Introducción
En Florianópolis, en el Estado de Santa Catarina en Brasil, existe una amplia diversidad de especies, que pueden ser nativas o naturalizadas. En la finca Ressacada, se encuentra una variedad de especies de diferentes familias. Predominan las que pertenecen a las ciperáceas, las gramíneas y las leguminosas.
Se encuentran en la familia Cyperaceae, las especies Cyperus flavescens L.; Cyperus polystachyos Rottb.; Rhynchospora barrosiana Guagl; Rhynchospora holoschoenoides (Rich.) Heiter; Scleria distans Poir., entre otras. En cuanto a las gramíneas, se pueden encontrar Acroceras macrum Stapf; Axonopus affinis Chase; Hemarthria altissima (Poir.) Stapf & C.E. Hubb., Ischaemum minus J. Presl; Sacciolepis indica (L.) Chase; Setaria distans (Trin.) Veldkamp. Entre las leguminosas predominan Desmodium adscendens (Sw.) DC., Mimosa bimucronata (DC.) Kuntze, Trifolium repens L.; Trifolium pratense L., y otras.
La presencia y permanencia de estas especies en el pastizal se puede afectar por el manejo, el clima (incidencia de las estaciones) y las condiciones de suelo, principalmente. Los nutrientes inmóviles, como el fósforo (P) y el potasio (K), son elementos primarios esenciales para el crecimiento de la planta (Martínez-Sáez et al., 2018).
Este trabajo se realizó con el objetivo de caracterizar la composición florística de los pastizales, después de dos años y medio de haber aplicado diferentes dosis de fertilizantes calcáreo, fosfórico y potásico.
Materiales y Métodos
Localización. Los estudios se realizaron en la finca experimental Ressacada-UFSC, ubicada en el Estado de Santa Catarina, en la zona de Tapera, al sur de la isla. Geográficamente se encuentra a los 27º 41’ 06.28” S; 48º32’ 38.81” O, con predominio de terreno de relieve plano y a 3 msnm.
Características del clima y suelo. El estudio se realizó en verano (enero-abril), con predomino de temperatura diaria de 27 °C y mínima promedio de 23 °C, con más del 60 % del total de las precipitaciones anuales y un rango de 90-160 mm, para un clima subtropical húmedo (De Andrade y Lamberts, 1996). El suelo del área está constituido por sedimentos arenosos, de origen aluvio-coluvial, eólica y lacustre, clasificado como Neosuelo Hidromórfico Típico (IBGE y IPUF, 1991).
Diseño experimental y tratamiento. Se empleó un diseño en bloques al azar, con cuatro repeticiones. El estudio se realizó en cuartones que estaban bajo una investigación de fertilización, con 12 tratamientos experimentales:
T1: 0 calcáreo, 0 P2O5 y 0 K2O
T2: 0 calcáreo, 0 P2O5 y 1 K2O
T3: 0 calcáreo, 1 P2O5 y 0 K2O
T4: 0 calcáreo, 1 P2O5 y 1 K2O
T5: ½ calcáreo, 0 P2O5 y 0 K2O
T6: ½ calcáreo, 0 P2O5 y 1 K2O
T7: ½ calcáreo, 1 P2O5 y 0 K2O
T8: ½ calcáreo, 1 P2O5 y 1 K2O
T9: 1 calcáreo, 0 P2O5 y 0 K2O
T10: 1 calcáreo, 0 P2O5 y 1 K2O
T11: 1 calcáreo, 1 P2O5 y 0 K2O
T12: 1 calcáreo, 1 P2O5 y 1 K2O
Las recomendaciones de fertilización se realizaron teniendo en cuenta lo descrito en el Manual de recomendaciones de fertilización para el Estado de Rio Grande do Sul y Santa Catarina (SBCS-CQFS, 2004), elaborado a partir de los análisis de suelo.
Animales y manejo. Las investigaciones se desarrollaron en la unidad de vacunos, que se manejó durante varios años (2016-2019) con fertilización y en un sistema de pastoreo racional Voisin (PRV), con predominio de la raza Brahama y animales de leche, con peso promedio de 300 kg.
