Introducción
La innovación ha sido tradicionalmente apreciada según Ahn et al., (2019); Geibler et al., (2019) y Blume (2020) como algo que ocurre dentro de una organización. El incremento de la disponibilidad y movilidad de los denominados “trabajadores del conocimiento”, el auge de Internet y el amplio universo de posibles proveedores externos en la actualidad, han socavado la efectividad del sistema de innovación tradicional según Chesbrough (2017), surgiendo un nuevo conceptoque necesariamente sigue el modelo de Innovación Abierta. Asimismo, en décadas más recientes, las definiciones o los conceptos han enfatizado el carácter sistémico de la innovación y superan la vieja visión sobre la misma, que la aprecia como una actividad especializada que depende directamente de la cantidad de recursos utilizados en la ciencia subvencionada por los gobiernos y en los laboratorios de investigación y desarrollo (I+D) de las empresas.
También se aprecia la innovación como una idea transformada en algo vendido o utilizado según OECD/Eurostat (2018); como una actividad cuyo resultado es obtener nuevos productos y procesos, o mejoras sustancialmente significativas de los ya existentes, o un cambio en los métodos de trabajo, en el uso de los factores de producción y en sus tipos de procesos para mejorar la productividad y/o sus rendimientos comerciales.
Dado lo expuesto, resulta complicado definir de manera absoluta la capacidad tecnológica, pues el concepto considera diversos aspectos, según de León García (2021), por lo que su medición implica un alto grado de complejidad. Asimismo, Dutrénit (2003) se refiere a ellas, como el conjunto de habilidades que se dispone para usar eficientemente el conocimiento tecnológico adquirido, para asimilar, utilizar, adaptar y cambiar tecnologías existentes, así como la habilidad para crear nuevas tecnologías y desarrollar productos y procesos. O sea, la capacidad tecnológica se define como la habilidad de utilizar efectivamente el conocimiento tecnológico en producción, ingeniería e innovación, que contribuye a la creación de nuevas tecnologías y a la generación de nuevos productos y procesos en respuesta al ambiente económico cambiante (Vargas et al., 2020; Castrillón-Muñoz et al., 2020; Santos Matos et al., 2020; Barbosa et al., 2020).
También, García Muiñas & Navas López (2007), Carpio-Gallegos &Miralles, (2018) y De la Hoz-Dominguez, et al.,(2021) la conceptualizan, como toda facultad intensiva en conocimiento para movilizar conjuntamente distintos recursos científicos y técnicos, acumulados a través de un conjunto de rutinas y procedimientos, que permite desarrollar innovaciones tecnológicas en procesos y/o productos, al servicio de la implementación de estrategias competitivas responsables de la creación de valor ante ciertas condiciones del entorno (Hernández Chavarría, 2017)
Por otra parte, los sectores intensivos en conocimiento de alta tecnología, tienen la característica de combinar, tanto la intensidad de conocimiento como la intensidad tecnológica, y son considerados sectores clave para el desarrollo de la denominada sociedad del conocimiento.
La intensidad tecnológica ha sido abordada desde diferentes perspectivas: la intensidad de I+D entre países de acuerdo a Brigante (2018) y en empresas de acuerdo con Kim, (2002);Gouvêa Almeida etal., (2020) y García-Contreras, et al., (2021) la intensidad tecnológica entre países y en empresas, así como la intensidad innovadora en empresas (de León García, 2021).
Con el análisis anterior y a partir del propósito del presente artículo, se asume el concepto emitido por Brigante (2018), que aborda la intensidad tecnológica como contribución de las actividades tecnológicamente intensivas al incremento de la productividad laboral del sector industrial en 28 países (de varios continentes). Se logran separar 150 clases industriales en cuatro grupos en función de su contenido en tecnología (Alta, Media Alta, Media Baja y Baja) y encontró que los sectores de baja intensidad tecnológica también tienen una alta contribución en la productividad del trabajo y eficiencia sectorial.
Por otro lado, el concepto de Empresas de Grado Significativo de Intensidad Tecnológica (EGSIT) es propuesto por de León García et al., (2021) y se enuncia como aquella que tiene una estrategia empresarial con bases en la gestión del conocimiento, la transferencia de tecnologías y el desarrollo tecnológico para lograr nuevos y mejorados productos, procesos y servicios que parten del apoyo de la actividad de investigación y de la vinculación del capital humano a proyectos de innovación que agreguen valor con eficiencia y calidad a la actividad comercializadora generada en el ámbito nacional e internacional para el bienestar social y ambiental.
