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Revista Cubana de Anestesiología y Reanimación

versión On-line ISSN 1726-6718

Rev cuba anestesiol reanim vol.16 no.1 Ciudad de la Habana ene.-abr. 2017

 

ARTÍCULO DE REFLEXIÓN

 

Historia de la terapia eléctrica en reanimación

 

History of electric therapy in resuscitation

 

 

José Ricardo Navarro-VargasI, Raúl Muñoz CorenaII

 

I Universidad Nacional de Colombia. Bogotá D.C., Colombia.
II Universidad Metropolitana de Barranquilla. Colombia.

 

 


RESUMEN

Introducción: la enfermedad coronaria es una de las principales causas de muerte en el mundo, y dentro del continuum del paro cardiaco, las arritmias fatales que se presentan durante la inestabilidad eléctrica secundaria a la obstrucción coronaria, responden a la terapia eléctrica.
Objetivo: actualizar la historia de la terapia eléctrica en reanimación cardiopulmonar y cerebral.
Desarrollo: durante más de dos siglos se han desarrollado e implementado técnicas modernas de aplicación de la terapia eléctrica en el entorno del paro cardiaco, hechos trascendentales que han reducido la morbimortalidad relacionada con el paro cardiaco.
Conclusiones: se reafirma la importancia de la terapia eléctrica dentro de la comunidad para el tratamiento efectivo de las arritmias más frecuentes que producen paro cardiaco a nivel extrahospitalario, así como los antecedentes y la justificación en el conocimiento del Desfibrilador Automático Externo (DEA) como medida práctica y segura en la reanimación por parte de los testigos (primeros respondientes) del paciente que presenta paro cardiaco.

Palabras clave: paro cardiaco, terapia, eléctrica, desfibrilación.


Abstract

Introduction: Coronary disease is one of the leading causes of death worldwide, and within the continuum of cardiac arrest, fatal arrhythmias onset during electrical instability secondary to coronary obstruction respond to electrical therapy.
Objective: To update the history of electrical therapy in cardiopulmonary and cerebral resuscitation.
Development: For more than two centuries, modern techniques have been developed and implemented for the application of electrical therapy in the area of cardiac arrest, transcendental events that have reduced morbidity and mortality rates related to cardiac arrest.
Conclusions: The importance of electrical therapy within the community is reaffirmed, for the effective treatment of the most frequent arrhythmias that produce cardiac arrest at the out-of-hospital level, as well as the antecedents and justification in the knowledge about automated external defibrillators (AED) as a practical and safe measure in the resuscitation by the witnesses (first responders) of the patient who presents the cardiac arrest.

Key words: cardiac arrest; electric therapy; defibrillation.


 


INTRODUCCIÓN

Las compresiones torácicas de alta calidad y la desfibrilación temprana son las intervenciones de mayor impacto en la reanimación cerebro cardiopulmonar, ya que se traducen en un aumento significativo en la sobrevida de las víctimas de paro cardiaco. 1-5

La desfibrilación ventricular puede ser realizada a nivel extrahospitalario con un aparato portátil práctico y seguro llamado desfibrilador automático externo (DEA). El DEA tiene un reconocimiento mundial como eslabón prioritario en la cadena de sobrevida6 y la S.C.A.R.E. ha participado como consultor en la justificación legal que está realizando el Instituto de Evaluación Tecnológica en Salud IETS para lograr su implementación en sitios públicos de nuestro país. 7

 

PARO CARDIACO Y REGISTRO DE PARO

Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, DANE, en Colombia durante el año 2013 se presentaron 202.786 muertes por diferentes causas, dentro de las cuales se encuentra el infarto agudo de miocardio con 29.202 casos (14,4 %), seguido de enfermedades pulmonares obstructivas crónicas con 11.221 (5,5 %).8 Desafortunadamente, en los países latinoamericanos no se ha podido implementar el Registro de Paro, según lineamientos Utstein, el cual permitiría realizar investigación cuantitativa y veraz en la calidad de la reanimación.9 En Colombia, aparece publicado un artículo aislado de Valencia y colaboradores del año 2011, 10 quienes realizaron un registro de los casos de paro cardiaco entre los meses de Julio y Octubre del 2010 en el hospital San Juan de Dios de Cali, donde se presentaron 22 casos de paro cardiaco, de los cuales, 40,9 % fueron mujeres y 59,1 % hombres. El 80 % de los casos se presentaron en el servicio de urgencias y el 20 % restante en la unidad de cuidados intermedios. Dentro de los diagnósticos iniciales más comunes se encontraron el paro respiratorio con 6 casos, seguido de infarto agudo de miocardio con 3 casos. 10

 

