Custom services
Spanish (pdf)
Article in xml format
Article references
Send this article by e-mail
Cited by SciELO 
Similars in
SciELO 
Permalink
En el ámbito mundial, la evaluación de las competencias, funciones y el desempeño laboral de los profesionales de la salud ha constituido, en las últimas tres décadas, una preocupación permanente de los sistemas de salud para incrementar la calidad de sus servicios, y por otro lado, ha exigido a las universidades médicas aportar al mundo laboral un profesional con adecuada capacidad y modos de actuación en un escenario laboral concreto.1
La enfermería es una profesión en la que se deben investigar distintas y mejores formas de brindar cuidados, basados en el avance de los conocimientos y pruebas obtenidas mediante la investigación, con el fin de ofrecer atención de calidad a la población y generar recursos humanos competentes; esta tiene dos compromisos sociales fundamentales: responder a las demandas de salud de una sociedad dinámica, donde los conocimientos científicos y tecnológicos en el mundo contemporáneo se hacen obsoletos con gran rapidez, y como disciplina, generar conocimientos, divulgarlos y aplicar sus hallazgos para mejorar el cuidado a las personas y grupos sociales; sin embargo, no todos sus profesionales están conscientes de la necesidad de mantener una búsqueda activa y permanente en la superación profesional.2
Los enfermeros se forman en función de realizar un importante número de procedimientos y deben adquirir la capacidad para identificar problemas de salud que les permitan tomar decisiones propias del ejercicio profesional, a través de la aplicación del proceso de atención de enfermería como método científico de la profesión.3
En los procedimientos propios del proceso de atención de enfermería es frecuente que un Licenciado en Enfermería presente dificultades para resolver los problemas que se les plantean; aunque posean los conocimientos teóricos, en ocasiones no han sido capaces de apropiarse de ellos en toda su magnitud, y por ende, sus habilidades resolutivas no se han desarrollado totalmente. Las causas pueden ser variadas: se ha demostrado que los profesionales que se apropian de procedimientos de trabajo mental que reflejan las formas de pensamiento y trabajo de la ciencia en general, pueden llegar a mejores resultados en la resolución, independiente de las situaciones que se presentan en las diferentes áreas de trabajo, propias de su desempeño profesional.4
Es criterio de los autores que los conocimientos teóricos adquiridos se ponen de manifiesto en el desempeño de las funciones, pero requieren la sistematicidad en el enfrentamiento de los problemas para desarrollar las habilidades necesarias.
Las nuevas transformaciones que se están realizando en el nivel primario de atención de salud conllevan modificar la formación y preparación del recurso humano, sustentadas sobre la base de la integración plena en el trabajo. Para que exista un buen desempeño laboral es necesario ser competente y tener en cuenta el estado de las condiciones personales y de trabajo existentes.5
Es en la Atención Primaria de Salud (APS) donde la población recibe los primeros servicios del equipo básico de salud. El enfermero de la APS es aceptado por la comunidad, por lo que sus cuidados, consejos, apoyo psicológico y emocional al individuo y a la familia serán bien recibidos, pero debe ser un profesional competente, con una sólida preparación científico-investigativa. Por ello, los autores destacan la importancia de la adquisición de competencias investigativas en los profesionales de enfermería en este nivel de atención a la población.
En Cuba, la evaluación de las competencias profesionales es una problemática vigente en el ámbito de la salud y se han realizado estudios referentes al tema. Específicamente en la APS se presentan resultados relacionados con la evaluación de la competencia profesional en las especialidades de Enfermería y Medicina General Integral, así como la atención a los problemas de salud más frecuentes en su actuar diario.6
Ser competente se refiere a la capacidad que tiene una persona de realizar una labor productiva: "hacer", en su sentido de comprender, saber lo que hace y por qué lo hace. Es decir, utiliza el conocimiento, habilidad y aptitud para desempeñar un conjunto de actividades de acuerdo a criterios establecidos.5
Veliz Martínez et al.,1) en su estudio, hacen referencia a las clasificaciones de las competencias realizadas por varios autores, entre las que se encuentran las competencias genéricas para la salud: generales, de atención de salud, formativas, investigativas y de gestión. Dentro de las competencias genéricas generales se encuentran: la comunicación, actitud profesional, ética, moral y ciudadanía, análisis e interpretación de informaciones, toma de decisiones para la solución de problemas con independencia y creatividad, interacción social, trabajo en equipos y responsabilidad legal.
Las competencias genéricas de atención de salud se dividen en: abordaje de problemas individuales y colectivos de salud: métodos clínico y epidemiológico, promoción de salud y prevención de enfermedades, diagnóstico, conductas terapéuticas y ambientales.1
Las competencias formativas incluyen las didácticas, metodológicas y tecnológicas, educación social y autosuperación permanente; y las competencias investigativas: aplicación de las bases del pensamiento científico y la utilización de la metodología de la investigación científica.1
De las necesidades genéricas para la salud, los autores hacen énfasis en las competencias investigativas por constituir un problema a resolver en el profesional de enfermería en su desempeño laboral. La necesidad de gestionar, dentro de su formación el desarrollo de competencias investigativas que contribuyan a comprender e interpretar la acción del enfermero en la asistencia, la docencia, la gestión y la investigación a través de un cuerpo de conocimientos que permita diferenciar a la enfermería de otras disciplinas del área de la salud, es fundamental y una responsabilidad del sistema de educación médica superior.7
Las competencias investigativas de los licenciados en enfermería se definen como: “… el sistema de conocimientos, habilidades, valores y cualidades de estos profesionales en correspondencia con las funciones investigativas propias de su desempeño profesional, para ofrecer soluciones a los problemas en la atención de enfermería, y el enriquecimiento de las ciencias desde una base científica, así como el diseño, comunicación y conducción del proceso investigativo para la satisfacción de las exigencias sociales en la calidad de vida de la población”.8) Sixto Pérez et al.9 agregan que del uso consciente que se haga de las técnicas y procedimientos propios de la enfermería, depende en gran medida el éxito o fracaso al enfrentar la solución de un problema profesional en el área asistencial. Naturalmente, la formación de procedimientos heurísticos no puede ser espontánea, debe ser un proceso consciente y basado en el desarrollo de investigaciones científicas. Además refiere que el desarrollo de las ciencias de la enfermería y la excelencia en la calidad de la atención dependen de que este licenciado aplique su inteligencia, creatividad y responsabilidad para resolver los problemas de la práctica profesional y a la exacta comprensión de la realidad objetiva con el fin de dominarla, ideas coincidentes con las de los autores de esta comunicación.
Se considera que en el proceso de desarrollo de las competencias investigativas en los profesionales de Enfermería de la APS existen insuficiencias que deben ser atendidas mediante estrategias capacitantes, se ha constatado el insuficiente conocimiento metodológico evidenciado tanto en las investigaciones como en publicaciones; de ahí la necesidad del trabajo sistemático dirigido a la solución de dicha problemática.
