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Revista Cubana de Medicina Militar

versión impresa ISSN 0138-6557versión On-line ISSN 1561-3046

Rev Cub Med Mil v.36 n.1 Ciudad de la Habana ene.-mar. 2007

 

Trabajos de revisión

Instituto Superior de Medicina Militar “Dr. Luis Díaz Soto”

Los medicamentos en el mundo asimétrico actual: del no-acceso al acceso. Parte 1

Dr. Gilberto Vladimir Calzadilla Moreira,1 Dr. Héctor L. Lara Fernández,2 Lic. Isela Rodríguez Castillo3 y Lic. María Victoria Martínez Álvarez4

Resumen

Se realizó una revisión bibliográfica actualizada acerca de las causas esenciales que originan la actual bipolaridad de las naciones en cuanto al acceso a los sistemas de salud y en especial a los medicamentos básicos. En tal sentido, se evidencia cómo las desiguales relaciones internacionales desde el punto de vista económico, social y cultural, así como las severas restricciones financieras, la deuda externa y el aumento en los costos para la adquisición de tecnologías constituyen un desafío para la supervivencia de los países pobres y en desarrollo.

Palabras clave: Medicamentos, asimetría, desafío.

Se vive un nuevo milenio, el tercero de la era moderna; los avances científicos y tecnológicos en el mundo actual son una de sus características. Hoy se sueña con lograr terapias genéticas eficientes, sustituir órganos vitales mediante el empleo de “células madres” y biomateriales compatibles o descubrir fármacos capaces de curar el cáncer y el SIDA. Pero la realidad es que detrás de la supuesta prosperidad se produjo la división del planeta en 2 grupos de países carentes de equilibrio social y económico.

“…El binomio salud-pobreza se hace más evidente en el mundo. La imposibilidad de acceder a medicamentos básicos, la aparición de epidemias emergentes, las tasas de defunción infantil, el consumo o la falta de agua, infraestructuras sanitarias deficientes o ausentes etc., son factores que evidencian el abismo que separa cada vez más a los países…”1

En este contexto un análisis de los elementos que se vinculan con los medicamentos, implica valorar diversas aristas del problema y estrecha interrelación de varias disciplinas. Por lo controvertido del tema, su complejidad y actualidad, se exponen algunos de los factores que explican la actual bipolaridad en relación con el acceso a medicamentos. En tal sentido, se realizó una revisión bibliográfica de la literatura existente relacionada con el tema, que incluyó libros y publicaciones periódicas de autores nacionales y extranjeros, con el objetivo de dotar a los profesionales de la salud, desde la óptica de la ciencias sociales, de una herramienta útil en la interpretación de las causas y efectos que originan las desiguales relaciones internacionales entre los países pobres y en desarrollo del Sur con los países ricos del Norte, en relación con la industria de la salud y en especial con los medicamentos.

El mundo de hoy y sus desafíos

Constituye un aspecto de gran interés para las naciones poder acceder a los fármacos por su influencia en el grado de desarrollo y eficiencia de los sistemas de salud. La sociedad en su conjunto no tiene dominio de cuánto está hoy comprometido el futuro del planeta. El esplendor científico-técnico de la época contemporánea, si bien impactó de forma positiva en todas las esferas, porta grandes riesgos que ponen en peligro incluso la supervivencia de la especie humana. Al respecto, algunos autores señalan la incapacidad del progreso tecnológico y del conocimiento científico para contribuir, por sí solos, al bienestar de la humanidad.2 La dialéctica materialista asume, al margen de las teorías existentes, que los factores fundamentales que impulsan el desarrollo de las ciencias son las necesidades sociales, que además le imprimen sus particularidades, ello sin negar el efecto interno de la propia ciencia.

La revolución tecnológica a fines de la década de los 90, sobre la base del desarrollo de las comunicaciones y la informática en los países ricos, permitió múltiples aplicaciones para las investigaciones en todas las esferas, así surge lo que se conoce como la E ra del conocimiento . Este fenómeno tuvo influencia en el desarrollo social en general, y en particular, sobre la medicina. En términos de salud ello se concreta, por ejemplo, en indicadores como el aumento de la expectativa de vida, la erradicación de múltiples enfermedades infecciosas, el control de muchos padecimientos crónicos no transmisibles, la introducción de singulares técnicas de imagenología, terapias genéticas, el desarrollo de la llamada medicina regenerativa y la posibilidad creciente para la síntesis de potentes medicamentos.

