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ACIMED

versión impresa ISSN 1024-9435

ACIMED v.20 n.3 Ciudad de La Habana sep. 2009

 

PÁGINA DEL EDITOR


La crítica que construye: un arte difícil de ejercer en la ciencia


The criticism that constructs: a difficult art to practise in the Science

 

 


Rubén Cañedo Andalia


Licenciado en Información Científico-Técnica y Bibliotecología. Departamento Fuentes y Servicios de Información. Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas-Infomed. La Habana, Cuba

 

 

 



La enfermiza obsesión por cuidar "la imagen" del país, del ministerio, la empresa o el territorio -muchas veces más recurrente que la preocupación por los propios desaguisados de la realidad- en ocasiones es paranoia por el destino de tu puesto, tu cargo y algunas bagatelas más, cuando de lo que se trata es de mejorar la realidad.
En otros, obedece a una extendida confusión que no pocos asumen, quizá sin mala intención: los problemas no deben dilucidarse públicamente, porque demeritan las reales conquistas de la Revolución.
Y esa ceguedad, de la cual beben oportunistas e indolentes, con cargo o de filas, puede alimentar la sensación de que todo anda bien. Ese sería el peor servicio a la Revolución.
Algunos han llegado a percibir el ejercicio sano de la crítica como una concesión de flojos; como darle las armas al enemigo. Lo cierto es que el misil más peligroso que podemos ofrendarle a quienes quisieran desmantelar una obra de 50 años es el silencio, la simulación, la doble moral, la conformidad, la desactivación de la intransigencia ante los males que se incuban y desarrollan ante nuestros ojos.
Cuba tiene suficiente luz como para verse en su espejo, y corregir sus fealdades.

José Alejandro Rodríguez. Espejos. Juventud Rebelde. 29 de agosto de 2009.
http://www.juventudrebelde.cu/opinion/2009-08-29/espejos/

Los seres vivos continuamente captan estímulos del medio. Ellos, convertidos en información, son la materia prima para que millones de organismos respondan y organicen su conducta siempre en atención a un principio básico: la conservación y perpetuación de la especie. Las personas constantemente perciben, determinan, evalúan (comparan) y toman decisiones esenciales para su subsistencia y desarrollo. Este ciclo de procesos se repite infinitamente, en forma consciente o inconsciente, en cada actividad que desempeña un individuo como integrante de las comunidades de las que forman parte. La ciencia, como otro cualquier campo de la actividad humana, no escapa a la realización de dichos procesos. En ella, esta actividad constituye un elemento fundamental para su avance y por ello, alcanza notables niveles de perfección.

El saber científico se construye paso a paso y a veces por saltos. Cada nuevo paso se da sobre la base de uno u otros anteriores. Con el transcurso del tiempo, si cada uno no posee la solidez suficiente, la estructura de un área del conocimiento puede colapsar estrepitosamente. La ciencia aún así se enfrenta continuamente a fracasos y no son extrañas grandes revoluciones capaces de sacudir los cimientos de casas intelectuales presuntamente inamovibles. La relatividad del conocimiento científico y la imposibilidad de detener su avance y perfeccionamiento es algo con lo que debemos aprender a convivir. Cada disciplina y campo del conocimiento se renueva regularmente sobre la base de la evaluación rigurosa y sistemática de cada logro alcanzado. En cada caso, se impone evaluar la concepción (modelo o paradigma) que lo sustenta, los métodos e instrumentos utilizados, la rigurosidad del ejercicio realizado, etcétera.


ÉTICA Y RESPONSABILIDAD DE LA CRÍTICA CIENTÍFICA

La evaluación y la crítica constituyen un proceso inherente al quehacer de la ciencia. La evaluación, como proceso formal de la actividad científica, implica la emisión de un juicio que contiene el resultado del proceso de evaluación; la crítica, un producto complejo del pensamiento racional, frecuentemente cargado de subjetividad, que supuestamente debe presentar un balance de los aspectos positivos y negativos que presenta un objeto desde la perspectiva de una serie de criterios de evaluación -pueden ser de presencia/ausencia, de nivel de presencia, etcétera-, acordados previamente para su realización. Pero la ciencia es una esfera de la actividad social sumamente competitiva donde por doquier existen fuertes intereses económicos, políticos, y de toda índole. Por esta razón, muchas veces el proceso no sucede así. La crítica, como cualquier fenómeno social, se inserta en un contexto social e histórico concreto, refleja las relaciones entre los seres humanos y sus espacios sociales y es un arma de la lucha social.