La Empresa de Investigaciones, Proyectos e Ingeniería de Matanzas (EIPI) con 21 años de creación ha trabajado en la mejora continua de su sistema de dirección y en sus recursos tecnológicos. En el presente estudio se pretende mostrar los resultados de la determinacióndel Grado de Intensidad Tecnológica (GrIT) en la Empresa de Investigaciones, Proyectos e Ingeniería de Matanzas (EIPI).
Materiales y métodos
Para el cálculo se empleó la tecnología para la evaluación, clasificación y mejora del Grado de Intensidad tecnológica en empresas cubanas propuesta por de León García (2021).
Se persigue como objetivo fundamental calcular el Grado de Intensidad Tecnológica (GrIT) de la empresa como una función combinada de la Capacidad Tecnológica Empresarial (CT emp) y el Índice de intensidad tecnológica empresarial (IIT), ver ecuación 1.
Índice de Capacidad Tecnológica Empresarial (CTemp)
El índice de CT emp se determina mediante el Procedimiento específico para el cálculo y la mejora de la capacidad tecnológi ca en organizaciones empresariales propuesto por de León García (2021), este se sustenta en tres etapas y ocho pasos, ver figura 1. El cálculo de la capacidad tecnológica se centra en factores que son definidos a partir de cinco dimensiones:
Dimensión de investigación, desarrollo, innovación (I+D+i) y el aprendizaje tecnológico, se vincula con el factor de capacidad tecnológica para la investigación y desarrollo (I+D) y el aprendizaje tecnológico.
Dimensión de dirección estratégica de la innovación, se vincula con el factor de capacidad tecnológica de dirección estratégica de la innovación.
Dimensión de mercado, se vincula con el factor de capacidad tecnológica de mercado.
Dimensión de producción, se vincula con el factor de capacidad tecnológica para la producción.
Dimensión de gestión de los recursos financieros, se vincula con el factor de capacidad tecnológica de gestión de los recursos financieros.
Índice de intensidad tecnológica empresarial (IIT)
El índice de intensidad tecnológica (IIT) está relacionado con seis indicadores de intensidad tecnológicas Tabla 1.
El IIT se cuantifica como se observa en la ecuación 8.
Pri es el significado (ponderación) en IIT de cada una de las intensidades relativas, esta magnitud se calcula para el caso no ponderado como:
El grado deintensidad tecnológica empresarial se determina como el producto de la intensidad tecnológica y la capacidad tecnológica, como se muestra en la ecuación 10.
En la fig 2 se presentan los tipos de grados de intensidad tecnológica según el valor obtenido de GrIT.
Según el grado de intensidad tecnológica empresarial la empresa puede clasificarse en tres tipos.
Una empresa de grado I es clasificada como Empresa Tecnológica
Una empresa de grado II es clasificada como Empresa en Consolidación Tecnológica
Una empresa de grado III es clasificada como Empresa de Baja Tecnología.
Las empresas de grado I y II son consideradas Empresas de Grado Significativo de Intensidad Tecnológica (EGSIT), esto es, si se atiende a las posibilidades y capacidades que poseen para el desempeño de actividades tecnológicas y de innovación.
Resultados y discusión
La aplicacióndelProcedimiento específico para el cálculo y la mejora de la capacidad tecnológi ca en organizaciones empresariales, arrojó que en el año 2020 para la EIPI un CT emp de 0.58. En la tabla 2 se muestran los valores de los 17 indicadoresI X y de las 49 variablesI XY de capacidad tecnológica asociadas a los cinco factores FCT. Las variables débiles se resaltan en rojo.
El índice y los indicadores de intensidad tecnológica empresarial y sus resultados en la EIPI se exponen en la tabla 3.
La fig 3 muestra el valor de GrIT. El valor del Grado de Intensidad Tecnológica Empresarial (GrIT) se obtiene por la ecuación 10, el valor para estas condiciones es de 0.39.
En la fig 4 se muestra un análisis de tendencia futura (2030) supuesta-deseada, en el cual se le recomendó a la empresa basar su estrategia de mejora del GrIT.
