SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.15 número2Epidemiología de las enfermedades cerebrovasculares de origen extracraneal índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Revista Cubana de Angiología y Cirugía Vascular

versión On-line ISSN 1682-0037

Rev Cubana Angiol Cir Vasc. vol.15 no.2 La Habana jul.-dic. 2014

 

PRESENTACIÓN

 

 

A propósito de la enfermedad cerebrovascular de origen extracraneal

 

A propos of the cerebrovascular disease of extracranial origin

 


 

 

Queridos colegas:

He recibido por parte de los editores de la Revista Cubana de Angiología y Cirugía Vascular la solicitud de escribir algunas líneas introductorias a este número de la revista que se ha consagrado a la enfermedad cerebrovascular de origen extracraneal, tarea de la que me siento honrado y realizo con mucho placer.

Es un número que ante todo ha significado el esfuerzo de valiosos colegas de diferentes instituciones y especialidades: desde el policlínico, hospitales, hasta el Instituto Nacional de Angiología y Cirugía Vascular; desde las imágenes, epidemiología, marcadores de enfermedad o cirugía, quienes llevan meses revisando las fuentes médicas más confiables y trabajando muy duro, para poner a punto esta revista de manera que los colegas de todo el país y quienes nos lean, tengan lo más actualizado en diferentes tópicos de esta localización de la enfermedad ateroesclerótica.

Cuando las lean, con seguridad coincidirán conmigo que están abordadas las temáticas que necesitan del mayor conocimiento, no solo por su importancia, sino además, por las controversias que generan.

Un valor especial del conjunto de este número es que no está escrito con un propósito «enciclopedista», sino más bien, con un objetivo práctico y racional, adaptado a las condiciones particulares en las que desarrollamos nuestro trabajo.

Tampoco veremos un enfoque simplista del problema. Cada tema escogido ha sido revisado y redactado con la casi absoluta exactitud de lo que debemos conocer para este momento del desarrollo científico y médico de nuestro país.

No han faltado las precisiones sobre los factores de riesgo, como elemento esencial en la prevención de la enfermedad, como primera elección en el tratamiento de la enfermedad ateroesclerótica en general y su localización extracraneal en particular.

Debe llamarnos especialmente la atención el carácter silencioso y larvado de la enfermedad hasta que en muchas ocasiones su inicio es súbito y devastador. Lo que ocurre de igual manera con dos de sus más importantes factores de riesgo, la hipertensión arterial y la diabetes mellitus, que en múltiples oportunidades están ocasionando su daño irreversible sin conocerlas el portador.

Las realidades epidemiológicas de esta afección enfermedad nos inducen a mantenerla en un primerísimo foco de atención, máxime conociendo que cada vez más, la población cubana incrementa su expectativa de vida, que se aproxima a los 80 años.

De igual manera se ha precisado la necesidad de un abordaje multidisciplinario de esta entidad, que debe comenzar por el nivel primario de atención hasta ir definiendo las mejores oportunidades de cada enfermo particular en relación con las especialidades que deben ocuparse de él.

Con una licencia de los autores, me atrevo a escribir, que el conocimiento de esta entidad debe ser desde el nivel preprimario, esto es, desde las facultades de medicina, donde debe enseñarse la entidad con el mismo enfoque que conocemos y que se actualiza en este número.

De particular interés resulta el artículo de búsqueda activa de la enfermedad en un área de salud del centro de nuestro país, en Santa Clara. También es muy gratificante conocer que se buscan marcadores de la enfermedad, que nos orienten a precisar qué persona está en particular riesgo de enfermar y morir.

Los medios diagnósticos, desde el método clínico, pasando por la nada invasiva ultrasonografía hasta los estudios con imágenes, cada vez con mucho menos riesgos y mejor nitidez en estas, cuya espectacularidad no deja de asombrarnos, son situados en su justo lugar.

Finalmente, si todo lo que hemos revisado, incluyendo el tratamiento con medicamentos, no ha sido efectivo para el enfermo, entonces se impone la intervención sobre la zona de enfermedad, con sus dos vertientes bien precisadas, la cirugía o la angioplastia-stent, también conocidas como procedimientos abiertos o cerrados con indicaciones cada vez más precisas e individuales, de los que muy bien se señala en el texto: ambos procederes se complementan y no compiten.

En resumen queridos colegas, estamos frente a un número de excepción, para colocarlo debajo de la almohada, o tenerlo disponible muy cercanamente, en forma digital, como aglutinador de la verdad que prevalece en estos momentos.

Felicito de corazón, muy sinceramente, a los editores por esta iniciativa y a los autores que han dado lo mejor de sí para disponer de tanta verdad compactada en unas pocas páginas. Se ha conseguido la meta.

Sin embargo, no olviden que cada meta es un nuevo punto de partida.

Prof. JUAN ENRIQUE YARA SÁNCHEZ