Pero más que en el proceso -plagado a menudo por las distorsiones que propician los múltiples intereses que en la evaluación científica y académica concurren-, con frecuencia inexplicable hasta para quienes lo realizan, fijémonos en el cómo y en sus efectos.

La crítica cuando se ensaña, ridiculiza y arrasa la obra de un individuo o grupo o la actividad de una organización, por citar dos casos simples, paraliza, decepciona, consterna y destruye. La rabia y el temor afloran entonces para iniciar una cadena de enfrentamientos y frustraciones que la mayoría de las veces cuando menos produce un clima tenso donde es difícil que aparezcan sentimientos positivos y soluciones racionales. Es más, sus efectos a menudo prevalecen más allá del momento de la crisis y minan crónicamente la relación entre el sujeto que evalúa y el sujeto cuya obra o actividad se evalúa. Lamentablemente, este no es un hecho poco frecuente en lo social ni en lo profesional.

No son ajenas a la crítica científica los "oráculos" que echan "fuego" por sus bocas para barrer con la obra, la actividad, el prestigio, la vida de las personas, el quehacer de las instituciones y hasta con la historia de un país. Tampoco son pocos quienes se enfrentan resueltamente a estos estilos destructivos de evaluación ajenos a la sabiduría y el amor propios del verdadero quehacer científico, porque comprenden que estos más que alentar a perfeccionar y perfeccionarse, llevan a la paralización o destrucción de cualquier esfuerzo constructivo y a la creación de un ambiente de resentimiento nada favorable para el avance de la ciencia.


ACIMED Y LA CRÍTICA

Acimed siempre ha considerado la crítica como parte consustancial del avance de la ciencia y la sociedad en general. Ello nos ha llevado a realizar un esfuerzo sistemático por hacer de ella un ejercicio constructivo y créanme, es muy heterogéneo tanto el grupo de autores que nos envían sus trabajos como el que los consulta; desde expertos reconocidos hasta muchos bibliotecarios que sirven anónimamente a nuestra red, todos reciben nuestro mejor trato.

Para mantener un nivel de calidad aceptable a escala nacional y regional, debemos rechazar, debemos solicitar cambios, verificaciones y rectificaciones y cada interlocutor, la mayor parte de las veces alguien que se auxilia del correo electrónico para comunicarse con nosotros, es un sujeto que no conocemos, que no sabemos cómo reaccionará a cada mensaje que le enviemos, a cada solicitud que le hagamos. En mi experiencia personal todo radica en el cómo.

 

ARBITRAJE AMIGABLE, CONSTRUCTIVO Y EDUCATIVO

Desde la creación de Acimed, ha primado en su comité editorial el convencimiento de que todo trabajo es perfectible. Todo trabajo es un nuevo paso que dan sus autores para crecer como profesionales o como científicos. Las críticas consustanciales a los procesos de arbitraje deben ser una oportunidad para que no se pierda nada valioso y se garantice la calidad de lo que se publica. Muchos artículos serán rechazados, otros recibirán recomendaciones y enmiendas; pero en el proceso aprenderemos, volveremos a insistir y llegaremos. De la mano solidaria y rigurosa de los árbitros, creceremos, y paso a paso, ganaremos confianza en nosotros mismos y respetaremos mucho más el espacio de construcción de conocimiento de la ciencia que nos reúne.

Para criticar adecuadamente hay que hacerlo sobre la base de evaluaciones justas. Se deberán emplear argumentos sólidos y claros. Sobrarán las divagaciones, algunas cifras y ejemplos serán suficientes y el objeto y los objetivos deberán precisarse bien. La observación (y las mediciones) han de realizarse en forma sistemática y confiable. Más que atacar, hay que sugerir. Para que alguien se percate de sus errores, muchas veces es suficiente con plantear de forma clara y contundente la manera más eficaz de hacer algo, los objetivos que deben proponerse, los resultados que deben alcanzarse, etcétera. En la medida en que la crítica se refiera a aspectos concretos, a los aspectos específicos que califican a un trabajo como científico, tanto en su contenido como en su forma, más posibilidades habrá de que sea bien recibida y surta efecto. La práctica de las comunicaciones entre los autores y los árbitros, cuando es éticamente manejada, puede ser de mucha ayuda.

