INTRODUCCIÓN
La Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), Programa Cuba, ha tenido como misión desarrollar la investigación y la docencia de postgrado sobre la sociedad cubana, y en particular sobre la problemática del desarrollo con perspectivas multi e interdisciplinarias, en aras de contribuir a consolidar una comunidad académica de alta vocación latinoamericanista, capaz de realizar aportes sobre su desarrollo social.
Dentro de sus programas de estudio se encuentra la Maestría en Desarrollo Social (MDS)1, que tiene entre sus bases teóricas: 1) La concepción del desarrollo como profundo y complejo proceso social que involucra dimensiones económicas, éticas, políticas, culturales, entre otras. 2) Lograr el bienestar social, calidad de vida, justicia, equidad social, desarrollo local y participación social.
Atendiendo a las demandas de los centros de trabajo y a las líneas estratégicas del Desarrollo Social de FLACSO-Cuba, se enfatiza en que los maestrantes desarrollen trabajo de tesis de relevancia, actualidad y pertinencia. De ahí que sistematizar los resultados de tesis de la MDS, teniendo como eje de sistematización la identificación de brechas de equidad (desde diferentes dimensiones) en contextos de cambios en el diseño y gestión de las políticas públicas, posibilitaría una mirada crítica propositiva, de cara a tener un programa que tribute al debate y la transformación de las brechas de equidad.
Para la sistematización se revisaron 41 tesis, cuyos resultados de investigación se ubican entre el 2000 y el 2015. De ellas se seleccionaron para esta sistematización 30 trabajos relacionados en la bibliografía, donde aparecen referencias (trabajadas con diferentes grados de aproximación) a cambios relevantes del contexto país de este período y su impacto en indicadores del desarrollo social en diferentes escalas territoriales, principalmente en las brechas de equidad. Los resultados se presentan con la división de dicho período en dos etapas:
El proceso denominado Batalla de ideas (2000-2007) que comprende la ampliación de las inversiones sociales como respuesta a las desigualdades generadas en la década del 90, procesos nacionales y de integración regional que favorecen las relaciones sociales y comerciales con Cuba. Se enmarca en los últimos años de presidencia de Fidel Castro.
El proceso denominado actualización del modelo cubano (oficialmente desde el 2011 hasta la actualidad; pero con algunos antecedentes que se ubican entre 2008-2010). Comprende transformaciones en la política económica y social, buscando mayor eficiencia y sostenibilidad, a partir de la crisis económica internacional, y la vulnerabilidad socio-económica interna, la que se agravó en el 2008 por la devastación de los huracanes Gustav, Ike, Palomas.
ALGUNAS PREMISAS EPISTEMOLÓGICAS PARA EL ANÁLISIS DE RESULTADOS
Conocer quiénes son los y las autores de estos trabajos es clave para entender los puntos de vista y las interpretaciones de la realidad que ofrecen. El 90% de los trabajos de tesis fueron realizados por mujeres, aunque en las tutorías hay una participación más balanceada de hombres y mujeres. El enfoque de género es bastante abordado con diferentes grados de centralidad, según el tema de tesis. Incluso, es un hombre, quien trabaja los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres. Pero este número también coloca la reflexión sobre un tema bastante debatido. En el caso cubano, la Educación Superior se ha ido feminizando. En ello influyen, entre otros factores, la continua asignación a los hombres del rol productivo en la familia, por lo que se separan de los estudios más tempranamente. Son las mujeres quienes generalmente se inclinan más por las Ciencias Sociales.
Los perfiles profesionales de los maestrantes, tutores y tutoras se mueven fundamentalmente en Derecho, Filología, Sociología, Estudios socio-culturales, Economía, Contabilidad, Trabajo Social, lo que condiciona el proceso de selección del objeto de estudio y los tipos de análisis de la información. Es importante reconocer el enfoque interdisciplinario del programa de formación que intenciona que se aborden los objetos de estudio desde esta perspectiva. Todos los trabajos abordan diferentes dimensiones del desarrollo, aunque en algunos casos el enfoque jurídico y económico es muy notable.
