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Revista Universidad y Sociedad

versión On-line ISSN 2218-3620

Universidad y Sociedad vol.11 no.4 Cienfuegos oct.-dic. 2019  Epub 02-Sep-2019

 

Artículo original

Las bases del cambio de la matriz productiva en Ecuador (2006-2016)

The basis of the change of the productive matrix in Ecuador (2006-2016)

0000-0003-0916-336XNatacha Pahola De las Mercedes Díaz Rodríguez1  *  , Lilia Lourdes Mora Pisco1  , Marco Edmundo Durán Vasco1 

1Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí. Ecuador, E-mail: lilia.mora@uleam.edu.ec, marco.duran@uleam.edu.ec

RESUMEN

El tema del cambio de la matriz productiva en Ecuador se desarrolla en el marco de un debate complejo y contradictorio por la diversidad de aristas desde donde se analiza, generando en algunos casos incomprensión del mismo ocasionados por esta diversidad de pensamiento. Partiendo de esta preocupación la autora de este ensayo pretende ofrecer un análisis del tema del cambio de la matriz productiva de Ecuador desde el enfoque de la Economía Política colocando la atención en la teoría del desarrollo considerando su evolución histórica y actual. Se parte de reconocer que la necesidad del cambio en los componentes del desarrollo en Ecuador es el resultado de la mezcla de todo un conjunto de factores internos y externos, los cuales tienen un carácter pluridimensional, al tener un basamento político, económico, histórico, étnico, cultural, es decir, social.

Palabras-clave: Desarrollo endógeno; matriz productiva; teorías del desarrollo; neoliberalismo; estructuralismo; desarrollo alternativo

ABSTRACT

The issue of changing the productive matrix in Ecuador is developed within the framework of a complex and contradictory debate because of the diversity of edges from which it is analyzed, generating in some cases incomprehension caused by this diversity of thought. Based on this concern, the author of this article intends to offer an analysis of the topic of the change of the productive matrix of Ecuador from the approach of the Political Economy placing the attention in the theory of development considering its historical and current evolution. It starts from recognizing that the need for change in the components of development in Ecuador is the result of the mixture of a whole set of internal and external factors, which have a multidimensional character, having a political, economic, historical, ethnic base, cultural, that is, social.

Key words: Endogenous development; productive matrix; theories of development; neoliberalism; structuralism; alternative development

Introducción

En el marco de los cambios que tuvieron lugar en los primeros años del siglo XXI América latina se identifica la revolución ciudadana iniciada de 2007, con el gobierno de Rafael Correa. El proyecto político-social que se estableció desde el inicio de su mandato acogió como eje central y rompe la grave crisis socioeconómica que había caracterizado a Ecuador durante década y para ello se propuso la construcción del plan nacional de desarrollo que centró su acción en la transformación de la matriz productiva.

Bajo este término se entiende la forma en que se organiza la sociedad (o una comunidad) para producir determinados bienes, productos o servicios en un tiempo y precio determinado. Pero, por su alcance el término no se limita únicamente a los procesos estrictamente técnicos o económicos, también tiene la obligación de velar por los procesos e interacciones entre los distintos actores: sociales, políticos, económicos, culturales, entre otros, que utilizan los recursos que tienen a su disposición para llevar adelante las actividades productivas.

El proyecto resultó uno de los retos más ambiciosos de Ecuador, se sostenía la idea de que el cambio de la matriz productiva debía sustentarse en el impulso de los sectores estratégicos a partir del aumento de la responsabilidad del Estado en la planificación y consecución de objetivos del régimen de desarrollo económico, la concertación, y concreción de la equidad social y territorial, tomando como base del aprovechamiento de los conocimientos e iniciativas de los ecuatorianos en la diversificación productiva, el impulso y expansión de productos y de destinos de exportación, en la sustitución de importaciones, y en la mejora continua de la productividad y competitividad (Ecuador. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo, 2013).

