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INTRODUCCION
Visitar y ser atendido por el estomatólogo es una de las situaciones que genera más miedo y ansiedad en las personas, esto dificulta la atención estomatológica; tanto que en ocasiones impide el tratamiento dental y atenta contra la salud oral.
Publicaciones sobre este tema demuestran el miedo que las personas le tienen al estomatólogo o al sillón dental. Es habitual que las personas señalen que la visita al dentista es una de las atenciones en salud que más miedo les provoca, un estudio realizado en el 2019, estableció la influencia negativa de la odontofobia sobre la salud bucal, donde los dientes clínicamente afectados con indicaciones de extracción, predominaron en pacientes odontofóbicos.1-3
Se estima que entre el 10 y el 15 por ciento de la población experimenta ansiedad cuando tiene que acudir al dentista, Fresneda en su investigación del 2022, obtuvo alta incidencia de ansiedad y miedo, en 43 pacientes estudiados.4
Rodriguez Chala;5 Lima Álvarez, Guerrier Granela y Toledo Amador;6 proponen tratamientos para el control de la ansiedad con terapia de comportamiento y terapia medicamentosa con ansiolíticos, mientras que Brizuela Mora, Sánchez Hernández, Fuentes Guerrero, Morales Miguel y Manso Armas,7 defienden la aplicación de la acupuntura en el adulto mayor ansioso ante el tratamiento estomatológico. Por su parte, Moré Chang8 destaca la efectividad terapéutica de la homeopatía y Vara Delgado y Lima Álvarez9 promueven la terapia floral en los servicios de este tipo. Hernández Domínguez,10) aportan sus experiencias con la hipnosis.
La utilización de procederes naturales como los son las técnicas mencionadas contribuyen a reducir los síntomas de ansiedad; en tanto, otra opción natural de tratamiento lo constituye la musicoterapia, considerada actualmente como una terapia alternativa no farmacológica para reducir la ansiedad y el estrés, utilizada en distintos campos como la psicología, la medicina y la odontología.
En el uso de la musicoterapia y otras alternativas que se dirigen a igual propósito, en el campo pediátrico sobresalen las vivencias de Muñuzuri, Arias, Vargas, Giles y Adams;11 en tanto, Gómez, Durán, Cabra, Pinzón y Rodríguez12 han aplicado la musicoterapia en el control de ansiedad odontológica en niños con Síndrome de Down.
La ansiedad del adulto cardiópata y la de Diabéticos e hipertensos, la controlan Nieto-Romero13 y Tufiño con de Jesús;14 respectivamente. Reafirman la efectividad de la musicoterapia, los aportes de Díaz Buriticá, Álvarez Suárez, Ospina Martínez y Alzate Escobar;15 García-Bermúdez Cuesta, Díaz Romero, Littman Sevilla, Santos Sotres, Pérez Romero y Ocaña López;16 los cuales coinciden con las valoraciones de Alarco-Cadillo, Apayco, Bossio y Torres.17
Porciúncula hace referencia a su utilidad en este servicio en pediatría, ortodoncia, endodoncia y dentro del área orofacial en los padres de pacientes con labio leporino y paladar fisurado. También destaca el trabajo de Jiménez, en el cual la musicoterapia mejoró los niveles funcionales en pacientes con apoplejía, daño cerebral, pacientes oncológicos y con Alzheimer.18)
Rodríguez Chala, plantea que la musicoterapia actúa directamente sobre el sistema nervioso simpático disminuyendo su actividad; como resultado de lo cual el paciente no solo experimenta beneficios psicológicos sino también fisiológicos, como la disminución de la presión arterial, la frecuencia cardiaca y respiratoria.5
Teniendo en cuenta que los procedimientos estomatológicos en ocasiones son incómodos y dolorosos, que muchos de los pacientes presentan ansiedad y miedo al ser atendidos en el sillón dental y que necesitan de un ambiente más agradable, se aplicó esta experiencia haciendo uso de la musicoterapia en pacientes para lograr en ellos una mejor cooperación en el sillón dental y elevar la calidad de la atención estomatológica, con el objetivo de evaluar la influencia de la musicoterapia en el paciente durante el tratamiento dental.
MÉTODO
Se realizó un estudio de intervención para evaluar la influencia de la musicoterapia en el paciente durante la atención estomatológica, en el Servicio Estomatológico del Policlínico Tula Aguilera del municipio Camagüey, provincia Camagüey; en el período comprendido entre marzo y abril del 2022.
El universo de la investigación se constituyó por la totalidad de los pacientes mayores de 5 años que acudieron a las consultas de EGI y Periodoncia en un mes de trabajo.
