SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
 número69Tarea Vida: una oportunidad para educar en la sostenibilidad desde la universidad cubanaLa escuela rural en Cuba: proyección cultural de la República (1930-1958) índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Varona. Revista Científico Metodológica

versión impresa ISSN 0864-196Xversión On-line ISSN 1992-8238

Varona  no.69 La Habana jul.-dic. 2019  Epub 01-Dic-2019

 

Artículo original

Estado actual de la competencia orientación profesional de profesores de institutos preuniversitarios de La Habana

Actual status of the competence professional orientation of professors at bachelor's degree institutes in Havana

Yaranay López Angulo1  * 

Annia Almeyda Vázquez2  ** 

1 Facultad de Ciencias Sociales y Comunicaciones, Universidad Santo Tomás. Concepción, Chile.

2 Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana. Cuba.

RESUMEN

La optimización del proceso de orientación profesional es uno de los retos actuales de la educación del siglo xxi. Una adecuada elección profesional incide en la motivación profesional, evita las deserciones de la universidad y facilita la inserción al mercado laboral. En el proceso de elección profesional juegan un rol fundamental los profesores de institutos preuniversitarios, quienes tienen dentro de sus funciones principales la realización de orientación profesional. Los objetivos de esta investigación fueron caracterizar el proceso de orientación profesional y diagnosticar el estado actual de la competencia orientación profesional de profesores. Se utilizó un enfoque cualitativo y un diseño fenomenológico. La muestra la conformaron expertos sobre el tema (n = 3), directivos (n = 3) y profesores (n = 29) de tres institutos preuniversitarios de La Habana. Como resultados se obtuvo que es insuficiente el nivel de información y actualización respecto al proceso de orientación profesional; no se visualiza una estrategia organizada y eficiente desde el proceso docente-educativo. En coherencia, el nivel de preparación de los profesores para desarrollar esta función es insuficiente.

Palabras clave: orientación profesional; profesores; institutos preuniversitarios y competencia

ABSTRACT

The optimization of the professional orientation process is one of the current challenges of 21st century education. An appropriate professional choice affects the professional motivation, avoids the desertions of the university and facilitates the insertion to the labor market. In the process of professional choice, teachers from pre-university institutes play a fundamental role, who have within their main functions the realization of professional guidance. Given the lack of empirical evidence about how professional guidance is carried out, this research was proposed as objectives to characterize the vocational guidance process and to diagnose the current status of the professional guidance professors. A qualitative approach and a phenomenological design were used. The sample consisted of experts on the subject (n = 3), managers (n = 3) and professors (n = 29) of three pre-university institutes in Havana. As a result, it was found that the level of information and updating regarding the professional orientation process is insufficient; an organized and efficient strategy is not visualized from the teaching-educational process. In coherence, the level of preparation of teachers to develop this function is deficient.

Key words: professional guidance; teachers of secondary education and competencies

INTRODUCCIÓN

Este artículo es parte del ejercicio académico de culminación de la Maestría en Psicología Educativa de la Facultad de Psicología de la Universidad de la Habana, titulado “Programa de capacitación para el desarrollo de la competencia orientación profesional dirigido a profesores de preuniversitarios”.

La sociedad cubana experimenta actualmente cambios como consecuencia de la actualización del modelo económico, lo que tiene grandes impactos en la vida social. La Educación Superior es un renglón vital que se alinea con esta dinámica de transformaciones, buscándose incrementar su calidad con la máxima eficiencia económica posible, así como una mayor equidad y pertinencia (Cubadebate, 2015; Rodríguez, 2016). En el lineamiento 143 de la política económica y social del Partido y la Revolución se afirma que es preciso continuar con el perfeccionamiento de la educación, teniendo en cuenta que resulta imprescindible reducir o eliminar gastos excesivos en la esfera social (PCC, 2011). Según un informe del Banco Mundial, Cuba se ubicó en primer puesto en cuanto a la inversión en el sistema educativo para el periodo 2009-2013, con un 12,9 % del PIB invertido en este sector (World Bank, 2014). Por tanto, no es desestimable la pérdida de recursos invertidos en cada estudiante que abandona la universidad, por lo que se precisa incrementar la eficiencia (porcentaje de graduados respecto a los matriculados), tal como se expresa en el lineamiento 151 (PCC, 2011).

