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INTRODUCCIÓN
El desarrollo de iniciativas socioculturales comunitarias dirigidas al mejoramiento de la calidad de vida de las personas constituye, para países como Cuba, una práctica de carácter transformador y de indiscutible alcance social. Entre la amplia gama de instituciones y entidades que mayor incidencia tienen en el desarrollo sociocultural a nivel local se destacan los llamados «proyectos comunitarios».
Valorados como iniciativas socioculturales sin ánimo de lucro, de carácter participativo e inclusivo, los proyectos comunitarios aúnan actores sociales de diversas procedencias (profesionales, artísticas, generacionales y sociales), con la intención de dar respuesta a problemáticas concretas de la localidad, a partir de medios y recursos propios, puestos en función del beneficio social colectivo.
Desde el punto de vista metodológico, los proyectos comunitarios en Cuba han contado, desde su surgimiento en la década de los años noventa, con el acompañamiento de importantes entidades culturales, entre las que se destacan el Centro de Intercambio y Referencia Iniciativa Comunitaria (CIERIC) y las Casas de Cultura, las cuales acumulan una vasta experiencia en el trabajo comunitario y una concepción renovadora para la gestión de estas iniciativas. De igual forma, muchos se apoyan en alianzas estratégicas con otros proyectos análogos y con instituciones culturales de la comunidad interesadas en participar en la solución a los problemas y en el mejoramiento de la vida espiritual de sus miembros. Tal es el caso de “CREARTE: Crecer con las Artes”, nacido en la Universidad “Hermanos Saíz Montes de Oca”, que desde 2014 se convirtió en proyecto comunitario, en aras de contribuir al desarrollo de los valores éticos y estéticos de niños, niñas y jóvenes de Pinar del Río.
Precisamente, el presente trabajo versa sobre esta iniciativa comunitaria, su concepción educativa y sociocultural, su lógica de intervención y los principales resultados obtenidos en los últimos cinco años; en específico, se valora su impacto durante los meses en los que el mundo, incluida Cuba, ha estado estremecido por la pandemia de COVID-19.
MÉTODOS
Para llevar a cabo el estudio se tomaron en cuenta los referentes teóricos relacionados con el concepto «evaluación de impacto», definido como el proceso de análisis y valoración de los cambios y trasformaciones operados en el transcurso del desarrollo de un proyecto social, donde se valoraron sus efectos (positivos o negativos), tanto los que aparecen contemplados como resultados esperados como aquellos no planificados (Ander-Egg, 1981; Pichardo, 1989; Castro & Chaves, 1994; Vaklay, 2004; Pacheco, 2009; González, 2010; Bugallo, 2016; Cabrera, Choe & Montes de Oca, 2018). Lo anterior puede asumirse desde la perspectiva de un sistema de dimensiones e indicadores básicos de carácter integrador (Tabla 1).
Tabla 1 Dimensiones e indicadores definidos para el estudio de evaluación del impacto sociocultural y educativo del Proyecto “CREARTE: Crecer con las Artes”
Para constatar los impactos de CREARTE, se seleccionó una muestra representativa de los beneficiarios directos del proyecto: niñas, niños y jóvenes participantes en los talleres; así como sus coordinadores y gestores, funcionarios y directivos de las instituciones culturales de la provincia, y miembros de la comunidad, incluidos familiares de los talleristas: todos beneficiarios indirectos de la iniciativa. Entre los métodos científicos utilizados se emplearon la encuesta, la entrevista, la observación participativa y el análisis de documentos. También se empleó la estadística descriptiva para el tratamiento y procesamiento de los datos, y la lógica inferencial para el establecimiento de regularidades y tendencias, a partir de la interpretación de la información constatada. La amplitud de la muestra respondió a la disposición positiva y voluntaria de los entrevistados y encuestados en colaborar con la investigación.
La evaluación del impacto sociocultural y educativo de CREARTE abarcó las cuatro etapas siguientes:
realización del análisis conceptual del objeto de estudio de la investigación;
caracterización del objeto de investigación y constatación del problema científico de investigación;
determinación de los aspectos metodológicos a tener en cuenta y diseño de un sistema de variables, dimensiones e indicadores para la evaluación de impacto sociocultural y educativo;
diseño y aplicación de los instrumentos: procesamiento, análisis y valoración de la información obtenida a partir de la aplicación de los instrumentos.