Al mismo tiempo el Estado democrático y la construcción del poder popular; auspiciaría la igualdad, la cohesión y la inclusión; objetivos que debían articular con los avances del desarrollo productivo con el social para lograr mejorar la calidad de vida de la población; la construcción de espacios de encuentro común, de seguridad integral, y de respeto a los derechos humanos, como condición para promover la sostenibilidad territorial.

De esta manera se impulsó la implementación de un modelo generación de riquezas basado en el aprovechamiento óptimo de los conocimientos y las capacidades de las y los ecuatorianos (Ecuador. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo, 2013) y supera así la concentración, las tendencias a la exclusión y la dependencia de los recursos naturales. Así durante estos años el seguimiento al cambio de la matriz productiva se ha convertido en un referente obligado del análisis de toda la vida económica, social y política en Ecuador.

De esta manera se impulsó la implementación de un modelo generación de riquezas que superara así la concentración, las tendencias a la exclusión y la dependencia de los recursos naturales.

El punto de partida del cambio es considerar este proyecto como una propuesta que se enfrenta a los modelos neoliberales de desarrollo reinantes en épocas pasadas, los cuales se fundamentaron en dos pilares; el primero, la defensa de la eficacia del mercado como mecanismo de asignación óptima de los recursos, junto con la crítica a la intervención pública en las actividades económicas por cuanto generadoras de distorsiones; la segunda, la insistencia en las ventajas de una participación plena en el comercio internacional, junto con la crítica al modelo de industrialización por sustitución de importaciones, que supone restricciones a las importaciones y un claro sesgo antiexportador.

La importancia de este proyecto ha sido reconocida por su carácter integral y transformador que, pese a los obstáculos internos y el impacto de los cambios a nivel global, logro durante esos años un concretar algunos objetivos y develar los factores que deben ser superados para alcanzar propósitos tan loables.

El análisis de diversas fuentes de gobierno, artículos y el estudio de las teorías que sustentan el cambio e la matriz productiva se presentan como un proyecto alternativo orientado a satisfacer las necesidades humanas -tanto materiales como inmateriales, asegurando al mismo tiempo vías para satisfacer necesidades de expresión, creatividad e igualdad, y condiciones de convivencia, que le permitan a todos los ciudadanos comprender y dominar sus propios destinos.

Así durante estos años el seguimiento al cambio de la matriz productiva se ha convertido en un referente obligado del análisis de toda la vida económica, social y política en Ecuador. Por tanto, volver sobre el tema, es necesario pues la reflexión que supone la confrontación de criterios y los datos que muestran la sinergia del cambio-en sus avances y retrocesos- no demerita su proyecto, más bien, se erige como una condición obligada para los que desde la académica, investigan o promueven la comprensión de las bases económicas en que se funda la situación actual de Ecuador y su proyección futura.

Desde el punto de vista metodológico el rigor de un ejercicio de opinión de este trabajo se sustenta en la referencia a las fuentes consultadas y al conocimiento construido sobre la base de discusiones en las que los autores advierten que aún es preciso dilucidar el alcance del cambio que encierra la proyección de la matriz productiva del Ecuador en la última década, por lo que siempre se animará todo tipo de análisis y reflexión que arroje más información y perspectivas acerca del tema.

Desarrollo

Para comprender mejor las bases del cambio de la matriz productiva es preciso reconocer que la economía ecuatoriana se ha visto marcada por la concentración de materias primas en la estructura de las exportaciones del país, resultara una característica insoslayable del sistema productivo del país.

Según la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (2013), en esta práctica se identifican tres períodos: el primero que va de 1927 a 1963, que muestra un 88% de concentración de exportaciones en productos primarios, compuesta al inicio de este período por casi un 40% el cacao y sus elaborados, y a su término por un 50% el banano, mientras el cacao baja a ser un 15%.