El adecuado desarrollo de la orientación profesional puede favorecer un afrontamiento exitoso a este proceso de elección, evitando que el estudiante haga una elección incorrecta, con las consecuencias para su futuro, así como el gasto de recursos materiales y humanos que representa. En Cuba la continuidad de estudios y la inserción laboral son aspectos destacados en las políticas educativas. Se plantea que la educación preuniversitaria tiene como misión fundamental formar y graduar bachilleres de calidad, así como fomentar el desarrollo de habilidades que garanticen una transición exitosa del estudiante a la Educación Superior (Estévez, y Abadie, 2014). En función del logro de este objetivo cada institución educativa de la enseñanza media superior es responsable de la planificación, organización y control de las actividades de formación vocacional y orientación profesional como parte de su proyecto educativo institucional. Esta responsabilidad asignada a la escuela queda recogida en la concepción de la formación vocacional y la orientación profesional para el trabajo en el Ministerio de Educación de la República de Cuba (Del Pino, Matos y Parra, 2016). La escuela es uno de los agentes de socialización que tiene gran influencia en la elección de carrera y una de sus funciones sociales es ser garante de la inserción laboral de los sujetos escolarizados (Hugo, Name y Leal, 2010; Ávila Castellanos, 2011).

En la actualidad los estudiantes preuniversitarios presentan dificultades para elegir su carrera. Algunos de los indicadores de ese problema se han sistematizado y confirmado en varias investigaciones (García Fonseca, 2013; Bueno, 2014; Almeyda, 2012; Almeyda, 2017; Del Pino, 1998). Dentro de los indicadores del problema se encuentra que el estudiantado presenta (Almeyda, 2017):

  • Insuficiente conocimiento en torno a los requisitos que se exigen para el acceso a la Educación Superior.

  • Desconocimiento sobre cuál es la mejor forma de realizar el llenado de la boleta.

  • Insuficiente conocimiento sobre las diferentes opciones de carreras.

  • Elecciones condicionadas por la opinión de otras personas.

Si bien estos antecedentes permiten dar cuenta de las dificultades del proceso de orientación profesional por parte de los estudiantes, las inconsistencias en la actualidad apuntan hacia la necesidad del abordaje y contribución de la ciencia para incidir en la mejora de este proceso y plantea el reto de redimensionar las estrategias de orientación que realizan los profesores como una de sus funciones principales. Teniendo en cuenta lo anterior esta investigación se propuso como objetivos caracterizar el proceso de orientación profesional y diagnosticar el estado actual de desarrollo de la competencia orientación profesional de los profesores de tres institutos preuniversitarios de La Habana.

DESARROLLO

La muestra la conformaron expertos sobre el tema (n = 3), directivos (n = 3) y profesores (n = 29) de tres institutos preuniversitarios de La Habana que fueron parte de una investigación relacionada con la orientación profesional desde la perspectiva de los estudiantes (Almeyda, 2017). Se trabajó con una muestra no probabilística de sujetos tipos, dado que se tuvieron en cuenta determinados criterios de inclusión que debían cumplir los participantes.

Para expertos se evaluó que fueran:

  • Profesionales con experiencia investigativa en el tema de orientación profesional.

  • Profesionales con responsabilidades ministeriales que participaran en la conducción del proceso de orientación profesional.

  • Para profesores y directivos:

  • Que se desempeñaran en la actualidad como profesores guías o directivos de Instituto Preuniversitario Urbano.

  • Que manifestara motivación por el debate sobre el tema.

Esta investigación inscribe en el paradigma constructivista, con un enfoque cualitativo y un diseño fenomenológico dado que estudia el fenómeno tal cual es percibido y experimentado por las personas que participaron en la investigación. La categoría principal de la investigación es la competencia en orientación profesional. Se describe como una configuración psicológica compleja, integrada por componentes cognoscitivos, motivacionales y personológicos que permiten realizar la función de orientación profesional eficientemente, mediante el proceso docente-educativo.

Dentro de las dimensiones de la competencia de orientación profesional se encuentran (García, 2011):

  • Saber: se refiere al conocimiento declarativo o saber qué (hechos, conceptos, principios y leyes) y conocimiento procedimental o saber cómo (procedimientos y estrategias). Puede alcanzar un nivel de sabiduría suficiente que permita, además, saber por qué, para qué, cuándo y dónde aplicar este conocimiento.

  • Saber hacer: tiene que ver con las habilidades necesarias para llevar a cabo una actividad: cognitivas, emocionales, sociales y técnicas. Saber estar son las creencias, valores y actitudes, que favorecen o dificultan el desempeño.

  • Querer hacer: es el conjunto de aspectos motivacionales responsables de que la persona quiera o no realizar los comportamientos propios de la competencia. Se trata de factores de carácter interno (motivación por ser competente, identificación con la tarea, entre otros) o externo (dinero extra, días libres, beneficios sociales, entre otros) a la persona, que determinan que se esfuerce o no por mostrar una competencia.