 

PUBLICACIONES CRÍTICAS

Hasta el momento nos hemos referido básicamente a la relación que se da entre editores y autores y la importancia de desarrollar un arbitraje amigable, constructivo y educativo. Ahora bien, puede que el hecho del cual se ocupe sea la publicación de una contribución que contiene, como resultado de un trabajo de investigación, una crítica directa y explícita a los procesos, los resultados o la actividad de una organización.

Por principio, si como individuos o como organizaciones, no somos capaces de manejar, aceptar y crecer a partir de las críticas recibidas cuando menos creeremos que nuestro trabajo es perfecto, nos abandonaremos y más temprano que tarde, seremos arrastrados por la dinámica de la vida. Sin embargo, con frecuencia no es necesario criticar directa, explícita y públicamente a individuos y organizaciones por sus errores. Ello no favorecerá el cambio sino el desprestigio y el resentimiento y hasta la subestimación de los resultados de la investigación en cuestión por parte de los aludidos. Un informe privado a la entidad o institución criticada puede que surta mejor efecto cuando se considere necesario.

Con seguridad, muchos aceptarán las críticas y aprenderán de los errores de los demás cuando estos se señalen con claridad, aunque no declare explícitamente a quién se dirige exactamente el mensaje, debido a un enmascaramiento protector del prestigio de hombres y organizaciones que todos debemos cuidar.


CONSIDERACIONES FINALES

Una revista científica exige rigor, pero la elevación de su calidad es un proceso complejo e histórico que supone esfuerzo y trabajo sistemático. Se trata idealmente de una construcción colectiva entre autores, árbitros, editores y lectores. Las revistas son reflejo de lo que somos como profesionales y seres sociales, y son síntesis de nuestra cultura científica y nuestra cultura general. La crítica es herramienta de construcción y es una manera de mantener un diálogo abierto con la realidad con el fin enriquecer los conocimientos que necesitamos para comprenderla y así poder transformarla en la dirección de nuestros objetivos.

 

 


Lic. Rubén Cañedo Andalia. Departamento Fuentes y Servicios de Información. Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas-Infomed. Calle 27 No. 110 e/ N y M, El Vedado. Plaza de la Revolución. Ciudad de La Habana. Cuba. Correo electrónico: ruben@infomed.sld.cu

 

 


Ficha de procesamiento

Términos sugeridos para la indización

Según DeCS1
EDICIÓN; REVISIÓN POR PARES; PUBLICACIONES PERIÓDICAS; CIENCIA DE LA INFORMACIÓN; BIBLIOTECOLOGÍA; CUBA.
PUBLISHING; PEER REVIEW, RESEARCH; PERIODICALS; INFORMATION SCIENCE, LIBRARY SCIENCE; CUBA.


Según DeCI2
EDITORIAL; REVISIÓN INSPECTIVA DE LA INVESTIGACIÓN; PUBLICACIONES PERIÓDICAS; CIENCIAS DE LA INFORMACIÓN; CUBA.
PUBLISHING HOUSE; PEER REVIEW, RESEARCH; PERIODICALS; INFORMATION SCIENCES; CUBA.


1BIREME. Descriptores en Ciencias de la Salud (DeCS). Sao Paulo: BIREME, 2004.
Disponible en: http://decs.bvs.br/E/homepagee.htm
2Díaz del Campo S. Propuesta de términos para la indización en Ciencias de la Información. Descriptores en Ciencias de la Información (DeCI). Disponible en: http://cis.sld.cu/E/tesauro.pdf

Copyright: © ECIMED. Contribución de acceso abierto, distribuida bajo los términos de la Licencia Creative Commons Reconocimiento-No Comercial-Compartir Igual 2.0, que permite consultar, reproducir, distribuir, comunicar públicamente y utilizar los resultados del trabajo en la práctica, así como todos sus derivados, sin propósitos comerciales y con licencia idéntica, siempre que se cite adecuadamente el autor o los autores y su fuente original.

Cita (Vancouver): Cañedo Andalia R. La crítica que construye: un arte difícil de ejercer. Acimed 2009;20(3). Disponible en: Dirección electrónica de la contribución. [Consultado: día/mes/año].