En el segundo período -que comprende entre 1964 y 1990- la concentración de exportaciones baja al 77%, el petróleo toma su protagonismo en la década de los setenta y alcanza picos de hasta el 70%, dejando en segundo plano al resto de productos. Y el tercer período -que va de 1991 al 2011- indica una nueva subida en la concentración al 80%, en la cual el petróleo mantiene su supremacía sobre el resto de productos con un promedio de 45% aproximadamente.

En efecto, durante mucho tiempo la economía en Ecuador se concentró en la explotación de materias primas, con muy bajos niveles de uso de la ciencia y la tecnología, y como consecuencia de ello ha provocado que sea un mercado muy susceptible de ser sustituido en los mercados internacionales. Esta realidad ha colocado al país en una posición muy vulnerable, ello se ha expresado en la estructura de sus exportaciones históricamente. Es en esta dirección que desde la primera década del 2000 se comienzan a dar los primeros pasos en términos de toma de decisiones.

Después del 2006, con la llegada al gobierno de Rafael Correa, se reformula la planificación de la economía a través de los planes de desarrollo primero y de planes del Buen Vivir posteriormente. En ellos se haría evidente las bases de una concepción de desarrollo alternativo que según el relatorio de Uppsala (citado por Hettne, 1990), sostiene ideas claves se asocian a la satisfacción de las necesidades básicas como elemento central del desarrollo alternativo, y añade dimensiones tales como el ecodesarrollo, el endodesarrollo y el desarrollo autónomo.

La contextualización y actualización de este modelo económico permito ajustar la concepción de desarrollo al considerar que las posibilitar a las personas para que puedan satisfacer sus necesidades está en el aumento de su productividad. Por tanto, los mejoras a nivel social debían revertirse en el proceso productivo y a su vez la productividad debía elevar la satisfacción de las necesidades de las personas.

En el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2010 se señalan “tres orientaciones éticas de la planificación emitidas en tres dimensiones: la justicia social y económica, la justicia democrática participativa y la justicia intergeneracional”. El plan concibe salir de la dependencia del petróleo y ello implicaba un cambio en la matriz productiva.

Sin embargo, aspectos claves del proceso se identifican en el informe de Comisión Económica para América Latina (2012), al plantear que la transformación de la matriz productiva supone la utilización de los resultados científico técnicos en los cambios estructurales de los procesos productivos y el aumento e intensidad en el conocimiento , la asimetría tecnológica, la estimulación del crecimiento de la demanda interna y externa así como encontrar una sinergia entre la igual da social y las dinámicas económicas para la transformación productiva.

Así, en febrero 2013, se presentó el proyecto de cambio de la matriz energética y productiva del Ecuador, basada en la idea de promover a una etapa de desarrollo endógeno. De este modo el principal objetivo del cambio de matriz productiva (plasmado en el Plan de Cambio de Matriz Productiva, y delineado en el Plan del Buen Vivir 2009 - 2013) se dirigió a salir del extractivismo, y estableciendo la priorización de: biocombustibles, maricultura, refinería, petroquímica, astilleros, siderúrgica y metalurgia. Estas industrias están vinculadas a la explotación petrolera, minera y de agrocombustibles.

En este sentido, poner en marcha el cambio productivo que llevo a la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo a plantear que existen cuatro ejes importantes a considerar para producir un cambio en la matriz productiva:

  1. La diversificación productiva como impulso al desarrollo de industrias como la petroquímica, siderúrgica, metalúrgica, biocombustibles, forestal y maricultura, con lo cual se amplía el abanico de oferta del país; mejorar los sistemas de valor agregado, y con ello poder diferenciar nuestros productos;

  2. La estimulación de la tecnificación y conocimiento sobre las industrias de biotecnología, servicios ambientales y energías renovables;

  3. La sustitución de importaciones de corto plazo sobre industrias como la farmacéutica, tecnológica y metalmecánica;

  4. La maximización del portafolio de productos de exportación, dando soporte a la economía popular, logrando mayores actores y productos sobre las industrias de alimentos, textiles y turismo.