  • Poder hacer: requiere de disponer de medios y recursos para llevar a cabo la actividad o desempeñar la competencia. Desde el punto de vista individual: la capacidad personal, las aptitudes y rasgos personales. Desde el punto de vista situacional tiene que ver con el grado de favorabilidad del medio.

Como método de investigación se utilizó el grupo focal, lo que permitió encausar una conversación planificada, con el objetivo de debatir en un determinado periodo de tiempo, no más de dos horas, con varios sujetos, sobre el objeto de investigación. Permitió la utilización de técnicas para facilitar el intercambio y disminuir las resistencias de los miembros del grupo. Durante todo el proceso investigativo se tuvieron en cuenta los resguardos éticos asociados al consentimiento informado y anonimato de los participantes e instituciones.

Para la recolección de la información se utilizó la entrevista a expertos y directivos de los institutos preuniversitarios urbanos y grupos focales con los profesores. Las entrevistas fenomenológicas permitieron comprender las vivencias de las personas relacionadas con un fenómeno y descubrir los elementos en común de esas experiencias (Hernández Sampieri, Fernández Collado y Baptista Lucio, 2010). El procedimiento de análisis de la información se hizo a través del análisis de contenido por categorías. El foco estuvo en el discurso de los participantes y en encontrar unidades comunes. El análisis de contenido se realizó con toda la información obtenida en cada una de las técnicas aplicadas. Los niveles de consecución fueron tres: el primero lo constituyó el análisis de cada técnica, de manera independiente, siguiendo los objetivos previstos de la técnica; el segundo es un análisis integral de cada preuniversitario según núcleos de sentidos emergentes y el tercero es la identificación de regularidades y diferencias, emergentes del análisis de las dimensiones de la competencia de orientación profesional, que son las dimensiones más importantes en el análisis.

Las características del proceso de orientación profesional se establecen a partir de cuatro dimensiones de análisis que son desarrolladas teniendo en cuenta las regularidades y diferencias de cada instituto.

Nivel de información y actualización respecto al proceso de orientación profesional

El nivel de información y actualización de los profesores respecto a la orientación profesional en los tres institutos preuniversitarios es insuficiente. Existen dificultades con el conocimiento de leyes, decretos y resoluciones que establecen la función de orientación profesional y no se evidencia dominio de la existencia de estos documentos. En correspondencia, los profesores poseen incertidumbre acerca de su función dentro del proceso, en cuanto a disposiciones que normen su responsabilidad y ocupación dentro de su labor educativa.

El profesorado no posee un adecuado conocimiento de los aspectos medulares para el acceso a la Educación Superior en cuanto a carreras disponibles y priorizadas, nombres actuales de las carreras, modalidades de estudio, objeto de estudio, campo de actuación, acciones profesionales, posibilidades reales de empleabilidad, entre otros. En este sentido como parte de las exigencias de la escuela, a lo único que hacen referencia, porque tienen dominio desde la experiencia, es en la orientación profesional pedagógica, la cual realizan sistemáticamente.

Respecto al reconocimiento de la función de orientación profesional como parte del rol de educador del profesorado, existen diferentes actitudes. En el Instituto Preuniversitario Urbano del municipio Cerro se evidenció una actitud negativa dado que no lo consideran como parte de su rol. Como consecuencia no se concibe la orientación desde el proceso enseñanza-aprendizaje, sino que reclaman la presencia de un especialista (puede ser psicólogo o psicopedagogo) que se encargue de esta función en la escuela. Esta estrategia de escindir la función y depositarla en una persona en específico, tributa a que el profesorado se enfoque solamente en la función docente-metodológica, evadiendo la de orientación profesional e investigativas, que son las menos desarrolladas en este nivel de enseñanza de manera general. Otro elemento de importancia relacionado con esta actitud es que al depositar la responsabilidad en otra persona (especialista) expropian a la clase como un espacio ideal para la orientación profesional, con lo cual no se niega la necesidad de un especialista que quizás diseñe la estrategia a nivel de la escuela, pero esto nunca debe suplir el trabajo desde la clase.

En el Instituto Preuniversitario Urbano del municipio Regla se constató una actitud ambivalente dado que los profesores tienen noción de lo que deben hacer en cuanto a la orientación profesional, pero no la hacen porque no se sienten preparados. Uno de los elementos más importantes, que sostiene positivamente esta actitud, es la percepción que tienen acerca de la importancia de la orientación profesional. Es decir, valoran lo significativo que es la preparación de los estudiantes para la toma de decisión profesional consciente y responsable. Consideran el preuniversitario como una instancia de especial significación dado que es la antesala de la universidad.