La participación de los países pobres en los flujos internacionales de tecnologías, producción y comercialización disminuyó apreciablemente. …”América Latina y el Caribe sufren hoy la distribución más desigual del planeta”…3

Las desigualdades sociales presentes a nivel global originan una distribución geográfica de las enfermedades. En general en los países subdesarrollados, los niveles de salud decrecen vertiginosamente, con un incremento en el número de padecimientos, sobre todo en los sectores más vulnerables de la sociedad. En América Latina, África, el Caribe y el Sureste Asiático, las enfermedades infecciosas como la tuberculosis, las de transmisión sexual (ITS) y las transmitidas por vectores como el dengue, se elevan en comparación con los países ricos. África acumula una cuarta parte de la carga de enfermedades del planeta, que causan 4 millones de muerte al año.4,5

La Organización de la Naciones Unidas (ONU) estima que más de 40 millones de personas padecen la pandemia producida por el virus VIH-SIDA en todo el mundo. De ellos el 95 % corresponden a países subdesarrollados, 26 millones viven en África subsahariana y 2 millones 400 mil en América Latina y el Caribe.6,7 El SIDA mata a 6 000 personas diariamente en el continente africano,2 estados como Lesotho y Swazilandia apenas respiran para sobrevivir con una tasa de mantenimiento de la enfermedad del 25 y el 42,6 % respectivamente.5 En los países pobres o en desarrollo las enfermedades diarreicas agudas tienen alta mortalidad entre la población infantil.

Reemergen otras como el cólera, el dengue, el paludismo y la tuberculosis.5,8 Es significativo que por ejemplo, la tuberculosis pulmonar incremente su incidencia a escala global y sobre todo en los países del Tercer Mundo, se detecta una ocurrencia anual de tuberculosis de alrededor del 40 % y solo curan algo más del 82 %. 5 Ello ocurre aun cuando se combate y desaparece el bacilo causal, luego es posible afirmar que la insalubridad y la desnutrición propician la infección. La causa fundamental de estos males son las pobres condiciones higiénico-sanitarias y socio-económicas, impuestas a estos pueblos.

En nuestro hemisferio el acceso a los servicios de salud a finales del siglo pasado era menor del 30 %.9 En muchos de estos países se incrementa la atención privada, pero solo con posibilidades para los sectores de más altos ingresos. En el primer mundo crece la demanda asistencial, los pacientes exigen que se les realicen las últimas técnicas y la prescripción de fármacos de última generación, ello implica un mayor costo para los contribuyentes, lo que no incluye amplios sectores de la población con bajos ingresos o seguros médicos que no cubren los gastos en salud. En los EE.UU. el pago de los medicamentos ha dejado de ser un problema exclusivo de los pobres, muchas empresas han dejado de ofrecer seguro médico y tratan de librarse de la responsabilidad de pagar, como resultado los pacientes asumen una proporción cada vez mayor del costo de sus fármacos. Hay países muy desarrollados, como Suecia, en los que el estado es capaz sufragar la atención médica.9

Según el último reporte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) correspondiente al año 2004, los 10 lugares del mundo donde hay menor promedio de vida se ubican en el continente africano, en algunos estados como Zimbabwe, la esperanza de vida al nacer es de apenas 36 años. En Latinoamérica la mayor esperanza de vida se encuentra en Cuba con 77 años, pero incluso los países más pobres de la región, como Bolivia, Nicaragua o El Salvador, no se acercan a los bajos niveles que existen en África, mientras que en Japón y Europa sobrepasa los 80 años. Como expresión de las diferencias internas un brasileño pobre que nace al Nordeste del país vive como media 15 años menos, que uno en la región Sur.10