La selección de la muestra fue al azar y se tuvo en cuenta el consentimiento del paciente, a través de su firma, en participar en el estudio, independientemente de sentir temor o no al tratamiento estomatológico. Se explicó que su participación era voluntaria y podía retirarse en el momento que lo deseara, de esta forma quedó constituida por 40 pacientes, de ellos 20 atendidos en la consulta de EGI y 20 en la de Periodoncia, se agruparon en 3 grupos de edad: 5-18, 19-59, 60 y más.
Las sesiones se dividieron en dos visitas:
Primera visita: Se atendió al paciente sin música.
Segunda visita: Se atendió al paciente con música.
En la primera consulta una vez sentado el paciente en el sillón, se le informó sobre las características del estudio, recogido en el consentimiento informado. Se llenó, a cada paciente, la primera parte del formulario confeccionado a este fin, donde se registró la edad, sexo, si tenía miedo visitar al dentista, o sentía alguna sensación desagradable como: tensión, temblores, fuertes latidos del corazón, manos sudorosas o ansiedad cuando era atendido por el estomatólogo, el gusto hacia la música, cuál prefería escuchar durante la atención estomatológica: instrumental, suave, variada, fuerte (reguetón, rock), infantil. Seguidamente se procedió a realizarle el tratamiento que requería según el cumplimiento de las normas establecidas para el mismo. Al terminar se recogió en la encuesta si durante la atención sus temores y sensaciones desagradables se mantuvieron, disminuyeron o desaparecieron.
Se citó al paciente a la semana y se atendió escuchando la música que le agradaba según los datos recogidos en el formulario, al finalizar se registró en la segunda parte de la encuesta, cómo se sintió (bien, regular, mal, normal), el efecto que tuvo la música en él (paz, tranquilidad, sedación, relajación, alteración), si se sintió satisfecho y le gustaría repetir la experiencia cada vez que visite al estomatólogo.
Todos estos procedimientos estuvieron a cargo de las especialistas en EGI y Periodoncia. Se siguieron los siguientes criterios de evaluación:
Altamente satisfactorio: El paciente refirió sentirse bien escuchando música, sintió un efecto de paz, tranquilidad, sedación o relajación, sus temores o sensaciones desagradables desaparecieron y manifestó el gusto de repetir la experiencia.
Satisfactorio: El paciente refirió sentirse bien escuchando música, le transmitió un efecto de paz, tranquilidad, sedación o relajación, sus temores o sensaciones desagradables disminuyeron y manifestó el gusto de repetir esa experiencia.
No satisfactorio: El paciente se sintió regular, mal o normal escuchando música, lo alteró o no tuvo ningún efecto, se mantuvieron sus temores o sensaciones desagradables y manifestó no repetir la experiencia.
La influencia de la musicoterapia en el paciente durante la atención estomatológica se consideró buena cuando la respuesta fue altamente satisfactoria o satisfactoria y mala cuando resultó no satisfactoria. Se ejecutó estadística descriptiva mediante la distribución de frecuencia en valores absolutos y por cientos, y estadística inferencial test de hipótesis de proporción. La confiabilidad (C) 95%, según normas internacionales. Los resultados se presentaron en tablas.
RESULTADOS
La muestra estuvo representada por 40 pacientes de ambos sexos, mayores de 5 años; predominó el grupo de edad de 19-59 años (57.5 % para un p=*7.687E-03), los grupos de edades de 5 a18 y el de 60 y más, representaron el 25 y 17.5 %; respectivamente. Del total de la muestra, el sexo femenino fue el más frecuente con un 57.5 %, seguido del masculino (42.5 %). (Tabla 1)
En cuanto al sexo, se asume que se debe a que las mujeres buscan el cuidado médico y estomatológico con más frecuencia que los hombres y el grupo etáreo que predominó es el que con mayor frecuencia acude a la consulta según las estadísticas. Una revisión bibliográfica realizada por García-Bermúdez Cuesta, Díaz Romero, Littman Sevilla, Santos Sotres, Pérez Romero y Ocaña López;16 obtuvo resultado similar.
Se respetó el efecto de la música, según la expresión del paciente, teniendo en cuenta sus preferencias, para que fuera la escuchada mientras eran atendidos en el sillón dental; ello evidenció que el 82.5 % (P=8.893E-03), seguido del 65 %, sintió tranquilidad; el 27.5 % se sedó y el 10 %, refirió paz. La música suave seguida de la variada, fueron las más solicitadas. (Tabla 2) Se prefirió que el paciente escogiera la música, teniendo en cuenta su individualidad, para evitar correr el riesgo de que la seleccionada no fuera de su agrado y le generara malestar. El propósito en todo momento fue proporcionarle las condiciones favorables para lograr disminuir las sensaciones desagradables que pudieran presentarse.
