan, cuando no se razona dónde están los riesgos que pueden desequilibrar la armonía e integridad biopsicosocial del ser humano.

En el campo de la docencia, los conocimientos se quieren recibir cada vez con menos profundidad, y en ese sentido, los profesores notan que los estudiantes de niveles superiores cada vez más se les parecen a los de niveles inferiores.

Con la falta de reconocimiento social también se pierde la admiración hacia los profesores, y los estudiantes no se motivan a seguir sus pasos ni mucho menos a acercarse a sus pensamientos. Las actitudes hacia ellos, así como la relación con sus compañeros, sus directivos y la comunidad, lejos de socializarse, tienden más bien a ser "enquistadas".

Los intereses hacia la lectura científica son reemplazados por los libros sobre técnicas sexuales, meditación trascendental, guías de cuidados para el cuerpo, control mental,vitaminofilia, bioenergética, remedios para las crisis de la vida adulta, y otros por ese estilo.

Por todo esto, puede que temas como la medicina social, la integralidad, la promoción de salud, la prevención, la comunidad, la familia, la intersectorialidad y otros corran el riesgo de ser relegados a planos inferiores.

 

CONSIDERACIONES FINALES

Es imperativo abrir los ojos a esta realidad. Una nueva perspectiva de aprendizaje constante, nos debe llevar al sentido común, buscando que la creatividad sea acompañada de sensibilidad, humanismo y solidaridad, de manera que se aporte a lo que enriquece la vida. El interés del profesional de la Estomatología así como de los estudiantes, en prepararse técnicamente, y la actitud de las personas hacia la salud, son elementos que deben ser aprovechados. Diseñar juntos una estrategia para construir un bien común que involucre en su camino el quehacer de todos, sin obviar la realización personal de cada cual, es un reto inmediato a tener en cuenta tanto en la práctica de la asistencia estomatológica, como en el desarrollo de la docencia.

Finalmente es imprescindible tomar en cuenta la perspectiva de la otra persona, buscando comprender su posición en la medida en que queremos compartir la nuestra. No existe para esto una receta escrita, pero sí se pueden ir llevando actas de lo que va sucediendo día a día, y con seguridad hallaremos importantes transformaciones a su debido tiempo. Solo no olvidar que se debe buscar un balance entre la razón y el sentimiento, ya que el conocimiento para que se transforme en una buena acción, debe ser pasado por los sentimientos.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Giddens A. Consecuencias de la modernidad [online]. 2011 Feb-Abril [citado 16 febrero 2011];75. Disponible en: http://www.razonypalabra.org.mx/N/N75/monotematico.../10_Bonilla_M75.pdf

2. Osorio Gómez JJ. La salud pública y la posmodernidad. Revista Ces Salud Pública. 2010 jul-dic;1(1):1-3.

3. Torre de la D. El punto de vista clínico de las ideas: modernidad-posmodernidad. Revista Espiral [online]. 2010 [citado 15 octubre 2014]; 26. Disponible en: http://hernanmontecinos.com/2010/02/17/el-punto-de-vista-clinico-de-las-ideas-modernidad-postmodernidad

 

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA

1. Lejarraga H. La subjetividad del niño en la posmodernidad. Arch argentpediatr [online]. 2012 [citado 15 octubre 2014];110(4):318-22. Disponible en: http://www.scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0325-00752012000400008&lng=es&nrm=iso ISSN 0325-0075.

2. Foster I, Habermas J, Baudrillar J y otros. La postmodernidad. México: Kairos; 1988.

3. Lyotard JF. La condición postmoderna. Madrid, España: Cátedra. 1998.

 

 

Recibido: 3 de febrero de 2015.
Aprobado: 6 de febrero de 2015.

 

 

Jorge Luis Bécquer Águila. Universidad de Ciencias Médicas de La Habana. Facultad de Ciencias Médicas "10 de Octubre". Correo electrónico: [e-mail]