DESARROLLO
“CREARTE: Crecer con las Artes” surgió en noviembre de 2012 como proyecto extensionista de la Universidad de Pinar del Río (UPR), con el objetivo de vincular a los estudiantes de la carrera de Estudios Socioculturales a la práctica comunitaria, tomando en cuenta proyectos de referencia nacional como “El Patio de Pelegrín”, “Con amor y esperanza”, “Laud y Guayabera” (hoy Casa de la Décima “Celestino García”) y “Los Chapuserios”; todos de la misma provincia. Entre sus acciones educativas más importantes destacaron el desarrollo del movimiento de artistas aficionados de la UPR; la revitalización de las Verbenas de San Rosendo (principal fiesta tradicional de Pinar del Río); la celebración de festivales de tradiciones culinarias, mediodías culturales y galas artísticas; y la consolidación de la Galería “Nexos” como espacio de integración de la comunidad universitaria con los artistas plásticos de la provincia. Por su parte, el Taller de Dibujo “Ilustrando Sueños”, promovido por CREARTE y coordinado inicialmente por los propios estudiantes de Estudios Socioculturales, con el acompañamiento de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), a través del escritor y artista plástico Néstor Montes de Oca, se convirtió en un espacio de creación infantil que, poco a poco, fue multiplicando su impacto social y educativo más allá de los muros de esta casa de altos estudios.
Luego de establecer su sede en el Centro de Promoción y Desarrollo de la Literatura “Hermanos Loynaz”, en septiembre de 2014, y haber consolidado sus alianzas y sinergias de trabajo con instituciones culturales y actores sociales del territorio, entre las que sobresalieron la Casa de Cultura “Pedro Junco” y la Escuela Primaria “Conrado Benítez”, CREARTE comenzó a transformarse en proyecto sociocultural comunitario, lo que posibilitó extender un amplio movimiento artístico por la reanimación cultural de la principal plaza del caso histórico de Pinar del Río: el Parque de Independencia.
El movimiento generado por CREARTE en este período abarcó un programa de actividades que incluía la participación de los niños y las niñas del Taller “Ilustrando sueños” en “Tizas sobre el asfalto”, un espacio animado por el propio Néstor Montes de Oca con su disfraz de payaso, Comebolas, en el que combinaba las artes plásticas con la lectura de fragmentos literarios, la música y el baile, y llenaba de colorido y alegría las mañanas de cada fin de semana. Por su parte, en las noches de sábado, el proyecto promovía galas artísticas en el espacio de la plaza con la música de preferencia entre los jóvenes, que acudían de todas partes de la ciudad. El 20 de enero de 2016 CREARTE obtuvo el reconocimiento legal por parte del Gobierno Municipal de Pinar del Río como Proyecto Sociocultural Comunitario. Ese mismo año fue declarado Proyecto Artístico por la UNEAC en la provincia; y, un año más tarde, Grupo de Creación Infantil por el Centro Nacional de Casas de Cultura.
A partir de su nuevo perfil, se propuso contribuir a la formación de valores éticos y estéticos a través del desarrollo de las habilidades artístico-creativas de los niños, las niñas y los adolescentes de la comunidad de Pinar del Río. Para ello se reestructuraron paulatinamente tres espacios de creación artística: el Taller de Dibujo “Ilustrando Sueños”, el Taller de Grabado “Pekegrafía” y las Escuelas de Verano, que abarcan talleres de literatura, danza, música, artes plásticas, teatro, periodismo cultural, realización audiovisual, fotografía, cerámica, aplicaciones tecnológicas avanzadas, práctica comunicativa de lenguas extranjeras, cocina tradicional y manualidades (Figuras 1 y 2).
Figura 2 Imágenes de los talleres de creación infantil “Pekegrafía” e “Ilustrando sueños” de CREARTE.
Desde el punto de vista metodológico, CREARTE se basa en una concepción educativa-sociocultural, que integra el enfoque para la gestión de proyectos del Centro de Intercambio y Referencia Iniciativa Comunitaria (Juliá, González y Fabelo, 2006; y Juliá, 2016), con las orientaciones emitidas por el Consejo Nacional de Casas de Cultura (2010), bajo el asesoramiento particular del Colectivo Técnico de la Casa de Cultura “Pedro Junco” y el CIERIC-UNEAC de Pinar del Río.
Contrario a la visión centralizada y asistencial, verticalista y competitiva, CREARTE es coordinado por un Grupo Gestor integrado por pedagogos y artistas (con formación didáctica como instructores), representantes de las familias de los talleristas y de la comunidad. Este grupo tiene la responsabilidad de coordinar las acciones del proyecto y crear las condiciones necesarias para lograr los objetivos propuestos para potenciar un clima psicosocial y pedagógico que favorezca el carácter participativo, respetuoso, inclusivo, creativo y desarrollador, la toma colectiva de decisiones y la articulación con los diferentes actores sociales en defensa de los intereses de la comunidad. Para ello, asumen como preceptos de su estilo de funcionamiento los siguientes:
Uso apropiado de los recursos materiales y humanos del proyecto.