En el Instituto Preuniversitario Urbano del municipio Plaza de la Revolución se constató una actitud positiva, es decir, los profesores saben que la función de orientación profesional está contenida dentro de sus funciones y al mismo tiempo realizan acciones, aunque perciben que deben prepararse más. Los profesores perciben que los estudiantes no poseen una preparación adecuada para realizar una toma de decisión profesional responsable. En correspondencia valoran la influencia que tienen otros agentes de socialización (comunidad, familia y escuelas anteriores) en la preparación previa de los estudiantes. Se enfatiza en dos cuestiones fundamentales: la inadecuada preparación que puedan tener los padres para guiarlos, asesorarlos y las fracturas que existen en la labor que realizan los niveles precedentes de enseñanza. Esto ocasiona que los estudiantes se presenten menos preparados para la toma de decisión profesional, lo que provoca que los profesores de este nivel de enseñanza tengan que redoblar esfuerzos para explicarles particularidades del ingreso, que ya otros niveles debieron haber trabajado.

Orientación profesional mediante el proceso docente-educativo

El preuniversitario que demostró tener un mejor nivel de desarrollo en este núcleo fue el del municipio Plaza de la Revolución, dado que posee una planificación de actividades que, de realizarse adecuadamente, puede tributar eficientemente al proceso de orientación profesional. Los otros dos institutos no cuentan con una estrategia organizada, relacionada con la orientación profesional. Se caracteriza por desarrollar algunas acciones de carácter aislado e inconsistente para “ayudar” a los estudiantes en la toma de decisión profesional.

La estrategia del municipio Plaza de la Revolución tiene una temporalidad anual y cuenta con un conjunto de actividades diferenciadas para cada curso. Estas se caracterizan por tener objetivos diferentes y el gradiente de complejidad va en aumento según el acercamiento al proceso de elección profesional. Concibe que en décimo grado solo lleva solo información vocacional, en onceno grado profundiza en toda esa cultura general integral y duodécimo grado ya implica trabajar sobre la orientación hacia las carreras que motiven a los estudiantes.

Como regularidad en todos los preuniversitarios se observa que los profesores conocen algunas acciones que se realizan en la escuela para tributar a la orientación profesional, aunque no todos tienen el mismo nivel de dominio como el constatado en los directivos entrevistados, esto denota una contradicción entre el conocimiento y dominio que tienen los profesores y los directivos. En las declaraciones de los dirigentes de los institutos se enfatiza en la tenencia de una estrategia bien diseñada e implementada sobre la cual no se observan argumentos en las declaraciones del profesorado.

Dentro de las acciones de formación profesional que promueve la escuela se encuentran las docentes, extradocentes y extraescolares. Todas tienen un carácter y nivel de desarrollo diferente. Estas parecieran encontrarse más inestructuradas, endebles y menos logradas en los institutos preuniversitarios de los municipios Cerro y Regla.

En cuanto a las actividades docentes existe el Movimiento de Monitores, utilizado principalmente para trabajar con la orientación profesional pedagógica. Las actividades extradocentes se centran fundamentalmente en las Sociedades Científicas, conversatorio con representantes de diferentes facultades y actividades integrales con la familia y la comunidad. Como parte de las extraescolares se convoca a las Puertas Abiertas en las universidades, visitas y actividades en centros laborales de la comunidad. No se perciben fortalezas en cuanto al funcionamiento de ninguna de estas actividades, impresiona que lo implementan como mecanismos que están establecidos por el Ministerio de Educación y que son de carácter obligatorio llevarlos a cabo, dado que no se deja claro el verdadero efecto sobre la orientación profesional que todas estas actividades tienen, situación que denota la incertidumbre que poseen los profesores en cuanto al modo de llevar al cabo la orientación profesional desde el proceso docente-educativo.

Otro de los elementos que se observan tiene que ver con las gestiones que realizan los preuniversitarios para establecer convenios con instituciones y empresas. De manera general los preuniversitarios no han aprovechado las bondades de su entorno para propiciar el intercambio académico-profesional y perfeccionar la orientación profesional de los estudiantes. En correspondencia, el preuniversitario del municipio Regla no tiene firmado convenios, el preuniversitario del Cerro solo tiene algunos gestionados por los propios profesores y que han funcionado solo con ese profesor y el grupo que ha tenido y por su parte el preuniversitario del municipio Plaza de la Revolución tiene tres firmados. En todos los preuniversitarios predominan las acciones que se realizan de carácter externo, los organismos interesados acuden a la escuela y tratan de motivar a los estudiantes para que ingresen a sus sectores. Estas carreras generalmente son las que están priorizadas por el país, las cuales pertenecen al Ministerio del Interior, Pedagógico y Salud Pública. De manera general se visualizan dificultades a nivel de institutos para asesorar, dirigir, encausar y organizar el proceso de orientación profesional atendiendo las necesidades de los diferentes grados y preparación de los profesores.

