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Revista Médica Electrónica

versión On-line ISSN 1684-1824

Rev.Med.Electrón. vol.38 no.5 Matanzas sep.-oct. 2016

 

ARTÍCULO HISTÓRICO

 

Combatientes y doctores del Ejército Libertador cubano

 

Fighters and physicians of the Cuban Liberating Army

 

 

Lic. Eida María Hernández Infante, Lic. Marcelino Mena Hernández, Lic. Omara Milián Zambrana, Lic. Loyna Caridad Milián Aldazábal, Lic. Isabel Carrasco Martínez, Lic. María Elena García Chaviano

Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas. Matanzas, Cuba.

 

 


RESUMEN

El presente trabajo abordó las síntesis biográficas de algunos hombres de las Ciencias Médicas, quienes se convirtieron en primeros oficiales del Ejercito Libertador cubano.

Palabras clave: combatientes, oficiales, doctores, ejército libertador.


ABSTRACT

The current work approached the biographical summary of several men of the Medical Sciences who became first-rank officers of the Cuban Liberating Army.

Key words: fighters, officers, physicians, liberating army.


 

 

INTRODUCCIÓN

Desde los primeros brotes de rebeldía surgidos en nuestro país contra los conquistadores españoles y después en las guerras por la independencia, la tradición de lucha de nuestros hombres ha jugado un papel destacado en las distintas esferas de la vida social, demostrando firmeza, valor y abnegación, por conquistar una vida mejor.

El objetivo de este trabajo es abordar las síntesis biográficas de algunas de estas personalidades de las Ciencias Médicas, que en sus dobles labores como combatientes y doctores, fueron protagonistas de las luchas en Cuba entre 1868 y 1898, donde alcanzaron altos grados militares.

 

DESARROLLO

Durante las guerras de la independencia de Cuba, estos hombres pensaron como poder servir de mejor manera a la lucha que se estaba llevando a cabo contra el colonialismo español y prestos a combatir partieron a los campos insurrectos e incluso dejaron sus familias y su confort, ya que habían estudiado carreras de Ciencias Médicas y no tenían necesidad de irse a la manigua.

Calculamos que de estos 67 hombres de batas blancas participantes en las guerras independentistas, 2 alcanzaron el grado mayores generales del Ejército Libertador, 2 de generales de División, 21 de generales de Brigada, 39 coroneles y 3 tenientes coroneles.

Eduardo Agramonte Piña

Coronel, médico-cirujano. Nació en Puerto Príncipe, Camagüey, el 3 de octubre de 1841.

Primo del Mayor General Ignacio Agramonte Loynaz. Comenzó sus actividades conspirativas en la Junta Revolucionaria de Camagüey. Junto con Ignacio y Salvador Cisneros lideró el sector más radical en contra de los que planteaban formulas reformistas. Fue uno de los 76 camagüeyanos que protagonizaron el alzamiento de Las Clavellinas. Al organizarse militarmente el contingente camagüeyano, le correspondió ocupar la jefatura de cuarto pelotón. Integró el Comité Revolucionario de Camagüey, creado el 26 de noviembre, y dos días más tarde recibió su bautismo de sangre en el combate de Bonilla, donde resultó herido en una pierna.

Se considera que fue el primero en derramar sangre mambisa en tierra camagüeyana. Dos días después, el 30, sin sanar aún la herida, participó en el combate de Arenilla. Tras esa acción tuvo que realizar su primera intervención quirúrgica en las complejas condiciones de campaña amputándole un brazo al entonces Teniente Coronel Pedro Recio, posteriormente conocido como el Manco de Arenillas.

El 26 de febrero de 1869, fue elegido miembro de la Asamblea de Representante del Centro, cargo al cual renunció el 29 de marzo, para incorporarse al Ejército Libertador como médico-cirujano. El 14 de abril de 1869 fue designado secretario del Interior del primer gobierno de la República en Armas, donde también se ocupó interinamente de la Secretaría de Relaciones Exteriores, durante las ausencias del titular de esa rama. Por discrepancia con el presidente Carlos Manuel de Céspedes, renunció al cargo y se incorporó a la Cámara de Representes como diputado por Camagüey, el 14 de abril de 1870.

Todo el tiempo que le dejaba disponible su trabajo lo dedicaba a prepararse militarmente estudiando la táctica y la estrategia. Se incorporó a las tropas a comienzo de 1871, pues la Cámara acordó recesar desde el 1 de enero, y el Mayor General Ignacio Agramonte lo llamó para que cumpliera la misión de crear un batallón. El 24 de agosto de 1871 fue nombrado jefe interino de la Brigada del Sur del distrito de Camagüey, con grado de Coronel.

Sostuvo varios combates, sobresaliéndose el de San Carlos, el 5 de octubre de 1871. El 20 de octubre, tuvo un encuentro con el enemigo cerca de la finca Matilde, propiedad de la familia de su esposa. A finales de 1871 atacó a una columna en Jobo Dulce (Hato Viejo). El 10 de enero de 1872 fue ascendido a Coronel, según consta en el escalafón del Ejército Libertador. El 8 de marzo de ese año, en un encuentro con fuerzas del Bon San Quintín, en San José del Chorrillo, recibió una herida de bala en el pecho que le produjo la muerte instantánea.

