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Cofin Habana

versión On-line ISSN 2073-6061

Cofin vol.11 no.1 La Habana ene.-jun. 2017

 

Artículo Original

 

La relación del capital humano con el capital constante y su presencia en los activos del balance general

 

Relation of Human Capital to Constant Capital and its Presence in the Assets of the General Balance

 

 

Fernando Vecino Guerra, Antonio B. Zaldívar Castro

 

ISPJAE, Cuba.

 

 

 

 


RESUMEN

El capital humano desarrolla las fuerzas productivas del hombre. Este aparece en el modo tecnológico fabril-mecanizado con los grandes descubrimientos científicos y su aplicación a las tecnologías. Llevándonos a los autómatas actuales, cambia la composición orgánica del capital acortando los ciclos de vida de los medios básicos con una mayor acumulación e inversión. Persigue, asimismo, la plusvalía extraordinaria, por lo que crea nuevos bienes y conocimientos y se gana un lugar en el balance general y en la ficha de costo. El objetivo del presente artículo es contribuir al análisis teórico del capitalismo en su etapa actual, a través del estudio del capital humano en su función imprescindible en la producción de nuevos activos y servicios, y su responsabilidad en el cambio social. La investigación tiene lugar a partir de la identificación de las categorías marxistas de valor con las variables contables.

PALABRAS CLAVE: capital individual, capital variable, fuerza productiva, plusvalía extraordinaria.


ABSTRACT

Human capital develops men? productive forces. Such capital appears in the mechanized-industrial technological mode with the great scientific discoveries and their application to technologies. While arriving to the current automatic machines, we can see how the organic composition of capital changes by reducing the life cycles of the basic means with a higher accumulation and investment. Human capital also pursues the extraordinary surplus value, thus it creates new goods and knowledge and earns a place in the general balance and the cost record. The aim of this article is to contribute to the theoretical analysis of Capitalism in the current stage, through the study of Human capital in its essential function in the production of new assets and services, as well as its responsibility for social change. Research takes place starting from the identification of Marxist categories of value with the countable variables.

KEYWORDS: individual capital, changeable capital, productive forces, extraordinary surplus value.


 

 

Introducción

El capital humano (CH) es el portador del conocimiento y la experiencia en el proceso productivo. Aparece en este con la necesidad de la utilización de la ciencia y los descubrimientos, y posibilita la reproducción ampliada capitalista de forma acelerada. Transforma continuamente la estructura y superestructura social de manera que nos sitúa en el modo tecnológico actual robotizado-automatizado. Asimismo, lo encontramos en todos los niveles de liderazgo de procesos como guía de las inversiones, fundador de nuevos emprendimientos, y creador del tercer sector productivo o de servicio, o sea, de aquellas estructuras que van a servir de tejido celular a todo el cuerpo del mercado, mediante la comunicación de las empresas del sector I y II, la creación de su fuente logística y de encadenamientos productivos y nuevos valores añadidos.
La aceleración de la revolución científico técnica (RCT) en los años 60 del siglo XX, propicia la aparición de un nuevo modo tecnológico de producción; la capacidad productiva se diseña para la economía de rango a diferencia de la economía de escala, y la innovación y desarrollo pasa a ser una nueva función empresarial.
El CH, a solicitud del dueño capitalista, hace disminuir el ciclo de vida de los activos productivos a partir del incremento de la obsolescencia de los mismos, con el fin de aumentar la plusvalía extraordinaria. También busca la integración de productos y servicios en sus nuevos diseños al repartir socialmente el trabajo, y dirige la orientación hacia nuevas áreas productivas de modo que aumenta la segmentación del mercado, la creación de nichos y la combinación de estos elementos.
En el capitalismo actual, el CH como portador del conocimiento, debe estar contemplado en la expresión de valor de los productos y servicios. Este establece la división del trabajo abstracto y concreto, así como del complejo y simple, por lo que convierte al conocimiento en un valor que se comercializa y pasa a ser un nuevo derecho de las empresas al debitarse como activo. Sus innovaciones pueden multiplicar o ahorrar el trabajo de la masa obrera.
Los activos intangibles, por su parte, están personalizados en los trabajadores y representan al autor intelectual de los procesos.
El objetivo del presente artículo es contribuir al análisis teórico del capitalismo en su etapa actual, enfocado en el concepto de CH como productor de activos, bienes y servicios y del cambio social, a partir de la identificación de las categorías marxistas de valor con las variables contables mediante:

  • La formulación del capital individual (CI) con la participación del CH.
  • La relación del capitalista y el objeto de trabajo con el CH y con el obrero.
  • El destino actual de la plusvalía acumulada y su incidencia en el CH.
  • La aceleración y acortamiento del ciclo de vida del capital constante (CC).
  • La importancia de la formación y emancipación del CH.
  • El CH y el CC en la combinación de las fuerzas productivas sociales.

Metodología

La investigación es analítica teórica con un diseño bibliográfico, integrado por técnicas como el análisis de contenido, de conceptos y categorías, así como del entorno socio-económico e histórico del período en el que se desarrolla el estudio. Además, se utiliza el método de valoración en función de ocho criterios principales:

1) Evaluación y revisión de la bibliografía marxista y de artículos especializados.
2) Definición de las categorías económicas utilizadas.
3) Establecimiento de una cronología del objeto de estudio.
4) Descripción y caracterización de la época histórica.
5) Caracterización del desarrollo socio-económico y científico técnico del período.
6) Explicación del aporte creciente del CH al desarrollo técnico social.
7) Definición de la ubicación y responsabilidad del CH en la creación productiva.
8) Valoración del papel social del CH en el tránsito a la nueva sociedad.

Marx, Engels y Lenin fueron testigos del modo tecnológico de producción fabril-mecanizado. Advirtieron el proceso de concentración de la propiedad productiva en grandes consorcios privados denominados Trust, Carteles, Monopolios, Sociedades accionarias, entre otros, y se refirieron, por otra parte, al proceso de la socialización de la producción propiciado por la interdependencia e intercambio de valores, creados tanto a nivel fabril como por la globalización de los mercados.
Para Marx (1867, pp. 324-414) los factores del desarrollo de la fuerza productiva (FP) del trabajo del hombre son:

  • Las condiciones naturales.
  • El grado promedio de habilidad del trabajador.
  • La capacidad y la efectividad de los medios de producción.
  • El nivel de desarrollo de la ciencia y el grado de su aplicación tecnológica.
  • La combinación social del proceso de producción.