Se derivó así que el proyecto promovió la orientación de acciones del sector público y el privado hacia el mercado interno y externo, con el reto de modificar la estrutura de las exportaciones, basadas en un mayor valor agregado e introducir de manera intensa las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones.

El desarrollo de este plan buscaba un aumento de capacidad productiva, promover una cultura de conocimiento en los ecuatorianos, buscando que a los productos nacionales se les incluya un valor agregado con el fin de alcanzar una Nación Productiva (Ecuador. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo, 2013).

En este marco la transformación de la matriz productiva y la contribución del gobierno a través de la inversión pública debía garantizar el acceso de nuevos emprendimientos y la diversificación de proveedores locales a través de la implementación de mecanismos y normativas que permitirán por medio de inversiones ampliar de la calidad y el volumen de la oferta.

En este marco, se consideró una exigencia el encadenamiento productivo local; fomentar la inversión privada por los proyectos de inversión pública mediante modelos de gestión y financiamiento. Se trabajó así en la conformación de nuevas industrias y el fortalecimiento de sectores productivos con inclusión económica al aprovechar al máximo la biodiversidad de materias primas que posee el Ecuador.

Pero esta transformación se apoyaría en procesos endógenos desdelos que se el desarrollo de una economía debía llegar a ser sostenible en la media que el uso de los recursos disponible (financieros, naturales, humanos y sobre todo el aprovechamiento del conocimiento científico, tecnológico, las innovaciones) permitirían eleven la eficiencia y la productividad.

Luego, la idea de potenciarla industria nacional, sustituir importaciones y disminuir la vulnerabilidad externa se convirtieron en objetivo principal del Gobierno Nacional en el periodo comprendido entre el 2013 y 2017. Esta posición llevaría a la definición de cambios (Ecuador. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo, 2013).

Para entonces se promovió la diversificación y cambios estructurales hacia nuevas formas de producir el desarrollo económico del Ecuador, pero debía asegurar la concordancia entre la igualdad social y las dinámicas económicas en las que avanzar hacia el desarrollo y la conformación de nuevas industrias, así como la promoción de nuevos sectores con alta productividad, competitividad, sostenibles y sustentables (Ecuador. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo, 2013), serian acciones claves.

Otras de las metas estuvieron asociadas a impulsar la gestión de recursos financieros y no financieros, la contratación pública y promover la inversión privada promoverá la sustitución de importaciones y priorizará la producción nacional diversificada.

En cualquier caso, el énfasis para salir de la dependencia petrolera, se argumentó que la necesidad de conseguir un fuerte crecimiento económico previo, que provea al país de importantes recursos de inversión y que la única manera de poder competir con ventaja en el mercado externo era agregar valor a la producción primaria, e invertir en sectores tecnológicos de vanguardia (Ecuador. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo, 2013).

El nuevo Plan del Buen Vivir en su versión 2013-2017 incluyó en el objetivo 11 la política estratégica de industrializar la minería como eje de la transformación de la matriz productiva, asimismo incluyó a los biocombustibles, al transporte; pero, estas decisiones se contraponen con el cambio de matriz energética porque demandaba el aporte de la industria petroquímica (Ospina, 2013).

En general se identifica que, para superar los problemas del funcionamiento económico y social de las anteriores matrices productivas, el cambio de la matriz productiva sustento una revolución en el pensamiento cuyos supuestos permiten confirmar el alcance del cambio toda vez que en su esencia se promovió la importancia de: producir más, producir mejor y producir cosas nuevas (Ekps, 2014). En este sentido se precisaron ideas básicas como:

  1. El cambio de la matriz productiva debía concebirse como un ejercicio de desarrollo industrial.

    • Esto se fundamenta en como el cambio de la incorporación de tecnología y de valor agregado en la producción es totalmente coherente con los tiempos en que vivimos, en donde la industrialización tiene un aspecto importante en lo que es el talento y capital humano. Por tanto, se concibe como estrategia participar en los mercados internacionales, atrayendo nuevos productos y mayor inversión (Villegas, 2015).