Los institutos preuniversitarios no tienen identificados espacios idóneos para la planificación de actividades relacionadas con la orientación profesional como: preparaciones metodológicas, claustrillos, reunión de departamento y otros que puedan suplir las necesidades de formación que tiene el claustro.

Nivel de preparación de los profesores para realizar su función de orientación profesional

Es notoria la necesidad de preparación que poseen los profesores para tributar de manera eficaz a la función de orientación profesional dentro de su rol de educador. Se observa que, en dependencia del carácter de la actitud hacia esta función, se comporta la necesidad de preparación, no obstante, de manera general, poseen conciencia de que es un tema en el cual necesitan capacitación. Se percibe interés y motivación por la preparación de la escuela y superación de los profesores en esta función. Los docentes del preuniversitario del municipio Plaza de la Revolución posen conciencia de algunas habilidades necesarias para desplegar esta función como son: comunicativas, conocimiento de los estudiantes del aula, sus potencialidades, proyectos de vida, entre otras. Sin embargo, esta disposición no se observa en el claustro de manera totalizada, dado que se identifica la presencia de profesores jubilados reincorporados, lo cual hace que, desde el punto de vista institucional, se vivencie que se tiene menos control del profesor porque solo se le exige lo docente, pero dada la sólida experiencia que poseen muestran resistencias hacia el tratamiento de otras temáticas e indicaciones, quedándose solamente con el compromiso del cumplimiento de la función docente-metodológica.

La preparación que tiene el profesorado para realizar esta función es en relación con las carreras pedagógicas, fundamentalmente. Siendo así, estos saberes se caracterizan por vincularse a la especialidad en la cual se graduaron y a su historia de vida.

Se distingue, con gran énfasis en todos los preuniversitarios, la sobrecarga del rol del maestro en cuanto a las disímiles tareas que realiza y las particularidades del preuniversitario cubano actual. Este elemento es visualizado por los profesores como interferente y perturbador en cuanto al desarrollo de la función de orientación, dada la sobrecarga de la función docente-metodológica, de este modo, aunque se identifican con la función de orientación profesional, la dejan a un lado para reforzar la otra, pues la consideran más determinante en el ingreso a la universidad. Uno de los elementos reforzadores es que el Ministerio de Educación mide la calidad del proceso docente-educativo y de la escuela por la promoción que se acentúa en los exámenes de ingreso a la Educación Superior, de modo que se le atribuye más importancia a la cantidad de estudiantes que ingresan que a la calidad del acceso.

Otro de los elementos que contribuye a la baja preparación es la inexistencia de control y asesoría interna-externa en cuanto a evaluar el modo en que la escuela y el profesorado realiza la orientación profesional. Se reconoce la exigencia del Ministerio de Educación respecto a realizar la orientación profesional, sin explicar el modo y las estrategias viables para su consecución y calidad en la escuela. Existe una tendencia a discutir en la escuela las evaluaciones y centrarse solamente en lo docente-metodológico, obviando las otras dos funciones. También la vía más utilizada es el chequeo de documentos y explicación de cómo se hace, pero no directamente con el profesor en la actividad específicamente.

Estrategias que se utilizan para realizar la orientación profesional mediante el proceso enseñanza-aprendizaje

Las estrategias no quedan claramente explicitadas, dado que no se concibe la orientación desde el proceso enseñanza-aprendizaje, puesto que predomina la incertidumbre sobre cómo llevarla a cabo, lo que reafirma que los profesores no sienten tener las habilidades técnicas (sobre todo) para el desarrollo de la orientación profesional. Por estos motivos predominan las acciones realizadas de manera individual, generada por la demanda independiente a través de una duda de un estudiante o un debate que se genera espontáneamente. Estas acciones se caracterizan por ser inestables, personales, dejando fuera, la mayoría de las veces, la clase como medio para el debate del tema en el grupo. Esta práctica es contraproducente de cara al desarrollo de la función de orientación profesional, dado que deben ser estrategias coherentemente planificadas.

Existe, en un gran grupo de los profesores investigados, la tendencia a identificar en los estudiantes fortalezas y debilidades asociadas al rendimiento que han tenido en las asignaturas que se miden para el ingreso, este indicador tiene un carácter reduccionista dado que deja fuera la motivación, intereses y otras formaciones psicológicas que son determinantes en el logro de la meta de formarse como un profesional competente y responsable.

