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Revista Médica Electrónica

versión On-line ISSN 1684-1824

Rev.Med.Electrón. vol.38 no.5 Matanzas sep.-oct. 2016

 

ARTÍCULO HISTÓRICO

 

El Dr. Domínguez Roldán visto por el estudiante Mario Dihigo

 

Dr. Domínguez Roldan seen by the student Mario Dihigo

 

 

Dr. Víctor Guillermo Ferreira Moreno

Hospital Provincial Pediátrico Docente Eliseo Noel Caamaño. Matanzas, Cuba.

 

 


RESUMEN

Tres meses, antes del gran descubrimiento de los rayos que marcarían el nacimiento de la Radiología, y en pleno estremecimiento nacional independentista, nació el Dr. Mario Emilio Dihigo Llanos, en Cidra, Matanzas, en 1895. Profesional multifacético: médico, radiólogo, escritor, periodista, pedagogo y fundador de la revista  Médica, fue reconocido como educador destacado del siglo XX en Cuba e incluido entre las cien figuras científicas cubanas de todos los tiempos. Estudió entre 1912 y 1917 en la Escuela de Medicina de la Universidad de La Habana, de modo que conoció y fue alumno de varias de las más excelsas figuras de la ciencia cubana. En ocasión del ciento veinte aniversario de su nacimiento y del surgimiento de la Radiología, y a través de artículos recogidos en su autobiografía, el autor abordó otra visión, más humana, de la personalidad del Dr. Francisco Domínguez Roldán: médico, patriota, coronel del Ejército Libertador, defensor de la doctrina finlaísta e introductor de la Radiología en Cuba. Se analizaron algunas notas biográficas de ambas figuras. El trabajo pretendió reconocer a todos los que han dedicado, o han decidido dedicar su vida a la ciencia de las Radiaciones e Imágenes.

Palabras clave: Radiología, Historia de la Medicina, Francisco Domínguez Roldán, Mario Dihigo Llanos, Cuba.


ABSTRACT

Three months before the great discovery of the rays that marked the birth of Radiology, and in full force of the national independent quiver, Dr Mario Emilio Dihigo Llanos was born in Cidra, Matanzas, in 1895. Multifaceted professional: physician, radiologist, writer, journalist, pedagogue and founder of the journal Mdica, he was recognized as outstanding educator of the 20 century in Cuba and among the 100 Cuban scientific personalities of all the times. Between 1912 and 1917 he studied in the Medicine School of the University of Havana, therefore he met and was the pupil of several of the most distinguished figures of the Cuban science.  In occasion of the 120 anniversary of his birth and of the emergence of Radiology, and through articles gathered in his autobiography, the author approached another, more human view of Dr. Francisco Dominguez Roldan’s personality: physician, patriot and Colonel of the Liberator Army, defender of the Carlos J. Finlay’s doctrine and introducer of Radiology in Cuba. We analyzed several biographic notes of both of the figures. The work pretended to recognize all the persons who had devoted, or have decided to devote their life to the science of Radiology and Imaging.

Key words: Radiology, Medicine History, Francisco Domínguez Roldán, Mario Dihigo Llanos, Cuba.


 

 

INTRODUCCIÓN

El 8 de noviembre de 1895 marcó el comienzo de una nueva era en la historia de la medicina: el descubrimiento de los rayos X por Roentgen. Por el altruismo del físico, fue adoptado inmediatamente por todos y constituyó un gigantesco paso adelante en el desarrollo de la medicina, al añadir una nueva dimensión al examen clínico que hacía posible el estudio de lesiones anatómicas profundas, convirtiéndose a partir de entonces, en parte esencial del diagnóstico y más tarde del tratamiento. La explosión tecnológica de las últimas décadas ha multiplicado las prestaciones de la especialidad; la aparición de nuevas técnicas, modalidades y el mejoramiento de las ya existentes, se suceden con significativa frecuencia y de manera paralela, mejoran la obtención, el almacenamiento y la transmisión de las imágenes y con ello el teleproceso y la telemedicina, elementos todos que complementan de manera significativa el alcance de esa rama de las ciencias médicas.