Se utilizó como insumo fosfato de Arad (fosfato natural), superfosfato triple 46 % de P2O5 y cloruro de potasio 60 % de K2O5.
El fertilizante calcáreo consiste en una mezcla de óxido de calcio y óxido de magnesio.
Mediciones y procesamiento. La caracterización de la composición florística se realizó de forma visual (Machado et al., 1997), y se estimó el porcentaje de aparición de las especies entre las familias predominantes, además de las bostas y el suelo descubierto. Se utilizó para ello el método del marco de m2, que se replicó cuatro veces por tratamiento, para un total de 48 marcos. Esto se realizó en un momento, durante la época de estudio. Para el registro de los datos se utilizó el programa Excel.
Resultados y Discusión
Se encontraron 19 familias, con representación de 64 especies (figura 1). Se observó una amplia diversidad de las familias en la zona donde se realizó el estudio. De manera general, casi todas estuvieron presentes en los cuartones, lo que se puede deber a que muchas de estas especies se consideran como predominantes de la flora nativa o naturalizada de la región (Mourelle et al., 2018). Las de mayor representatividad fueron Poaceae, Cyperaceae y Fabaceae. El resto de las especies identificadas pertenecen a las familias Apiaceae, Asteraceae, Commelinaceae, Euphorbiaceae, Hypoxidaceae, Juncaceae, Lamiaceae, Lythraceae, Melastomataceae, Ochnaceae, Onagraceae, Polygalaceae, Rubiaceae, Scrophulariaceae y Xyridaceae, que mostraron una tendencia de aparición muy baja (de una a cinco especies por familia).
Esta riqueza en biodiversidad de plantas denota que en esta región del sur de Brasil se cuenta con una flora rica en familias y especies de plantas. Muchas de ellas pueden ser utilizadas en la alimentación del ganado vacuno (Hurrell et al., 2019).
En la tabla 1a y b se muestra el porcentaje de las familias al realizar la composición florística del pastizal, al inicio y final del estudio. Como se muestra, hubo aumento de la presencia de estas familias, desde el inicio hasta el final del estudio, y en todos los tratamientos.
Como se refirió antes, la familia Poaceae fue una de las que más representación de especies tuvo. Las poáceas o gramíneas, como también se les conocen, representan uno de los grupos vegetales más diversos en el mundo. Se utilizan como alimento para el hombre y los animales. En muchos países, la alimentación de la masa ganadera se sustenta en sistemas de alimentación basados en los pastos y las forrajeras, debido a que se consideran recursos de bajo costo (Vargas-Martínez et al., 2018).
Al inicio del experimento (tabla 1a y b), las poáceas comenzaron con un porcentaje por encima del 50 %, aunque al final del estudio, la presencia de estas especies disminuyó en un rango de 40-45. Esto se debe a que se reajustó el manejo de los animales a un ciclo de estancia de un día, y a una rotación de, aproximadamente, 35 días. Ese ajuste del manejo puede que haya influido en que otras familias aumentaran, como es el caso de Fabaceae, en la que se observó incremento en todos los tratamientos. También pudo haber influido en la disminución de las gramíneas la influencia de la competencia que se produce en el pastizal, así como algunos efectos indirectos, que pudieron causar restricciones en el desarrollo de estas plantas.
Soliveres-Codina y García-Palacios (2019) plantearon que la competencia se debe a que, en condiciones específicas, el ambiente y el suelo son capaces de proveer solamente cantidades limitadas de los nutrientes esenciales para el crecimiento normal de una población determinada de plantas. Cuando las poblaciones exceden el límite de los factores esenciales, se inicia la competencia. Y, en este caso, la presencia de las especies de las familias identificadas pudo haber influido en la disminución de las gramíneas.
En todos los tratamientos es relevante destacar el aumento de las leguminosas, representadas principalmente por Aeschynomene falcata (Poir.) DC., D. adscendens, Desmodium barbatum (L.) Benth., Desmodium incanum DC., M. bimucronata., T. repens y T. pratense.