  2. El cambio de la matriz productiva hay que hacerlo en un contexto de articulación con otras dos matrices: la matriz energética y la matriz del conocimiento.

    • Esta posición parte de una relación simple: sin energía, no hay producción, y sin conocimiento, no puede haber innovación. Se explica así que, al tomar en cuenta que en un contexto como el de Ecuador donde la inversión privada es significativa, es importante reconocer que este cambio no es solo una tarea del Gobierno; la inversión privada debe jugar un rol importante, ello lo justifica el hecho de que la innovación sale de los propios empresarios, porque son quienes conocen cómo ganar espacio en el mercados, más sofisticados (Mollina, 2016).

  3. El cambio de la Matriz Productiva no implicaría dejar de exportar productos primarios, sino mejorar la eficiencia y diversificar productos.

    • Así, la declaración de la agenda para la transformación productiva que se diseñó para el periodo 2010-2013 (Ecuador. Ministerio de Coordinación de la Producción, Empleo y Competitividad, 2010) dejaría planteado que desde el enfoque presidencial de Ecuador, se debía ir a la sustitución selectiva de importaciones y cambiar las exportaciones, lo cual podría ser una alternativa para superar el conflicto estructural, evitando los problemas de balanza exterior (Epinoza, 2016).

  4. Asumir una nueva modalidad de intervención estatal que, la diferenciara de décadas anteriores, partiendo de las principales limitaciones para el desarrollo de determinadas áreas de producción, los sectores público y privado arribaran a acuerdos para el uso de instrumentos más idóneos y funcionales para apoyar el desarrollo.

    • Tal consideración implicaría una nueva relación público - privada, donde el Estado no estaría supeditado a las decisiones del sector privado, sino que sigue manteniendo su autonomía como árbitro último de las políticas económicas y con capacidad de decisión por encima de intereses corporativos. Pero esta autonomía se nutre de una red de vinculaciones con agentes económicos y sociales dentro de un marco institucional que permite constantes negociaciones sobre políticas y metas.

  5. La transformación productiva deba desarrollarse a través del conocimiento y el talento humano lo que implicaría desplegar programas de capacitación, relacionado con el cambio de la matriz productiva (Zavala, 2017).

Por un lado, la estrategia nacional para el cambio de la Matriz Productiva priorizó mejorar la producción intensiva mediante la innovación, tecnología y conocimiento, lo cual no solo aumentaría la productividad y la calidad sino tenía el propósito de incrementar el valor agregado con mayor componente ecuatoriano; logrando con esto impulsar la transición del país de una economía basada en el conocimiento.

Pero, para llevar acabo la innovación es preciso impulsar el desarrollo del talento humano como recurso más importante pues la transformación de la matriz productiva, comienza y termina en las personas. El profesionalismo y el nivel técnico de los ecuatorianos, el dominio de las habilidades necesarias en llevar a cabo el proceso de cambio en cada sector, es básico en la concepción del cambio productivo.

De este modo se consideró necesario llevar a cabo iniciativas para ampliar y mejorar la oferta académica en las ciencias, tecnología y educación, así como implementar diversos programas de capacitación según las diferentes áreas de desarrollo económico como una condición para lograr formar mano de obra especializada.

Desde esta perspectiva lograr un desarrollo sostenible para el país mediante el cambio de la matriz productiva no solo se limitó a la forma en cómo se produce y crece económicamente también se trataba de promover el desarrollo social y cultural del país.

De acuerdo con las consideraciones hasta aquí se advierte que el cambio requirió aplicar alternativas que, según Luna Osorio (2013), modificaba la manera de concebir el proceso:

La primera alternativa se apoyaría en la explotación petrolera, una minería en crecimiento, una agricultura industrializada y el mejoramiento de los servicios modernos en la línea de lo necesario para el desarrollo de esos sectores.

