SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.23 número2Producción de King Grass como alimento para el ganado vacuno con riego por aspersión de baja intensidadDigestión anaerobia, aguas residuales de café, reactor UASB índice de autoresíndice de assuntospesquisa de artigos
Home Pagelista alfabética de periódicos  

Serviços Personalizados

Journal

Artigo

Indicadores

  • Não possue artigos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • Não possue artigos similaresSimilares em SciELO

Compartilhar


Revista Ciencias Técnicas Agropecuarias

versão On-line ISSN 2071-0054

Rev Cie Téc Agr vol.23 no.2 San José de las Lajas abr.-jun. 2014

 

ARTÍCULO ORIGINAL

 

Comparación de métodos para determinar capacidad de uso de tierras agrícolas, con fines de ordenamiento territorial rural, en Guatemala

 

Comparison of methods for determining capability of agricultural soil use, for rural soil planning, in Guatemala

 

 

M.Sc. Mario Eddy Díaz VisquerraI, Ph.D. Eddi Alejandro Vanegas ChacónII, Dr.C. Nancy García ÁlvarezIII, Ph.D. Jorge Camacho SandovalIV

I Fondo Nacional de Tierras, Guatemala.
II Universidad de San Carlos (USAC), Facultad de Agronomía, Guatemala.
III Universidad de Ciego de Ávila, (UNICA), Ciego de Ávila, Cuba.
IV Instituto Tecnológico de Costa Rica, Costa Rica.

 

 


RESUMEN

La capacidad de uso de las tierras agrícolas es un criterio ampliamente utilizado en el ordenamiento territorial rural sostenible a nivel mundial. Sin embargo, muchas veces se carece de instrumentos estandarizados a nivel nacional para la realización de esta actividad, tal el caso de Guatemala. En esta investigación se realizó un análisis comparativo de las dos metodologías más utilizadas en el país, la del Instituto Nacional de Bosques (INAB) y la del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA), determinando que sí existen diferencias estadísticas significativas entre la aplicación de una u otra metodología, respecto a la superficie (cuantificada en ha) asignada a cada una de las unidades de capacidad de uso de las tierra, lo que con fines de implementación de programas de ordenamiento territorial rural puede afectar positiva o negativamente el manejo de los recursos naturales y la sostenibilidad de proyectos agropecuarios, recomendando discrecionalidad en el uso de estas metodologías, de conformidad con el interés primario del programa de desarrollo a implementar.

Palabras clave: capacidad de uso de las tierras agrícolas, ordenamiento territorial rural.


ABSTRACT

The capability of agricultural land use is an important criterion used in sustainable rural land planning, worldwide. However, frequently there are not national standardized instruments for conducting this activity, such as in Guatemala. In this research, a comparative analysis of the two methodologies used in the country, one from the National Forestry Institute (INAB) and other from the Ministry of Agriculture, Livestock and Food (MAGA), were done. Statistically significant differences exist between the application of one or another methodology, relative to the determined surface (measured in ha) of each one, of the units used for to classify capability of agricultural land use. Therefore, rural planning programs can be positively or negatively affected as function of the methodology used for this purpose. It is recommended discretion in the use of these methodologies, according with the primary interest of the development program to implement.

Key words: capability of agricultural land use, rural land planning.


 

 

INTRODUCCIÓN

En propiedades rurales de uso agropecuario, la capacidad de uso de las tierras determina la utilización más adecuada y menos agresiva con el entorno medioambiental, en función de las propiedades intrínsecas que caracterizan los recursos biofísicos de un espacio determinado (Año, et. al, 1997). La consecución de este fin varía en función de los planteamientos metodológicos iniciales y el proceso culmina con la evaluación de la idoneidad o aptitud de la tierra para favorecer ciertos usos o sistemas de gestión específicos, a lo que algunos autores le han llamado el mejor y mayor uso (American Society of Farm Managers and Rural Appraisers. 2000). A pesar de plantear objetivos teóricamente bien definidos, los procedimientos metodológicos para la determinación de la capacidad de uso de las tierras son muy variados y diversos de acuerdo con su noción conceptual USBR, (1951); Klingebiel y Montgomery, (1961); FAO, (1978), Sánchez et al, (1982); ejemplos con buenos resultados en países del área son reportados como es el caso de Costa Rica que cuenta con una metodología aprobada por el Organismo Legislativo para tal efecto (MAG-MIRENEM, 1994).