Las afiliaciones laborales son muy diversas. En el momento de la investigación, los y las maestrantes laboraban en la Universidad de Pinar del Río, Instituto Pedagógico, Universidad Central de Las Villas, FLACSO-Cuba, Instituto Cubano de Investigación Cultural “Juan Marinello”, Instituto de Relaciones Internacionales, Ministerio de Economía y Planificación, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, DESOFT2, Centro de Investigaciones Psicológicas y Sociológicas, Dirección de Agricultura, Telepinar, Grupo Estatal de la Bahía de La Habana, Centro de Estudio de Migración Internacional y el Centro de Estudios del Desarrollo Local. Este es un aspecto a tener en cuenta, pues la institución puede influir en la selección del tema de investigación, las facilidades de acceso a la información, facilidades logísticas, disponibilidad de tiempo para investigar; así como la forma en que se abordan las temáticas y la información que puede ser publicable o no (fundamentalmente cuando son estudios de las propias instituciones, sus proyectos, sus políticas, etc.).
Las tesis develan nuevas formas metodológicas de abordar las inequidades y retratos en diferentes planos de una Cuba que, como dice el grupo Buena Fe, “son muchas Cubas”. A diferencia de las imágenes externas e internas de inmovilidad, es una Cuba que está en permanente movimiento, donde el período analizado (2000-2015) se caracteriza por transformaciones significativas en las diferentes dimensiones del desarrollo.
Los trabajos abordan realidades invisibilizadas que ofrecen puntos de vista que interrogan muchas certezas construidas como los discursos triunfalistas sobre la erradicación de la pobreza, de las desigualdades de género; que mueven las percepciones sobre grupos etarios como los niños y niñas, los ancianos y ancianas, las personas con síndrome de Down; o la inerte y acrítica retórica sobre los resultados de nuestros sistemas educativo, de comunicación, de salud; así como nuestras formas de participación. El tema de las desigualdades raciales no está abordado suficientemente, al igual que temas de género relacionados con la diversidad sexual, las masculinidades; o el de las desigualdades por condición de migrante.
Un elemento muy importante es que no son textos con mensajes catárquicos, derrotistas o de crítica destructiva. En todos se reconocen los avances que se han logrado con las políticas sociales, ambientales, etc. y a la vez elaboran propuestas de transformación con diferentes grados de viabilidad.
Las tesis tienen como generalidad un enfoque cualitativo, aunque siguiendo el principio de triangulación metodológica, se conjugan métodos y técnicas mixtas (cuantitativas, cualitativas y participativas) como entrevistas a expertos, entrevistas semi-estructuradas y en profundidad, observación, análisis documental, encuestas, completamiento de frases, escala Likert, asociación libre de palabras, grupos de discusión, talleres participativos, etc. Prevalecen los estudios de casos por la factibilidad económica y el acceso a la información; aunque también se realizan análisis generales de las políticas, leyes, estrategias y planes de acción implementados.
Otros principios metodológicos importantes que se cumplen en varios trabajos son:
La perspectiva multi-actoral con el reconocimiento de los roles, concepciones, valoraciones y la participación activa de varios actores en el proceso de investigación. El curso Concepción y metodología de la Educación Popular del Programa de maestría pone énfasis en el diálogo de saberes como una forma participativa de construcción del conocimiento hacia un desarrollo social más auténtico.
La perspectiva de transitar escalas geográficas nacional, provinciales, municipales, comunitarias, familiares, personales, así como ecosistemas, áreas de salud, de deporte, de comunicación, universidades, áreas económicas (empresariales, cooperativas), etc., en una lectura de la realidad donde se retroalimentan los diferentes espacios que se contienen.
Hay trabajos realizados solo desde una mirada nacional, relacionados con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, el Ministerio de Turismo, la Estrategia Ambiental Nacional, DESOFT, el Ministerio de Comercio Exterior (en su relación con el sector apícola).