La segunda daría prioridad al desarrollo minero, procuraría que la explotación petrolera mantenga niveles adecuados, daría fuerza a la producción industrial derivada de la minería e impulsaría no solo el uso sino la generación de servicios modernos en el país. Jugaría papel importante el turismo receptivo, si cabe el término: “cinco estrellas”.

La tercera opción significaría que el petróleo ha dejado de ser el principal elemento de desarrollo y que la minería y las industrias derivadas han tomado la posta, para expandir la industria siderúrgica, la metalurgia y la metalmecánica, y entrar en líneas de servicios aptas para exportar o al menos dejar de importar.

Todo lo planteado exigía vincularse con la frontera científica, tecnológica y de innovación en el marco en que se deben producir los cambios estructurales que caracterizan los sectores tradicionales promoviendo nuevos productos y servicios con abundante valor agregado con gran intensidad en conocimiento, buscando reducir la brecha tecnológica y redefinir la inserción externa, reduciendo los niveles de desigualdad social, lo que requiere una articulación social de todos los sectorres y organizaciones.

De acuerdo con estas concepciones del cambio de la matriz productiva en Ecuador estuvo determinada por la estructura de los sectores de la producción de bienes y servicios, organizada en función de la importancia que cada sector tiene en el desarrollo nacional, para generar: inversión, producción, empleo, invención, innovación y exportaciones de bienes, servicios y tecnología.

Sin embargo, según datos de 2012 el patrón de especialización primario exportador y extractivista que caracterizó a Ecuador por mucho tiempo se convertiría en el problema más grave de la economía ecuatoriana pues superarlo equivalía a dar un giro total en la estructura del país y sobre todo porque con ello se suscribía la decisión de construir el país del Buen Vivir que se anhela.

Los pasos que hasta 2012 se había dado por el gobierno de la Revolución Ciudadana estuvieron centrados en promover un nuevo orden económico y social, más equitativo e inclusivo, en mejorar los indicadores de formación de capacidades en el marco de la educación y en el uso de tecnologías de conectividad y telecomunicaciones, así como en la infraestructura para la productividad sistémica como carreteras, desarrollo científico, cambio de matriz energética y dotación de bienes y servicios esenciales, eran evidentes (Poveda, 2014).

Por tanto, el cumplimiento de este desafío histórico de convertir al país en generador y exportador de mayor valor agregado a través del aprovechamiento del conocimiento y el talento humano, y la inclusión de nuevos actores sobre la base de una adecuada redistribución y equidad, que asegura el Buen Vivir, necesitaba reforzar las intervenciones de cada institución con el propósito de alcanzar el objetivo común en el menor tiempo posible.

Así, en las elecciones de 2013, el Estado siguió aplicado su política de cambio y se pondrían en prácticas medidas de promoción y control de las actividades y se introdujo la referencia a las Zonas Especiales de Desarrollo (ZEDE); asociadas a la riqueza minera; el desarrollo de la matriz energética; la creación de la ciudad del conocimiento; la inversión extranjera directa sujeta primordialmente al interés estatal; la educación orientada a la concientización del “buen vivir” y de mecanismo gubernamentales para solucionar la controversias del estado con las empresas privadas.

Entre los requisitos para cambiar la matriz productiva se mantendría la idea de estimular el aprovechamiento de la globalización tecnológica, asumir una visión planificadora de largo plazo, ampliar las posibilidades de apertura al mercado mundial, asegurar la estabilidad política y la seguridad jurídica, impulsar la productividad nacional, la inversión extranjera, la efectividad del Estado, la competitividad del sector privado, y el desarrollo de clúster. Pero en ella el comercio exterior podría ser dinamizador si se tiene en cuenta que entre los efectos probables estaría no solo el incremento de las exportaciones, con una menor participación del petróleo; sino el aumento de exportaciones mineras industriales, y de servicios modernos

Otras actividades como e turismo receptivo; el aumento del valor agregado en todos o en la mayoría de los sectores productivos, el incremento de las importaciones, el aumento de la balanza comercial negativa, la innovación permitiría descubrir nuevas propuestas para crear pequeñas empresas que impulsen la economía y la productividad en el país.