Grandes esperanzas están depositadas, además, en la Imagenología molecular y en una de sus potencialidades: el diagnóstico preclínico. Lo penoso, a pesar de todos los adelantos, y aunque el diagnóstico por imágenes está implicado en numerosas decisiones médicas cruciales, es que aún el acceso, incluso a los servicios más esenciales, es limitado para muchos en el mundo.

En ocasión del ciento veinte aniversario del nacimiento del Dr. Dihigo y del descubrimiento de los rayos que darían origen a la Radiología y a la Radioterapia, el autor pretende homenajear a dos figuras de la historia de las ciencias en Cuba, que iluminaron los principios de la Patria y que, aunque estaban bien establecidas ya, decidieron dedicar formalmente sus mayores energías a la Radiología.

 

DESARROLLO

Resulta poco menos que obligado, en un trabajo de esta naturaleza, destacar de manera particular a los pioneros del uso y progresiva aplicación de los rayos X en Cuba y reconocer a los que han partido físicamente en cualquier lugar del país, entre ellos a los doctores Carlos Desvernine, Emilio Alamilla y Martínez Mesa, quienes fundaron el primer Instituto de Radioterapia y Electroterapia;(1,2)a los doctores Miguel de Carrión, José A Taboadela, Jorge Selva, Gerardo Gutiérrez, Gustavo González Sastre, Francisco Hernández, Juan Bautista Ruiz y José R. Valdés Anciano, discípulos, ayudantes y colaboradores del Dr. Domínguez Roldán.(1)

A los doctores Filiberto Rivero (profesor Titular), Viamonte Cuervo (profesor Auxiliar) y Ricardo Hernández Beguerie (profesor Agregado), fundadores de la primera cátedra de Radiología y Fisioterapia;(1,2) a los Drs. Castellanos y Pereira por sus trabajos angiográficos.(2) De manera esencial al Dr. Pedro L. Fariñas Mayo, quien dedicó su vida al ejercicio, al progreso y a la enseñanza de la Radiología.

En Matanzas, a los doctores: Augusto Escoto, al propio Dihigo, Isaac García Hernández, Rodolfo Beguiristain, Alfredo Botet, Wilfredo Valls, Valdés Araujo, Antonio González, Machado, Urbizo Cañón, la Dra. Luzardo, Jorge Morejón y Manuel García. Igualmente se recuerda con singular vehemencia al entusiasta Dr. Jorge Banasco Domínguez, quien bien pudo haber sido notable colaborador del Dr. Fariñas; ambos fallecieron prematuramente.

- Mario Emilio Dihigo Llanos

Nació el 8 de agosto de 1895, en el ingenio “Magdalena” del entonces municipio de Santa Ana de Matanzas (Cidra), hoy perteneciente al Consejo Popular Santa Ana, del municipio Limonar. Comenzó el bachillerato en el Instituto de Matanzas, lo continuó en Pinar del Río y lo terminó en La Habana en 1912.(3)

Ese mismo año matricula en la Escuela de Medicina de la Universidad de La Habana. En aquella época fue presidente de la Asociación de Estudiantes de Medicina y director, administrador, redactor y cobrador de su revista. A las diez de la mañana del 26 de junio de 1917, recogió en las oficinas de la secretaría de la universidad el título de Doctor en Medicina y Cirugía; esa misma noche tomó el tren hacia el entonces central Carreño, donde comenzaría a ejercer su profesión al día siguiente, cubriendo las vacaciones del médico local por espacio de dos semanas.(4,5)