Tabla 2 Efecto de la música en los pacientes estudiados según su preferencia musical
Fuente: Encuesta *P=8.893E-03
Al comparar la remisión del miedo y de las sensaciones desagradables entre la primera visita (atención sin música) y la segunda visita (atención con música) se observó en la primera que el 42,5% de las personas que manifestaron sentir miedo al visitar al dentista lo mantuvieron (100%), sin embargo, en la segunda visita en el 100% de los casos el miedo desapareció durante la atención estomatológica. (Tabla 3)
El 57,5% no refirió miedo, pero sí una o más sensaciones desagradables (50%); del total de la muestra, 3 no señalaron sensaciones desagradables. Los 17 pacientes con miedo sentían, además, sensaciones desagradables para un 42,5%. En la primera visita el 91,89% de las sensaciones desagradables se mantuvieron (*P=5.010E-21), mientras que el 8,10% disminuyeron. Al comparar con la segunda visita resulta significativo señalar que en la mayoría de los pacientes las sensaciones desagradables desaparecieron en un 83,78%, y en el 16,21% disminuyeron.
Tabla 3 Remisión del miedo y sensaciones desagradables en la primera y segunda visita
Fuente: Encuesta *P=5.010E-21
LEYENDA:
A: Mantiene.
B: Disminuye.
C: Desaparece.
El grado de satisfacción de los pacientes tratados con musicoterapia es significativo ya que el 100% manifestó satisfacción con el uso de la música y el gusto por repetir esta experiencia, de ser posible, siempre que visitara al estomatólogo. (Tabla 4)
Tabla 4 Grado de satisfacción de los pacientes tratados con musicoterapia
| Grado de satisfacción | Satisfacción | Total | ||
| No | % | No | % | |
| Satisfecho | 40 | 100 % | 40 | 100 % |
| No satisfecho | 0 | 0 | 0 | 0 |
| Gusto por repetir la experiencia | 40 | 100 % | 40 | 100 % |
Fuente: Encuesta
Es evidente la influencia de la musicoterapia en el paciente durante la atención estomatológica, según los resultados, lo cual fue altamente satisfactorio para un 85% y satisfactorio para el 15%, ello representa el 100% de la muestra estudiada. (Tabla 5)
Tabla 5 Influencia de la musicoterapia en el paciente durante la atención estomatológica
Fuente: Encuesta *P=2.835E-10
Todos los participantes emitieron sus impresiones y vivencias, en especial se valieron de la comparación entre las consultas con la experiencia de la musicoterapia y los momentos pasados, para los cuales declararon sentir miedo desde días anteriores al servicio. Los pacientes aludieron al recuerdo negativo que, desde la infancia poseen de la visita al estomatólogo, siempre resultó una experiencia de miedo o ansiedad, contrario a lo que ahora han conseguido con las nuevas prácticas con la música y destacan, además, el valor de la comunicación con las profesionales con las que han intercambiado. Se logró un ambiente de confianza y se declararon estados de satisfacción muy convenientes para que se mantuvieran con éxitos las reconsultas.
DISCUSIÓN
Los efectos de la música sobre el comportamiento humano han sido reconocidos a lo largo dela historia cultural del hombre. La regulación del estado de ánimo es uno de los usos más frecuentes de la musicoterapia en la vida diaria para aquietar estados de excitación producidos por el estrés o el temor.3-7 Al respecto, la música sedante, de naturaleza melódica sostenida y armónica, tranquiliza; los ritmos lentos inducen paz, calma, serenidad, lo cual concuerda con el estudio actual. En la revisión realizada por Díaz Buriticá, Álvarez Suárez, Ospina Martínez y Alzate Escobar; la melodía clásica fue reconocida como la más usada y eficaz; plantean que diversos autores expresan que al momento de sintonizar esta música se libera dopamina, lo que genera sensaciones placenteras y de relajación.15
Nieto-Romero, al estudiar el efecto de la música sobre el nivel de ansiedad en adultos cardiópatas sometidos a resonancia magnética, concluyó que la seleccionada por el paciente, según su gusto, mostró ser efectiva para lograr un cambio específico en el estado fisiológico, emocional y conductual.13
En el presente estudio la música suave fue la preferida por el paciente que, aunque no es clásica, su melodía lenta relaja, tranquiliza, seda, transmite paz y favorece el alcance de un estado de bienestar en las personas. La música variada; que ocupó el segundo lugar, genera placer, lo que contribuyó a sentirse bien durante el tratamiento.