La FP siempre estará presente en el hombre. Es potenciada por los factores de su desarrollo, el cual permitirá su rendimiento y eficiencia en la creación de valor. El modo tecnológico de producción fabril-mecanizado posibilita la desaparición temporal de la pequeña empresa y la clase media, y el aumento de la socialización de la producción, lo cual propicia las economías de escala y demanda grandes cantidades de empleados. Por otra parte, se ponen en práctica nuevos conceptos de dirección y organización científica del trabajo, surgen los métodos tayloristas y fordistas, y se desarrolla una nueva ciencia para optimizar los procesos productivos y obtener más plusvalía de forma intensiva, que se potencia con la energía eléctrica.
El término capital produjo usos con derivaciones posteriores y su importancia en los procesos de producción y reproducción social le otorgó mayor connotación. Al decir capital se refiere un recurso con la propiedad de generar valor cuando es explotado en un régimen de producción capitalista. Puede ser cualquier activo.
El CC, el capital variable (CV) y el CH son productos del desarrollo de la FP del hombre. A continuación se define cada una de estas nociones:
Capital constante (CC): parte del capital que se invierte en medios de producción, materias primas, materias auxiliares e instrumentos de trabajo. No cambia su magnitud de valor en el proceso de producción y lo transfiere completamente al nuevo producto creado. Marx (1867) lo denomina también "parte constante del capital" (pp. 160-170). Está sujeto a registro contable si se considera como valor de activos fijos o activos circulantes.
Capital variable (CV): parte del capital que se invierte en fuerza de trabajo y cambia de valor en el proceso de producción. Además de reproducir su propio valor crea un remanente que también puede variar conocido como plusvalía (P). A la fuerza de trabajo se le paga un salario que debe ser equivalente al valor que esta devenga durante el período que se le explota, aunque crea un valor superior a su fuerza de trabajo que pasa a ser propiedad del capitalista. Esta operación se contabiliza, se debita una cuenta nominal de gasto destinada a este fin, y se controla en la ficha de costo.
A su vez, el CI representa el valor de un producto o servicio equivalente a la suma del aporte del CC, el CV y la P obtenida del obrero. De esta manera, el resultado del proceso de producción es una cantidad de producto o servicio correspondiente en valor a la suma del aporte de las partes. Esta operación queda representada de la siguiente manera: CI = (CC + CV + P) (Marx, 1867, p. 172).
El resultado representa el valor de la unidad, producto o de toda la producción social. La composición orgánica del capital permite discernir quién transfiere valor en el proceso productivo, crea nuevos valores, y favorece la apropiación del capitalista del nuevo valor creado con la P. Su tendencia es al aumento del CC y a la disminución relativa del CV, de manera que procura mayor P y llega a su máxima expresión: la plusvalía extraordinaria (PE). De este modo, se facilitan las ganancias monopólicas con el aumento de los gastos de innovación y desarrollo.
Según Marx (1867) "lo que convierte al instrumento de trabajo de herramienta en máquina es la aplicación de la ciencia y la técnica al proceso productivo" (p.324). Al multiplicarse los inventos y crecer la demanda de máquinas, se fue logrando la diversificación en la elaboración de maquinarias para distintas ramas independientes. Al crearse la división del trabajo en la construcción de maquinarias, el diseño surge como nuevo producto.
La misma cadena de valores que va integrándose para obtener nuevos productos o combinaciones de estos, exige una relación entre ramas por lo que aumenta la socialización. "Las masas gigantescas de hierro que la industria tenía ahora que mover, forjar, soldar, cortar, taladrar y moldear, reclaman el surgimiento de una industria nueva dentro de la división del trabajo para producir máquinas, y producir máquinas por medio de máquinas" (Marx, 1867, p. 337).

Definiciones de capital humano (CH)

El CH suele definirse teniendo en cuenta la destreza, experiencia, los conocimientos y las capacidades de todos los trabajadores de las empresas, incluidos los directivos.
Los individuos presentes en toda estructura social tendrán una situación en cuanto a los niveles de conocimiento, destreza y experiencia; pero el CH es un valor que se desarrolla como resultado de la práctica y de la preparación a la que sean sometidos los trabajadores. Necesariamente, debe ir en aumento la capacidad y calidad de respuesta de estos en el proceso productivo. Se considera entonces CH quien realice aportes sustanciales al proceso de creación de valor.
Por su parte, Becker (2002) plantea que el CH es "la inversión en dar conocimientos, formación e información a las personas; esta inversión permite a la gente dar un mayor rendimiento y productividad en la economía moderna y aprovecha el talento de las personas" (p.26). A esta definición se le debe añadir que el aporte esperado es medible y puede formar parte tanto de los activos intangibles de las empresas, como del cálculo del costo de los productos que aporten un margen comercial mayor, con una alta valoración de mercado.
Asimismo, Stewart (1997) entiende que el CH está "encarnado en las personas cuyo talento y experiencia crean productos y servicios por los cuales los clientes acuden a ella en lugar de la competencia" (p.123). Sin embargo, debe existir un talento innato para lograr que las personas puedan entregar un producto con diferencias cualitativas que sean notables y atraigan a los consumidores, pues son ellos, en definitiva, los mejores jueces de las ventajas que aporta en la satisfacción oportuna de las necesidades que aparecen en el mercado.
Roos et al. (1999) afirman lo siguiente: "creemos que el valor del capital humano surge de la competencia, de la actitud y de la agilidad intelectual" (p. 64). El CH, salvo excepciones, no es espontáneo en un mundo competitivo. Por tanto, será necesario invertir y luego exigir y viabilizar los resultados que se esperan. Esto se logra a través de la orientación de planes y tareas en la dirección de la innovación y de los estudios de mercado, a partir de la búsqueda de nuevos productos que alcancen ventajas competitivas y valores añadidos.
Odriozola (2008) propone sustituir el término capital humano por potencial humano, definido, a su vez, como "el conjunto de conocimientos y valores asimilados por las personas, que contribuyen al mejoramiento de sus habilidades productivas y creativas, a la ampliación de sus capacidades para participar de forma consciente en el proyecto social del cual forma parte y a su realización plena como individuo" (pp. 237). Es evidente que la concepción de CH de esta autora difiere de la que se considera en el presente artículo. Desde una perspectiva marxista, fundamenta su desacuerdo al considerar al capital como una relación social de producción en términos de explotación en el marco de un sistema capitalista.
La dependencia de la ciencia y la técnica crece en la sociedad capitalista. Para poder utilizar los grandes descubrimientos científicos se necesita que el CH intervenga para garantizar las aplicaciones a los procesos productivos, liderar la invención y el uso de tecnologías, la inversión tecnológica en las ramas, el desarrollo de la división y especialización del trabajo, y la separación del trabajo abstracto del diseño de productos (proyectos) de la actividad material. Debe dedicarse a transformar, en todo momento, la resistencia dada en la estructura y superestructura social, de manera que nos sitúe en el modo tecnológico actual robotizado-automatizado (Sotolongo, 2011).