Solamente en el preuniversitario del municipio Cerro dada la actitud negativa ante la función, excluyen la tarea de orientación de su rol de educador, por tanto, no concientizan las acciones que deben hacer para tributar a la preparación de los estudiantes. En correspondencia, reconocen que no están preparados y solicitan que lo haga un especialista. Este bajo nivel de preparación que poseen los profesores se relaciona con la falta de identificación con la necesidad de prepararse. Los profesores de este centro consideran que deben hacer orientación profesional a partir de su voluntad, creatividad y consideración, no como una función asignada a su rol de educador. Esta creencia es limitante y paralizante dado que hace depender netamente de la actitud positiva y creativa del profesor, su vínculo con el proceso de orientación profesional. Como consecuencia predominan las actividades por motivación individual y sobre todo de carácter extraescolar. En general, las ínfimas acciones que se realizan en la escuela parten de la iniciativa propia de algunos profesores, lo que no es suficiente, ni se da en todos los grupos por igual.

Estado actual de la competencia orientación profesional en los profesores

Se hace referencia al estado actual de la competencia de orientación profesional a través de la identificación de dificultades en cada una de las dimensiones de la competencia de orientación profesional.

Saber

El profesorado desconoce los aspectos medulares para el acceso a la Educación Superior: carreras disponibles y priorizadas, nombres actuales de las carreras, modalidades de estudio, objetos de estudio, campos de actuación, acciones profesionales y posibilidades reales de empleabilidad. Existe una diferencia, dado que no todos los preuniversitarios poseen en mismo nivel de desconocimiento. Los profesores estaban más actualizados en algunos parámetros, en el municipio Plaza de la Revolución, después del municipio Regla y por último los del municipio Cerro. De manera general se carece de un conocimiento preciso y amplio sobre las regulaciones, resoluciones y decretos que establecen y norman la función de orientación profesional. El grado de conocimiento tiene una relación directa con la configuración de la actitud ante esta función.

El profesorado reconoce que no están preparados para realizar la orientación profesional. La preparación que tienen solo se relaciona con las carreras pedagógicas, por esta razón es que solo realizan orientación profesional pedagógica. Aunque se reconoce la clase como una vía para realizar la orientación profesional, no se concibe la orientación ni existe claridad en cuanto al modo de realizar la función de orientación profesional mediante el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Existe un conocimiento insuficiente de las características psicológicas de la edad y de otras particularidades personológicas que permiten tributar mejor a la toma de decisión. Perciben que los estudiantes deben inclinarse hacia carreras tomando como referente las asignaturas donde estos tienen mejor promedio, lo que deja fuera la motivación, los intereses; los cuales son aspectos importantes para la elección de carrera.

Saber hacer

El profesorado presenta incertidumbre sobre cómo llevar a cabo el proceso de orientación profesional, lo que quiere decir que los profesores no sienten tener las habilidades generales para ello. En este sentido emerge una diferencia, dado que los profesores del preuniversitario del municipio Plaza de la Revolución evidencian malestares o disonancia cognitiva, causados por la necesidad de cumplir con la tarea y la falta de preparación para llevarla a cabo. Esta situación está dada porque se identifican con la tarea y tienen una actitud positiva hacia esta; en coherencia, realizan la orientación de manera individual, generada por la demanda independiente a través de una duda de un estudiante; de modo que no se aprovecha el grupo ni la clase como espacios de potenciación y crecimiento individual y grupal. La orientación profesional que realizan los profesores se vincula a la especialidad que tienen y a la experiencia e historia de vida.

Los profesores reconocen la importancia que tienen habilidades comunicativas como: claridad, seguridad en cuanto al tema y persuasión en la función de orientación. No tienen conciencia de la necesidad de utilizar recursos emocionales para influir de manera positiva en el comportamiento de los estudiantes en cuanto a la toma de decisión profesional. Les falta práctica y uso de las tecnologías de la información (programas virtuales, entre otros) como medios para orientar profesionalmente a los estudiantes. A pesar de que en las escuelas se llevan cabo algunas investigaciones, no se logra articular de manera sistemática la función investigativa con la de orientación profesional.

Saber estar

El profesorado posee diferentes actitudes ante la función de orientación profesional. Presentan actitud positiva (de apoyo) a las acciones que realizan órganos como el Ministerio del Interior, Salud y Pedagógico, en el proceso de captación hacia sus carreras.