Coordinación colectiva y toma de decisiones participativa.
Superación metodológica permanente de los gestores e instructores.
Búsqueda de oportunidades para fomentar la capacidad creadora de los talleristas (participación en exposiciones, galas culturales, concursos y festivales).
Estabilidad en la asistencia y el desempeño de los talleristas y el instructor de arte.
Desde el punto de vista estratégico, CREARTE abarca tres líneas básicas devenidas dimensiones o ejes transversales: la educativa, la artística y la sociocultural, concretadas a través de un sistema de acciones que contempla:
El desarrollo de talleres artísticos.
La participación en eventos socioculturales comunitarios.
La reanimación sociocultural de espacios públicos de la ciudad.
La integración y articulación con otros proyectos comunitarios e instituciones culturales.
En su proyección social CREARTE destaca por sus fuertes alianzas y sinergias de trabajo con los actores sociales del territorio, entre ellos, los representantes de las diferentes circunscripciones de los Consejos Populares “Hermanos Barcón” y “Cuba Libre”, la Casa de Cultura “Pedro Junco”, la Dirección Municipal y Provincial de Cultura, la oficina del CIERIC-UNEAC, el Centro Provincial del Libro y la Literatura, y la Dirección Municipal de Educación, entre otros.
CREARTE constituye también un espacio educativo dirigido a la formación integral de sus beneficiarios. Desde el punto de vista pedagógico-didáctico, se estructura en talleres de apreciación y creación artística, como forma de organización práctica y creadora del proceso de aprendizaje, a través de los cuales «se construyen conocimientos» y se desarrollan capacidades y habilidades; y se fortalecen y crean valores de solidaridad, altruismo, justicia y amor, donde ha de prevalecer un clima abierto, de confianza y libertad, que estimula la realización individual y colectiva de los participantes.
Desde lo artístico-educativo, a través de sus talleres artísticos, el proyecto promueve conocimientos y habilidades de vital importancia para el crecimiento cognitivo y socio-afectivo de los niños, las niñas y los adolescentes participantes, con énfasis en su preparación para la vida; todo ello en función de aprendizajes básicos que potencien el desarrollo integral de su personalidad.
La intencionalidad tanto de los talleres permanentes (“Ilustrando Sueños” y “Pekegrafía”) como de los talleres de las Escuelas de Verano se distinguen en su concepción y funcionamiento por constituir espacios de realización y enriquecimiento espiritual, a través de los cuales cada instructor se esmera por promover en los talleristas la apreciación y creación artística, la imaginación, la creatividad y, sobre todo, los valores humanos de respeto a la diversidad, la cooperatividad y la responsabilidad. Todos los talleres parten de un programa elaborado de antemano, lo que asegura la organización didáctica previa de los contenidos a tratar de acuerdo con los intereses y las necesidades de los participantes, los objetivos propuestos, los métodos y la evaluación.
En cuanto a los contenidos, estos son seleccionados y organizados de manera que estimulen la imaginación, la espontaneidad y la fantasía de los talleristas en su relación con el mundo que les rodea, para que así puedan percibirlo en toda su riqueza, diversidad y complejidad. Por otra parte, cada instructor se preocupa por organizar y graduar los aspectos técnico-formales, según las posibilidades individuales del grupo y las edades de los niños y adolescente, siempre apoyándolos con la observación, de modo que constituyan sugerencias o recomendaciones para la acción creadora, sin olvidar la importancia de la exploración y experimentación personal. Lo más importante en el desarrollo de cada taller es el proceso traducido al resultado artístico creativo que se pueda lograr, el cual el instructor puede llegar a promover a través de concursos, exposiciones y otros eventos.
En el caso particular de los talleres “Ilustrando Sueños” y Pekegrafia”, estos se sustentan en una visión pedagógica humanista y martiana, según la cual la literatura se utiliza como agente motivador y soporte para las artes plásticas y la educación artística. La lectura de poemas y cuentos infantiles de autores cubanos e internacionales en cada encuentro incentiva y promueve el carácter vivencial del aprendizaje y la convivencia en el espacio de CREARTE, la imaginación, la fantasía, y el desarrollo en los talleristas de habilidades de apreciación y creación artística.
Evaluación del impacto sociocultural y educativo de CREARTE
La información obtenida a partir de la aplicación de los diferentes instrumentos se procesó de acuerdo con las variables, las dimensiones y los indicadores definidos previamente.