Relación capital humano (CH) - capital constante (CC)

Teniendo en cuenta los conceptos anteriores, es posible definir el CH como aquel valor en forma de conocimientos científico-técnicos, culturales y éticos, acumulado en personas independientes, o agrupado en equipos de trabajo en una empresa o en la sociedad. Este permite evaluar el objeto de trabajo a partir de la conducción de un proceso productivo con la utilización del conocimiento, hasta un resultado final esperado que puede ser un nuevo valor (como bien o servicio). Esta definición hace énfasis en la idea de que el conocimiento acumulado por el CH a través de la formación se convierte en un activo intangible que se tiene que representar en el balance general y en la ficha de costo por su valor.
En el capitalismo actual, con el objetivo de demostrar la autenticidad y novedad de las innovaciones, se protegen para su comercialización y pasan a ser una patente que se convierte en propiedad de su(s) creador(es). Esto limita el empleo por parte de otros productores, los cuales tendrán que obtener licencias que le otorguen el derecho de explotación de dicha patente. De este proceso se deriva un costo añadido al producto que introduce un cambio contable al tener que considerar el uso del conocimiento como un activo (intangible) más dentro del balance, en la misma posición que los equipos (activos fijos). La obtención de la patente está sujeta al cumplimiento de diversos requisitos (constituir una novedad mundial y tener aplicabilidad industrial y altura inventiva según las normas establecidas por la Organización Mundial del Comercio (OMC)).
Si se personalizara el CH sería un individuo con talento y con un nivel de desarrollo que dependería de la acumulación de conocimientos que alcance en su trayectoria de formación académica y experiencia laboral, así como de sus cualidades innatas y valores éticos. Estos rasgos le permitirían contribuir de manera valiosa a la empresa o a la sociedad en la creación de nuevos productos o servicios. De este modo, su comportamiento sería equiparable al del CC y el CV, lo que se verá en el desarrollo del artículo. Intervendría entonces en la composición del CI tanto para productos individuales como para la producción social, a través del aumento del CC y la disminución del CV, de manera que se obtenga mayor plusvalía y acumulación y aumenten los gastos de innovación. Así, la reposición continua y acelerada de los activos productivos (AP) va a ser la función principal del CH en la búsqueda de mayor masa de plusvalía.
El capitalista invierte no solo para reponer con la reproducción simple sino para crecer en escala ampliada a partir de la acumulación que genera y delega al CH la renovación de los activos. La estandarización de los procesos productivos intensifica la producción con el máximo aprovechamiento de los activos.
El CH diseña, proyecta y construye prototipos que van a convertirse en los nuevos activos (edificios, maquinarias, herramientas o componentes). Los edificios en que se trabaja, junto a la maquinaria, serán los medios de trabajo. Esta parte del CC transfiere valor al producto en la misma medida en que pierde, con su valor de uso, su propio valor de cambio. Según Marx (1867) "el valor así adherido al nuevo producto va restando valor a la maquina disminuyéndola constantemente con el paso del tiempo hasta que el medio de trabajo queda fuera de uso y su valor se distribuye, entre una masa de productos que brotan desde esta en una serie de procesos de trabajo constantemente repetidos, hasta que deja de producir" (p.339).

