Introducción
La educación es un factor clave para el crecimiento económico de un país. La sociedad actual requiere del concurso de profesionales capaces de reconocer sus oportunidades laborales y académicas, para adoptar decisiones sobre la realidad circundante.1,2) La elección vocacional es un proceso que permite entrar a dicha etapa estudiantil de la mejor forma, ya que toma en cuenta las actitudes y las habilidades que guardan relación con una profesión. Es por ello que la vocación es “un proceso psicológico que moviliza una personalidad particular en relación al mundo profesional adulto, en el cual participará activamente para relacionarse”.2
Los motivos de ingreso a la universidad determinan, en buena parte, el éxito del estudiante en la carrera seleccionada y, posteriormente, su desempeño como profesional.3) La elección de una profesión determina un estilo de vida que requiere preparación constante, entendiendo que muchos aspectos están por encima de cualquier beneficio económico.2
Los factores que motivan a estudiar carreras universitarias son variados y se clasifican en internos y externos. Entre los primeros se pueden citar las aptitudes, los intereses, la personalidad y las motivaciones propias que posee la persona. Entre algunos de los aspectos externos a los jóvenes que influyen en su decisión se encuentran: la familia, el entorno social, cultural y económico, así como la información que pudieran tener sobre las distintas profesiones.3
Estas condiciones son susceptibles a variaciones durante el transcurso de los estudios, pues la idealización inicial marcada por la ayuda al prójimo y la satisfacción con la carrera, podrían ceder paso paulatinamente a lo referente al dinero o la posición social. Asimismo, estas motivaciones pueden variar de acuerdo al contexto social en que los estudiantes se desenvuelvan.4
Sobre las motivaciones para estudiar Estomatología existen investigaciones realizadas en países como Arabia Saudita,5 Croacia,6 Egipto,7 Bulgaria,8 India,9 Francia,10 Nepal,11 Estados Unidos,12,13 Brasil14 y Chile,15,16,17 publicadas en inglés, que han utilizado instrumentos en ese idioma. Si bien hay investigaciones que utilizaron instrumentos en español para evaluar este aspecto en naciones latinoamericanas, como Venezuela3 y Cuba,18,19 estos no cumplen los requisitos metodológicos adecuados.
Cada vez que ingresa un grupo de estudiantes a una carrera universitaria, muchos, o no finalizan sus estudios o tienen dificultades diversas para lograrlo, mientras que otros alcanzan la meta de forma exitosa de principio a fin.20 Las razones que explican dichos acontecimientos son variadas, pero, sin dudas, una de ellas tiene que ver con el hecho de haber realizado una elección correcta, acorde a lo que los alumnos esperan obtener al ejercer la profesión.21
Es necesario investigar las razones actuales que motivan a la selección de la carrera en Cuba, pues las consecuencias de una elección errónea no son solo afectivas (por ejemplo, frustraciones) y académicas, sino también económicas, pues la repitencia y la deserción incrementan los gastos del Estado en educación.3,22,23 Para abordar este tema de investigación es necesario contar con instrumentos validados científicamente con el rigor metodológico que corresponde. El objetivo de la presente investigación fue validar una escala para evaluar las motivaciones para estudiar Estomatología en alumnos cubanos.
Métodos
Diseño y participantes
Se realizó un estudio de tipo instrumental, de corte transversal y multicéntrico. Mediante un muestreo no probabilístico por conveniencia, se reclutó a los estudiantes de pregrado de ambos sexos de todos los años que desearon participar. Se excluyó a los que no asistieron a clases o prácticas asistenciales en los días de aplicación de la escala, así como, a los que no la llenaron o lo hicieron parcialmente (≥ 25 % de las preguntas sin responder). Los encuestadores solo respondieron consultas relacionadas con la tipología y forma de la escala, absteniéndose de sesgar los resultados con opiniones o respuestas a las preguntas. El tiempo promedio que los estudiantes emplearon para contestar el cuestionario fue de 10 minutos. La muestra quedó conformada por 1324 estudiantes. La fase de encuestado se realizó durante el periodo académico 2018-2019 en estudiantes de pregrado de nueve universidades cubanas: Universidad de Ciencias Médicas de Granma (UCMGRM), Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba (UCMSCU), Universidad de Ciencias Médicas de Holguín (UCMHLG), Universidad de Ciencias Médicas de Las Tunas (UCMLTU), Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey (UCMCMG), Universidad de Ciencias Médicas de Ciego de Ávila (UCMCAV), Universidad de Ciencias Médicas de Cienfuegos (UCMCFG), Universidad de Ciencias Médicas de Villa Clara (UCMVCL) y Universidad de Ciencias Médicas de La Habana (UCMLHA).
Instrumento
Originalmente, la escala utilizada se diseñó en España por Soria y otros.24 Posteriormente, Mayta y otros4) validaron la prueba en estudiantes latinoamericanos para medir las motivaciones para estudiar medicina (MEM-12). Considerando que esta población no difiere mucho con respecto a la de estudiantes de Estomatología, se consideró validar la prueba latinoamericana más reciente. La escala MEM-12 está conformada por 12 ítems, donde seis de ellos representan al factor social/altruista e igual número al factor económico/prestigio, con una escala tipo Likert de cinco puntos (muy en desacuerdo, desacuerdo, indiferente, de acuerdo y muy de acuerdo). La escala ha reportado ser válida y confiable (Kaiser-Meyer-Olkin (KMO) ≥ 0,75; r de Pearson ≥ -0,63, alfa de Cronbach 0,74).4
Procedimientos, recolección y análisis de datos
Se coordinó con los docentes de cada aula o prácticas asistenciales un espacio de tiempo de 20 minutos aproximadamente para el llenado del instrumento. Se registró la información en una base de datos Microsoft Excel (versión 2013 para Windows) y se realizó un control de calidad en tres fases: en primer lugar, por los propios encuestadores, luego por el investigador principal del estudio y, por último, por el estadístico.
Se analizaron los ítems para identificar posibles excesos de asimetría y curtosis (> 1). Luego se realizó un análisis factorial exploratorio (AFE) sobre la base de una matriz de correlación producto-momento (Pearson). Se usó el método máxima verosimilitud con rotación oblicua promin. Se calculó el test de Bartlett y el índice Kaiser-Meyer-Olkin (KMO). Para determinar la estructura factorial se utilizó el análisis paralelo de Horn,25 con el método de máxima verosimilitud y rotación oblicua promin. Todos estos procedimientos se ejecutaron a través del programa FACTOR.
Posteriormente, se realizó un análisis factorial confirmatorio (AFC), a través del software AMOS 25.0, en el que se consideró la evaluación de índices de bondad de ajuste tales como: índice de bondad de ajuste (GFI), índice de ajuste incremental (IFI), índice de Tucker Lewis (TLI), índice de ajuste comparativo (CFI), error cuadrático medio (RMR) y el error de aproximación cuadrático medio (RMSEA). Finalmente, se analizó la consistencia interna de la escala mediante el estadístico alfa de Cronbach.
Aspectos éticos
El proyecto de esta investigación fue aprobado por el Comité de Ética y el Consejo Científico de la Facultad de Ciencias Médicas de Bayamo perteneciente a la UCMGRM. A los estudiantes se les explicó todos los aspectos del estudio y se solicitó la firma del consentimiento informado. Todas las informaciones y datos personales de los encuestados fueron anónimos. Se respetó los aspectos de la Declaración de Helsinki para la investigación en seres humanos.
Resultados
Se encuestó a 1342 estudiantes, de los cuales, 18 no llenaron las encuestas o lo hicieron parcialmente, quedando una muestra final de 1324. De estos, el 66,8 % (n = 885) fueron mujeres, la mediana de edades fue de 21 años (rango intercuartílico: 20-22 años), el 20,1 % (n = 267) pertenecieron a la UCMCMG y el 31,5 % (n = 417) cursaba el cuarto año de la carrera (Tabla 1).
Se hizo un análisis descriptivo de los ítems. Once presentaron coeficientes de asimetría y curtosis entre -1 y 1, excepto el ítem 4, por lo cual fue eliminado. Así, se consideró realizar el análisis factorial exploratorio sobre la base de una matriz de correlaciones producto-momento (Pearson). Además, se analizó si la muestra era adecuada para realizar el análisis factorial a través de las pruebas de Kaiser-Meyer-Olkin y esfericidad de Bartlett, cuyo resultado fue bueno y significativo (KMO = 0,855; Bartlett = 1483,2; p = 0,000) (Tabla 2).
DE: desviación estándar | As: asimetría | α: alfa de Cronbach.
Nota: se procede a eliminar el ítem 4 por exceso de asimetría y curtosis.
El análisis paralelo identificó dos factores. La varianza total explicada fue del 56,5 % (Factor 1 = 41,47 %; Factor 2 = 15,09 %). Se eliminó el ítem 1 por presentar cargas factoriales en ambos factores (complejidad factorial), y también los ítems 5 y 9 por presentar cargas superiores a 0,4 en un factor distinto al modelo propuesto (Tabla 3). De esta forma, la escala quedó compuesta por 8 ítems distribuidos en 2 factores. Debido a que estos resultados pueden diferir en otra población, se procedió a realizar el análisis factorial confirmatorio.
Los resultados del análisis factorial confirmatorio permitieron observar que el modelo factorial de 8 ítems presentó resultados pocos satisfactorios. Sin embargo, a través de una modificación de índices, se realizó una reespecificación del modelo, eliminando el ítem 12. Así, considerando los índices de bondad de ajuste, los resultados para una estructura factorial de 7 ítems distribuidos en 2 factores fueron satisfactorios (GFI = 0,986, IFI = 0,985, TLI = 0,976, CFI = 0,985, RMR = 0,014, RMSEA = 0,05) (Fig. 1).
Aun cuando las respuestas de los ítems presentan promedios altos, los coeficientes de asimetría y curtosis presentan valores absolutos inferiores a 1, lo cual es satisfactorio. Respecto a la fiabilidad, los ítems presentan valores superiores a 0,70. El coeficiente α de Cronbach para la escala en conjunto también resultó ser superior a 0,70 (α = 0,821, IC: 0,799-0,840). El coeficiente de correlación entre los factores resultó ser bueno (r > 0,30). En suma, los 7 ítems presentaron características de medición adecuadas (Tabla 4).
Finalmente, la escala de motivaciones quedó conformada como se muestra en la tabla 5.
Discusión
Desarrollarse como profesional es una exigencia necesaria en los tiempos actuales y el campo de la estomatología no es la excepción.26 Es por ello, que las motivaciones que puedan manifestar quienes pretenden estudiar o estudian esta carrera cumplen un rol importante para el desempeño del futuro profesional.27) Lo anterior ha motivado el desarrollo de múltiples investigaciones sobre el tema.28,29,30,31,32,33
En la presente investigación, con un total de 1324 casos válidos, se hizo un AFE sobre la base de una matriz de correlación producto-momento (Pearson). Luego de los correspondientes análisis, el modelo quedó conformado por 7 ítems, de los cuales, 3 pertenecen al factor 1 (“social/altruista”) y 4 al factor 2 “económico/prestigio”). Los criterios de eliminación de ítems utilizados son ampliamente conocidos y utilizados en investigaciones sobre validación de instrumentos, especialmente en el área de salud.4
Nuestra investigación no ha sido la única en encontrar estos patrones motivacionales. En Estados Unidos los estudiantes estuvieron mayormente motivados por la posibilidad de ayudar a los demás, a la vez que las motivaciones menos frecuentemente identificadas fueron las relacionadas con aspectos económicos.11 En Venezuela, la selección de la carrera se relacionó con la satisfacción de necesidades y expectativas personales en lugar de razones sociales o altruistas.3 Un estudio realizado en 13 países reportó la vocación de servicio social como la segunda motivación mayormente identificada.34
Específicamente en Cuba, el estudio realizado por De la Mella y otros18 reportó que los factores de mayor influencia en la elección de la carrera fueron el reconocimiento social, la influencia familiar y amistades (42 %) y, fundamentalmente, los profesionales de la especialidad que les brindaron atención en tratamientos estomatológicos desde edades tempranas (40 %). A su vez, el 11 % de los estudiantes encuestados manifestaron que su motivación radicó en la posibilidad de cumplir misión de colaboración en el exterior y el 8 % reconoció que había elegido la carrera teniendo en cuenta el salario percibido por estos profesionales. Otro estudio cubano, el de Núñez y Peguero,19 realizado en estudiantes del primer año de la carrera, encontró una motivación de tipo mixta, donde confluyeron la superación personal y profesional como objetivo esencial en sus vidas.
El primer dominio de la escala MEEC-7 corresponde a la vocación de servicio, extensamente descrita como característica inherente a la profesión médica.4,35,36,37 Se han desarrollado metodologías que explícitamente consideran este aspecto para la selección de nuevos estudiantes de medicina.38 Asimismo, en otras carreras, especialmente en las ciencias no médicas, este aspecto parece no jugar un rol cardinal.4,39
El segundo dominio de la escala evalúa las motivaciones relacionadas con la adquisición de posiciones sociales y económicas privilegiadas. En Croacia6 y la India9 los estudiantes eligieron la carrera porque es altamente pagada y ofrece trabajo estable. Una investigación realizada por Avramova y otros8 en estudiantes búlgaros mostró que estos compartían motivaciones humanistas relacionadas con el prestigio y la seguridad económica.
La escala validada muestra una potencial utilidad para evaluar las motivaciones para estudiar la carrera, por lo que puede servir para realizar evaluaciones nacionales anuales sobre esta realidad y a partir de ello trazar estrategias docentes-educativas. Además, es importante señalar que este instrumento contiene ítems que reflejan solamente percepciones, las cuales pueden ser realidades o creencias en los estudiantes y pueden variar según cada contexto universitario.
Nuestro estudio presenta limitaciones. Es válido señalar que, atendiendo a la complejidad del fenómeno motivacional, pueden existir componentes no evaluados por la presente escala, como el interés científico, la orientación al logro de desafíos y retos, el liderazgo, el interés en desarrollar misiones de colaboración médica en otros países, entre otros. Sin embargo, la escala se basó en dos antecedentes que midieron muchos aspectos (y que no tuvieron respuestas masivas/adecuadas de otros aspectos), por lo que se recomienda que se deben medir de nuevo estos aspectos como influyentes para las motivaciones en la elección de la carrera.
La escala MEEC-7 es válida, confiable y permite evaluar las motivaciones de estudiantes cubanos respecto de la elección de la carrera de Estomatología. Esta consta de dos componentes diferenciados pero complementarios a la vez: Social/altruista y Económico/prestigio.