Introducción
La enfermedad periodontal es consecuencia de la ruptura del equilibrio entre la microflora bucal y la respuesta defensiva del huésped. Específicamente en las periodontitis este desequilibrio origina destrucción de los tejidos de soporte del diente. La necesidad de restaurar el tejido vivo ha sido una realidad enfrentada con más o menos éxito desde el surgimiento mismo de la civilización humana. En particular, para la sustitución y regeneración del hueso se han utilizado diferentes materiales que incluyen algunos minerales y el propio hueso.1
El tratamiento periodontal ideal no sólo ha de prevenir la pérdida de inserción, sino también promover la regeneración de los tejidos de soporte del diente. Esto conlleva al desarrollo de biomateriales y a la modalidad de tratamiento denominada Regeneración Tisular Guiada (RTG) y Regeneración Ósea Guiada (RTO).
Diferentes investigaciones han demostrado que las membranas de colágeno son efectivas para evitar la invasión de tejido fibroso cuando se pretende la regeneración del tejido óseo. Sin embargo, ante determinadas situaciones clínicas, estas membranas no resisten la presión que le ejercen los tejidos durante la cicatrización. Es por esta razón que se aconseja su utilización en combinación con distintos tipos de injertos, con la intención de mantener dicho espacio, es decir usar a la vez ambas modalidades.2
Camps MM y colaboradores3 presentaron un caso que consistió en el uso de la Regeneración Tisular Guiada con injerto óseo como tratamiento de defectos infraóseos, concluyeron que era una técnica adecuada. En cuanto a la regeneración de defectos óseos periimplantarios del tipo dehiscencia, muchos estudios demuestran mayor regeneración ósea en los casos en que se usan membranas, respecto a los casos en que no se usan.
En armonía con los resultados logrados en estudios referentes al tema surge como problema científico: ¿Cuál será la evaluación del tratamiento de los defectos óseos complejos con coralina y membrana de colágeno en la Clínica “Lidia Doce Sánchez” de Guantánamo en el período 2014-2017?
La RTG Y RTO reportan grandes beneficios a la salud periodontal. A pesar de la certificación de las ventajas del uso de los biomateriales, se hallan escasos trabajos donde se investigue el tratamiento de los defectos óseos complejos con la combinación de ambas modalidades (RTG Y RTO) en la provincia Guantánamo lo que motivó a la realización de dicho estudio con el objetivo de evaluar el tratamientode los defectos óseos complejos con coralina y membrana de colágeno en la Clínica “Lidia Doce Sánchez” de Guantánamo en el período 2014-2017.
Método
Se realizó un estudio cuasi-experimental, longitudinal y prospectivo en 18 pacientes de ambos sexos, comprendidos entre 25 y 54 años de edad, diagnosticados con periodontitis crónica del adulto y de los cuales se tuvo en cuenta un defecto óseo complejo, a nivel del tercio medio radicular. Fueron intervenidos quirúrgicamente, previo consentimiento informado para participar en la investigación y tratamiento inicial. Se evaluaron al año de recibir el implante, con visitas de mantenimiento mensual a partir de los tres meses del proceder quirúrgico.
Se excluyeron del estudio los pacientes con el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida), trastornos psicosomáticos, higiene bucal deficiente, antecedentes de procesos oncoproliferativos, pacientes fumadores, diabéticos no controlados y los que no desearon ser incluidos en la investigación.
La edad se consideró en los siguientes intervalos de 25-34, 35-44 y 45-54 años.
La profundidad de la bolsa periodontal se determinó mediante la sonda periodontal de Williams, midiendo la distancia desde el margen gingival al fondo de la misma, según las normas técnicas de este proceder.
Para determinar los grados de movilidad dentaria fueron utilizados los criterios de Laura Lau, descritos por Ríos Nosco.4
Grado 0: Corresponde a un diente sin movilidad.
Grado I: Corresponde a una movilidad mínima, por encima de lo normal, de aproximadamente 1mm en sentido vestíbulo-lingual o palatino.
Grado II: Movilidad dental de más de 1mm en sentido vestíbulo-lingual o palatino.
Grado III: Movilidad dental de 2mm en sentido vestíbulo-lingual o palatino, más movimiento intrusivo.
Grado IV: Cuando el diente no posee nada de anclaje en el alveolo, donde no hay prácticamente nada de hueso, y el diente está retenido solo por gíngiva.
Para valorar la osteointegración se realizó la comparación entre las características radiográficas antes de la intervención y después de un año de ser aplicados los biomateriales y se formalizaron cuatro grados:
Grado 0: No se observa relleno del defecto óseo.
Grado I: Relleno del defecto óseo en un 50 %.
Grado II: Relleno del defecto óseo entre el 60 y 70 %.
Grado III: Relleno del defecto óseo entre el 80 y 100 %.
Estas variables se midieron al inicio y al año del tratamiento.
Para evaluar los resultados del tratamiento se tuvo en cuenta la disminución de la profundidad del surco gingival y la osteointegración.
Buena: Disminución de la profundidad del surco y osteointegración grado III.
Regular: Disminución de la profundidad del surco gingival y osteointegración grado I y II.
Mala: Osteointegración grado 0.
En casos de existir combinaciones la evaluación se determinó por el grado de osteointegración.