Realizó varios aportes a la causa independentista. Para instruir a los oficiales con los elementos de la táctica y la estrategia, elaboró un pequeño cuaderno que tituló Memorándum sobre el arte de la guerra, compilación de obras sobre el arte militar de la época, las cuales tradujo y extractó adicionándoles de forma didáctica, ejemplos concretos de la experiencia cubana, así como aspectos de la legislación militar mambisa. Tuvo también una sensibilidad extraordinaria para la música. Fue el autor de los toques de corneta “Diana mambisa” y “A degüello”.(1,2)

Pedro Estanislao Betancourt Dávalos

Mayor General. Médico-cirujano. Nació en Sabanilla del Comendador, Matanzas, el 6 de agosto de 1858. Fue uno de los organizadores del levantamiento en la provincia de Matanzas. Sin embargo, no llegó a tiempo al encuentro con Juan Gualberto Gómez y Antonio López Coloma, en Ibarra, el 24 de febrero de 1895. Fracasado el alzamiento, regresó a la ciudad de Matanzas y se sometió a las autoridades el día 28. Fue remitido al Castillo de San Severino y posteriormente desterrado a Madrid. De allí logró escapar el 10 de junio de 1895 y se dirigió a New York vía París.

Salió hacia Cuba en la expedición del vapor Willmington, apresado por los ingleses en la isla Inagua Grande, en Bahamas. Los expedicionarios estuvieron un tiempo presos en Nassau. Una vez liberado, regresó a New York para volver a Cuba en la expedición del vapor Bermuda, que bajo el mando del Mayor General Calixto García desembarcó por Maraví, Baracoa, el 24 de marzo de 1896, día en el que ingresó en el Ejército Libertador con grado de Teniente Coronel.

Permaneció un tiempo en el cuartel general del General en Jefe, quien lo designó para la provincia de Matanzas, a la que arribó el 4 de junio de 1896. Allí organizó la Brigada Oeste, por orden del General de División José Lacret, quedando como jefe de la misma. El 10 de diciembre de 1896, fue trasladado para la Jefatura de la Brigada Norte, perteneciente a la Primera División del Quinto Cuerpo. Resultó herido en la acción del ingenio Magdalena, el 5 de agosto de 1896. Libró los combates de Limones (26 de julio de 1896), Buen Amigo (18 de octubre 1896), Purgatorio (3 de diciembre de 1896), Infierno y Macurijes, y participó en los ataques a los poblados de Perico, Recreo, Corral Falso y Canasí, entre otros. El 26 de julio de 1897 fue nombrado jefe de la Primera División del Quinto Cuerpo, a la que dirigió en más de doce acciones combativas de consideración. Recibió la duodécima y última expedición del vapor Dauntless, que desembarcó por Caleta del Barco, en la bahía de Matanzas, el 26 de febrero de 1898.

Representó a su provincia en la Asamblea de Santa Cruz del Sur, donde aprobó la destitución del Mayor General Máximo Gómez como General en Jefe del Ejercito Libertador, el 11 de marzo de 1899. Fue ascendido a Coronel, el 8 de junio de 1896; General de Brigada, el 26 de julio de 1897; General de División, el 30 de diciembre de 1897; Mayor General, el 15 de agosto de 1898. Se licenció el 1 de enero de 1899. Fue elegido delegado a la Asamblea Constituyente, siendo uno de los que aprobó la Enmienda Platt, el primero de marzo de 1901. Fue designado gobernador de la provincia de Matanzas durante la ocupación militar norteamericana (1899-1902).

De 1902 a 1906 se desempeñó como senador por Matanzas. Del 20 de junio de 1922 al 20 de mayo del 1925 ocupó el cargo de secretario de Agricultura, Comercio y Trabajo en el gabinete del presidente Alfredo Zayas. Durante varios años fue presidente del Consejo Nacional de Veteranos.

Murió en la ciudad de La Habana, el 19 de mayo de 1933, cuando se encontraba conspirando contra la dictadura de Gerardo Machado. En homenaje a su memoria se le puso su nombre al antiguo pueblo de Corral Falso de Macurijes.(1-3)

Ángel del Castillo Agramonte

General de Brigada y odontólogo. Nació en Puerto Príncipe, Camagüey, el 14 de agosto de 1834. Adquirió experiencia combativa peleando como voluntario con las milicias de Pennsylvania durante la Guerra de Secesión en Estados Unidos. Fue uno de los 76 camagüeyanos alzados en las márgenes del río Las Clavellinas, el 4 de noviembre de 1868. Al estructurarse militarmente las fuerzas, quedó como ayudante del jefe del segundo pelotón Ignacio Mora. Participó en los combates de Bonilla y Arenillas, los días 28 y 30 de noviembre de 1868, respectivamente, contra una columna española mandada por el Conde de Valmaseda, a la que también emboscó seguidamente en Los Itabos.