La ciencia se centraliza en los países ricos, como parte del injusto orden económico mundial, en estos se concreta la mayor capacidad de investigación. Las pesquisas con fines médicos generalmente no persiguen un objetivo social ya que la mayor parte se realizan por encargo privado, su fin primario es en realidad el beneficio económico, muchas veces en detrimento de la propia salud humana. El Norte invierte entre el 2-5 % de su producto interno bruto (PIB) en investigación y desarrollo, mientras que el Sur destinan entre el 0,3-0,5 %.2,11

Se produjo un cambio en la estructura social, en los países desarrollados hay mayor cantidad de científicos e investigadores así como un aumento de los centros dedicados a estos fines, ello a su vez originó gran número de publicaciones, que hoy se caracterizan por una creciente coautoría internacional y colaboración interacadémicas, fundamentalmente entre los países de la jerarquía científica, la información se difunde, sobre todo desde EE.UU. y Europa, lo que expresa una realidad desigual, que además se manipula como forma sutil de dominación.11 Los países pobres no disponen de infraestructura ni masa crítica de científicos capaces de impulsar las investigaciones al no existir financiamiento, asimismo sufren el robo de cerebros y emigraciones de sus hombres de ciencia.

Aunque la mitad de las compañías farmacéuticas más grandes del mundo están en Europa, colocan los precios más elevados a los medicamentos que venden en los EE.UU. en comparación con el resto del mundo, así obtienen mayores beneficios, por lo que les resulta ventajoso presentarse como norteamericanas lo sean o no, muchas abren sus oficinas en este país con el objetivo de beneficiarse de la gran cantidad de investigaciones que se realizan, sobre todo las que utilizan fondos públicos. La imagen de que estas industrias son maquinarias de ciencia es falsa, son maquinarias comerciales, que utilizan su poder para atraer y utilizar a las instituciones médicas y de gobierno.12

Así mismo algunas de las investigaciones y ensayos clínicos se desplazan hacia los países pobres, allí son más baratas, hay pocas regulaciones estatales y menos costos, se violan incluso principios éticos universalmente aceptados. Además en la mayoría de esas naciones la medicina preventiva es insuficiente, mientras que la curativa alcanza altos niveles por reportar mayor lucro. Lo que determina la prioridad en investigación no son las necesidades sociales, es el mercado.9,13

La transferencia de tecnologías Norte-Sur, que debió constituir un modelo de cooperación por su esencia humanista y ser expresión del verdadero vínculo entre los pueblos, es hoy una muestra de las desiguales relaciones económicas internacionales. Muchas de ellas son contaminantes y obsoletas con efectos nocivos para las personas y el medio ambiente, además de un incremento en las restricciones para la entrada de los productos en el mercado de los países emisores,10 como parte de la total dependencia económica y cultural de las naciones pobres. Tal proceder irracional, asume un componente dramático en el caso del traspaso en la industria de la salud sin tener en cuenta las peculiaridades y prioridades de la nación. Goldernberg14 señala que aunque se importen son necesarias investigaciones para hacerlas utilizable. Los científicos del Sur deben asimilar tecnologías apropiadas, de acuerdo con las condiciones sociales, ambientales y culturales de sus países.

En 1994 se creó la Organización Mundial del Comercio (OMC). Varios de sus acuerdos tienen influencia en la producción y comercialización de medicamentos, el referido a la propiedad intelectual (TRIP, en inglés) es el de mayor repercusión sobre el acceso a estos productos, ya que establece normas para la protección de la propiedad intelectual en todos los campos tecnológicos, con especial referencia a las patentes de inversión y otorga uso exclusivo a favor del titular, además de regulaciones sobre convenios de licencias, marcas y genéricos.4,9 Como otras organizaciones internacionales, la OMC tiene un perfil imperial, sus resoluciones responden a los intereses de las transnacionales farmacéuticas, por la que logran concentrar en los países ricos la mayor parte de los gastos en la industria de la salud, el monopolio de la mayoría de los productos y procesos patentados. Día tras días se imponen reglas cada vez más proteccionistas a favor de las naciones del Norte. Como expresión de lo perverso e intransigente en el accionar de los consorcios, sucesivas reuniones ministeriales de este organismo no logran una justa solución del conflicto. La más reciente en Hong Kong, significó un fracaso para el multilateralismo, por la imposición a los países pobres de políticas de subsidios agrícolas y de liberación de los servicios incluidos los de salud.3