Otros trabajos describen el contexto nacional y luego se focalizan en diversas escalas territoriales, entre las que se encuentran las siguientes provincias y municipios: Pinar del Río (Pinar, La Palma, Minas de Matahambre); La Habana (10 de octubre, Marianao, Arroyo Naranjo, Cerro, Playa, Centro Habana, Plaza de la Revolución, Habana Vieja, Boyeros, Guanabacoa, Habana del Este, San Miguel del Padrón); Villa Clara (Santa Clara, Placetas, Camajuaní, Quemados, Manicaragua, Cifuentes, Ranchuelo, Santo Domingo, Corralillo, Caibarién, Remedios). Sin una descripción tan intencionada de la escala provincial, algunas tesis se enfocaron en el trabajo con los municipios Quivicán, Bejucal, Bartolomé Masó y Cabaiguán.
A estos se adicionan otros espacios trabajados en las tesis (de conjunto con los territoriales) como la Facultad de Economía (Universidad de La Habana), una escuela primaria en la localidad de Cayo Hueso, clubes de jazz y el hospital América Arias en La Habana; la Empresa pecuaria MACUN en Villa Clara; la Facultad de Derecho y grupos de estudiantes de periodismo y estudios socio-culturales, Universidad de Pinar del Río y espacio de teleaudiencia de Telepinar en Pinar del Río.
CON LOS LENTES DE LA EQUIDAD: BRECHAS MÁS TRABAJADAS A NIVEL DE GRUPO SOCIAL Y DE TERRITORIO
En las tesis revisadas, existen diferentes niveles de identificación y problematización de las brechas de equidad. Prevalecen los estudios en los grupos y territorios con condiciones más desfavorables. Aunque la mayoría de los trabajos apuestan por una visión multidimensional, dada la concepción del desarrollo que se maneja en el programa de maestría, los análisis priorizan algunas de las dimensiones buscando profundización.
Las investigaciones realizan caracterizaciones socio-demográficas y hacen referencia a diferentes tipos de brechas de equidad; pero se identifica la necesidad de trabajar más la interseccionalidad en los estudios grupales. Los tipos de brechas más trabajadas son las territoriales, las etarias y las de género, en grado medio las de nivel socio-económico y en menor grado las de color de piel y la de personas con discapacidades, (Tabla 1).
ANÁLISIS HISTÓRICO: LOS CAMBIOS Y SU RELACIÓN CON LA EQUIDAD
En varias de las tesis analizadas, aunque aborden temas actuales, se trabaja la perspectiva histórica de los fenómenos. Hay un reconocimiento explícito al carácter positivo de las transformaciones estructurales y culturales logradas con la Revolución cubana en la política social, en el ámbito comunicacional, en la distribución de la propiedad, etc. En algunos trabajos también se hace referencia a inequidades que permanecieron como desafíos y a otras que emergieron o se profundizaron, principalmente con la década del 90. Ello nos permite tener en cuenta inequidades pre-existentes que no se le pueden atribuir solamente a los acontecimientos más recientes. Entre estas inequidades se encuentran referencias a la estratificación social por ocupación e ingresos; la pérdida de la capacidad adquisitiva del salario; la dualidad monetaria y patrones inequitativos de selectividad territorial.
REFERENCIAS A PROCESOS MÁS RELEVANTES DEL PERÍODO: 2000-2007
La década del 2000 se reconoce por la reciente historiografía como la Batalla de Ideas, nombre acuñado por Fidel Castro, en el contexto de enfrentamiento político al gobierno de Estados Unidos por las consecuencias de la Ley de ajuste cubano como el caso de la migración ilegal por vía marítima del niño Elián. Las condiciones económicas del país no eran las de inicio de la década del 90.
La reforma de los 90, en su dimensión económica3, había propiciado cierta recuperación de los fondos estatales para una reinversión en las esferas sociales, a fin de revertir los efectos de la primera década de período especial. En los años 2000 también cambia el contexto regional con la Revolución Bolivariana de Venezuela y la constitución de un nuevo mecanismo de integración regional como la Alianza Bolivariana para los pueblos de América (ALBA) que cambia el patrón de inserción de Cuba en la economía internacional, favoreciendo la planificación económica del país y el desarrollo de programas sociales.
El período especial, además, trajo desigualdades, muchas desigualdades, cosas tristes, cosas dolorosas, a las que fuimos obligados por las circunstancias. No había otra alternativa, tuvimos que acudir a una serie de medidas. Ese fue el dolor moral adicional que tuvimos que sufrir (…)
Hemos hecho muchas cosas, pero nuestra Revolución tiene que perfeccionarse, nuestro trabajo tiene que perfeccionarse. (…) Vamos a multiplicar los conocimientos y la cultura de nuestra población, vamos a multiplicar las riquezas espirituales a un ritmo como jamás se ha hecho en la historia en ningún país. (…) Vamos a desarrollar un socialismo mucho más justo; vamos a garantizar las posibilidades de que todos los niños que nazcan en este país, cualquiera que sea el nivel cultural del núcleo familiar, el lugar donde viva, la marginalidad que padezca, tengan todos, absolutamente, las mismas posibilidades. Y eso está en nuestras manos, tenemos toda la fuerza para alcanzarlo. (…) Es por eso que se abre una etapa trascendental, y esas posibilidades las hemos ganado luchando, resistiendo, combatiendo. (Castro, 2000: 29 y 30)
Las tesis refieren como procesos relevantes del período, atendiendo también a los territorios en que realizan la investigación, los siguientes:
Procesos tecnológicos: la Revolución Energética; la Informatización de la sociedad cubana (con énfasis es el sector educacional, de salud y productivo); mayor desarrollo y accesibilidad de grandes sectores de audiencias a tecnologías modernas, dígase videos, DVD, Internet, VCD, MP3, MP4.
Procesos socio-económicos: Desarrollo de la agricultura urbana; el Programa de Inserción Laboral; reconversión económica de zonas mineras.
Procesos sociales y culturales: el nuevo Plan de construcción de viviendas; el Programa de Universalización de la Educación Superior; la formación y empleo de trabajadores sociales, maestros de la enseñanza primaria, profesores generales, enfermeros, entre otros; los Seminarios nacionales (2002 y 2006) de seguimiento y evaluación del Plan de Acción Nacional de Seguimiento a la IV Conferencia de la ONU sobre la Mujer; Casas de cultura con talleres literarios más inclusivos respecto al género; afectaciones económicas en Telecentros y la prohibición de colocar audiovisuales foráneos
Procesos socio-políticos y jurídicos: el diseño e implementación de Estrategias Municipales de Desarrollo (EMD); continuidad de implementación de la Estrategia Ambiental Nacional; la promulgación del Decreto Ley No. 234 “De la Maternidad de la Trabajadora” (2004) y la Ley No. 105 (2008) De Seguridad Social que sanciona que ambos cónyuges indistintamente, puedan recibir el beneficio de la pensión en el caso del fallecimiento del otro.
Los 2000: Impactos positivos y negativos en la equidad
A continuación se relacionan en la tabla 2, los impactos positivos y negativos en las brechas de equidad que se identifican en las tesis estudiadas, por acceso, uso y control de diferentes tipos de recursos que facilitaron los procesos de transformaciones económicas, sociales, políticas o culturales del período 2000-2007.
Se recomienda la lectura de algunos fragmentos de las tesis seleccionadas para este estudio, que ilustran de forma más explícita lo expuesto en la tabla 3. El estudio de caso de la empresa pecuaria MACUN, Villa Clara (Cino 2009, p. 80) brinda elementos para la comprensión del acceso a recursos económicos y satisfactores; así como la atención a las desigualdades espaciales por problemas de conectividad (Cino 2009, p. 61). En cuanto al acceso a la electricidad con la Revolución Energética se propone el estudio de las Energías Renovables y el desarrollo económico y social. (Valido, 2012, p. 63).