Al reorganizarse el Ejército Libertador, después de la Asamblea de Guáimaro, fue nombrado jefe de la Segunda Brigada de la Primera División de Camagüey, con grado de General de Brigada bajo las órdenes del Mayor General Ignacio Agramonte. Participó en los combates de El Cercado, ingenio Santa Isabel, Bagá, El Salado y Belén, y en el ataque a San Miguel de Nuevitas. Apoyó al alijo de la expedición del vapor Salvador, desembarcada por La Guanaja, en la costa norte de Camagüey, el 14 de mayo de 1869. Posteriormente libró los combates de Monte del Horno, Quinta Canosa, La Caridad, Las Mercedes y Sabana Nueva. Fue designado para sustituir al General de Brigada Honorato del Castillo, muerto el 20 de julio de 1869, en el cargo del jefe de la División de Sancti Spíritus. En el combate de Pitajones, entre Ciego de Ávila y el estero de Júcaro, el 13 de agosto de1869, vengó la muerte de Honorato, pues hizo prisionero y ajustició al Teniente Coronel español que lo emboscó y asesinó. En este combate se apoderó personalmente de un cañón al que los mambises dieron el nombre de “El Ángel”. Murió durante el ataque al poblado de Lázaro López, en Camagüey, el 9 de septiembre de 1869.(1-4)

Honorato del Castillo Cansio

General de Brigada, médico y pedagogo. Nació en Sancti Spíritus, Las Villas, el 30 de noviembre de 1838. Presidía la Junta Revolucionaria de Sancti Spíritus y cuando se produjo el alzamiento de La Demajagua, se encontraba en la ciudad de La Habana. El 20 de noviembre de 1868 salió en un barco de cabotaje hacia Caibarién en compañía del habanero Luis Ayestarán. Después de pasar por Remedios se dirigió a Sancti Spíritus para fomentar el alzamiento de esa zona. Sin lograr su objetivo y temiendo una delación, en enero 1869 marchó a Camagüey, e hizo contacto con el Mayor General Ignacio Agramonte. Al conocer que el movimiento revolucionario en Las Villas estaba a punto de estallar, en febrero regresó a Sancti Spíritus para ponerse al frente de las fuerzas. En Jobosí, al este de esa villa, se le unieron más de mil hombres; pero con muy pocas armas. En marzo, Carlos Manuel de Céspedes lo nombró Jefe de la División que debía operar en Sancti Spíritus y Morón. Fue elegido delegado a la Asamblea de Guáimaro y representante a la Cámara, cargo al cual renunció para asumir el mando del distrito de Sancti Spíritus. Después de reorganizar la División libró los combates de Las Coloradas, Las Llanas, Judas Grande, Santa Gertrudis, Jobosí y la finca San José. El 20 de julio de 1869, cuando transitaba solo por un camino próximo a su campamento, a orillas del arroyo Naranjo, en Morón, fue sorprendido por el enemigo y asesinado. En el escalafón del Ejército Libertador aparece ascendido a General de Brigada, reconociéndosele la antigüedad con fecha 10 de abril de 1869.(1-5)

José Joaquín Castillo Duany

General de División. Médico. Nació en Santiago de Cuba, Oriente el 1ro de mayo de 1858. Hermano de General de División Demetrio Castillo Duany. Sirvió como médico en la Marina de Guerra de los Estados Unidos, etapa en la cual participó en una expedición científica en el Océano Glacial Ártico, lo que lo permitió adquirir experiencia en cuestiones navales. Ya en Cuba, prestó su colaboración en la fallida conspiración conocida como la Paz del Manganeso, en 1890.

Ingresó en el Ejército Libertador el 1ro. de julio de 1895, y se incorporó el día 4, en El Caney al Regimiento Prado (después Regimiento de Infantería Baconao, Primera Brigada, Segunda División del Primer Cuerpo), bajo las órdenes del Coronel Victoriano Garzón. Pocos días más tarde fue trasladado para el Estado Mayor del Mayor General José Maceo. Después del combate de Peralejo (13 de julio de1895), pasó al Estado Mayor del Mayor General Antonio Maceo, quien lo nombró jefe de Sanidad del primer Cuerpo; aquí resultó electo Delegado a la Asamblea Constituyente de Jimaguayú, donde lo nombraron subsecretario de Hacienda del Consejo de Gobierno, cargo al cual renunció para continuar prestando servicios directamente en las tropas.

Al organizarse la columna invasora, en los primeros días de octubre de 1895, fue designado su jefe de Sanidad y el 24 de noviembre de 1895, jefe del Cuerpo de Sanidad del Ejército Libertador, el cual ocupó durante poco tiempo por tener que salir hacia República Dominicana para procurar la ayuda del presidente de ese país. Simultáneamente, el presidente Gaspar Cisneros le encomendó continuar rumbo a New York, donde debía entregar unos documento al delegado Tomás Estrada Palma y ponerse a su disposición. Allí fue nombrado subdelegado general de la revolución, cargo desde el cual prestó valiosísimo servicio al Departamento de Expediciones.