Los datos demuestran la utilidad de la musicoterapia en este paciente ya que se constataron la disminución y eliminación del miedo y las sensaciones desagradables como lo son la tensión, la ansiedad, la sudoración de las manos.
Muñuzuri, Arias, Vargas, Giles y Adams, en una investigación de tipo clínico experimental, sugirieron una relación directa entre la disminución de los niveles de ansiedad y el desarrollo de una conducta cooperadora del paciente pediátrico por efecto de la música, por lo que concluyó que la musicoterapia es un tratamiento alternativo eficaz para reducir la ansiedad en pacientes pediátricos durante la atención odontológica. Por otra parte, con la musicoterapia disminuyó la ansiedad de moderada a leve, así como la tensión arterial y frecuencia respiratoria.11
La satisfacción de la totalidad de los pacientes con el uso de la música y el gusto por repetir la experiencia es comprensible si se tiene en cuenta el gusto de las personas por escuchar música en algún momento de su vida, pues la misma según su estado de ánimo y la necesidad individual les transmite dignidad, calma, sentimentalismo, serenidad, ternura, tristeza, paz, melancolía, alegría, acción, movimiento entre otros. Por ello la utilización de la música durante la atención estomatológica crea bienestar en las personas y sobre todo en pacientes ansiosos o con miedo, que propicia su cooperación y facilita la actividad clínica. Similar resultado obtuvo García Bermúdez, ya que 100 % de sus casos prefirieron música en cada procedimiento estomatológico.16
La música contribuye a la adaptación del individuo a su medio por lo que es innegable su influencia positiva sobre las personas; por tanto, se puede considerar una alternativa efectiva para disminuir o eliminar ansiedades y miedos en los pacientes que acuden al servicio estomatológico e incluso en aquellos que no lo refieren en el sillón dental, pues le generan bienestar, al crearles un ambiente relajado y agradable, que favorece una actitud positiva y de cooperación durante el tratamiento dental.
Porciúncula en su estudio concluyó que la música ocupa uno de los lugares preponderantes en los tratamientos no farmacológicos al relajar, disminuir la ansiedad y el estrés en pacientes sometidos a un tratamiento o previo al mismo, alivia el dolor del paciente frente a distintos tratamientos, es efectivo como medio de comunicación en pacientes con dificultades en la expresión mediante el lenguaje y ayuda a mejorarlo, por lo que lo considera ”[…] un recurso terapéutico válido para complementar tratamientos convencionales ya sea aplicado de manera individual o en forma grupal”.18
La combinación de la musicoterapia con otras técnicas sugiere también buenos resultados, Díaz en su revisión, al comparar los efectos de la musicoterapia y la aromaterapia concluyó que esta última brinda mayor eficacia para reducir los niveles de ansiedad y estrés en la consulta odontológica, sin embargo al aplicarlas juntas se obtendría mejores resultados.15
Alarco-Cadillo; comparó la musicoterapia y la distracción audiovisual, como técnicas alternativas de manejo de conducta para el control de la ansiedad; encontró que ambas técnicas obtuvieron resultados positivos, aunque la distracción audiovisual alcanzó mejores resultados, al aislar al niño, visual y auditivamente, del entorno odontológico, aunque las dos constituyeron opciones para aquellos padres que no aceptan técnicas de restricción física como parte de la consulta odontológica.17)
No obstante, junto con la música se debe añadir, una gota de ternura, comprensión, paciencia, respeto, consideración, amabilidad y amor al paciente que se encuentra vulnerable, por miedo o estrés cuando acude al servicio estomatológico, que posibilite establecer una comunicación abierta, sincera, cálida, basada en el diálogo que aumentará la confianza hacia el profesional y mejorará el binomio estomatólogo-paciente, lo cual contribuye a brindar una atención con mayor calidad y humanismo.
En esta intervención predominó el sexo femenino y el grupo de edad de 19-59 años, mientras que el efecto de la música que prevaleció en los pacientes fue la relajación seguida de la tranquilidad con preferencia hacia la música suave y variada.
En la primera visita (sin música) todos los pacientes que refirieron sentir miedo lo mantuvieron, al igual que la mayoría de las sensaciones desagradables, mientras que en la segunda visita (con música) el miedo desapareció en la totalidad de los casos y la mayoría de las sensaciones desagradables también.
La totalidad de las personas manifestó satisfacción al ser tratados con musicoterapia, por lo cual resultó ser efectiva la influencia de la terapia mencionada en el paciente durante la atención estomatológica.