Se sintió inclinado, inicialmente, a dedicarse a la especialidad de garganta, nariz y oídos (GNO) y asistía diariamente a la consulta externa del Hospital Mercedes, donde le permitió trabajar el profesor Emilio Martínez. Allí conoció al director del dispensario del Bando de Piedad, quien le ofreció la plaza de especialista de GNO, la que aceptó a pesar de ser totalmente honoraria. Unos meses después, cuando los doscientos pesos que había traído del central Carreño estaban tocando a su fin, comienza a trabajar como médico en Bejucal, donde pensaba instalarse con la que sería su esposa. Sin embargo, un hecho cambió el curso de sus vidas: se estaba proyectando la fundación, en Matanzas, de la Escuela Normal de Maestros que debía funcionar en cada provincia.(6,7)

En 1918 se trasladó definitivamente a Matanzas: había obtenido por oposición, en La Habana,(7) la cátedra de Anatomía, Fisiología e Higiene de la Escuela Normal, la que ocupó por más de 40 años; fue indistintamente secretario y director de esa escuela. Asimismo, fue profesor de Anatomía Artística en la Escuela de Artes Plásticas de Matanzas(3) y profesor del Colegio Arturo Echemendía.(8)

En julio de 1921, funda la revista Médica precursora de la actual Revista Médica Electrónica.(9) Estuvo dedicado a enfermedades de la piel, sífilis y vías urinarias y definitivamente a la Radiología. Por sus ideas políticas fue encarcelado durante el gobierno de Machado, época en la que se le suspendió empleo y salario. Con estilo irónico denunció en la prensa la corrupción, el abandono de la enseñanza y otros males que padecía la República.

Participó en diferentes eventos y congresos como la Conferencia Regional Iberoamericana del Rotary International, en 1936, en la Convención Constituyente Cubana, en 1940, y en el Segundo Congreso Mundial de la Paz, en 1950, además de otros eventos médicos. De igual manera fue miembro de importantes corporaciones, como la Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales de La Habana, institución en la que ingresó como académico correspondiente en 1942,(3,10) con el tema: “Condrodisplasia hereditaria deformante”, expuesto la noche del 26 de marzo,(10) un mes después del fallecimiento de Domínguez Roldán.

Fue miembro fundador del Grupo Índice. Fue además distinguido por varias sociedades radiológicas extranjeras que lo habían hecho miembro.
Participó en la Campaña de Alfabetización.

Dentro de sus mayores aportes se encuentran las obras de texto que elaboró, relacionadas con la enseñanza de Educación para la Salud, Ciencias de la Naturaleza y Biología Humana, que formaron parte del programa educacional de varios países, además de libros de cuentos, viajes y cuadernos.(3) Reveló un concepto amplio de la docencia y la maestría pedagógica a partir de sus profundos conocimientos, habilidades y gran vocación.

En la figura 1 se aprecia al Dr. Mario Dihigo en tres momentos de su vida: a la izquierda en 1917, año de su graduación como médico. En el centro, médico y profesor establecido. A la derecha, en el retiro.

Fallece en Matanzas el 27 de febrero de 1978.

- Francisco “Panchón” Faustino de la Caridad Domínguez Roldán. (Figura 2) La Habana 15 de febrero 1864- ibídem 25 de abril de 1942, gran médico (anatomista y cirujano) y excelente pedagogo; carismático profesor de gran reputación en la Facultad de Medicina de la Universidad de La Habana, de la cual llegó a ser su Decano, valeroso oficial mambí, honesto Ministro y uno de los máximos defensores de la prioridad de la doctrina finlaísta en la conquista de la fiebre amarilla.