Impacto en los beneficiarios directos
Al procesar los datos obtenidos a partir de las encuestas, las entrevistas y la observación realizada según las dimensiones y los indicadores establecidos metodológicamente, quedó constatado el impacto que para los niños, las niñas y los adolescentes ha tenido la experiencia de participar en los talleres de CREARTE. Así, por ejemplo, desde el punto de vista cognitivo, se pudo evidenciar la repercusión que el proyecto ha tenido en sus aprendizajes en la adquisición de conocimientos asociados al lenguaje propio de las artes, el desarrollo de la imaginación, la espontaneidad y la fantasía en relación con el mundo que los rodea, así como de habilidades creativas: comprensión y apreciación de las artes, observación y reflexión crítica, originalidad y destrezas manuales.
En este sentido, los niños y las niñas encuestados reconocieron en CREARTE un espacio eminentemente educativo de apreciación y creación artística, de enriquecimiento cognitivo y espiritual a través del cual adquieren no solo conocimientos, sino también desarrollan habilidades y su talento, su gusto artístico, su motivación y sentido de responsabilidad colectiva e identidad, valores de solidaridad, altruismo, justicia y amor, donde prevalece un clima abierto, de confianza y libertad, que estimula la realización individual y colectiva de los participantes. En cuanto al desarrollo volitivo de la personalidad, los talleristas también apuntaron que el proyecto les ha provocado emociones positivas con respecto a sus actitudes hacia el trabajo propio y el de los demás, al sentido de pertenencia con el proyecto, los niveles de afectividad y la comprensión mutua.
Impacto en gestores, instructores y promotores
Además de resultar una experiencia positiva y fructífera para los niños y las niñas de la comunidad, CREARTE ha tenido un impacto importante en la visión de los propios gestores del proyecto, y los instructores de arte que imparten y coordinan los talleres. Para ellos, la experiencia de trabajo con los infantes y sus familias ha significado una oportunidad de desarrollo profesional, que además de haberles exigido vocación comunitaria, ha puesto a prueba sus capacidades de gestión como líderes. En opinión de los instructores entrevistados, el proyecto ha exigido de ellos capacidades pedagógicas y didácticas que les permitan ajustar los contenidos de cada sesión a la diversidad de intereses, edades, conocimientos y habilidades de los talleristas asistentes.
Como factor importante para su buen desempeño profesional, señalan las oportunidades que CREARTE les ha brindado en términos de superación, entre las que se destacan el permanente acompañamiento ofrecido por los metodólogos del Centro Provincial de Cultura Comunitaria, la Casa de Cultura “Pedro Junco”, el Centro Provincial de Superación para la Cultura y la continua interacción con representantes del CIERIC-UNEAC en Pinar del Río. Por otra parte, atribuyen sus altos niveles de compromiso con el proyecto, los niños y las niñas participantes, sus familias y la comunidad, al clima de respeto y empatía que prima en cada espacio entre los propios miembros del Grupo Gestor, entre estos y los propios instructores; al carácter siempre colectivo de las decisiones; así como a las sinergias de trabajo desarrolladas con los diferentes actores sociales de la comunidad.
La profesionalidad y el compromiso adquiridos por los instructores y gestores del proyecto fueron ampliamente reconocidos en las encuestas y entrevistas como uno de los principales factores que han asegurado el alto nivel de convocatoria alcanzado por CREARTE, sus resultados, su sostenibilidad como proyecto de creación artística y el alto grado de satisfacción de los participantes. Asimismo, reconocen que, a través de los talleres como forma de organización práctica y creadora del proceso de aprendizaje, cada instructor del proyecto puede seleccionar y ajustar los contenidos que mejor estimulen la imaginación, la espontaneidad y la fantasía de los talleristas; organizar y graduar los aspectos técnico-formales a tratar, de acuerdo con las posibilidades individuales, la edad y la capacidad creadora de los niños y niñas; facilitar el goce estético; atender las necesidades y los intereses individuales y colectivos; y canalizar las motivaciones, el uso productivo del tiempo libre y el crecimiento personal. Todo esto ha significado para ellos una oportunidad de desarrollo personal y profesional, un reto que exige constantemente capacidad para potenciar de manera sistemática su superación metodológica.
Impacto en los beneficiarios indirectos del proyecto
La inclusión de CREARTE en la Programación Semanal de la Cultura en Pinar del Río; y la participación de los talleristas en galas artísticas, peñas, exposiciones personales y colectivas, y festivales, evidencian el amplio reconocimiento social al proyecto. También lo demuestra el hecho de formar parte del Programa de reanimación sociocultural “Arte en Colón”, que abarca un amplio movimiento artístico cada fin de semana en el casco histórico de la ciudad.
En el estudio realizado también se destaca la trascendencia de la iniciativa en las propias familias, quienes valoran como muy positivos la calidad y pertinencia de los talleres, y su valor educativo e instructivo. Ello, según los entrevistados y encuestados, se refleja en el alto nivel de implicación personal y la motivación de padres, madres y personas adultas responsables hacia las experiencias artísticas y socioculturales emanadas de CREARTE.