Este incremento es importante, pues se ha descrito que la presencia de leguminosas en los pastizales es una excelente alternativa para mejorar la fijación de nitrógeno al suelo, debido a la capacidad que tienen de fijar ese elemento y ponerlo a disposición de las especies presentes en el pastizal (Carrilli, 2018).
En este aumento de las leguminosas también pudo influir el balance de nitrógeno en el suelo, relacionado con la presencia de potasio, fósforo, y otros elementos necesarios para el buen desarrollo y crecimiento de las plantas.
Según Bianco y Cenzano (2018), en las investigaciones acerca de la función de las leguminosas en las praderas y de su importancia para la fijación y el subsecuente incremento de N en el forraje asociado, se concluye que el N fijado por las leguminosas presenta valores entre 50 y 300 kg de N/ha/año. Al respecto, Arcos-Álvarez et al. (2018) plantearon que los sistemas con leguminosas, sean herbáceas o arbustivas asociadas con otras especies, pueden desempeñar una función en el ecosistema, por esta y otras cualidades de dichas especies. Además, contribuyen al reciclaje de nutrientes en la pradera, así como al aumento y conservación de la biodiversidad y al mejoramiento de la dieta de los rumiantes (Tarazona et al., 2013). Su inclusión en los sistemas también favorece la ocurrencia de cambios en los indicadores nutricionales, con mejor aprovechamiento de las gramíneas acompañantes, debido al incremento del contenido de proteína y la digestibilidad de la dieta, y a la reducción de los niveles de fibra en FDN (Quintero et al., 2017).
Otro de los indicadores que se estimó en el pastizal fue el porcentaje de bostas o excretas, pues en las áreas de pastoreo la deposición de las excretas tiene gran significado por la contribución de nutrientes a los pastos (Piazza et al., 2018).
Según lo informado por Crespo et al. (2015), en la pradera pastoreada las bostas constituyen pequeños microhábitats. En ella se desarrolla una rica y variada fauna edáfica, en ocasiones muy especializada, que toma parte activa en los flujos de materia y energía entre la materia fecal, el pastizal y el suelo. Además, las bostas aportan alto porcentaje de los nutrientes consumidos por el ganado, que son devueltos al pastizal (López-Vigoa et al., 2017).
En este estudio, la presencia del estiércol en los cuartones estuvo en un rango de 0,80-5,12 %. Aunque no se cuantificó la presencia de la macrofauna, se conoce que es de mucha importancia para incorporar las excretas al suelo y contribuir al reciclaje de los nutrientes, principalmente por la presencia de las lombrices y los coleópteros, que constituyen las mayores poblaciones de la macrofauna en los pastizales (Caicedo et al., 2018).
Con respecto al indicador suelo descubierto, en todos los tratamientos el porcentaje estuvo por debajo del 10 %. Este valor se considera bajo. Según Machado et al. (1997), un área que tenga menos del 20 % de despoblación o de suelo descubierto se considera de buena cobertura por las plantas. Esta variable es importante, ya que permite conocer si hay que hacer alguna resiembra o rehabilitación en el área. Según refieren los autores citados, esta acción hay que acometerla cuando el porcentaje de despoblación o suelo descubierto está por encima del 60 %, por lo que los cuartones del núcleo bovino, lugar donde se desarrolló esta investigación, no se afectaron.
Se concluye que a pesar de que el pastizal está catalogado como natural o naturalizado, hubo aumento de las leguminosas, debido a la aplicación de la fertilización simultánea que benefició a todos los tratamientos. Estos mostraron un comportamiento similar, con amplia diversidad de especies de plantas de las familias Poaceae y Fabaceae, de las que el animal hace uso para su alimentación.
Se recomienda determinar la calidad nutricional del pastizal, hacer labores de rehabilitación y siembra de especies mejoradas, que ayuden a incrementar el contenido de proteína en el pastizal; además de usar especies forrajeras proteicas como suplemento alimenticio.