MUERTE SÚBITA CARDIACA Y RITMOS DE PARO

La muerte súbita cardiaca representa del 20 al 30 % de las muertes de origen cardiaco. En los Estados Unidos de América, es responsable del 7 al 18 % de los decesos totales,11,12 con una incidencia de 70 a 155 casos por 100.000 habitantes/año.13 En Francia, la incidencia es de 3.21 casos por 100.000 habitantes/año,14 y en China es de 41,3 casos por 100.000 habitantes/año.15 En la población infantil, en Holanda, hay informes de una incidencia de 3,2 casos por 100,000 habitantes/año.16 El mayor número de casos se presenta en población entre los 45 años y 75 años de edad. La causa principal es la arterioesclerosis coronaria, la cual tiene predominio en la población masculina, pero con una participación cada vez mayor en el sexo femenino donde se ha informado que puede representar hasta el 35 % de la mortalidad de origen cardiaco. 17-19

Los ritmos de paro más frecuentes son la taquicardia ventricular sin pulso (TVSP) y la fibrilación ventricular (FV) en un 60 a 80 %. 20 Arritmias que responden a la terapia eléctrica, motivo por el cual es imperativo capacitar desde la comunidad en general, hasta el más alto nivel de los proveedores de la salud, en el entrenamiento óptimo en esta terapia, para brindar a los pacientes mayor probabilidad de sobrevida.

Es fundamental conocer los diferentes cambios que ha tenido la terapia eléctrica a través del tiempo para comparar los diferentes modelos usados y el impacto que cada avance aportó en el aumento de la sobrevida de los pacientes.

Constituye el objetivo de este artículo, realizar una actualización de la historia de la terapia eléctrica en reanimación cardiopulmonar y cerebral.


REVISIÓN CRONOLÓGICA DE LA TERAPIA ELÉCTRICA

La utilidad de la terapia eléctrica en reanimación se remonta al año 1796, cuando Richard Fowler le aplicó corriente galvánica al corazón de una rana en asistolia y se produjo una contracción normal.21,22 En 1872, Green publicó seis casos de sobrevivientes de paro cardiorrespiratorio en pacientes anestesiados con cloroformo, a los cuales se les aplicó corriente eléctrica proveniente de baterías galvánicas. Pese a estos informes exitosos, el conocimiento del tratamiento de la fibrilación ventricular (FV) fue precario y sólo hasta 1886 John McWilliam describió sus efectos hemodinámicos y características clínicas, y explicó cómo el choque eléctrico podía revertirla.21-27

Prevost y Batelli introdujeron el concepto de desfibrilación eléctrica en 1899, después de notar que grandes voltajes aplicados al corazón de un animal podían poner fin a la fibrilación ventricular.28 Posteriormente, Hooker, Kouwenhoven y Langworthy realizaron varios estudios, financiados por "Edison Electric Institute" y el "Instituto Nacional de Salud" de los Estados Unidos de América, con el fin de desarrollar un desfibrilador portátil que fuera útil para las empresas eléctricas, ya que sus empleados sufrían electrocución con frecuencia; y fue así como estos autores en 1933 publicaron un informe de la realización de una desfibrilación interna exitosa, mediante la aplicación de corriente alterna en un estudio animal.29,30

El primer informe oficial de una desfibrilación exitosa en un humano lo realizó Claudio S. Beck (1894-1971) en 1947, mediante la aplicación directa de corriente alterna a una frecuencia de 60 Hertz en el corazón de un paciente a quien se le practicó una cirugía cardiaca.27,28 Al término de la década de 1940, uno de los padres de la Reanimatología, Vladimir Negovsky, aplicaba compresiones torácicas externas y desfibrilación a perros sometidos a hipotermia e introdujo los conceptos y términos de estado agónico, muerte clínica y enfermedad pos reanimación.31

Un profesor de ingeniería eléctrica en el Johns Hopkins Hospital, William B. Kouwenhoven (1886-1975) fue uno de los pioneros de la terapia eléctrica. Desde 1930 se dedicó a la investigación de la fibrilación ventricular y la desfibrilación inmediata, sin la necesidad de compresión cardiaca. La motivación principal para dedicarse a esta línea de investigación, fueron los pacientes sometidos a choque eléctrico accidental con corriente alterna. Kouwenhoven y su equipo realizaron múltiples estudios en perros entre 1950 y 1955, aplicando desfibrilación mediante electrodos colocados en la pared torácica y en 1957 dieron a conocer un desfibrilador perfeccionado, que consistía en una pequeña caja y dos cables aislados con electrodos de cobre.28,32 En la misma época, Maurice Paul Zoll (1911-1999) un cardiólogo judío-estadounidense y uno de los pioneros en el desarrollo del marcapasos y desfibrilador cardiaco, graduado en la Escuela Latina de Boston (1928), demostró en el año 1952, que la estimulación eléctrica externa del tórax de un paciente durante el paro cardiaco podía suspender la arritmia fatal y hacer que se produjera un ritmo cardíaco efectivo. En 1956 desfibriló con éxito a un ser humano a través de electrodos de cobre sobre el tórax y realizó la primera cardioversión eléctrica en humanos en los años 50.33 Zoll además desarrollo un método para la estimulación eléctrica directa del corazón a través de un marcapaso implantado. Este avance tecnológico fue el paso para el desarrollo de los marcapasos cardíacos actuales.33 James Jude, cirujano de tórax desarrolló el masaje cardíaco a tórax cerrado y se le considera el padre de las compresiones torácicas. Falleció en el mes de julio de 2015. (Fig. 1).