Resultados
En la distribución de los defectos óseos complejos predominó el grupo de edad comprendido entre 35-44 años con un 50 %, seguido en orden decreciente el grupo de 45-54 años y el grupo de 25-34 con un 33.3 % y un 16.7 %, respectivamente.
En cuanto a la profundidad del surco gingival antes de realizar la intervención quirúrgica se evidenció un predominio de la profundidad patológica con valores de 6-7 mm con un 59.1 %, en orden descendente la profundidad de 4-5 mm con un 29.5 %, luego las bolsas que oscilaban entre 8mm o más con un 11.4 %, transcurrido 12 meses, la primacía le correspondió a la ausencia de bolsa periodontal con un 56.8 %, le continuó el valor de 3 mm con un 31.8 %y luego la profundidad de 4-5 mm para un 11.4 %.
La movilidad estuvo presente en 16 piezas dentarias con predominio del grado II, al que le correspondió un 50 %, luego el grado I con 33.3 %, el grado 0 con un 11.1 % y el grado III con 5.6 %. Al evaluar esta variable a los 12 meses, el grado 0 ascendió de 11.1 % a un 66.7 % es decir prevaleció la ausencia de movilidad, el grado I le continuó con un 22.2 % y posteriormente el grado II con un 11.1 %.
Se logró relleno óseo grado III en un 77.8 % de los defectos óseos complejos, lo que demostró su primacía en este estudio, en los grupos de edades el más destacado en este aspecto fue el de 35-44 años con un 38.9 %, seguido en orden decreciente por el de 45-54 con un 22.2% y por último el grupo de 25-34 con un 16.7 %. La osteointegración grado II y grado I obtuvieron un 11.1 %.
La evaluación del tratamiento de defectos óseos complejos con coralina y membrana de colágeno resultó ser buena en un 77.8 %, prevaleció el grupo de 35-44 con un 38.9 %, continuándole los grupos de 45-54 y 25-34 a los que les correspondió un 22.2 % y 16.7 % respectivamente. La evaluación de regular y mala estuvo presente en los grupos de 35-44 y 45-54 ambos con un 11.1 %.
Discusión
Los resultados obtenidos en el estudio en cuanto a la distribución de los defectos óseos según grupo de edad no coinciden con la investigación llevada a cabo por Rios Rubio G, Santana Fernández KA y colaboradores donde el grupo más afectado resultó ser el de mayor edad con un 41.9 % y el 20 %, respectivamente.5-6
Considera la autora que los estudios referenciados evidencian el carácter acumulativo de las periodontopatías, a pesar, de que no haya prevalecido el grupo de mayor edad en la investigación, situación que se explica por no ser el que mayor cantidad de defectos óseos complejos aportó donde la causa principal radica en exodoncias realizadas por caries y por pérdidas óseas avanzadas.
La disminución de la profundidad del surco gingival luego de realizado el implante coincide con los resultados logrados por Stoecklin-Wasmer y Catacora-Churata JC donde constataron que la utilización de ambas modalidades en conjunto muestra mayores beneficios en la terapéutica periodontal y uno de ellos es la reducción de la profundidad de la bolsa periodontal.7-8
Según similitud entre los resultados obtenidos en dichas investigaciones y los de la autora se reflejan los numerosos beneficios que reporta esta terapéutica regenerativa combinada en los tejidos periodontales.
La reducción de la movilidad dentaria en los resultados de la investigación muestra puntos de coincidencia con los logrados por Del Águila Manuel Carlos el cual al realizar la evaluación del tratamiento a los tres meses reportó una disminución notable de la misma.9
A pesar de que la movilidad dentaria tiene un significado relativo respecto al pronóstico de la salud periodontal por los diversos factores que la originan, se tuvo en cuenta en la investigación al estar presente en la mayoría de las piezas dentarias con defectos óseos complejos. La reducción de la misma luego de realizado el tratamiento con ambas modalidades evidencia en el estudio su relación con el grado de inflamación y la pérdida ósea.
El logro de la osteointegración grado III en la mayoría de los defectos óseos en la investigación coinciden con Yáñez Ocampo BR, Singh Aparna y Velazco G los cuales obtuvieron un notable relleno óseos luego de aplicado el tratamiento combinado de Regeneración Ósea y Tisular Guiada.10,11,12) La osteointegración grado I estuvo presente en el grupo de edad de 45 a 54 años ya que el envejecimiento está asociado a un declive de los mecanismos defensivos del individuo.
En el estudio al predominar la evaluación buena del tratamiento de los defectos óseos complejos con coralina y membrana de colágeno constata la similitud con los resultados obtenidos por Calzada-Bandomo A, Sruthy Prathapy Hena Rahman, los que concluyeron que se logran mejores efectos en cuanto a la regeneración de los tejidos periodontales dañados con la combinación de técnicas regenerativas en comparación con el tratamiento convencional.13,14,15
La evaluación del tratamiento resultó regular y mala en un 11.1 %, determinadas por la osteointegración grado II y I, respectivamente, asociado al potencial de curación innato de cada persona.
Conclusiones
En el estudio se evidencia mayoritariamente el grupo de edades de 35 a 44 años. Después de tratados los defectos óseos complejos con coralina y membrana de colágeno priman: la ausencia de bolsas periodontales, la movilidad dentaria, la osteointegración grado III y la evaluación buena del tratamiento de los defectos óseos complejos.