El panorama actual del estudio de capacidad de uso de las tierras en Guatemala se caracteriza por utilizar variantes metodológicas de las contribuciones internacionales más significativas, adaptadas a condiciones locales, tal es el caso del proyecto piloto de estudio semidetallado de suelos y capacidad de uso de las tierras, a nivel departamental, que utiliza métodos desarrollados por el Instituto Geográfico Agustín Codazi de Colombia (MAGA-IGAC, 2010 y MAGA-IGAC, 2013). Sin embargo, aún se carece de un criterio estándar para desarrollar este tipo de estudios para promover el desarrollo territorial sostenible a nivel rural, aunque actualmente se utilizan las metodologías propuestas por el Instituto Nacional de Bosques de Guatemala (INAB, 2000) y el Ministerio de la Agricultura, Ganadería y Alimentación (MAGA, 2002) que necesitan ser comprobadas en su aplicación. Por lo tanto el presente trabajo tiene como objetivo comparar la capacidad de uso de la tierra mediante las metodologías INAB y MAGA para que se establezcan similitudes y vacíos entre ambos métodos y con ello su implicación en la toma de decisiones respecto al ordenamiento territorial en las zonas nor-este y central de Guatemala.

 

MÉTODOS

Para la comparación de las metodologías propuestas por INAB y MAGA se evaluaron 22 fincas productivas en las zonas noreste y central de Guatemala, ubicadas en los departamentos de Izabal y Chimaltenango respectivamente, cuya ubicación geográfica se detalla en la Tabla 1. El estudio de la capacidad de uso de las tierras se realizó en un mapa a escala 1:50 000 mediante Sistema de Información Geográfica, estimándose de forma independiente las áreas correspondientes a cada categoría o clase según el caso.

El método propuesto por el Instituto Nacional de Bosques de Guatemala INAB (2000), se basa en propiedades físicas del suelo y reúne conceptos y procedimientos de otros sistemas (Sheng, 1974). El método es categorizado por regiones naturales, entre las que se definen: Tierras de la Llanura Costera del Pacífico, Tierras Volcánicas de la Bocacosta, Tierras Altas Volcánicas, Tierras Metamórficas, Tierras Calizas Altas del Norte, Tierras Calizas Bajas del Norte, Tierras de las Llanuras de Inundación del Norte. Tiene como variables a cuantificar la profundidad, pendiente, pedregocidad y drenaje, (estos últimos dos, como factores modificadores) y define las siguientes categorías: a). Agricultura sin limitaciones “A”, b). Agricultura con mejoras “Am”, c). Agroforestería con cultivos anuales “Aa”, d). Sistemas silvopastoriles“Ss”, e). Agroforestería con cultivos permanentes “Ap”, f). Tierras forestales para producción “F” y g). Tierras forestales de protección “Fp”.

El método MAGA (2002), identifica ocho clases agrológicas basado en la propuesta de Klingebiel y Montgomery (1961), modificado para Guatemala. Debido a que la metodología INAB, reconoce siete categorías y la metodología MAGA, reconoce ocho clases, se homologaron las categorías y clases en unidades de capacidad de uso, basados en experiencias prácticas en la realización de estudios de capacidad de uso de las tierras en el país (Tabla 2).

Se consideró como variable el área correspondiente a cada una de las diferentes unidades de capacidades de uso de la tierra, para ello primero se realizó la prueba de Levene para la igualdad de varianzas y posteriormente la prueba de t para la igualdad de medias. También se evaluó la concordancia a través del coeficiente de correlación propuesto por Lin (2000), cuya interpretación se presenta en la Tabla 3.