Entre los efectos generados por CREARTE destacan los cambios logrados en la calidad de las relaciones sociales y el comportamiento de las familias, principalmente las integradas al proyecto, su acercamiento mutuo, su sentido de pertenencia comunitaria, el empleo del tiempo libre en buenas prácticas de consumo cultural (artes visuales, literatura, realización audiovisual, entre otras) y, en general, su calidad de vida. Según los sujetos del estudio, todo ello se expresa en el mejoramiento de las relaciones de convivencia, la solidaridad, el apoyo mutuo, las buenas relaciones de convivencia, el incremento de su participación en la vida social comunitaria; pero, sobre todo, en las actividades promovidas por CREARTE en la comunidad. En sentido general, reconocen a este como un proyecto de vida colectivo que ha generado espacios artístico-culturales de beneficio para toda la comunidad.
Por otra parte, para los líderes comunitarios, las alianzas con CREARTE han significado una vía palpable para implicarse activamente en un proyecto de vida colectivo; armonizar y fortalecer las relaciones con las familias desde nuevos roles y posiciones; y acercarse a sus preocupaciones e incidir activamente en la solución de sus problemáticas. Esto ha influido en la percepción favorable de la comunidad y sus valoraciones positivas con respecto a la pertinencia y calidad de los talleres artísticos de CREARTE, todo el movimiento cultural que despliega, y su utilidad sociocultural y educativa.
CREARTE en tiempos de COVID-19
Desde que el 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud anunciara que la enfermedad conocida como COVID-19 se había extendido por los cinco continentes, afectado a un gran número de personas y alcanzado el nivel de pandemia global, la dinámica de vida del mundo cambió. El cierre de las fronteras, la paralización total o parcial de gran parte de los centros de producción y los servicios, las instituciones culturales, educativas y de todo tipo, matizado con medidas de confinamiento social, trasformó paulatinamente la vida a nivel planetario
Desde el 23 de marzo, cuando en Cuba se pasó a fase sanitaria epidemiológica y se estableció la cuarentena social, los talleres de CREARTE y todo su accionar comunitario se detuvieron en tiempo y espacio real. Ante los nuevos retos, los gestores del proyecto iniciaron la búsqueda de alternativas que permitieran reactivar su funcionamiento en condiciones de confinamiento social. Surgió la idea de crear un nuevo espacio de interacción, de aprendizaje y creación artística entre los miembros de CREARTE, que se ajustara a la realidad, pero en correspondencia con los preceptos y principios básicos de su funcionamiento.
El 2 de mayo, luego de explorar diferentes vías, CREARTE reabrió sus puertas a través de un grupo de WhatsApp “Ilustrando sueños desde casa”, concebido esta vez, como plataforma virtual y espacio de intercambio creativo. Esta interfaz pronto incentivó el interés no solo de los niños, las niñas y los adolescentes de los talleres habituales de CREARTE con alcance social, sino también de otras ciudades de Cuba y de diversos países (Fig. 3).
Figura 3 Foto collage del VII Taller “Ilustrando sueños desde casa”: “Entre letras y pinceles” (julio 2020).
Al acompañamiento y apoyo de las instituciones culturales locales, se sumaron entidades educativas de reconocido prestigio: el Centro de Estudios de Ciencias de la Educación (CECE) de la Universidad de Pinar del Río, el Instituto Superior de Ciencias Pedagógicas (ICCP), la Red Iberoamericana de Pedagogía (REDIPE) y la DVV Internacional.
Los talleres virtuales de CREARTE, promovidos a través del Grupo de WhatsApp, asumieron temáticas de interés artístico-educativo y sociocultural, muchos de ellos coincidentes con fechas y celebraciones importantes:
I Taller “El duende pintor”, convocatoria inicial a los talleres virtuales, coauspiciado por CIERIC-UNEAC, la Casa de Cultura “Pedro Junco” y el Centro Provincial de Artes Visuales.
II Taller “Madre querida”, dedicado al Día de las Madres, coauspiciado por la Red Iberoamericana de Pedagogía (REDIPE).
III Taller “Nuestro Martí”, por el 125 aniversario de la caída del Apóstol, coauspiciado por la Sociedad Cultural “José Martí” de Pinar del Río.
IV Taller “Mi familia”, coauspiciado por la Red Iberoamericana de Pedagogía (REDIPE) y la DVV Internacional, dedicado a la amistad y a los abrazos como expresión física de tan importante valor humano.