El tratamiento contable de la depreciación de los activos

La devaluación periódica se fija y se acredita a la cuenta de activo para equipos y maquinaria, disminuyendo el saldo de su valor y, al mismo tiempo, como contrapartida de este crédito, se debita otra cuenta de derecho que registra la depreciación y amortización. De esta manera, son creadas las provisiones para la reposición del activo una vez que este deje de operar, bien por el fin de su vida útil, o por la devaluación moral y su sustitución por otro en el caso de la reproducción simple. En la reproducción ampliada, se acreditará a una cuenta de capital o de pasivos (si utiliza préstamos) y se debitará en una cuenta de activos la cantidad equivalente a su costo de activo adquirido.
En el caso de un activo intangible que representa conocimiento comercializable como licencias, patentes, propiedad industrial, software, fórmulas, diseños y prototipos, y otros derechos sobre conocimientos o estudio, se debitará un cuenta de activo intangible contra crédito de capital o préstamo, lo cual le da el derecho a la explotación del conocimiento o estudio.
La depreciación es considerada en el costo del producto o mercancía cuando el activo productivo transfiere su valor por cuotas a cada unidad del producto. Esto va a formar parte de la ficha de costo unitaria del producto o servicio, lo que posibilitará recuperar el valor del activo con la venta de cada unidad productiva, y se debitará una cuenta de amortización. De forma similar, se considerará en la ficha de costo el valor del conocimiento cuando se ha pagado por hacer uso de este, y cada unidad de producto deberá recuperar la inversión de los activos que incluye el conocimiento.
El CC transfiere plenamente el valor al nuevo producto o servicio de la siguiente manera:

1. Las materias primas y materiales que se integran al objeto añaden completamente su valor, incluso el valor de aquellos residuos o desperdicios que se derivan de ellos.
2. Los materiales auxiliares que no se integran al objeto y se gastan en el proceso añaden completamente su valor, o sea, el gastado en el proceso.
3. Los activos fijos o medios básicos transfieren completamente su valor durante el período de vida útil del activo, pero lo hacen por partes.

Ahora bien, con el desarrollo de la industria surgen los sectores I y II (Marx, 1867, p. 293). El I se encarga de la elaboración de medios de producción y el II de la producción de medios de consumo para destino individual o industrial.
Por otra parte, el CH gestiona la acumulación capitalista en la reproducción ampliada. Para que la reproducción simple se convierta en reproducción en escala ampliada, la producción del sector I debe hallarse en condiciones de fabricar menos elementos del CC para II y más para I (Marx, 1867, p. 259).
Asimismo, la plusvalía acumulada deviene CC adicional mediante su inversión en AP. Las premisas de la reproducción ampliada son las siguientes:

1. La suma acumulada para comprar nuevos activos con el objetivo de ampliar la industria o crear una nueva (destino de la acumulación) debe ser suficiente.
2. Se supone que exista una producción en escala ampliada, lista para ser vendida en el mercado, de los AP que son necesarios para la ampliación. El CH habrá diseñado y esbozado previamente los prototipos a elaborar con cualidades añadidas.

Es preciso destacar el aporte del sistema crediticio a la reproducción ampliada. Todos los capitales potenciales, depositados en bancos y concentrados por estos, se convierten en capital disponible para préstamo listo para la reproducción ampliada, lo cual facilita y adelanta las inversiones.