No se descartó en este momento la posibilidad de acceder a bienes de capital y otros bienes y servicios importados al considerar que estos constituyen una oportunidad para la organización y la modernización der sus procesos de producción en un marco de inserción competitiva internacional.

Sin dudas, el mayor desafío de este arduo proceso de cambio estuvo asociado a la sustitución de importaciones. El gobierno promovió negociaciones con diferentes empresas para generar el compromiso de frenar o reducir las importaciones y apostar por la exportación de productos con sello ecuatoriano; pero, en realidad los obstáculos de la tramitación y la necesidad de construir, una relación de cercanía y de confianza, resultó ser una limitante que pese a los avances que pudieran citarse no se pudo evitar las afectaciones (Poveda, 2014).

De manera general, se reconoce que la implementación de la política económica de seguimiento y fortalecimiento de los ejes estratégicos de la matriz productiva ecuatoriana en esta década, permitió que se lograra obtener un crecimiento estable en la producción nacional, entre las que se destaca: el aumento de las exportaciones no petroleras; el incremento productivo y de firmas del sector manufacturero, la inversión en el país y el sector de industrias (Valencia Prado, 2015).

A pesar de los buenos resultados alcanzados en estas áreas, en los últimos años los avances en los temas de transformación productiva han sido menos significativos. El análisis presentado por Calderón & Stumpo, (2016), a la Comisión Económica para América Latina, deja ver los problemas que se deben asumir como desafíos.

Las observaciones al cumplimento de la estrategia nacional de cambio de la matriz productiva advierten que los objetivos y metas han sido ambiciosos y poco realistas, fragilidad, y alta rotación de las autoridades y del personal técnico, la escasa coordinación y articulación interinstitucional, y las fallas en el diálogo entre el sector público y -privado limitando la posibilidad de alcanzar los resultados previstos (Palacio, 2016).

Los desafíos entonces suscriben la necesidad de ajustes a la estrategia nacional y de aprovechar las oportunidades que ofrecen las tendencias económicas globales. En este es preciso repensar las vías de estimulación del desarrollo del sector productivo y potenciar las instancias de coordinación del sector público, y privado sobre todo apostar por el impulso de la inversión privada.

Se debe mantener como prioridad el aprovechamiento de las ventajas que ofrece la economía digital y consolidar la intervención en cadenas productivas; además, es preciso mantener los incentivos para utilizar la investigación en el desarrollo de clusters productivos.

Pero con sus pro y sus contra, la implementación de los cambios en la matriz productiva del Ecuador devela la complejidad proceso, en tanto, la articulación de todo el sistema, no solo una serie de lineamientos estructurales y la concreción de medidas o incentivos económicos por el gobierno; también hay que tener en cuenta la forma en que se mueve el mundo y el impacto que puede tener la liberalización del comercio; el desarrollo de las comunicaciones y el transporte, la presión de las grandes empresas mundiales por estar en capacidad de utilizar los recursos naturales, serán solo algunos de los factores a tener en cuenta para asegurar la continuidad de este proceso.

Al mismo tiempo de consideró que el núcleo del cambio de la matriz productiva se relaciona también con el cambio de mentalidad nacional para asegurar el emprendimiento, elevación de las cifras del turismo receptivo; el aumento del valor agregado en todos o en la mayoría de los sectores productivos, el encadenamiento de las empresas el incremento de las importaciones y el desarrollo del comercio exterior, entre otro. Pero en cualquier caso, se precisa apostar por una educación de calidad y dentro de ella, la formación de profesionales capaces de utilizar la investigación científica y técnica, para asumir el liderazgo, en los destinos de la nación.