V Taller “Por un mundo mejor”, en saludo al Día Mundial del Medio Ambiente, coauspiciado por el Centro de Educación y Promoción para el Desarrollo Sostenible (CEPRODESO).
VI Taller “La amistad y los abrazos”, dedicado a la amistad y a los abrazos como expresión física de tan importante valor humano.
VII Taller “Entre letras y pinceles” (concurso artístico literario), coauspiciado por la Biblioteca Provincial “Ramón G. Coro” y el Centro Provincial del Libro y la Literatura, dedicado a valorar la importancia del hábito de la lectura, así como la creación plástica y literaria.
VIII Taller “Mi amor por los animales”, coauspiciado por el Centro de Educación y Promoción para el Desarrollo Sostenible (CEPRODESO), dedicado al amor por los animales y su importancia para convivir en armonía con la naturaleza, en un ambiente de respeto y comprensión.
IX Taller “Vuelos lilas”, dedicado al cumpleaños de la escritora Nersys Felipe (Premio Nacional de Literatura), coauspiciado por el Comité Provincial de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC) y la Organización de Pioneros de Cuba (OPJM).
X Taller “Redibujemos el mundo”, inspirado en un mundo de paz y armonía, de amor y solidaridad, de equilibrio ambiental y de respeto a la diversidad entre los seres humanos.
XI Taller “Los colores de nuestra América”, coauspiciado por la DVV Internacional, dedicado a las tradiciones y raíces de nuestros pueblos, sus fiestas, costumbres culinarias, rituales, cultivos, trajes, íconos y sitios históricos.
XII Taller “Pintando el mundo color esperanza” coauspiciado por el Canal de la Televisión Territorial TELEPINAR, sobre el valor los talleres virtuales de CREARTE durante el confinamiento social provocado por la COVID-19.
XIII Taller “Sueños y nanas” coauspiciado por el Boletín Electrónico “El Bohío”, inspirado en la obra de la joven escritora española Guaxara Afonso González.
XIV Taller “Fantasías a todo color”, coauspiciado por el Centro de Educación y Promoción para el Desarrollo Sostenible (CEPRODESO), la Biblioteca Provincial “Ramón G. Coro” y el Boletín Electrónico “El Bohío”
Desde el punto de vista metodológico, las convocatorias a los talleres virtuales de CREARTE promovían la inspiración creativa de los talleristas a partir de motivos literarios, los cuales abarcaban obras de escritores nacionales e internacionales relacionadas con cada tema seleccionado.
Por otra parte, en su concepción, también se apoyaba en un Grupo Gestor que fue conformándose poco a poco a partir del propio protagonismo en los talleres. Este quedó integrado básicamente por los familiares de los talleristas, algunos representantes de las instituciones involucradas y los miembros todos de la nueva “comunidad” de CREARTE, quienes asumieron paulatinamente las funciones básicas que aseguraban el funcionamiento armónico de la iniciativa, la toma colectiva de decisiones, la evaluación de cada taller y su sostenibilidad.
De esta forma, los talleres virtuales de CREARTE fueron convirtiéndose en una plataforma interactiva que, como los talleres habituales, fomentaba la creación artística, el conocimiento mutuo y el intercambio entre los talleristas bajo los principios del respeto y la comprensión. En cada ocasión se trataba la manera de mantener en alto la motivación de los participantes, provocarlos no solo para que dibujaran, sino para que indagaran y conocieran más sobre el tema elegido, sobre los autores, sobre pasajes interesantes acerca de los que pudiesen leer y discutir en casa, en el contexto de la familia. Por ello cada convocatoria se diseñó con la necesaria flexibilidad didáctica que ha demandado el confinamiento social. Además de su carácter abierto e inclusivo, los talleres brindaban la opción de participación individual o colectiva, fundamentada en el hecho de hacer posible la participación activa de la familia en todo el proceso de desarrollo del taller: lectura de la convocatoria, elaboración de la obra, socialización y valoración del resultado. En el marco de los talleres virtuales surgieron también espacios para los juegos de adivinanzas, los mensajes de voz y los videos en los que se leían poemas, y se compartían ideas y valoraciones de interés colectivo.
El éxito de cada taller y la visibilidad de sus resultados en las propias redes sociales hizo posible que, desde el primer taller virtual, se sumaran niños, niñas y adolescentes de otros municipios de Pinar del Río (Consolación del Sur, Los Palacios, Mantua, San Luis), otras provincias de Cuba (La Habana, Matanzas, Sancti Spíritus) y de diversos países (México, Argentina, España, Canadá e Italia), por lo que rápidamente se convirtió en un espacio interactivo que tendía puentes para un intercambio sin precedentes.