Condujo hacia Cuba, como jefe de mar, las siguientes expediciones armadas: tercer viaje del vapor Three Friends, que salió de Jacksonville, Florida, el 17 de junio de 1896 y desembarcó en la playa Las Canas, en la costa sur de Pinar del Río, el día 23, con 45 4xpedicionarios bajo el mando del Coronel Francisco Leyte Vidal; cuarto viaje del Three Friends, que desembarcó el 7 de julio de 1896 por la playa de Boca Ciega, La Habana, conduciendo a 65 expedicionario bajo el mando del Comandante Juan R. Cowley; quinto viaje del Three Friends, que salió el 31 de agosto de 1896 de Jacksonville y desembarcó el 6 de septiembre de 1896 por la caleta María la Gorda, cerca del cabo de San Antonio, en Pinar del Río, con 37 expedicionarios bajo el mando del entonces General de Brigada Juan Rius Rivera; tercer viaje del vapor Dauntless, que salió el 9 de octubre de 1896 de Palm Beach, Florida y desembarcó el día 13 por Río Hondo de San Juan, en la costa sur de Las Villas, conduciendo 37 expedicionario bajo el mando de Miguel Betancourt Guerra; cuarto viaje del vapor Laureada, que salió de San Salvador en las Bahamas, y desembarcó el 21 de marzo de 1897 por el esterón del Júcaro, cerca de Banes, Oriente, conduciendo 37 expedicionarios bajo el mando del Mayor General Carlos Roloff; noveno viaje del vapor Dauntless, que partió de la isla Concepción, en las Bahamas y desembarcó el 30 de octubre de 1897 por Punta Brava, en la costa norte de Oriente, conduciendo la expedición del Coronel Eliseo Cartaya. En esta ocasión quedó en tierra para salir nuevamente a Estados Unidos por poco tiempo después.

Regresó definidamente a Cuba con más de trescientos expedicionarios en el vapor Florida, que salió el 17 de mayo de 1898 de Tampa y desembarcó el 25 por Banes, Oriente. Ascensos: a Coronel, el 4 de julio de 1895; General de Brigada, el 24 de noviembre de 1895. Fue elegido delegado, por Oriente, a la Asamblea Constituyente de 1901. Murió el 21 de noviembre de 1902, en París, Francia, a donde había acudido para restablecer su salud.(1-6)

Eusebio Hernández Pérez

General de Brigada. Médico. Nació en Colón, Matanzas, el 18 de enero de 1853. En la Guerra del 68 participó en el frustrado alzamiento de Jagüey Grande. Durante la Guerra Chiquita fue coordinador entre Oriente y La Habana, hasta que se vio en la necesidad de huir a Estados Unidos ante la inminencia de su detención por las autoridades españolas. Tuvo participación muy activa en el Plan Gómez-Maceo (1884-1886). Cuando comenzó la Guerra del 95 se encontraba en La Habana y salió hacia New York. Allí se enroló en la expedición del vapor Hawkins, bajo las órdenes del Mayor General Calixto García, la cual naufragó frente a las costas de New York, el 26 de enero de 1896. Poco después llegó a Cuba en la expedición del vapor Bermuda, que bajo el mando de Calixto desembarcó por Maraví, Baracoa, el 24 de marzo de 1896. Le fue reconocido el grado de Teniente Coronel. Se mantuvo un tiempo incorporado al Estado Mayor de Calixto y posteriormente estuvo subordinado a los mayores generales José Maceo y Mayía Rodríguez. El 19 de mayo 1896 fue nombrado subsecretario del Exterior, cargo al que renunció en agosto del propio año por divergencias con el Consejo de Gobierno.

Se unió al Cuartel General del General en Jefe y participó en los combates de Saratoga del 9 al 11 de junio 1896, por el cual fue ascendido a Coronel; Loma del Hierro, Cascorro y Guáimaro. Fue elegido, por el Cuarto Cuerpo, delegado a la Asamblea Constitucional de La Yaya; pero renunció por estar en desacuerdo con el método empleado para elegir a los delegados.

Se reincorporó al Estado Mayor de Calixto García en el Departamento Oriental. Participó en el ataque a Las Tunas y Guisa. En enero de 1898, Calixto lo envió a Estados Unidos para que recuperara su salud, pues sufría de anemia cerebral. El 24 de agosto de 1898 fue escandido a General de Brigada. Resultó elegido representante, por el Sexto Cuerpo, a la Asamblea de Santa Cruz del Sur; pero desde de New York, donde se encontraba residiendo, no aceptó porque la Isla estaba ocupada militarmente por los norteamericanos.

Regresó a la patria el 9 de enero de 1898, acompañando el cadáver de Calixto. Fue candidato a la vicepresidencia de la República, en las primeras elecciones republicanas. Estuvo muy vinculado a la política nacional, en la que presidió varios partidos políticos. Se retiró de la vida pública en 1921 para dedicarse por entero al ejercicio de su profesión. Se desempeñó como catedrático en la Universidad de La Habana y fue considerado un eminente ginecólogo. Murió en La Habana, el 24 de noviembre de 1933.(1-7)

Antonio Lorenzo-Luaces Iraola

Coronel. Médico-cirujano. Nació en Puerto Príncipe, Camagüey, el 11 de junio de 1842. Hermano del Coronel Emilio Lorenzo-Luaces y tío del Coronel Ernesto Lorenzo-Luaces Molina. Combatió en la Guerra de Secesión norteamericana en la fila del ejército norteño, con el grado de Coronel. Se incorporó a la Guerra del 68 como expedicionario del vapor Perrit, que desembarcó por la península de El Ramón, en la bahía de Nipe, Oriente, el 11 de mayo de 1869, bajo el mando del general norteamericano Thomas Jordan. Integraba la compañía Rifleros de la Libertad, bajo las órdenes del canario Manuel Suárez.