Se observa que en 2020 el índice de capacidad tecnológica es de 0.58. Esto ubica a la EIPI en la categoría de Empresa con Capacidad Tecnológica Regular. Las variables débiles fueron 21 vinculadas a 13 indicadores que representaron el 42.8 % del total de variables. Los factores de capacidad tecnológica más débiles al cierre de la tercera evaluación (2020) son: Factor de capacidad de I+D y aprendizaje tecnológico FCTi= 2,06 (51.5%), Factor capacidad de mercado FCTm = 2,06 (51.6%) y el Factor de capacidad de gestión de los recursos financieros FCTrf = 0,7 (25.63%).
Los indicadores de capacidad tecnológica en los cuales el equipo de la EIPI trabajó en la mejora y además fueron jerarquizados son: I16, I5, I11, I1, I15, I4, I6, I8e I12. La mejora del índice de capacidad tecnológica de la organización presenta como prioridades, estas son: i) aumento de los niveles de crecimiento en la gestión de recursos financieros, ii) el fomento de una estrategia de innovación encaminada a fortalecer la dirección estratégica de esta actividad en la organización, iii) y la optimización de los recursos de mercadeo y ventas para fortalecer la capacidad tecnológica de mercado.
En la EIPI al cierre de la evaluación de 2020 quedaron identificadas las oportunidades latentes de mejora a partir de lo mostrado anteriormente en la tabla 3, donde se observan diez indicadores aun calificados de bajos y sus mejoras no fueron significativas en el período estudiado.
El valor del índice de Intensidad Tecnológica ITT es de 0.67. El indicador que influyó en este valor es Ir4, referido a productividad relativa. Por las características y la capacidad tecnológica de la EIPI, es poco probable que, en un corto plazo, se lleguen a armonizar los indicadores de intensidad tecnológica con los de EAT.
El valor de GrIT para estas condiciones es de 0.39, ubicado como Medio-Bajo, lo que resultó de Grado II, o sea, como Empresa en Consolidación Tecnológica. Con este valor se pudo clasificar a la EIPI como Empresa de Grado Significativo de Intensidad Tecnológica.
Se observa que la empresa puede desplegar un programa de mejora para alcanzar un aumento en 2022 de la Capacidad Tecnológica CTemp hasta un 88% y del GrIT hasta clasificarlo como medio, y en 2025 puede lograr la clasificación de medio-alto. Se observa demás, que en 2027 se pudiera conseguir un cambio de clasificación del GrIT de grado II a I y, en este sentidoalcanzar una evaluación de alto grado de intensidad tecnológica. En el resto de los años es posible lograr la mejora o estabilización del índice GrIT en dependencia, en gran medida, de la capacidad tecnológica empresarial.
El análisis de la regresión lineal de la serie CTemp; IIT y GrIT desde 2018 hasta 2030, muestra un valor de R de 0.78, lo que resulta favorable y nuestra que la variable independiente CTemp explica correctamente en un 78% el comportamiento de GrIT. En el caso de los valores de IIT se obtiene en el ANOVA un P-Valor de 0.766, lo que sugiere la posibilidad de excluirlo del análisis, pues su intervalo de confianza es menor de 95 %.
Conclusiones
En el estudio se pudo concluir que el índice de capacidad tecnológica en 2020 para la Empresa de Investigaciones, Proyectos e Ingeniería de Matanzas es regular así mismo, se identificaron las prioridades para la mejora, las cuales están en el aumento de los niveles de crecimiento en la gestión de recursos financieros, el fomento de una estrategia de innovación encaminada a fortalecer la dirección estratégica de esta actividad en la organización, y la optimización de los recursos de mercadeo y ventas para fortalecer la capacidad tecnológica de mercado. Por otro lado, el índice de Intensidad Tecnológica es de 0.67, el indicador que influyó en este valor es el referido a productividad relativa en el período. Por las características y la capacidad tecnológica de la EIPI, es poco probable que, en un corto plazo, se lleguen a armonizar los indicadores de intensidad tecnológica con los de las Empresas de Alta Tecnología. El valor del Grado de Intensidad Tecnológica para estas condiciones de capacidad e intensidad ubica a la organización en un rango Medio-Bajo, o sea, como Empresa en Consolidación Tecnológica. Con este valor se pudo clasificar a la EIPI como Empresa de Grado Significativo de Intensidad Tecnológica.