A partir de estos trabajos, Edmark-Lown y colaboradores, descubrieron que los desfibriladores de corriente continua (c.c.) eran más efectivos y producían menos efectos secundarios que los desfibriladores de corriente alterna (c.a). La administración de corriente continua fue perfeccionada durante los años 1960.34

En 1967, Pantridge y Geddes describieron un aumento en la sobrevida de pacientes que presentaron paro cardíaco extrahospitalario, mediante el uso de una unidad móvil de cuidado coronario equipada con un desfibrilador de corriente continua alimentado por baterías. Hacia 1970 fueron diseñados instrumentos experimentales internos y externos para detectar la fibrilación ventricular de manera automática. 28 En 1979, Diack y colaboradores describieron la experiencia clínica y experimental con el primer desfibrilador automático externo (DEA).35 Esto dio lugar a la implementación de la desfibrilación para uso por la comunidad y le dio vida al algoritmo de manejo del paro extrahospitalario (ABC primario) complementando la nemotecnia diseñada por Peter Safar con la D, del DEA (ABCD primario). 28,30

El primer desfibrilador interno automático se implantó en un ser humano en febrero de 1980. En ese mismo año, Weaver y asociados informaron que la iniciación rápida de reanimación cardiopulmonar (RCP) y la desfibrilación precoz, podrían producir retorno a la circulación espontánea y hacer que se recuperara la conciencia rápidamente en pacientes que sufrían paros cardíacos fuera del hospital.28,30

En 1980, Eisenberg y Copass publicaron un aumento en la tasa de sobrevida de pacientes que presentaron paro cardíaco extrahospitalario, que fueron desfibrilados por Médicos de Urgencias especialmente capacitados, comparados con la de pacientes con paro extrahospitalario que recibieron el tratamiento usual y rutinario, que incluía RCP básico y transporte al centro hospitalario.29,30

En 1991, Richard Cummins introdujo el concepto de cadena de sobrevida que se ha validado a través del tiempo.32. (Fig. 2).

En el año 2010, la Asociación Americana del Corazón (AHA), adicionó un quinto eslabón a la cadena de sobrevida: la conducta integral del paciente que recupera la circulación cardiaca de manera espontánea y del síndrome posparo cardiaco;36 una vez el paciente recupera la circulación cardiaca de manera espontánea queda en una condición de gran inestabilidad hemodinámica que se explica por el síndrome isquemia/reperfusión y requiere de un tratamiento integral y estricto en una Unidad de Cuidado Intensivo. 36,37 (Fig. 3).

Como se aprecia, a nivel extrahospitalario, el tercer eslabón, la desfibrilación, es un paso definitivo en la reanimación de un paciente que presenta un ritmo desfibrilable (FV/TVSP). Justifica realizar todos los esfuerzos para que las políticas sanitarias lo implementen en la comunidad y, que la misma esté capacitada para hacer buen uso del mismo. La terapia eléctrica es quizá uno de los aportes más importantes en la reanimación del paciente con un corazón "demasiado joven para morir".

Se concluye que la terapia eléctrica ha ganando terreno dentro de la comunidad para el tratamiento efectivo de las arritmias más frecuentes que producen paro cardiaco a nivel extrahospitalario: la TVSP/FV. Este artículo revisa los antecedentes y la justificación en el conocimiento del desfibrilador automático externo DEA como medida práctica y segura en la reanimación por parte de los testigos (primeros respondientes) del paciente que presenta paro cardiaco.

Financiamiento: ninguno.

Conflicto de intereses: ninguno.


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Recibido: agosto 12, 2016.
Aprobado: septiembre 30, 2016.

 

 

José Ricardo Navarro-Vargas. Especialista en Anestesiología y Reanimación, Profesor Titular de medicina, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá D.C., Colombia.rmunoz@unimetro.edu.co; jrnavarrov@unal.edu.co

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