Fue designado médico de la División de Camagüey, subordinado al Mayor General Ignacio Agramonte. En julio de 1869 fue nombrado jefe de Sanidad de Oriente y ratificado en ese cargo mediante decreto presidencial del 4 de abril de 1870. No obstante, continuó al lado de Agramonte como soldado de filas. El 8 de octubre de 1871 fue uno de los 35 jinetes que rescataron al entonces General de Brigada Julio Sanguily de las manos del enemigo. Curó las heridas recibidas por Agramonte en el combate de El Salado, el 23 de julio de 1872. Después de la muerte de este, el 11 de mayo de 1873, continuó junto al Mayor General Máximo Gómez, con quien participó en la campaña de Camagüey. Se destacó en los combates de La Sacra, Palo Seco y Las Guásimas. Fue ascendido a coronel el 26 de marzo de 1874. Cuando Gómez invadió a Las Villas, quedó subordinado al General de Brigada Henry Reeve.

El 19 de abril de 1875 se encontraban acampados en La Crimea, a 40 km al sudoeste de Puerto Príncipe, Camagüey, cuando fueron sorprendido por la guerrilla “Los Doce Apóstoles”, produciéndose el combate del potrero Los Alacranes, en el cual Antonio fue hecho prisionero. Conducido a Puerto Príncipe el día 20, lo fusilaron el 21. El 21 de diciembre de 1874, en su diario, Gómez había hecho anotaciones muy encomiásticas sobre la persona de Antonio Luaces. Algunos historiadores sostienen que llegó a ser jefe superior de Sanidad del Ejercito Libertador, mientras otros afirman que, en la práctica, solo ejerció el cargo de jefe de Sanidad de la primera División del Cuerpo del Centro, en Camagüey.(1-8)

José Lázaro Martín Marrero Rodríguez

Coronel. Médico. Nació en Santiago de las Vegas, La Habana, el 17 de diciembre de 1859. En 1893 José Martí lo nombró delegado de la revolución en Jagüey Grande, Matanzas. El 24 de febrero de 1895 se alzó al frente de 39 hombres en el potrero La Yuca, en Jagüey Grande. Dos días después sostuvo un encuentro con los españoles en Palmar Bonito, siendo este el primer combate librado en el Occidente en la Guerra del 95. Los cubanos fueron dispersados y obligados a refugiarse en la Ciénaga de Zapata. Al cerciorarse del movimiento armado había fracasado en esa provincia, decidió presentarse ante las autoridades españolas el 3 de marzo de 1895. Fue deportado a al ciudad de Pravia, en Asturias, de donde se fugó para pasar la frontera con Francia, el 1ro. de julio de 1895. Días después llegó a New York, donde se enroló en la expedición del vapor Willmigton, bajo el mando de Pedro Betancourt. No pudieron llegar a Cuba, pues fueron detenidos en la isla de Inagua y conducidos a Nassau, en las Bahamas, el 19 de octubre de 1895. Después de otro intento, del cual también resultó detenido, logró desembarcar el 24 de marzo de 1896 por Maraví, Baracoa, en el vapor Bermuda, bajo las órdenes del Mayor General Calixto García, a quien acompañó hasta el 2 de mayo de 1896. Posteriormente estuvo subordinado a los coroneles José González Calunga y Braulio Peña, sucesivamente.

Se destacó en los combates de Saratoga (9 al 11 de junio 1896) y Jacinto (6 de octubre de 1896). A mediados de noviembre de 1896 pasó al Cuartel General del General en Jefe. En enero de 1897 fue trasladado a la Primera División del Quinto Cuerpo de Matanzas, bajo las órdenes del General de División Avelino Rosas, de quien fuera jefe del Estado Mayor. En abril de 1897 se trasladó a la Brigada de Colón (primera Brigada de la Primera División del Quinto Cuerpo), bajo el mando del General de Brigada Francisco Pérez Garoz. En agosto de 1897 pasó al Estado Mayor General Francisco Carrillo, jefe del Cuarto Cuerpo de Las Villas, donde terminó la guerra.

Ascensos: a Capitán, el 24 de marzo 1896; Comandante, el 26 de mayo de 1896; Teniente Coronel, el 31 de enero de 1897; y Coronel, el 1ro. de junio de 1897. Se licenció el 1ro. de abril de 1899.