De esta forma, a medida que creció el intercambio entre los talleristas fue aumentando su interés por participar, por compartir sus obras con el grupo, y a la vez apreciar la de los demás, y valorar las capacidades propias y las de otros participantes. Poco a poco el espacio adquirió una dimensión social participativa, toda vez que estimulaba el intercambio abierto entre los participantes, incentivaba no solo la labor creativa individual sino también la colectiva, al posibilitar de manera desprejuiciada y flexible la participación de otros miembros de la familia en el proceso creativo y también en los intercambios de valoración y apreciación artística de las obras en el grupo.
Como resultado del desarrollo de los 12 talleres virtuales de CREARTE, entre mayo y octubre, los talleristas realizaron alrededor de 450 obras, algunas de las cuales participaron en concursos nacionales y provinciales, promovidos por entidades como el Centro de Estudios y Servicios Ambientales de Villa Clara (CESAMVC), la Cátedra HISTARMED, la Universidad de Ciencias Médicas de Guantánamo, la Casa de Orientación a la Mujer y la Familia (COMF) de Santiago de Cuba, el Consejo Nacional de Casas de Cultura y el Grupo Empresarial Correos de Cuba. A continuación, se presentan:
Exposición colectiva “Arte soy”, Museo Fragua Martiana, Universidad de la Habana (20 de marzo 2020).
Exposición colectiva en la Galería Virtual Creacion-line, del Museo Nacional de Bellas Artes, en homenaje al Día Internacional de los Museos (mayo, 2020).
XXV Concurso Nacional “De donde crece la palma” (2020), auspiciado por el Centro Nacional de Casas de Cultura y el Consejo Nacional de Artes Plásticas. Premio Primer Nivel y Premio del Proyecto Juana Moreno; Premio de la Brigada “José Martí” (mayo, 2020).
Concurso Virtual de Dibujo “Pintar el mundo en casa”, auspiciado por el Centro de Estudios y Servicios Ambientales (CESAM) de Villa Clara, Mención en categoría 5-10 años y categoría 11-15 años (junio, 2020).
Concurso “La COVID-19 en nuestras vidas”, convocado por la Cátedra HISTARMED, y la Universidad de Ciencias Médicas de Guantánamo. Categoría Adolescentes: 1er premio y mención (julio, 2020).
Concurso Nacional “Los CDR también cumplen 60”, convocado por la Casa de Orientación a la Mujer y la Familia (COMF) de Santiago de Cuba. 5 premios, 2 modalidades (septiembre, 2020).
Concurso Nacional “Fidel en mi corazón”, convocado por el Consejo Nacional de Casa de Cultura. 1er Premio, 2 menciones (noviembre, 2020).
Concurso Nacional “Dr. Adolfo Rodríguez Nodal in Memoriam” (4ta. Edición), convocado por el Proyecto Comunitario “Granjita Feliz” y su Club Martiano “Fijamos Rumbo”. 2 premios, Premio Especial otorgado por la Sociedad Cultural José Martí: Premio Especial (modalidad Literatura), premio (modalidad Literatura) (diciembre, 2020).
Concurso Internacional “El Bohío”, convocado por el Boletín Electrónico El Bohío, 3 premios (diciembre, 2020).
Concurso “Berta Cáceres in Memoriam” convocado por la Cátedra Honorífica “Berta Cáceres” de la Universidad de Pinar del Río, y el Centro de Educación y Promoción para el Desarrollo Sostenible (CEPRODESO). 3 premios en modalidad de artes visuales, 1 mención (Literatura) (marzo, 2021).
XXVI Concurso Nacional “De donde crece la palma”, auspiciado por el Centro Nacional de Casas de Cultura y el Consejo Nacional de Artes Plásticas: 1er premio (mayo, 2021).
II Concurso Virtual de Dibujo “Pintar el mundo en casa”, auspiciado por el Centro de Estudios y Servicios Ambientales (CESAM) de Villa Clara. 2 premios, 3 menciones (junio, 2021).
Concurso “Mi acción por el planeta” convocado por la oficina de Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en Cuba en ocasión del Día Mundial del Medio Ambiente. 2 premios, 1 mención (junio, 2021).
Expo Colectiva “Crear un sueño”, Biblioteca “Ramón González Coro” (octubre, 2021).
Asimismo, y como resultado de uno de los talleres virtuales de CREARTE, 15 obras llegaron a formar parte de una importante exposición llevada a cabo por la Galería Virtual del Museo Nacional de Bellas Artes Creacion-Line. Sin embargo, el mayor impacto de los talleres virtuales de CREARTE como experiencia artística y educativa, va más allá del número de participantes o de obras realizadas, entre los que destacan dibujos, poemas y relatos cortos, ni siquiera en los premios recibidos en estos cinco meses. La contribución más significativa de esta plataforma virtual ha estado en el ambiente desarrollador, dinámico y creativo impulsado, el cual ha generado niveles altos de motivación por las artes; y el intercambio sincero, espontáneo y respetuoso, a partir de la interacción afectiva entre los participantes.