La plusvalía extraordinaria (PE)

La PE constituye la ganancia extraordinaria con la inversión de los nuevos AP. Es fuente de acumulación acelerada que atrae para sí la inversión. Es aquí donde los capitalistas encargan a los CH protagonizar la gran carrera de acumulación e inversión de nuevos activos. Asimismo, se les encomienda a los departamentos de innovación y desarrollo y de marketing buscar continuamente respuestas en diseños, y son dirigidos a las oportunidades para alcanzar PE. Los beneficios estimados serán evaluados respecto a los gastos de investigación, desarrollo y marketing que se proyecten, y considerando el valor de aquellos activos que serán sustituidos pero que aún mantienen una cuota de valor y continúan amortizándose, lo que puede incidir en la toma de decisiones de la inversión.
Según Marx (1867):

Esta primera etapa, en que las máquinas no hacen más que conquistar su radio de acción, tiene una importancia decisiva, por las ganancias extraordinarias que ayudan a producir. Estas ganancias, no sólo son de por sí una fuente de acumulación acelerada, sino que además atraen a la rama de producción favorecida gran parte del capital social suplementario que se amasa incesantemente y que pugna por encontrar nuevas bases de inversión" (p. 274).

La oportunidad de producir ganancias extraordinarias con el trabajo del CH están dadas por:

1. La creación de nuevas necesidades y su satisfacción con nuevos servicios y productos a través de la elaboración de una nueva tecnología productiva y nuevos activos.
2. El diseño de nuevos AP más eficientes y con mayor capacidad y calidad que los llamados a sustituir, ahorrando materias primas o trabajo vivo.
3. El desarrollo de un cambio que optimice el proceso y fabrique productos similares al existente o sustitutivos, a través de otras vías tecnológicas o procesos.

La ganancia extraordinaria es el trabajo excedente que se aprecia en la expresión CI = CC + CV + P(1). El nuevo CC hará disminuir al CV.
Las ganancias extraordinarias son oportunistas y estarán vigentes temporalmente hasta que los productores de la misma rama realicen inversiones en sus AP e igualen las condiciones de trabajo.
Lenin había determinado, a principios del siglo XX, en su obra El Imperialismo fase superior del capitalismo, el dominio de la RCT y su aplicación a los monopolios y a las guerras de conquistas de mercados con el desarrollo de la industria militar (Lenin, 1973, pp. 268-279).
Posterior al esplendor de la estandarización de los procesos industriales y las ganancias monopólicas, comienza un proceso de diferenciación de productos y servicios. Los hechos más destacados son los siguientes (Lenin, 1973, pp. 221):

  • La segmentación de los mercados y la creación los "nichos".
  • Desarrollo del marketing como función empresarial.
  • Desarrollo de los departamentos de I + D en las empresas.
  • Surgimiento de nuevas necesidades para los hombres promocionadas por el marketing.
  • Desarrollo de la diversificación de productos y servicios, potenciado por el marketing, que crea una fuente inagotable de oportunidades para la pequeña empresa.
  • La formación pasa a ser una política de interés estatal con el desarrollo de universidades.
  • Desarrollo de los mercados bursátiles que favorece el crecimiento del financiamiento por adquisición de acciones.
  • Resurge con las pymes la clase media, dueña y accionista de la mayoría de la propiedad.
  • Los servicios bancarios se consolidan como intermediarios entre los recursos temporalmente libres de los capitalistas y aquellos capitalistas necesitados de inversión.

