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Revista Médica Electrónica

versión On-line ISSN 1684-1824

Rev.Med.Electrón. vol.40 no.1 Matanzas ene.-feb. 2018

 

CARTA AL DIRECTOR

 

Aspectos para mejorar la visibilidad internacional de la Revista Médica Electrónica

 

Aspects to improve the international visibility of Revista Médica Electrónica

 

 

Dr. Junior Vega Jiménez

Hospital Militar Docente Dr. Mario Muñoz Monroy. Matanzas, Cuba.

 

 

Estimada directora:

El mayor anhelo de un investigador es ver publicada su obra, y si es en una revista de alto impacto, mucho mejor. El gran afán de un revisor, árbitro o editor es pertenecer a una revista con elevados niveles de visibilidad. Similar eventualidad ocurre con el lector; todo lector desea consultar artículos de probada calidad.

A 20 años de haber migrado la histórica Revista Médica al soporte digital, la actual Revista Médica Electrónica (RME) debe continuar el legado de tan emblemática herencia. Algunos han sido los cambios llevados a cabo que contribuyen con tal propósito. Cabe mencionar dos, la migración hacia la plataforma Open Journal System (OJS) con todos los beneficios que esto implica; y la oportunidad ofrecida a los estudiantes de las ciencias de la salud a exponer sus investigaciones. No importa la procedencia o autoría del artículo, sino que lo publicado tenga la máxima calidad.

A pesar de estos importantes pasos dados en pos de alcanzar una mayor promoción internacional, aún no es suficiente. Una mejor divulgación de la actividad científica se puede lograr con acciones sencillas, pero concretas. Entonces se hace necesario trazar estrategias para aumentar el porcentaje de citas de la RME.

Recientemente, fue publicado un artículo de Benet Rodríguez1 en la revista Medisur, donde se expone el posicionamiento de las revistas científicas de la salud en Cuba según el índice H5 obtenido del Google Scholar Metrics. En el mismo, la RME se encuentra ubicada en la posición 11 dentro de todas las revistas médicas cubanas. La mayoría de estas se editan directamente en la Editorial de Ciencias Médicas, excepto 3 (Revista Habanera de Ciencias Médicas, Medisur y RME) que se confeccionan en Centros Provinciales de Información. No obstante, el índice de citas de estas revistas biomédicas en Google Académico es bajo.

¿Cómo saber cuándo se publica cada número? Se debe crear una lista de distribución de la RME, en la cual se incluyan todos los usuarios del OJS, ya sean lectores, revisores y/o editores. Es importante que los usuarios reciban las tablas de contenido de los números publicados, lo que ayudaría a conocer de primera mano lo publicado y probablemente a elevar el índice de citaciones. A pesar de que en algunos de los números de la RME se ha intentado cumplir con esta tarea, aún la lista de distribución no llega de manera continua y puntual a todos los lectores y/o autores.

¿En cuáles bases de datos o directorios se encuentra incluida la RME?

En la plataforma de OJS hay que incluir dichas bases, que se encuentren visibles para todos los usuarios nacionales o foráneos. Los autores deben conocer donde se verán reflejadas sus investigaciones. Al visitar OJS solo se observa Scielo.

Se tiene que trabajar en conseguir que los autores citen los manuscritos publicados en la RME. Esto se logrará mediante la publicación en la revista de artículos de probada calidad investigativa. Esta simple acción elevaría notablemente el índice h y el factor de impacto de las revistas sin elevar sustancialmente la calidad de las publicaciones, un tema todavía pendiente de solución que requiere un fuerte financiamiento de las investigaciones y de incentivos morales y materiales a los autores.1,2

Se hace necesario lograr una mayor colaboración de nuestras instituciones de salud con otras de diferentes latitudes, sean nacionales o extranjeras. Además de la colaboración, como una medida para hacer más visible y citable nuestra producción científica, también está la incorporación a las redes sociales científicas. Estas formas no convencionales de divulgar la ciencia generan visibilidad y sus propias métricas, por lo cual se les denomina métricas alternativas o altimetrías.3

Lograr que tanto los autores, como la propia revista, creen perfiles en Google Académico, influiría positivamente en la visualización del trabajo editorial de la RME.

Actualmente existen muchas bases de datos como el Web of Sciences, Mendeley, Author Resolver, Inspire, IraLIS, RePEc, Researcher ID, Scopus Autor Identifier y VIVO, entre otras. Especial importancia presentan, principalmente por su carácter gratuito, ResearchGate (RG) y el ORCID (por sus siglas del inglés open researcher and contribution ID). Ambos constituyen sistemas para la identificación inequívoca de investigadores que permite vincular las actividades de investigación y los productos de estos identificadores universales.3,4

Todo lo anterior, quizás sea un paso más en el constante batallar por estar indexados en las mejores bases de datos internacionales (SCOPUS, Medline/Pubmed, Elsevier). Tal vez, alcancemos algún día el conocido factor de impacto (FI), que tienen asignado las revistas que están indexadas en las bases de datos del Institute for Scientific Information (actualmente Thomson Scientific): Science Citation Index (SCI), Social Sciences Citation Index (SSCI) y Arts & Humanities Citation Index (AHCI).

Se deben publicar los análisis métricos de la RME donde se reconozcan a los autores de acuerdo al grado de productividad de los mismos, a través de la clasificación de Crane,5 que agrupa a los investigadores en cuatro grupos: transeúntes (con una sola publicación), aspirantes (de dos a cuatro publicaciones), moderados (de cinco a nueve publicaciones) y grandes productores (los autores con más de diez). También, se atañe publicar las investigaciones en lengua inglesa, asegurando de esa manera una mayor visibilidad internacional.

Los matanceros y cubanos, en sentido general deben identificarse con la revista, y eso se logra con el trabajo diario. La “visibilidad debe comenzar por casa”.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1- Benet-Rodríguez M, Morejón-Giraldoni A. Posicionamiento de las revistas científicas de la salud en Cuba según el índice H5 obtenido del Google Scholar Metrics. Medisur [Internet]. 2016 [citado 11 Feb2017];14(2). Disponible en: http://medisur.sld.cu/index.php/medisur/article/view/3254

2- Miguel-Soca P. ¿Cómo elevar el índice de citas de las revistas biomédicas cubanas? Medisur [Internet]. 2016 [citado 11 Feb 2017];14(3). Disponible en: http://medisur.sld.cu/index.php/medisur/article/view/3287

3- Dorta Contreras AJ. Colaboración internacional y visibilidad de la producción científica por las métricas alternativas. Rev Haban Cienc Méd  [Internet]. 2016 Feb [citado 21 Ene 2017];15(6). Disponible en: http://www.revhabanera.sld.cu/index.php/rhab/article/view/1260/1503

4- Acosta Ortega LF, Cascaret Soto X, Lescay Arias M. Orcid: identificador digital como registro único permanente en la revista MEDISAN. MEDISAN. 2016;20(12):7016.

5- Crane D. Social structure in a group of Scientits. A test of the "invisible College" hypotesis. American Sociological Review. 1969;34:335-52.

 

 

Recibido: 20/2/17
Aprobado: 13/2/18

 

 

Junior Vega Jiménez. Hospital Militar Docente Dr. Mario Muñoz Monroy. Carretera Central km 109 Gelpy. Reparto 2 de diciembre. Matanzas, Cuba. Correo electrónico: juniorvj.mtz@infomed.sld.cu

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