Por sus valiosos aportes en el estudio de las aplicaciones de las radiaciones en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades, se ha considerado con justicia como el “padre de la Radiología en Cuba”. Su labor lúcida y con perspectiva de futuro contribuyó de manera notable al desarrollo posterior de la disciplina.(11-15)

Se graduó en la Facultad de Medicina, de París, a los 27 años (1891), donde estudió por espacio de seis años, luego de haber vencido la carrera con notas de sobresalientes en la Universidad de La Habana, (1883) y obtenido el doctorado en España, (1885) con la tesis titulada “Contribución al estudio de la fiebre amarilla”. Rechazó las ofertas de profesores y compañeros de estudios para permanecer en el país galo y ejercer allí. A ellos respondió en los siguientes términos: “…Cuba es pequeña, esclavizada; necesita que sus hijos se sacrifiquen para independizarla y engrandecerla…” ¡Cuánto honor hizo a sus ideas y cuán consecuente fue con ellas!(12,14)

Según Presno Bastiony, otra gran personalidad, citado por el profesor Gregorio Delgado,(14)era un trabajador infatigable, pero con reputación de tener “malas pulgas” y un carácter exigente, a lo que se unía una gran severidad en las pruebas de curso, por lo que llegó a considerarse su asignatura un verdadero paso de las Termópilas, pues no era de los que buscaban popularidad a costa de proceder con suavidad en los exámenes.

En el curso de la guerra, inicialmente, y por indicación de Juan Gualberto Gómez, se mantuvo como enlace en La Habana; luego estuvo al lado del brigadier Lacret, atendió al Generalísimo Máximo Gómez y más tarde, con el general Pedro Betancourt. En la provincia de Matanzas, fue médico jefe, Gobernador Civil del oeste de Cuba y terminó la guerra como Coronel del Ejército Libertador.(11)

Durante varias décadas, publicó diversos artículos en publicaciones periódicas cubanas y extranjeras generando una amplia bibliografía activa.(11,14,15)

Tuvo la oportunidad de conocer a Pierre y Marie Curie.(15)

En 1906, instaló en el Hospital Mercedes el primer Departamento de Radiología de Cuba, inaugurado el 1 de mayo de 1907 y del cual fue fundador y primer Director. En los años siguientes, organizó el Departamento de Radiología de la Quinta Covadonga (actual Hospital Salvador Allende), del que también fue fundador y primer director, así como los de la Benéfica y del Hospital Calixto García, todos los cuales cooperaron eficazmente en el progreso de los estudios y práctica radiológica en Cuba.(13,15)

Sus méritos profesionales contribuyeron a prestigiar la campaña que emprendió desde París, en defensa de la gloria de Finlay. La propia Academia de Medicina de París concedió el Premio Vernois a sus libros: Carlos J. Finlay. Su centenario, (1933),  Su descubrimiento, (1881). Estado actual de su doctrina."(11,15)

Entre otros, fue merecedor de los siguientes premios honoríficos: Académico de Mérito de la Academia de Ciencias de La Habana, Miembro de la Academia de Medicina de París, Socio de Honor de la Sociedad Nacional de Cirugía, Gran Oficial de la Orden "Carlos Manuel de Céspedes", Medalla de Bronce por la Asistencia Pública de París, Caballero de la Legión de Honor de Francia, Medalla de la Independencia, Oficial de la Legión de Honor, Gran Cruz de la Orden Nacional de Mérito "Carlos J. Finlay".(11,15)

Murió víctima de un accidente el 25 de abril de 1942.

- Cómo veían los estudiantes de entonces al profesor Domínguez Roldán

Durante su formación en la Universidad de La Habana, Mario Dihigo conoció y fue alumno de varias de las más eminentes figuras de la ciencia cubana. En los cursos 1912-1913 y 1913-1914, aunque no de manera directa, estuvo en contacto con el Dr. Domínguez Roldán y luego, en el 1914-1915, recibiría por el profesor, la asignatura Anatomía Topográfica y Operaciones.

De cómo veían los estudiantes de entonces, en la opinión de Dihigo, a la figura del profesor, se pueden extraer varias ideas recogidas por este, en lo que finalmente compiló como su autobiografía. Al Dr. Domínguez, entre tantos profesores estudiados, fue a uno de los que más espacio le dedicó.