Consideraciones finales

La influencia del florecimiento tecnológico sobre la sociedad es total, pero el desarrollo desproporcionado entre los países hace que este elemento sea una farsa para la generalidad de la población mundial. Ello es consecuencia de las asimétricas relaciones económicas, sociales y culturales entre las naciones del Norte y el Sur, que lejos de resolverse se consolidad cada día más. Los estados subdesarrollados sufren severas restricciones financieras asociadas al problema de la deuda externa y la disminución en la transferencia de tecnologías. Esta circunstancia da lugar a la carencia de sistemas de salud equitativos en la mayor parte de las naciones, con aumento de la pobreza extrema y crecientes niveles de exclusión social. En los países capitalistas se aprecia un deterioro de sus instituciones y una profunda crisis moral, donde una élite en el poder y las transnacionales aplican nuevas variantes de dominación colonial. El desarrollo científico-tecnológico acelerado de la industria farmacéutica, propició que hoy se disponga de un inmenso arsenal terapéutico para la prevención y el tratamiento de las enfermedades. Tal disponibilidad de productos farmacéuticos no significa que estén al alcance de los pueblos pobres y desfavorecidos del planeta, inmensos sectores poblacionales no tienen acceso a los medicamentos esenciales, sobre todo en los países del tercer mundo. La mayoría de los problemas del mundo de hoy, en materia de salud, pueden resolverse con facilidad si se ponen al servicio de toda la sociedad, los avances científico-técnicos.

Summary

Drugs in the present asymmetric world: from non-access to access. Part 1

We made an updated bibliographic review on the essential causes originating the present bipolarity of nations regarding the access to health systems, and specially to basic drugs. In this sense, it is evidenced how the unequal international relations from the economic, social, and cultural point of view, as well as the severe financial restrictions, the external debt and the increase of the costs for the acquisition of technologies, are a challenge for the survival of the poor and the developing countries.

Key words: Drugs, asymmetry, challenge.

Referencias bibliográficas

1. Cabello F. Editorial. MAFRE MEDICINA. 2005;16(2):79-80.

2. Parenti RF. Bioética y bipolítica desde América Latina. En: Acosta JR ed. Bioética para la sustentabilidad. La Habana : Acuario. Centro Félix Varela, 2002. p. 172-84.

3. Castro F. Discurso pronunciado en el Segunda Cumbre Cuba CARICOM. Bridgetown, Barbados, 8 diciembre de 2005. En: Periódico Granma. Edición única viernes 9 diciembre, 2005. p. 5.

4. Balleza de Paris V. Medicamentos, salud y seguridad social. En Acosta JR ed. Bioética para la sustentabilidad. La Habana : Acuario. Centro Félix Varela; 2002. p. 111-214.

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10. Garrafa V, Porto D. Bioética, poder e injusticia: por una ética de intervención. En: Acosta JR ed. Bioética para la sustentabilidad. La Habana : Acuario. Centro Félix Varela; 2002. p. 185-93.

11. Castro Díaz-Balar F. Ciencia, tecnología y sociedad. Hacia un desarrollo sustentable en la Era de la globalización. 2da ed. La Habana : Científico-Técnica; 2004. p. 22-135.

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13. Benatar SB, Singer PA. A new look at international research ethics. J Br Med. 2003;32(1):824-6.

14. Goldenberg J. What is the role of sciences in developing countries? Science. 1998;279:1140.

Recibido: 29 de septiembre de 2006. Aprobado: 30 de octubre de 2006.
Dr. Gilberto Vladimir Calzadilla Moreira . Instituto Superior de Medicina Militar “Dr. Luis Díaz Soto”. Avenida Monumental, Habana del Este, CP 11 700, Ciudad de La Habana, Cuba.

1Especialista de II Grado en Ortopedia y Traumatología.
2Especialista de I Grado de Higiene y Epidemiología.
3Licenciada en Educación Superior en la especialidad de Español-Literatura.
4 Licenciada en Información Científico-Técnico y Bibliotecología

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