Poco después fue designado alcalde de Yaguajay, en Las Villas, por la intervención militar norteamericana. El 16 de junio de 1900 fue electo por el pueblo en el mismo cargo y reelecto el 1ro de junio de 1901. Posteriormente ingresó en el Ejército Nacional con grado de capitán. En él ocupó los cargos siguientes: director de un hospital militar, jefe de Sanidad del Cuerpo de Artillería, hasta 1909; jefe de Sanidad del Ejército permanente, de 1913 a 1915, con grado de Teniente Coronel; jefe de la Sección de Sanidad del Ejército Mayor General, de 1915 a 1919, con grado de coronel.(1-9)

Juan Emilio de la Caridad Núñez Rodríguez

General de División. Estomatólogo. Nació en Sagua la Grande, Las Villas, el 27 de diciembre de 1855. Combatiente de las tres guerras. En la del 68 hizo su ingreso en las fuerzas independentista en julio de 1876. Después de mantenerse unos días junto al entonces Teniente Coronel Francisco Carrillo, se incorporó a la caballería del Regimiento de Occidente, perteneciente de la Brigada de Cienfuegos, bajo el mando del General de Brigada Henry Reeve, de quien fue ayudante con grado de teniente. Integró, junto con Reeve, la Brigada de Colón. Participó en el combate de Yaguaramas, donde cayera su jefe. Núñez quedó bajo las órdenes del Coronel Ricardo Céspedes.

Al principio de 1878 comenzó a operar en su región natal, subordinado al Mayor General Carlos Roloff. Depuso las armas, siendo comandante, en la finca El Mamey, el 18 de marzo de 1878. A finales agosto de 1879, poco antes de comenzar la Guerra Chiquita, fue detenido en Sagua la Grande y remitido al Morro de La Habana, acusado de conspirar. A los 19 días logró escapar.

Se alzó el 13 de noviembre de 1879 en San Diego de Nigua, Sagua la Grande. Con grado de teniente coronel libró los combates de los ingenios Santa María y Conyedo, en Quemado de Güines. También tuvo acciones en Lomas de Amaro, Viana, Los Abreu, Antón Díaz, San Gil, Siguanea, El Gato, Pozo Viejo y Las Hondonadas. El Comité Revolucionario Cubano de Nueva York lo había ascendido a coronel desde diciembre de 1879. Ya fracasada la guerra, se resistió a deponer las armas y se mantuvo en la manigua, con unos cien hombres, hasta el 3 de diciembre 1880 en que por instancia de José Martí, a nombre del Comité Revolucionario Cubano marchó a los Estados Unidos saliendo por el Puerto de Isabela de Sagua, en ese mismo mes. Fue el último de los jefes insurrectos en abandonar la Isla.

En marzo de 1884 se enroló en una goleta norteamericana para arribar al puerto de Isabela de Sagua con el objetivo de explorar la situación real en Cuba. Fue denunciado y capturado el 14 de ese mes. Por gestiones familiares, quedó en libertad y regresó a Estados Unidos. Fue uno de los miembros fundadores del Partido Revolucionario Cubano (PRC)y colaboró en la organización del plan Fernandina.

Al comenzar la Guerra del 95 recibió la misión de permanecer en New York como elemento aglutinador de los emigrados cubanos. Comenzó a colaborar en la organización de expediciones armadas hacia Cuba. La primera de estas fue la del vapor León, que con 29 expedicionarios desembarcó en la ensenada de Taco-Nibujón, Baracoa, Oriente, el 19 de agosto de 1895. El 10 de febrero de 1896, al crearse el Departamento de Expediciones, el delegado del PRC, Tomas Estrada Palma, lo nombró jefe del mismo, aunque su fundación oficial se llevó a cabo el 2 de noviembre de 1896. El 14 de septiembre de 1896, el Consejo de Gobierno lo ratificó en ese cargo con grado de coronel y el 16 de diciembre de 1896, cuando ya había conducido a Cuba cinco expediciones, fue ascendido a General de Brigada. En total condujo personalmente como jefe de mar, más de veinte expediciones sin haber fracasado ninguna.

Después de disuelto el Departamento de Expediciones realizó su último viaje como jefe de expedición en los vapores Florida y Fanita, que desembarcaron a más de 500 hombres por Palo Alto, en la costa sur de Camagüey, el 3 de julio de 1898. Cuatro días más tarde recibió el ascenso a General de División. Fue unos de los cinco generales que acompañaron al Mayor General Máximo Gómez en su histórica entrada a la ciudad de La Habana, el 24 de febrero de 1899. Como delegado a la Asamblea de Representante de la Revolución Cubana (Asamblea de Santa Cruz del Sur y del Cerro), por el Cuarto Cuerpo, votó en contra de la destitución de Gómez como General en Jefe del Ejercito Libertador el 9 de marzo de 1899.

Formó parte de la Junta Consultiva creada por Gómez para gestionar el licenciamiento del Ejército Libertador, la cual sesionó del 24 de abril al 27 de mayo de 1899, en la Quinta de los Molinas, en la ciudad de La Habana.