Se percibe formalidad en el cumplimiento de estas actividades y se deja de ver el énfasis en su contribución al proceso y calidad. Son insuficientes las estrategias de la escuela para dirigir, asesorar, encausar la orientación profesional a nivel de la escuela, mediante el proceso docente-educativo en general, y a nivel de los profesores, con énfasis en el proceso enseñanza-aprendizaje. En todas las acciones de orientación profesional que se llevan a cabo falta el acompañamiento del profesor, dado que en su mayoría lo realizan como una tarea formal. Asociado a esto se percibe la falta de gestión de intercambio académico-profesional y técnico institucional e individual. Se desaprovechan los espacios idóneos para la planificación de actividades relacionadas con la orientación profesional como son los claustrillos, reunión de departamento, claustro del grado de la asignatura y Consejo Técnico Asesor. No se aprovechan adecuadamente las potencialidades del territorio donde están enclavadas las escuelas para propiciar intercambio académico-profesional.

Se realizan en duodécimo grado el cúmulo fuerte de actividades relacionada con la orientación profesional, bajo el argumento de que están más próximos a la toma de decisión profesional. Se reconoce moderadamente la labor de los medios de comunicación masiva, en aras de tributar al proceso de orientación profesional: periódico, programas radiales y spot televisivos relacionados con promociones de las Puertas Abiertas. Se distingue la falta de aprovechamiento a por parte de la escuela en general. Los profesores tienen una fuerte creencia relacionada con la necesidad de reforzar la función docente-metodológica y poca predisposición hacia elevar la calidad de la función de orientación e investigativa, dado que los estudiantes ingresan con muy mala preparación de la secundaria y el Ministerio de Educación mide promoción y calidad del ingreso.

Querer hacer

Las motivaciones que sustentan la función de orientación profesional son reforzadoras de las actitudes referidas. A los profesores les falta motivación para involucrarse de una manera más activa en las acciones de orientación profesional que realiza la escuela como institución. Tal parece que hay un divorcio entre las funciones principales de los profesores en el preuniversitario, evidenciándose un marcado interés en la función instructiva.

En la concepción de profesionales competentes, que maneja el grupo de profesores, la función que rige y determina este parámetro es para ellos la docente-metodológica. Este supuesto se construye y se reafirma sobre la base de las exigencias del Ministerio de Educación en cuanto a la calidad del proceso docente y la promoción en los exámenes de ingreso a la Educación Superior. Existe un grupo de factores que refuerzan de manera negativa esta dimensión, influyendo sobre el desinterés. Dentro de estos se encuentra la falta de relación entre la importancia de su labor y la estimulación percibida, la alta exigencia del Ministerio de Educación en cuanto a papeles que evidencien la eficacia de su rol profesional, la desvalorización de la figura del maestro en la sociedad, y el alto consumo de tiempo en el preuniversitario.

Poder hacer

Predominan de manera negativa las resistencias, poca flexibilidad, la falta de creatividad y toma de decisiones. Positivamente influye la presencia de un claustro con experiencia, disposición, optimismo y capacidad. Existe una deficiente gestión de los preuniversitarios dirigida a establecer convenios con instituciones y empresas para que realicen actividades que tributen a la orientación profesional de los estudiantes. Solo lo realiza la Aduana, Ministerio del Interior y Pedagógico, y por necesidad en el sector, no por convenios establecidos y pensados desde la demanda de la escuela. De este modo se desaprovecha el uso de las bondades territoriales que tienen las escuelas donde están enclavadas (no se explotan al máximo todas las potencialidades).

El profesorado percibe falta de control interno y externo en cuanto a chequear el modo en que los profesores y la escuela realizan la orientación profesional. Se reconoce que las condiciones materiales son desfavorables para la planificación de actividades generales.

Se percibe lo importante que es la estabilidad del claustro para trazar estrategias y medidas paliativas con esta función, puesto que impide que los procesos se lleven a cabo de manera consecutiva con una lógica integradora. En este sentido hay alta predisposición a elevar la preparación de los profesores en la función docente-metodológica y muy poca predisposición para elevar la preparación en la función de orientación e investigativa. Además, la exigencia del Ministerio de Educación está enfocada en la instrucción y devaluación del trabajo educativo. Los profesores señalan que enfatizan más en la instrucción porque el ministerio valora más la preparación para hace las pruebas de ingreso que otros procesos. Se señala poca importancia atribuida en las evaluaciones a la escuela y a los profesores, como un indicador más el trabajo asociado a la función de orientación profesional. Existen dificultades en el traslado para acceder a lugares de manera directa (empresas e instituciones de interés). Además de la percepción de sobresaturación de tareas y cansancio, vinculada a la elevada presión hacia la captación de estudiantes para carreras pedagógicas.