Se desarrolla, además, un nuevo modo tecnológico de producción: el automatizado-robotizado. Esto trae como consecuencia, en primer lugar, el surgimiento de la máquina automatizada, diseñada para el traslado de los medios técnicos y de funciones productivas de índole lógica (hasta ahora privativas de operarios capacitados); en segundo, la aparición de las tecnologías de la comunicación e informatización (TIC) y su integración con los autómatas.
Marx (1867) señala que el sistema automático "va desplazando progresivamente el talento del obrero" (p. 270). De este modo, los nuevos activos listos para sustituir aquellos depreciados ahorran maquinaria en el taller, son más productivos, garantizan mayor calidad, producen menos desperdicios y ahorran mano de obra.
Los capitalistas encuentran más plusvalía al disminuir el ciclo de vida de los activos productivos. Para ello se valen de los CH que crean los nuevos diseños, prototipos y proyectos con el objetivo de buscar las plusvalías extraordinarias a partir de la inversión de un CC nuevo (destinado a sustituir el existente). Los equipos y componentes de los activos depreciados pasan a formar parte de la basura global.
El CH procura la integración y combinación de valores provenientes de cadenas pretéritas de valores para el logro de un nuevo producto o servicio, con el que facilitará la visión a los departamentos de I+D y Marketing para diseñar nuevos valores añadidos.
Con el modo automatizado-robotizado, la tecnología a emplear y el conocimiento del proceso deben validarse y expresarse por escrito en un procedimiento de trabajo, elaborado por los CH que, siendo portadores del conocimiento, deberán trasmitirlo a la gerencia tecnológica y a los operarios, de manera que constituya una guía en su accionar productivo. Es necesario destacar que sin estos documentos de descripción de los procesos el obrero no puede operar.
El CH en el tercer sector productivo o de servicio, tendrá la visión e imaginación para rentabilizar o capitalizar sus conocimientos y experiencia. Un emprendedor o un hombre que funda una pyme es potencialmente un CH que ha acumulado conocimientos previos para economizar su negocio. Si funda una empresa deberá conocer bien el proceso de trabajo que va a desarrollar, su organización, los activos que necesita, su operación, las calidades de su producto, los mercados, tanto de compra de materias primas, como de venta de productos (la competencia); todo esto con el propósito de realizar ofertas sistemáticas al mercado signadas por la creatividad y la capacidad de invención.
Es necesario señalar que las pymes constituyen el tercer sector de la estructura económica de la sociedad. Estas auxilian a los sectores I y II y permiten, en todo momento, la integración y combinación de valores y servicios para cubrir las nuevas necesidades, por lo que se consideran la base logística del mercado.

 

El CH dentro de la expresión del CI y su presencia en los Activos del Balance Contable
El CH queda representado en los activos de la empresa cuando es necesario comprar los derechos de explotación de una patente para producir a partir de ese conocimiento. La relación creciente entre el CC y el CH, portador del conocimiento, no se manifestaba en la época de Marx. Con la aplicación de la ciencia y la técnica a los nuevos productos y servicios para lograr más eficiencia y ahorro de fuerza de trabajo, el CC comienza a desplazar al CV y le da paso al CH. Asimismo, empieza a crecer el sector I frente al sector II, asistido por el sector III. Los portadores de conocimiento aparecen dentro de la expresión del CI como un recurso que se comercializa y crea valor. Se profundiza la división social del trabajo entre el abstracto y el concreto y el intelectual y el físico.
Ya en el siglo XX, el factor del desarrollo de la ciencia y el grado de su aplicación tecnológica exigió la inversión de los gobiernos y los capitales privados en la formación. Para ello se crearon universidades e instituciones de investigación. Con la masificación y generalización de este proceso, los costos de la formación pasan a ser una preocupación para el estado capitalista y para su clase, aunque buena parte de esta reproducción de CH en el capitalismo es soportada por las propias personas, o sea, es privada y necesita ser retribuida de forma permanente, por lo que el capitalista no se puede desprender de la responsabilidad de reproducirlo constantemente.
Por la importancia del CH en la creación de valor, actualmente este deberá ser representado por la expresión del CI a partir de la consideración de que en el capitalismo actual el CH se ha derivado del CV. Se ha personalizado y constituido como un recurso comercializable y contable y que crea valor que puede socializarse y multiplicar o ahorrar el trabajo del resto de los obreros, representados en el CV. La expresión entonces quedaría entonces de la siguiente forma: CI =CC+CV+CH+P
Ahora bien, las diferencias entre CV y CH están dadas por su relación con el capitalista, caracterizada por diversos rasgos:

  • El capitalista paga el salario del CV (de los obreros), compra su fuerza de trabajo y permite la reproducción simple de este para que retorne cada día a su puesto de trabajo.
  • El capitalista paga el salario al CH y compra su compromiso con la empresa, lo que le permite a este último reproducirse de forma simple junto con su familia. Adicionalmente, paga una renta que le permite ampliar sus bienes de consumo y vida. Es frecuente, además del salario, pagar con "acciones" de la compañía. Sus rentas permiten adquirir "acciones" en el mercado, lo que los convierte en dueños.
  • Cuando el CH es propietario de una patente, el capitalista tiene que comprar la licencia que le permite utilizar su conocimiento.
  • El obrero depende del capitalista para reproducir su vida, está separado del medio de producción y tiene una mayor dependencia del capitalista para crear valores.
  • El CH puede acumular y esto le permite ser más independiente del capitalista. Es dueño de su herramienta de trabajo que son los conocimientos y experiencia, y su renta le permite ser emprendedor y pasar a formar parte de la clase capitalista.
  • El capitalista debe invertir, permanentemente, en la formación del CH para mantener su competitividad y realizar otros gastos que posibiliten la documentación e información a través de medios informáticos y otras herramientas tecnológicas para ejercer su creación.
  • Por otra parte, la relación del CH y del obrero con el objeto de trabajo se caracteriza de la siguiente manera:
  • El obrero actual crea físicamente los productos pero no los diseña (proyecto), sino que realiza el trabajo concreto y material.
  • El CH crea virtualmente el producto, elabora el diseño (proyecto), realiza el trabajo abstracto y complejo, determina los procedimientos necesarios, dirige el proceso, etc.

Finalmente, la nueva sociedad socialista en tránsito al comunismo deberá desarrollar los recursos humanos. Las FP del hombre alcanzarán su mayor desarrollo para satisfacer las necesidades crecientes de los hombres y se cumplirá el enunciado marxista siguiente:
En la fase superior de la sociedad comunista, cuando haya desaparecido la subordinación esclavizadora de los individuos a la división trabajo, y con ella, la oposición entre el trabajo intelectual y el trabajo manual; cuando el trabajo no sea solamente un medio de vida, la primera necesidad vital; cuando, con el desarrollo de los individuos en todos sus aspectos, crezcan también las fuerzas productivas y corran a chorro lleno los manantiales de la riqueza colectiva, sólo entonces podrá rebasarse totalmente el estrecho horizonte del derecho burgués, y la sociedad podrá escribir en su bandera: ¡De cada cual, según sus capacidades; a cada cual, según sus necesidades! (Marx, 1975, p. 17).
El estado de la nueva sociedad podrá acordar con las FP el balance necesario entre estas, de manera que se logre una combinación óptima de cada aporte que será proyectado por el CH social.

Conclusiones

Al abordar el concepto de capital humano debe tenerse en cuenta el contexto de análisis, pues es necesario conocer las diferencias de su aplicación, ya sea en una sociedad capitalista desarrollada o no, o socialista como la que se construye en Cuba.
Sin el capital humano, el nuevo capital constante no podrá ser competitivo debido a que los nuevos activos están muy vinculados al desarrollo científico técnico. El CH, con la RCT, acelera la obsolescencia de los activos mediante la búsqueda de plusvalía extraordinaria, de manera que se incrementa el basurero global y la explotación desequilibrada de la naturaleza. Asimismo, los capitalistas establecen relaciones diferencias con el capital humano y con los obreros y, al mismo tiempo, estos dos últimos contribuyen de disímiles formas a la creación del nuevo producto. Por otra parte, los activos intangibles del balance representan el resultado del trabajo del CH y constituyen propiedad de su creador y un derecho de la empresa que lo adquiere.
La combinación social de las fuerzas productivas y los capitales constantes no se materializará en el capitalismo por la esencia egoísta de concentración de riqueza tanto corporativa como individual.

 

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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Recibido: 9/6/2016
Aceptado: 19/7/2016

 

 

 

 

Fernando Vecino Guerra. ISPJAE, Cuba. Correo electrónico: guerravecino@gmail.com

Antonio B. Zaldívar Castro. ISPJAE, Cuba. Correo electrónico: tony@gest.cujae.edu.cu

 

 

NOTAS ACLARATORIAS

1. P constituye el trabajo excedente o todo el margen desde el producto de la suma del CC y el CV hasta llegar al precio del mercado.

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