Así se expresó el Dr Mario Dihigo, en dicha biografía, sobre el Dr. Roldán: “en primer año nuestro mayor temor estaba concentrado en el examen de Anatomía y este se convertía en verdadero terror, cuando recordábamos que al tribunal iba el doctor Francisco Domínguez Roldán, al que todos llamaban “Panchón”, alrededor del cual la leyenda había ido tejiendo innumerables anécdotas horripilantes de suspensos y desaprobados. Llegaba a decirse de Panchón, que lanzaba al aire un huesecillo del carpo(16) (el pisciforme)(17) y exigía que el alumno determinara mientras estaba en el aire, si era derecho o si era izquierdo”.(16)

“El Dr. José A. Presno Bastiony, nos explicó Esplacnología y su clase era una de las más amenas de 2do año. Recuerdo que fue él el único que oyó leer el tema escrito de mi examen de Anatomía. Mientras yo leía, “Panchón” le consultaba a Varela [también profesor de Anatomía y quien la había impartido en el primer año] las ventajas y posibilidades de alza que tendrían ciertos solares que se proponía adquirir en lo alto de la Víbora. De más está decir que, en vista de esa conversación, procuré leer lo más rápidamente posible, a fin de terminar mi examen antes de que se firmara la escritura de compra-venta”.(18)

En tercer año…“la primera hora de la tarde estaba destinada a Anatomía Topográfica y Operaciones. Fue nuestro profesor el Dr. Francisco Domínguez Roldán (…) Hombre de corta estatura, cabeza voluminosa y reluciente calva, nariz pequeña y voz fañosa, que caminaba a pasos cortos y rápidos y de carácter irregular y atrabiliario. En sus días negros la emprendía con todos. Recuerdo que una vez, después de haber peleado con Goyito, Bartolo, José e Illamba, (estos nombres indican como un reguero de pólvora, el camino seguido por él: la puerta, el patio, el salón de lavabos y la sala de disección), la emprendió con Testut, uno de los autores de nuestro libro de texto, y nos dijo que aquella clasificación era errónea y que eso sucedía porque ni Testut ni Jacob habían sido cirujanos. Otras veces, muy raras, estaba de broma. Al preguntarme, cierto día, cuántas asas nerviosas abrazan la subclavia y contestar yo, dos de ellas y no recordar la tercera, me dijo que eso me sucedía por no tener memoria y lo repitió varias veces, acompañándolo siempre  de una sonrisa muy pillina. Al ver que yo no me daba cuenta, me dijo:

__ Compadre, el asa memorable, el asa memorable. Usted verá que eso no se le olvida más. Él se rió con su risa nasal y todos los ocupantes de mi mesa lo corearon. Algunos se reían sin saber por qué, pero si no hubieran aprovechado esa oportunidad, quizás nunca más hubieran podido reírse delante de Panchón”.(19)

La figura 3 muestra una caricatura del Dr. Domínguez Roldán visto por Diego Fernández, tomada de “Recuerdos de una larga vida” y restaurada por el autor.

 

CONCLUSIONES

Si bien la sociedad tiene que sustentarse en economía, necesariamente debe hacerlo en valores también. Aunque por su relevancia es difícil elegir entre estos, indudablemente el valor identidad cultural (conformado a su vez por un conjunto de ellos) tiene que ser básico para la mejor fundamentación del sentido de pertenencia de quienes conforman determinada sociedad. Hoy, a los discípulos multiplicados de estas dos glorias de la medicina cubana, corresponde incentivar en los que siguen, los valores que en su momento, incentivaron en nosotros nuestros profesores. Ilumínese pues, la memoria, con la vida de hombres como estos.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1- Madrigal Lomba R. La radiología. Apuntes históricos. Rev Méd Electrón [Internet] 2009 [citado 10 Feb 2015];31(4) Disponible en:
http://www.revmedicaelectronica.sld.cu/index.php/rme/article/view/650/htm

2- Montes de Oca Rodríguez E, Ferreira Moreno V. Breve reseña histórica de la Radiología desde Rontgen hasta la ciudad de los puentes. En: Ferreira Moreno V. 40 años de Educación Médica Superior. Matanzas. Imágenes entre puentes. Matanzas. 2009 [CD ROM]. La Habana: CEDISAP; 2010.