El impacto de los talleres virtuales de CREARTE no se limita a la dimensión individual de los participantes; abarca sobre todo a la familia, espacio en el que la contingencia epidémica ha conducido a la necesaria revalorización de las relaciones interpersonales. En tal sentido, los talleres virtuales parecen haberse convertido en dinamizadores fortuitos del intercambio afectivo entre los niños, las niñas y los adolescentes y sus padres, en sano pretexto no solo para diálogos valorativos sobre el arte, la vida y sus valores, sino para el acercamiento respetuoso y apreciativo entre sí, para el aprendizaje, el divertimiento y el desarrollo de valores.
Al decir de Yania Collazo, especialista de promoción del Centro Provincial de Artes Visuales:
Cada uno de los ambientes propiciados por CREARTE fluye en dirección al bienestar y las raíces fértiles. El proyecto ha dejado bien claro el ánimo que pretende cultivar en niños y familias […] ese que aboga por labrar el pensamiento, forjar el carácter sobre la responsabilidad y el respeto, agrandar el alma cobijando sensibilidades y abrir el corazón al amor desde la justicia y la buena fe. Desde este proyecto nos siguen llegando montones de trazos, colores de ensueño, ingeniosos escenarios, diferentes técnicas y profundas concepciones sobre la coexistencia pacífica entre humanos, plantas y animales; y cada vez, sumando miembros desde otros sitios del planeta. Nuestros pequeños artistas han compartido sus múltiples entornos familiares y sociales, lo que deja clara la responsabilidad civil y la urgencia de permanecer unidos.
Desde México, Olga Patricia Pacheco Furber, trabajadora del área de formación ciudadana en la alcaldía de Iztapalapa y miembro ahora del Grupo Gestor de los Talleres Virtuales de CREARTE, sostiene que la plataforma interactiva impulsada por los talleres online permite a niños como los suyos combatir la sensación de aislamiento:
Se eliminan fronteras, lo que ayuda a imaginar y reconocer el planeta como el hogar común. Muchos de los participantes generan fuertes lazos de amistad. Existe un reconocimiento a la diversidad, un sentimiento de unidad […]. En el caso de mi hijo adolescente, el grupo virtual alivia la necesidad de pertenencia que la situación sanitaria dificulta. Propuestas como esta, demuestran que una crisis también puede presentar una oportunidad para mejorar, que existen otros modos de adquirir conocimientos y de mantener viva la esperanza de estar unidos. No se trata tampoco de adaptarse a la imposición del aislamiento, sino de generar un proceso de reinvención; de crear una reacción proactiva ante las dificultades.
En términos educativos, seguramente resulte difícil poder evaluar los conocimientos y las habilidades alcanzados como resultado de esta experiencia. Posiblemente, lo más factible y consistente se halle en las valoraciones de los protagonistas principales de esta experiencia artístico-pedagógica que difiere por contenido y forma de las maneras tradicionales de desarrollar el trabajo social comunitario, e incluso, de educar en muchas de las escuelas de estos tiempos. Ellas marcan un camino diferente al conocimiento, al aprendizaje, al crecimiento como seres humanos y como sociedad, así como al desarrollo de valores éticos y estéticos.
CONCLUSIONES
Como resultado del estudio desarrollado se pudo concluir lo siguiente:
Como proyecto de creación artística, CREARTE constituye una experiencia de indiscutible valor sociocultural y educativo por contribuir de manera significativa al bienestar social y espiritual de la comunidad pinareña.
Su impacto se constata en los cambios generados en los beneficiarios del proyecto, en el desarrollo de sus habilidades creativas y sus conocimientos, su gusto estético, su capacidad de apreciación y sensibilidad artística, y su sentido de responsabilidad, cooperatividad y respeto por la diversidad.
Su consolidación como iniciativa comunitaria estructurada sobre la base de alianzas con importantes actores sociales y el acompañamiento de entidades como el CIERIC y el sistema de Casas de Cultura, hacen posible su trascendencia y sostenibilidad, incluso en tiempo de confinamiento social y aislamiento.
Las acciones desarrolladas por CREARTE, a través de sus talleres virtuales en tiempo de confinamiento social y aislamiento, demuestran el valor del trabajo comunitario y de las artes como factores importantes de resiliencia.
CREARTE, sin dudas, encierra el tesoro y la magia movilizadora de los proyectos comunitarios como espacios de aprendizaje y creatividad.