CONCLUSIONES

Se demostró la existencia de características del proceso de orientación profesional que determinan el modo en que se lleva a cabo esta función en tres preuniversitarios de La Habana. Es insuficiente el nivel de información y actualización respecto al proceso de orientación profesional, no se visualiza una estrategia organizada y eficiente desde el proceso docente-educativo, el nivel de preparación de los profesores para desarrollar esta función es bajo, en correspondencia no se visualizan las estrategias que utilizan para realizar la orientación profesional mediante el proceso enseñanza-aprendizaje. Se identificaron las problemáticas asociadas a las dimensiones de la competencia orientación profesional, dentro de las cuales se encuentra que los profesores no poseen los conocimientos necesarios para el desempeño de la función de orientación, no tienen un desarrollo óptimo de las habilidades que se requieren, predomina una actitud ambivalente, no se identifican altos niveles de motivación y se visualizan debilidades desde lo individual e institucional que impiden el desarrollo eficiente del proceso.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Almeyda, A. (2009). El imaginario social en torno a la psicología desde la perspectiva de sus estudiantes en el proceso de construcción de su identidad profesional. Trabajo de Diploma. Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana. [ Links ]

Almeyda, A. (2012). Los primeros pasos en el proceso de convertirse en psicólog@s. Un programa de orientación profesional para estudiantes de nuevo ingreso a la Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana. Tesis de Maestría en Psicología Educativa. Universidad de La Habana [ Links ]

Almeyda, A. (2017). Programa de orientación profesional para la elección profesional responsable. Tesis presentada en opción al Título de Doctor en Ciencias Psicológicas. Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana. [ Links ]

Ávila Castellanos, D. (2011). De-Formación social de la vocación. La escuela. Trabajo de Diploma. Facultad de Sociología de la Universidad de La Habana. [ Links ]

Bueno, L. (2014). Caracterización del proceso de elección profesional de los estudiantes de 12 grado de 15 IPU de La Habana. Trabajo de Diploma. Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana. [ Links ]

Cubadebate (2015). La universidad cubana se integra y se transforma. Disponible en: http://www.cubadebate.cu/noticias/2015/09/09/la-universidad-cubana-se-integra-y-se-transforma/Links ]

Estévez, K. y Abadie, L. (2014). Continuidad de estudios. Realidades y desafíos en Cuba. Estudio, (4)14. [ Links ]

García Fonseca, T. (2013). Elegir una profesión significa elegir el futuro. Caracterización de la motivación profesional en estudiantes de 12 grado. Trabajo de Diploma. Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana. [ Links ]

García, M. (2011). Una revisión constructiva de la gestión por competencias. Anuales de psicología, 27(2), 473-497. Disponible en: https://revistas.um.es/analesps/article/download/123101/115731/Links ]

Hernández Sampieri, R., Fernández Collado, C. y Baptista Lucio, P. (2010). Metodología de la investigación. Vol. 3. México: Editorial McGraw-Hill. [ Links ]

Hugo, V., Name, E. y Leal, L. (2010). Agentes de socialización: influencia de la familia y la escuela en la elección de carrera. Revista Mexicana de Orientación Educativa, (13)17. [ Links ]

PCC (2011). Lineamientos de la política económica y social del Partido y la Revolución. 2011. Disponible en: http://www.cuba.cu/gobierno/documentos/2011/esp/l160711i.pdfLinks ]

Pino, J. L. (1998). La orientación profesional en los inicios de la formación superior -pedagógica: una propuesta desde el enfoque problematizador. Tesis presentada en opción al Título de Doctor en Ciencias Pedagógicas. Instituto Superior Pedagógico Enrique José Varona, La Habana. [ Links ]

Pino, J. L., Matos, Z. C. y Parra, I. B. (2016). Concepción de la formación vocacional y la orientación profesional para el trabajo en el Ministerio de Educación de la República de Cuba. [ Links ]

Rodríguez, L. (2016). La Educación Superior en Cuba se transforma. Granma, 24 de mayo. Disponible en: http://www.granma.cu/cuba/2015-09-07/la-educacion-superior-en-cuba-se-transformaLinks ]

World Bank (2014). Public Spending on Education, Total (% of GDP). Disponible en: http://data.worldbank.org/indicator/SE.XPD.TOTL.GD.ZSLinks ]

Recibido: 01 de Junio de 2019; Aprobado: 01 de Julio de 2019

*Autor para la correspondencia: yara13190@gmail.com, yaralopez@edu.cl

**Autor para la correspondencia: annia@psico.uh.cu

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons