SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.6 número12Del periodismo domesticado al periodismo bastardo y DJ índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Alcance

versión On-line ISSN 2411-9970

ARCIC vol.6 no.12 La Habana ene.-abr. 2017

 

EDITORIAL

 

Retos del periodismo contemporáneo: nuevas narrativas, medios, fuentes y audiencias en transición

 

 Challenges of contemporary journalism: new narratives, media, sources and audiences in transition

 

 

Dra. Maribel Acosta Damas

Facultad de Comunicación, Universidad de La Habana, Cuba.

 

 

No caigamos en lo del paraíso recobrado, que venimos de una resistencia, que los hombres que venían apretujados en un barco que caminaba dentro de una resistencia, pudieron ver un ramo de fuego que caía en el mar porque sentían la historia de muchos en una sola visión. Son las épocas de salvación y su signo es una fogosa resistencia.

                                                         José Lezama Lima [1]

 

¿Qué periodismo y cuáles periodistas demandamos hoy? Existe consenso indiscutible acerca del impacto de las TIC en la profesión a partir de la emergencia de una recepción protagonista de la producción y socialización de los acontecimientos. Concordamos todos en la presencia de otros fenómenos como la instantaneidad para contar las historias, las audiencias nómadas, el fin de la fidelización de los públicos, la transversalidad visual y sonora de los relatos, el cuestionamiento de los géneros periodísticos tradicionales, la aparición de narrativas de un profundo carácter infocomunicativo y la consolidación mercantil de las empresas periodísticas que ha impactado el ejercicio profesional.

Sin embargo, la preservación de esto que comenzó como oficio hasta convertirse en acto de fe, viene a ser más que un gesto de utopía irreconciliable en el siglo XXI. Consideramos que no hablamos de periodismo sino de periodismos, primer reto que no ayuda a mirarnos para desmontar estereotipos. 

Sabemos de los conocidos y re-conocidos mainstream de la información, con agendas cada vez más comunes y gestores de matrices de opinión —hoy globales— que configuran un supuesto imaginario colectivo.  Pero también siempre ha estado ahí el disenso, en pelea frontal contra la pretendida invisibilización de los primeros, ahora con herramientas poderosas que se abren paso en medio de innegables complejidades éticas y legales.

Las alternatividades comprometidas —enarboladas para desafiar las homogenizaciones de todos los tiempos— son actualmente la columna vertebral de los periodismos otros. Tenemos la urgencia de revelarlas y compartirlas. Están creciendo en las redes y en los espacios físicos. Articulan ambos escenarios, nos comentan la existencia humana y legitiman la belleza y los padecimientos de los rostros de la mayoría del planeta. Se visten de identidades desemejantes y desde los microrrelatos confluyen en las aspiraciones que no han logrado enterrar el pragmatismo, la manipulación feroz ni las confusiones que le son consustanciales.

Estamos hablando de tecnologías y narrativas, de géneros híbridos y de formaciones; de políticas, arte, culturas y disyuntivas, de revisitaciones y emergencias. Una vez más enfrentamos los colonialismos todos y salvamos la subjetividad de ese contador de historias llamado periodista, que en su relato entrega la vida sin artificios porque forma parte de ella.

El (los) periodismo(s) que defendemos —no importan los soportes, los nuevos roles ni las multitareas que le acompañan— debe erigirse más que nunca en oído y rostro de la gente.  Como insiste el teórico colombiano Jesús Martín Barbero (2009), en cada relato tiene que estar la agenda país, que es también la agenda mundo; aquella que transversaliza la vida de un pueblo, que invade sus costuras y que casi siempre es intencionalmente invisible o manoseada en acto grotesco y excluyente.

Nuestros periodismos están demandando diálogos y más diálogos: obviamente con el mercado laboral, pero sobre todo con la sociedad, con saberes provenientes de otras disciplinas (incluida la de la existencia) y con una academia menos retórica y más vivencial.

Apostamos por esos periodismos que nacen en las comunidades virtuales y físicas y se juntan en nuestras indagaciones para contar identidades. Asumimos el riesgo de batallar contra la especulación, la ignorancia, la simplificación o el silencio. Rescatamos la conducta ética como sentido de la profesión y apelamos al compromiso explícito con el relato desde lo urbano, lo negro, lo rural, lo indígena, la vejez, las sexualidades, las juventudes, las religiosidades, las mujeres, las otras [2]; y el desarrollo desde lo más visceral de las aspiraciones humanas.