Para dichos análisis estadísticos se utilizó el programa de cómputo Modelos Mixtos basados en Análisis Genéticos (Genstat), edición 15.

 

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

La capacidad de uso de las tierras de las 22 fincas como producto de la aplicación de los métodos INAB y MAGA, es sintetizada en forma de unidades de capacidad de uso (expresadas en hectáreas) en la Tabla 4.

De conformidad con el análisis estadístico de igualdad de varianzas y prueba de t para la hipótesis nula de igualdad de área promedio, para cada de las unidades de capacidad de uso de las tierras (Tabla 5), se observó que no existe igualdad de varianzas para las unidades 1 a la 5 y tampoco igualdad de áreas con significación bilateral del 5%, para dichas unidades, excepto en la unidad 6 que presentó homogeneidad de varianza e igualdad de áreas.

La concordancia evaluada a través del coeficiente de correlación de Lin, indicó correlación pobre para todas las unidades de capacidad de uso de las tierras (Tabla 6).

La homogeneidad de varianza y la relativa alta correlación de concordancia (aun cuando es considerada pobre) de la unidad 6, se explica porque agrupa la categoría forestal de protección (Fp) del método INAB y las clases VII y VIII del método MAGA, que representan los escenarios de conservación de áreas de cobertura vegetal y recarga hídrica, concepto predominante en ambas metodologías para la categoría y clases agrupadas en la unidad de capacidad de uso de las tierras.

Algunos vacíos metodológicos son identificados en ambas metodologías, por ejemplo, aquellos relacionados a la integración del concepto de la calidad del suelo y la productividad agrícola (Doran y Parkin, 1996). Mapas de unidades de suelo en escala grande, para sugerir el mayor y mejor uso de las tierras basados en factores formadores de suelo y materiales parentales (Sevilla y Comerma, 2008). La integración del conocimiento local del ambiente con los atributos químicos y físicos del suelo y el uso de las tierras (Fernandes et al., 2008). El estudio de la variación microclimática sobre la productividad agrícola como mecanismo derivado de la evaluación comparativa de métodos tradicionales de evaluación de tierras y la idoneidad del uso de la tierras por los agricultores locales (Cools et al., 2003). Sin embargo, se reconoce que son métodos prácticos, que deben aplicarse con discrecionalidad dependiendo de los fines del programa de ordenamiento territorial a desarrollar. Entonces se afirma que existen diferencias estadísticas significativas entre utilizar una metodología u otra, con fines de planificación del ordenamiento territorial rural, lo que sin duda conlleva a diferentes planteamientos de mejora agrícola, edáfica y consecuentemente ambiental por unidad de área en base a la capacidad de uso de las tierras, lo que podría comprometer la sostenibilidad de los procesos productivos en las áreas rurales.

 

CONCLUSIONES

• La clasificación de tierras por capacidad de uso comparando los métodos INAB y MAGA, através de unidades de capacidad de uso conlleva a resultados estadísticamente diferentes en cuanto al número de hectáreas asignadas a cada unidad.

• La aplicación de una u otra metodología para determinar la capacidad de uso de las tierras con fines de implementar programas de ordenamiento territorial rural, puede afectar positiva o negativamente el manejo de los recursos naturales y la sostenibilidad de proyectos agropecuarios.

• El uso de la metodología INAB o MAGA, para determinar la capacidad de uso de las tierras, debe ser usada con discrecionalidad conforme con el interés primario del programa de ordenamiento territorial rural local que se desee implementar.

 

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. AÑO, C.; J. SANCHEZ; C. ANTOLÍN: “Análisis y valoración de los sistemas de evaluación de suelos en España: evolución, tendencias actuales y perspectivas futuras”, Estudios Geográficos, No.228: 331-353, 1997.

2. COOLS, N.; E. DE PAUW & J. DECKERS: “Towards an integration of conventional land evaluation methods and farmers’ soil suitability assessment: a case study in northwestern Syria. Agriculture”, Ecosystems and Environment, No.95: 327–342, 2003.

3. DORAN, J.W.; T.B. PARKIN: “Quantitive indicators of soil quality: a minimum data set”, En: DORAN, J.W.; JONES, A.J. (Eds.), Methods for Assessing Soil Quality, (Soil Science Society of America, No.49): 25–37, 1996.

4. FAO: Report on the Agro-ecological zones project, 158pp., Food and Agriculture Organization of the United Nations, World Soil Resources Report 48, (Vol. 1: Methodology and results for Africa), Roma, Italy, 1978.

5. FERNANDES, L.A.; P.S. NASCIMENTO; S. D’ANGELO; C.A. DAYRELL & R. ARRUDA: “Relação entre o conhecimiento local, atributos químicos e físicos do solo e uso das terras”, R. Bras. Ci. Solo, No.32: 1355-1365, 2008.

6. GUATEMALA. MAGA, DURO, J. M., MONZÓN, R.M., VÁSQUEZ VILLATORO, R., GONZÁLEZ DÍAZ, G. R., GARCÍA GONZÁLEZ, G.P., ARQUETA MEDINA, J.C., GONZÁLEZ RIVERA, O.R. Atlas Temático De La República De Guatemala. Guatemala: MAGA. Escala 1; 250,000. Mapas a Colores. 1 Disco Compacto, 2002. 127 p.

7. GUATEMALA. MAGA-IGAC: Estudio semidetalado de los suelos y Capacidad de Uso de las Tierras del departamento de Chimaltenango, 968pp., Vol. I y II. Guatemala, 2010.

8. GUATEMALA. MAGA-IGAC: Estudio semidetallado de los suelos y Capacidad de uso de las Tierras del departamento de Sololá, 948pp., Vol. I y II. Guatemala, 2013.

9. GUATEMALA. INAB. Clasificación de tierras por capacidad de uso. Aplicación de una metodología para tierras de la república de Guatemala, 96pp., Instituto Nacional de Bosques, Guatemala, 2000.

10. KLINGEBIEL, A. & P.H. MONTGOMERY: Land capability classification, 21pp., USDA Agricultural Handbook 210, US Government Printing Office, Washington, D.C., USA, 1961.

11. LIN, L.I.: “A note on the concordance correlation coefficient”, Biometrics, No.56: 324-325, 2000.

12. MAG-MIRENEM: Metodología Determinación Capacidad Uso Tierras Costa Rica, 30pp., Decreto No. 23214, San José, Costa Rica, 1994.

13. SÁNCHEZ, P.A.; W. COUTO, & S.W. BUOL: “The fertility capability soil classification system: interpretation, applicability and modification”, Geoderma, 27 (4): 283-309, 1982.

14. SEVILLA, L. V. y J. COMERMA: “Caracterización de la Cuenca del Río Canoabo en el estado de Carabobo, Venezuela. II. Suelos y Tierras”, Agronomía Trop. 59 (2): 149-160, 2008.

15. SHENG, T.C.: Proyecto de clasificación de la capacidad de uso de la tierra orientado hacia su tratamiento, 13pp., Proyecto PNUD/FAO, Kingston, Jamaica, 1976.

16. USA. AMERICAN SOCIETY OF FARM MANAGERS AND RURAL APPRAISERS: The appraisal of rural property, 525pp., Wisconsin University, Madison, USA, 2000.

17. USA. UNITED STATES BUREAU OF RECLAMATION: Irrigated land use, Part 2: Land classification. Bureau of Reclamation Manual, Vol. 5. U.S. Government Printing Office, Washington, D.C., USA, 1951.

 

 

Recibido: 31 de agosto de 2013.
Aprobado: 28 de enero de 2014.

 

 

Mario Eddy Díaz Visquerra. Fondo Nacional de Tierras Guatemala, Tel. (502) 50086882. Correo electrónico: ediazvisquerra@yahoo.com