Conclusiones

Transformar el patrón de la economía para impulsar el desarrollo integral de Ecuador, constituye aun hoy una necesidad y un derecho inalienable de todos los ciudadanos. La Estrategia de cambio e la matriz productiva y la creación de las herramientas del políticas y administrativas que generó este proyecto se orientaron a este fin toda vez que promovió un nuevo esquema de generación, distribución y redistribución de la riqueza, incorporó a los actores que históricamente habían sido excluidos y concreto acciones orientadas a reducir la inequidad territorial y la vulnerabilidad de la economía ecuatoriana.

Al mismo tiempo la transformación de la matriz productiva otorgó un lugar especial a la diversificación productiva con un mayor valor agregado, no solo ecológico sino también en el conocimiento y la biodiversidad.

Sin dudas en estos años se generaron riquezas se amplió la participación y se concretaron acciones que ampliaron la participación de los ciudadanos en el desarrollo del país, en la construcción de una sociedad inclusiva, tal como refrendó la constitución, el Plan nacional del Buen vivir y otros programas que consolidan la idea del desarrollo armónico.

Sin embargo, la complejidad del proceso y los resultados alcanzados en la etapa que se estudia advierten que, en la concreción de metas tan altas, es preciso que las instituciones del Estado coordinen y concentren todos sus esfuerzos en el mismo objetivo pues esta ha sido una de las causas del limitado éxito de las políticas de desarrollo implementadas.

Hay que seguir trabajando en la armonización de la empresa privada y pública, en la calidad de la educación y en el óptimo uso de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en las diferentes áreas de producción, servicio de manera que facilite el desarrollo de clusters productivos, la mecatrónica, la nanotecnología.

Se precisa facilitar la creación de empresas y empleos formales, e instituciones y políticas públicas que apoyen el desarrollo de productos y servicios locales de primera calidad que permita la participación de Ecuador en los procesos de integración contemporáneos de América Latina y de otras regiones del mundo.

Aun es necesario seguir trabajando en la diversificación de las exportaciones, la búsqueda de grandes mercados, estimular la inversión extranjera sin promover la descapitalización, y sortear las barreras que impiden la aplicación estable de acciones para conseguir resultados a corto, mediano y largo plazo.

En una estrategia de transformación de la matriz productiva debería repensarse que esta sea conducida desde lo económico a generar impactos positivos: entrada de divisas, generación de empleos, mejoramiento de la infraestructura, estímulo a la actividad empresarial, dinámica económica regional. Evitando el incremento de las importaciones, distorsiones en el mercado laboral, limitaciones en la inversión pública, insuficiente infraestructura de servicios públicos, insuficiente vivienda, inflación, alta especulación sobre las tierras y bienes inmobiliarios.

Referencias bibliográficas

Comisión Económica para América Latina y el Caribe. (2012). Transformación productiva con Equidad. Santiago de Chile: CEPAL. [ Links ]

Ecuador. Ministerio de Coordinación de la Producción, Empleo y Competitividad. (2010). Agenda para la transformación productiva. Por un Ecuador positivo, inclusivo y en potencia. Consejo Sectorial de la producción, 2010-2013. Quito: Ministerio de Coordinación de la Producción, Empleo y Competitividad. [ Links ]

Ecuador. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo. (2013). Plan Nacional para el Buen Vivir. Quito: SENPLADES. [ Links ]

Luna Osorio, L. (2013). El cambio de la matriz productiva del Ecuador y su efecto en el comercio exterior. Recuperado de http://solocquenadacbyllunao.blogspot.com/2013/04/el-cambio-de-la-matriz-productiva-del.htmlLinks ]

Ospina, P. (2013). Ecuador: el nuevo período de gobierno y el cambio de matriz productiva. Análisis de Coyuntura. Recuperado de http://www.cepecuador.org/images/PDFs/coyuntura_julio_2013.pdfLinks ]

Recibido: 03 de Mayo de 2019; Aprobado: 18 de Julio de 2019

*Autor para correspondencia. E-mail: natacha.diaz@uleam.edu.ec

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