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Revista Cubana de Salud Pública

versión impresa ISSN 0864-3466

Rev Cubana Salud Pública vol.37 no.3 Ciudad de La Habana jul.-set. 2011

 

SIMPOSIO LUIS MARIO CRUZ CRUZ IN MEMORIAM:
"LA SALUD PÚBLICA REVOLUCIONARIA EN HOLGUÍN"

 

Merecido homenaje


Deserved tribute

 

 


 

 

La Revista Cubana de Salud Pública convoca y junto con el Hospital V. I. Lenin organiza, coincidiendo con la celebración del 45 Aniversario del mencionado hospital, un homenaje al revolucionario cubano, destacado cuadro de dirección de la salud pública revolucionaria cubana, Luis Mario Cruz Cruz. El Simposio homenaje tuvo como tema "La Salud Pública Revolucionaria en Holguín."

Las palabras sobre el homenajeado tuvieron como elemento central el elogio a cargo de la Dra. María Elena Ávila Geigel, además intervenciones adicionales de Belkis Cruz Cruz, su viuda, y de los doctores Alberto Céspedes Carrillo, Avilio Yera Padrón y Jorge R. Zaldívar de Zayas.

PRIMEROS AÑOS

Luis Mario nace el 25 de agosto de 1928, en el barrio rural de Melones, del Municipio de Holguín, provincia de Oriente, hoy municipio Rafael Freyre de la Provincia Holguín, en el seno de una familia campesina. Vive en el barrio hasta los 14 años, allí adquiere su cultura profundamente cubana, con rasgos de los hombres de campo, a los que siempre tiene presente en su quehacer posterior. Este sello de su personalidad le vale desde muy joven el apelativo de "el guajiro."

Sus abuelos por línea materna y paterna fueron campesinos.

La influencia del ambiente le forja un carácter voluntarioso, de hablar en voz baja, pausado, reflexivo, pero firme en sus criterios. La modestia sincera en cada uno de sus actos.

Del barrio rural a la ciudad de Holguín. Allí concluye la enseñanza secundaria y cursa el Bachillerato en Ciencias y Letras (preuniversitario) en el Instituto de Segunda Enseñanza, termina en 1949.

Ya se interesa en asuntos políticos. En 1946 es fundador de la Juventud Ortodoxa (del Partido del Pueblo Cubano-Ortodoxo, liderado por Eduardo Chivás, que tenía como lema Vergüenza contra Dinero). Lo distingue ser Secretario de Prensa y Propaganda del Comité Municipal de Holguín, hasta que terminado su bachillerato, se traslada a La Habana para matricularse en la Universidad.

En 1950 empiezan sus estudios en la carrera de medicina, que termina en 1956, a los 28 años de edad.

La escasa enseñanza que ofrecía el programa oficial de estudios lo lleva a insertarse en un grupo de trabajo del Hospital Freyre de Andrade (más conocido como municipal de emergencias). Era un buen centro para formarse como cirujano, es la primera especialidad en que se interesa, la practica, y años después es miembro de la Sociedad Cubana de Cirugía.

En este hospital trabaja también como barbero, vía para aliviar su situación económica, dada su categoría de estudiante pobre.

Durante esos años su pensamiento político se define más profundamente y lo lleva a la acción.

Numerosos contactos en la Universidad y el hospital le permiten participar en mítines contra el golpe de estado (1952), funerales de compañeros caídos en la lucha, preparación para la atención de revolucionarios heridos en lucha contra la policía de la dictadura (13 de marzo, asalto al Palacio Presidencial).

EL MÉDICO SALUBRISTA

En sus primeros momentos como médico continuó, según aconsejó después el Che, haciendo revolución para poder tener la revolución en el poder y hacer salud pública revolucionaria.

En los últimos años de la dictadura apoya la Huelga de Abril, lo que motiva su detención, esto se repitió algunos meses más tarde, ya bien vigiladas sus actividades contra el régimen. Su casa es allanada por la policía en seis ocasiones, su automóvil ocupado por fuerzas de la dictadura.

Su primer trabajo en Holguín sería como médico honorario en la Casa Municipal de Socorros, donde con posterioridad al triunfo revolucionario es Director, luego Director de los Servicios Médicos Municipales. En estos últimos cargos se inicia como cuadro de dirección de la salud pública.

Su trayectoria ascendente posterior deja clara su posición revolucionaria y lo exitosa de su gestión como salubrista:

1961-1964: Subdirector y Director del Hospital Civil de Holguín.

1964-1965: Director Regional de Salud Pública de Holguín.

1965-1971: Director Provincial de Oriente Norte.

1971-1974: Director de Hospitales y Policlínicos del MINSAP.

1974-1986: Jefe del Departamento de Hospitales y Policlínicos, Director de Hospitales, Director de Policlínicos, Director de Inversiones. Asesor del Vice-Ministro de Asistencia Médica. Todos los cargos del Nivel Central del MINSAP.

1987-1991: Jefe del Departamento de Políticas de Salud en la Dirección Provincial de Holguín.

1991-1992: Asesor del Director Provincial de Salud.

1992-1995: Asesor de la Dirección del Hospital V. I. Lenin, Especialista de I Grado en Cirugía en ese hospital.

De este extenso y diverso currículo como cuadro de dirección y funcionario se puede conocer la intensa actividad de Luis Mario en la salud pública revolucionaria cubana.

Gran experiencia adquiere al tener que atender a las numerosas construcciones que eran necesarias por la expansión progresiva de los servicios de salud, tan deficientes en la etapa anterior a la revolución. Adaptaciones, remodelaciones y nuevas construcciones, tan complejas como el Hospital V. I. Lenin le ocupa, la experiencia lo hizo un experto, no por eso sorprende que formara parte del Comité de Expertos del Ministerio de la Construcción.

No obstante las numerosas labores mencionadas, también es fundador de los Comité de Defensa de la Revolución y de las Milicias Médicas primero y luego de las Milicias Nacionales Revolucionarias. Participa en varias movilizaciones por necesidades de la defensa, también en trabajos voluntarios.

Está en la Limpia del Escambray, como médico del Batallón 115 de Oriente. Fue miembro del Comité Regional del Partido Comunista de Cuba en Holguín de 1965 a 1971.

Cumplió misiones internacionalistas en situaciones de guerra. En 1973 como Jefe de una de las Brigadas Médicas que fueron en misión a la República Árabe Siria cuando este país sufre la agresión del Estado de Israel. Según se relata llegan de noche a Damasco bajo un bombardeo, pasando del ómnibus en que viajaron, desde Irak, a la atención de heridos y lesionados.

Otra misión en tiempo (1976) y lugar de guerra la cumplie en Angola, tiene que recorrer el país, cuando más fuerte eran los grupos contrarrevolucionarios, visitando todos los lugares con colaboradores cubanos civiles. Un registro básico de los datos que necesitaba los consigna en un mapa.

Tiene Luis Mario que combatir, o estar en disposición combativa, en defensa de la causa revolucionaria en Cuba y fuera de nuestras fronteras en varias ocasiones.

ACTIVIDAD CIENTÍFICA

El Dr. Cruz Cruz no fue un hombre de la academia, fue un revolucionario consecuente que se aparta de su vocación por la cirugía y abraza la salud pública, entregándose a servir con pasión y orgullo en la trinchera de los servicios de salud.

Pero eso lo lleva también a realizar actividades científicas sobre todo con su participación activa en eventos, entre otros:

1974: Reunión de Expertos en Hospitales. Praga.

1976: Congreso Panamericano de Hospitales. México D.F.

1979: Congreso de la Federación Internacional de Hospitales. Oslo.

1982: Primera Reunión Nacional de Directores de Hospitales. La Habana.

1983: Congreso Médico. Damasco.

1995: Jornada XXX Aniversario del Hospital V. I. Lenin. Holguín

Entre los trabajos presentados por él en estas reuniones se reconoce por los que lo escucharon o leyeron luego en la Revista Cubana de Salud Pública el titulado "El Lenin, un hospital para respetar", que preparó con la dilección y el orgullo que profesaba a este centro al que estaba ligado desde su origen. En el Congreso citado de Damasco, expone con el título "La salud pública en Cuba."

Le otorgan su membrecía la Sociedad Nacional de Cirugía y la Sociedad Cubana de Administración de Salud (hoy Sociedad Cubana de Salud Pública).

VIAJES AL EXTERIOR

En el desempeño de sus tareas fueron frecuentes los viajes que debió realizar el Dr. Cruz Cruz.

Además de las misiones en tiempo de guerra y de los congresos científicos mencionados, se destacan:

Honduras, misión para ayuda por desastre (huracán Fifi, 1974).

Nicaragua, misión para ayuda por terremoto (1972).

Miembro de la delegación cubana a la Asamblea Mundial de la Salud (Ginebra, 1971).

Grupo de Estudio sobre organización de servicios de enfermería. República Democrática Alemana y Hungría (1971).

Misiones oficiales de Gobierno: Guinea Ecuatorial (1972), Irak (1978), Etiopía (1977), Irak (1978), Libia (1978), Granada (1979), Perú (1986).

Visita el Seguro Social (México D.F., 1975).

Curso de equipamiento de hospitales (Francia, 1983).

Estudio sobre proyectos de hospitales (Polonia, 1984).

RECONOCIMIENTOS Y DISTINCIONES

El Hacha de Holguín.

Medalla XX Aniversario (Consejo de Estado).

Medalla "Manuel Fajardo Rivero" (Consejo de Estado).

Medalla "Combatiente Internacionalista de Segunda Clase."

Medalla por Ayuda Médica, Segundo Grado, República Árabe Siria.

Medalla Trabajador Internacionalista.

Medalla Lucha contra Bandidos.

Reconocimiento por 20 años de servicios en la Sociedad Cubana de la Cruz Roja.

Numerosos certificados y reconocimientos de organizaciones sindicales, como cederista y de la defensa civil.

EL LEGADO

Luis Mario fundó, junto a Belkis Cruz Cruz, su esposa una familia revolucionaria ejemplar. Ella fue maestra de enseñanza primaria, que luego se licencia en química y ejerce una larga carrera en la docencia. De su unión una hija, también llamada Belkis, arquitecta.

Los que le conocieron bien lo recuerdan austero, disciplinado, modesto, dedicado, reflexivo, amable, educado, apasionado en el logro de los objetivos del trabajo. Ejemplo de cuadro y persona en todos los órdenes.

Usa muchos años el uniforme gris acero del Servicio Médico Social Rural, incluida su gorra tipo militar, el que considera un símbolo de la salud pública revolucionaria.

Uno de sus compañeros en Holguín lo recuerda así:

Todos los que tuvimos el honor y la buena fortuna de reconocer a Luis Mario, coincidimos en considerarlo un revolucionario íntegro, un dirigente ejemplar de la salud pública cubana, que siempre se caracterizó por su permanente vinculación con la base, con los médicos y demás profesionales y trabajadores de la salud. Se destacó mucho por ejercer personalmente el control más exigente de todas y cada una de las tareas indicadas en aquel momento. Significo que no eran ni pocas, ni fáciles, pues había que cumplir con el gran objetivo de elevar progresivamente el estado de salud de la población cubana en aquella zona del país que antes del triunfo revolucionario era de las más olvidadas por los diferentes gobiernos de turno de la neo colonia.

Luis Mario nos enseñó a luchar para cumplir nuestros compromisos. Nos inculcó la disciplina y la ética que debe caracterizar al médico revolucionario formado en Cuba. Por todo ello, el ejemplo del Dr. Luis Mario Cruz Cruz, se mantiene vigente en el sector de la salud en nuestro país (Yera Padrón A. Comunicación personal, 2011).

Firme en sus criterios bien fundamentados, los sostiene con respeto ante las instancias superiores. Ejerce la crítica de sus subordinados siempre en privado.

En plena madurez y capacidad de trabajo se desempeña en el Ministerio de Salud Pública, cuando junto a la nostalgia por el terruño se sumaron graves problemas de salud de su esposa, padres, suegros y un cuñado que lo inducen a solicitar la liberación de su cargo, obtenida no sin resistencia de sus jefes y regresa a Holguín, donde tiene una segunda etapa de realizaciones positivas. Es ejemplo poco común de funcionario que regresa por decisión propia de un alto cargo en la Capital a su lugar de origen (Céspedes Carrillo A. Comunicación personal, 2011).

En sus últimos años se ve afectado por problemas de salud. Fallece en la ciudad de Holguín, el 17 de octubre de 1995, víctima de un infarto agudo del corazón, seis años después del primero, a los 67 años de edad.

 

 

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