Se licenció del Ejército Libertador el 15 de julio 1899. El 27 de octubre de 1899, el gobierno interventor militar norteamericano lo designó para ocupar el cargo de gobernador de la provincia de La Habana. El 5 de noviembre de 1900 fue electo representante a la Asamblea Constituyente por esa provincia. En las primeras elecciones de la República resultó elegido para el mismo cargo de gobernador, en el cual se mantuvo hasta el 8 de abril de 1908. El 22 de octubre de 1911 ocupó la presidencia de la Asociación Nacional de Veteranos del Ejército Libertador. Fue secretario de Agricultora, Comercio y Trabajo durante el primer período del gobierno del presidente Mario García Menocal (1913-1917) y lo acompañó, como vicepresidente de la República, en su segundo período de gobierno (1917-1921). Murió en la ciudad de La Habana, el 5 de mayo de 1922.(1,10,11)

Juan Bruno Zayas Alfonso

General de Brigada. Médico. Nació en la ciudad de La Habana, el 8 de junio de 1867. Se alzó el 25 de abril de 1895 al frente de un grupo en Vega Alta, Las Villas. El 11 de mayo de 1895 se unió al entonces Coronel Joaquín Castillo López. Por acuerdo de los jefes villareños, le fue conferido el grado de Teniente Coronel. Cuando se organizó el Regimiento de Infantería Narciso, quedó al frente de este. De inmediato tuvo su bautismo de fuego en el potrero Las Delicias. El 24 de junio de 1895 pasó a mandar el Regimiento de Caballería Villaclara, el cual organizó.

El 18 de julio de 1895 se puso bajo las órdenes del Mayor General Manuel Suárez, después de haber atacado cuatro días antes el fuerte provincial. Fue ascendido a coronel el 15 de agosto de 1895. Ese mismo día se unió al Mayor General Serafín Sánchez, jefe de la Primera División del Cuarto Cuerpo. El 3 de diciembre de 1895 atacó al fuerte La Agronómica y el 12 de ese mes combatió en Arroyo Blanco. El 15 de diciembre de 1895 se incorporó al Mayor General Máximo Gómez en Mal Tiempo. Organizó la Brigada Villaclara (Primera Brigada de la Segunda División del Cuarto Cuerpo), de la cual asumió al mando para participar en la invasión. Hasta ese momento había librado las acciones de Tienda de Soto, La Campana, Quemado Grande, Arroyo Loro, Palo Prieto, Casanueva, La Movida, Cayo Romano y Torre Agronómica. Con la columna invasora participó, entre otros, en los combates de La Colmena, Coliseo, Calimete. Güira de Melena, Alquízar, Guayabal, Vereda Nueva, Hoyo Colorado, Cabañas, Bahía Honda y San Diego.

El 22 de enero de 1896 entró en Mantua al frente de la vanguardia de la columna. Fue uno de los firmantes del acta allí levantada, al siguiente día, dando por concluida la invasión. En la primera Campaña de Pinar del Río se destacó en los primeros combates de Paso Real de San Diego, Candelaria y el ingenio Laborí (11 de febrero de 1896), donde resultó herido. Nuevamente en La Habana, combatió en Jaruco y Santa Cruz del Norte, así como en La Perla, en la provincia de Matanzas. El 13 de marzo de 1896, encontrándose cerca de Batabanó, Maceo le dio la misión de marchar hacia Las Villas para organizar una brigada volante con la idea de que operara al este de la trocha de Mariel a Majana. Días después llegó a Las Villas y atacó a Santa Clara y participó en los combates de San Juan de los Yeras y Esperanza.

En cuanto a su ascenso a General de Brigada se dice que el Mayor General Antonio Maceo le confirió ese grado al llegar la invasión a Guane, el 20 de enero de 1896; pero lo cierto es que Maceo le entregó la proposición al General en Jefe en un escrito fechado en Nueva Paz, el 21 de febrero de 1896. Este a su vez se hizo llegar al Consejo de Gobierno el 8 de abril de 1896, lo cual fue aprobado al siguiente día. De esta forma Zayas se convirtió en el general más joven del Ejército Libertador en esos momentos.

El 13 de mayo de 1896 salió de Saratoga de Sagua para emprender el regreso a occidente con más de quinientos hombres. La tenaz persecución de los españoles lo obligó a entablar combates como los de Quemado de Güines, Motembo, Santa Isabel y el ingenio Carolina, cerca del Recreo, en Matanzas. Al quedar mermadas sus fuerzas se vio precisado a contramarchar hacia la región de Sagua la Grande. El 8 de junio de 1896 emprendió su segundo avance a occidente con unos doscientos hombres. El 26 de junio de 1896 llegó a La Habana. Libró los combates de Borroto y Lomas de Casigua. El 30 de julio de 1896 el enemigo atacó el lugar donde se encontraba acampado, en la finca La Jaima, en Güiro de Boñigal, Quivicán. En la acción recibió heridas mortales: una de bala, en el ojo derecho, un tajo de sable, en la cavidad axilar derecha, que le cortó la arteria. Sus restos fueron enterrados en Quivicán y trasladados al cementerio de Colón el 30 de julio de 1922.(1-12)

Máximo Zertucha Ojeda

Coronel. Médico. Nació en la provincia de La Habana el 18 de noviembre de 1855. Ingresó en el Ejército Libertador el 3 de febrero de 1896, incorporándose como médico a la Brigada del Sur de La Habana (Tercera Brigada de la Segunda División del Quinto Cuerpo), bajo el mando del General de Brigada Pedro Díaz Molina, con el grado de Comandante. El 13 de mayo de 1896 fue ascendido a médico mayor de la Segunda División del Quinto Cuerpo. El 13 de junio de 1896 fue promovido interinamente a jefe de sanidad de la División. Dos días después pasó a desempeñarse como médico personal del Mayor General Antonio Maceo, a quien asistió el 23 de junio de 1896 debido a las heridas que recibió en el combate de Tapia. El 14 de agosto de 1896 fue ascendido a Coronel. Acompañó a Maceo en el paso de la trocha de Mariel a Majana, por mar, el 4 de diciembre de 1896. Participó en el combate de San Pedro, donde cayó Maceo. Dos días después, la columna en la que marchaba pasó por las cercanías de Melena del Sur, donde vivían su esposa e hijos. Logró separarse de ella sin ser visto y, después de refugiarse en su casa, se presentó al enemigo al siguiente día, 10 de diciembre. No aceptó el ofrecimiento de cargos que le hicieran los españoles y se mantuvo colaborando con el ideal independentista.