Creemos en periodismos que asombren, que diviertan sin menoscabo de la dignidad, que aprovechen las sensibilidades contemporáneas para fomentar la inteligencia y no degradarla, que hagan de la libertad culturas verdaderas y no abstracciones hipócritas.

Esos periodismos están demandando a su vez un cambio raigal en la formación de periodistas, que privilegie currículos docentes flexibles, en permanente debate con la sociedad; y que cultive el pensamiento, la integridad y el ejercicio profesional desde un marcado sentido ético y humanista. Será difícil favorecer periodismos creativos si nuestras academias no impulsan aprendizajes interdisciplinares, apegados a la ciudadanía y enfocados en el lugar central que ocupan en la gestión de modelos de desarrollo sostenibles e inclusivos.

Los relatos de hoy deberán hacer culto a la memoria porque el olvido es herramienta cardinal para perpetuar el subdesarrollo y la miopía política. La memoria se erige entonces como signo de resistencia, punto de llegada y de comienzo de nuevos relatos para el reconocimiento y el auto reconocimiento de nosotros como especie. Y en el mundo actual —cuya producción simbólica apela al presente como referencia casi exclusiva— los periodismos de la memoria vendrán a entregarnos los mapas del futuro.

Nuestra Revista Alcance les propone en este número, para su «Dossier», un acercamiento a las narratividades periodísticas otras desde las perspectivas del realizador y teórico colombiano Omar Rincón y artículos referidos a los caminos de los relatos enfocados en la multimedialidad y las tendencias audiovisuales.

La sección «Itinerarios de investigación» entregael estudio del discurso de los diarios venezolanos Correo del Orinoco y El Universal en torno al deceso de Hugo Chávez, entre el 6 y el 12 de marzo de 2013. Propone también un acercamiento a los rasgos del telediscurso de los programas televisivos cubanos sobre ciencia, y examina los contrastes entre prácticas de dirección de la prensa cubana y las demandas impuestas por el paradigma de la sociedad red para los nuevos entornos mediáticos.

En «Invitados», el educomunicador y estudioso uruguayo Gabriel Kaplún reflexiona sobre la televisión local latinoamericana y las formas en que, desde su experiencia, este medio podría ganar efectividad en la búsqueda de una comunicación más plural.

La sección «Reseñas»aborda un acercamiento a Anatomía de una Isla, compilación de textos de jóvenes investigadores cubanos sobre temas artísticos y sociales. Y a partir de este número, nuestra revista presenta la nueva sección «Cartas al Editor», en que podremos contar con sugerencias, aportes, disensos o experiencias de los lectores. Esta vez con la historia de la video-carta como práctica comunicativa en una zona montañosa cubana donde además se desarrolla desde hace más de veinte años, una peculiar experiencia de televisión comunitaria.

Alcance les entrega estos textos como relatos sobre la vida, contados desde la ciencia, la proximidad y las identidades múltiples; pugnando por esos periodismos de nuestras sensibilidades.

Aspiramos a seguir construyendo en comunidad.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Martín-Barbero, J. (2009). Entre saberes desechables, y saberes indispensables (agendas de país desde la comunicación). Bogotá: Centro de Competencia en Comunicación para América Latina.

Rincón, O. (2014). Nuevas narrativas televisivas: relajar, entretener, contar, ciudadanizar, experimentar. Comunicar, XVIII.    Recuperado de: https://www.revistacomunicar.com/index.php?contenido=detalles&numero=36&articulo=36-2011-06.

 

 

Dra. Maribel Acosta Damas. Facultad de Comunicación, Universidad de La Habana, Cuba. Correo electrónico: maribela@fcom.uh.cu.

 

 

NOTAS

[1] Escritor cubano (1910-1976). Novelista, poeta, ensayista. Uno de los intelectuales más importantes del siglo XX hispanoamericano.

[2] Esta pudiera ser una digresión intencionada, cuando la Real Academia de la lengua Española (RAE) ha declarado oficialmente su desacuerdo con el uso del femenino y el masculino, asumiendo el masculino como genérico… ¿por qué no feminizar todo entones?

 

Creative Commons License Todo el contenido de esta revista, excepto dónde está identificado, está bajo una Licencia Creative Commons