3- García Blanco R. Cien figuras de la Ciencia en Cuba. La Habana: Editorial Científico Técnica; 2002. 155-7 p.

4-Dihigo Llanos ME. El campo por dentro o quince días de médico interino. Médica. 1923;3(8):191-6.

5- Dihigo Llanos ME.  Recuerdos de una larga vida. Cuad Hist Salud Pública. 1974;60(3):78-82.

6- Dihigo Llanos ME. Recuerdos de una larga vida. CuadHist Salud Pública. 1974;60(3):83-5.

7- Dihigo Llanos ME. Recuerdos de una larga vida. CuadHist Salud Pública. 1974;60(3):89-94.

8- Fernández Morín J. Dr. Mario Dihigo Llanos. Rev Méd Electrón [Internet]. 2004 [10 Agos 2015];26(4). Disponible en:
http://revmedicaelectronica.sld.cu/index.php/rme/article/view/157/html

9- Pérez Ortiz L. La Revista “Médica”. Apuntes para su historia. Rev Méd Electrón [Internet]. 2006 [citado 10 Agos 2015];28(4). Disponible en: http://www.revmedicaelectronica.sld.cu/index.php/rme/article/view/284

10- Notas y noticias. Médica. 1942;1(3):113.

11- Academia de Ciencias de Cuba. Domínguez Roldán, Francisco [Internet]. La Habana: Academia de Ciencias de Cuba; 2002 [citado 31 May 2016]. Disponible en: http://resultados.redciencia.cu/cientificos/biog/fdominguez.pdf

12- López Espinosa JA. Agosto 13 de 1891. Graduación del doctor Francisco Domínguez Roldán en la Facultad de Medicina de París. Universidad Virtual de Salud. Sección Humanidades. Fechas Memorables [Internet]. La Habana: Infomed; 2011 [actualización 12 de enero de 2015; citado 15 Agos 2015]. Disponible en: http://uvs.sld.cu/agosto-13-de-1891-graduacion-del-doctor-francisco-dominguez-roldan-en-la-facultad-de-medicina-de-par

13- López Espinosa JA. Mayo 1ro. de 1907. Inauguración de la primera unidad de radiología en Cuba. Universidad Virtual de Salud de Cuba [Internet]. La  Habana: Infomed; 2011 [actualización 12  Ene  2015;citado 10 Agos 2015]. Disponible en: http://uvs.sld.cu/mayo-1ro-de-1907-inauguracion-de-la-primera-unidad-de-radiologia-en-cuba

14-Delgado García G. Cátedra de Anatomía Topográfica. Cuad Hist Salud Pública [Internet]. 2009 [citado 31 May 2016];(105). Disponible en:
http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0045-91782009000100004&lng=es&nrm=iso

15- García Blanco R. Cien figuras de la Ciencia en Cuba. La Habana: Editorial Científico Técnica; 2002. 161-5 p.

16-Recuerdos de una larga vida. Cuad Hist Salud Pública. 1974;60(3):26-7.

17-Dihigo Llanos ME. Reminiscencias (1). Balance de cinco años de vida universitaria. Médica. 1923;3(1):19-23.

18-Recuerdos de una larga vida. CuadHist Salud Pública. 1974;60(3):28.

19-Dihigo Llanos ME. Recuerdos de una larga vida. CuadHist Salud Pública. 1974;60(3):40.

 

 

Recibido: 1 de septiembre de 2015.
Aceptado: 28 de marzo de 2016.

 

 

Víctor Guillermo Ferreira Moreno. Hospital Provincial Pediátrico Docente  Eliseo Noel Caamaño. Santa Isabel s/n e/t América y Compostela Matanzas, Cuba. Correo electrónico:victorf.mtz@infomed.sld.cu

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