El 20 de abril de 1898 solicitó su ingreso en el Ejército Libertador para que se le sometiera a un tribunal de honor, ya que se había generado un ambiente de rumores, sobre todo en publicaciones de los emigrados en Estados Unidos, en cuanto él había sido el centro de un plan para traicionar y asesinar a Maceo.

Fue admitido en el Ejército Libertador el 1 de mayo de 1898 y ocupó una plaza de médico en el Cuartel General del Departamento Occidental. Se creó una comisión investigadora, encabezada por el General de División Alejandro Rodríguez, quién presentó un informe exonerándolo de toda culpa. Por su parte, el Consejo de Gobierno, en la sesión del 24 de abril de 1898, había acordado un perdón general que incluía a los desertores, con el objetivo de aunar los esfuerzos en la etapa decisiva de la guerra con la intervención del ejército de Estados Unidos. Reclamó el grado de Capitán, correspondiente al grado que ocupaba, pero concluyó la guerra sin que se le reconociera. El 17 de octubre de 1902 ocupó el cargo de concejal del ayuntamiento de Güira de Melena hasta el 24 de abril de 1903, en que renunció para desempeñarse como jefe de sanidad de esa localidad. Fue destituido de ese cargo el 8 de agosto de 1904. Murió el 26 de octubre de 1905.(1-13)

 

CONCLUSIONES

Fueron nuestros mambises y doctores en las guerras de liberación de 1868-1898. El corazón enérgico, el patriotismo intachable, la mano tierna acostumbrada a realizar exámenes físicos a los enfermos, para contribuir a mitigar el dolor, capaces de empuñar un machete o un fusil, sin la mayor vacilación, pero también dispuestos a salvar vidas, poniendo muy en alto su profesión.

Supieron sufrir con estoicismo todas los dolores y privaciones, para prestar sus modestos servicios a la causa, demostrándose su infinito deseo de ver su patria libre, sin importarles el peligro de perecer en la lucha, confirmándose así su desinterés personal, espíritu de sacrificio y por sobre todas las cosas su gran amor a Cuba. Como dijera José Martí: “¡Alcémonos para darles tumbas a los héroes, cuyo espíritu vaga por el mundo avergonzado y solitario, alcémonos para que algún día tengan tumba nuestros hijos!”(14)

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1- Diccionario enciclopédico de historia militar de Cuba. Primera parte (1510-1898). T. I, Biografías. La Habana: Ediciones Verde Olivo; 2004. 393 p.

2- Godínez Sosa E. Eduardo Agramonte Piña. La Habana: Editorial Arte y Literatura; 1975.

3- Rodríguez Abascal P. El Mayor General Pedro E. Betancourt en la guerra y en la paz. La Habana: [editorial desconocida]; 1954.

4- El Camagüey legendario. Camagüey: Instituto de Segunda Enseñanza Esteban Borrero Echeverría/Imprenta La Moderna; 1944.

5- Piedra de Barreras O. Grandes de la patria: apuntes biográficos sobre cubanos notables. La Habana: Imp. "La Propagandista"; 1927.

6- Martínez Arango F. Próceres de Santiago de Cuba. Índice biográfico-alfabético. Santiago de Cuba: [editorial desconocida]; 1946.

7- Cepeda R. Eusebio Hernández. Ciencia y Patria. La Habana: Editorial de Ciencias Sociales; 1991.

8- Lagomasino L. Patriotas y heroínas. La Habana: Boletín Nacional de Historia y Geografía; 1912.

9- Fina García F. Biografía del coronel del Ejército Libertador Dr. José Lázaro Martín Marrero Rodríguez. Stgo. de las Vegas: Heraldo santiaguero; 1943.

10- de Arce Brizuela LA. Emilio Núñez (1855-1922), historiografía. La Habana; 1943.

11- Rodríguez Altunaga R. El general Emilio Núñez. La Habana; 1958.

12- Castellanos García G. Juan Bruno Zayas, médico y soldado. La Habana: Editorial Hermes; 1924.

13- Le Roy Gálvez LF. Máximo Zertucha Ojeda: el último médico de Maceo. La Habana: Imprenta Cárdenas; 1958.

14- Martí J. Obras Completas, tomo lV. La Habana: Centro de Estudios Martianos; 2001.

 

 

Recibido: 16 de junio de 2016.
Aceptado: 15 de septiembre de 2016.

 

 

Eida María Hernández Infante. Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas. Carretera Central Km 102. Matanzas, Cuba. Correo electrónico: gchaviano.mtz@infomed.sld.cu

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