La evaluación de impacto de un proyecto comunitario para personas con Síndrome de Down, Pinar del Río (Pacheco, 2009) aborda la integración de personas con capacidades especiales y el análisis del Programa de Estudio de Derecho, Universidad de Pinar del Río (Crespo, 2009, pp. 49-51) trabaja el análisis sobre el acceso a la formación con enfoque de género. El estudio de mujeres en la décima oral en Pinar del Río (Rodríguez, 2009, pp. 50-51) refiere la temática de los derechos culturales con enfoque de género y etario. También relacionado con la dimensión etaria, se encuentra el estudio de caso de la empresa pecuaria MACUN, Villa Clara (Cino 2009, p. 89) que coloca ejemplos positivos del acceso de los jóvenes a cargos de dirección.
Tres tesis ilustran con ejemplos sensibles las desigualdades de género, familiares, socio-ocupacionales y espaciales en el acceso a recursos económicos como son el estudio con mujeres de Habana Vieja, Centro Habana y Alamar en el Hospital Ginecobstétrico "América Arias" (Seuret, 2002, pp. 52-54); y los estudios de caso de la empresa pecuaria MACUN, Villa Clara (Cino 2009, pp. 77, 80) y de Minas de Matahambre, Pinar del Río (Hernández, 2009, p. 60).
Resultados interesantes en el análisis del acceso inequitativo a recursos sociales y ambientales, según el tipo de espacio, se encuentran en los estudios de caso de Minas de Matahambre, Pinar del Río (Hernández, 2009, p. 57); del Centro de Investigaciones Sociales de Telepinar, Pinar del Río (Jiménez, 2009, 61); de la empresa pecuaria MACUN, Villa Clara (Cino, 2009, pp. 81-82); y de La Cabaña, Pinar del Río (Roig, 2009, p. 52).
Sobre el empoderamiento y la participación, a partir del desigual acceso a recursos políticos, se recomienda la lectura de los estudios de personas en situación de pobreza, Bejucal (Gómez, 2009, p. 69); de educación ambiental y participación en el contexto nacional (Nodarse, 2005, p. 118) y los resultados de encuesta aplicada por Centro de Investigaciones Sociales de Telepinar, Pinar del Río (Jiménez, 2009, pp. 61, 63-67, 72).
El estudio con mujeres de Habana Vieja, Centro Habana y Alamar en el Hospital Ginecobstétrico "América Arias" (Seuret, 2002, pp. 52-55,56); el análisis del Programa de Estudio de Derecho, Universidad de Pinar del Río (Crespo, 2009, pp. 49-50); y los estudios de caso del Centro de Investigaciones Sociales de Telepinar, Pinar del Río (Jiménez, 2009, p. 72); de la empresa pecuaria MACUN, Villa Clara (Cino, 2009, p. 78) de las mujeres en la décima en Pinar del Río (Rodríguez, 2009, pp. 28-29, 49) y de Minas de Matahambre, Pinar del Río (Hernández 2009, p. 57), abordan las desigualdades de género en relación con diferentes recursos culturales. Entre ellos se encuentran el acceso inequitativo de las mujeres a la formación y la información y a la producción cultural como derechos culturales importantes. También hacen alusión al androcentrismo en la historiografía y la pervivencia de representaciones sociales estereotipadas de las mujeres.
REFERENCIAS A PROCESOS MÁS RELEVANTES DEL PERÍODO: 2008-2015
A partir del año 2007, con el cambio de gobierno, Raúl Castro Ruz realiza un llamado a la crítica del proceso revolucionario donde se identifican, por diferentes sectores, los principales desafíos del proceso cubano, en medio de una coyuntura nacional e internacional compleja4.
Entre los diferentes retos fueron señalados el incremento eficiente de la producción básica e industrial en varios renglones; la soberanía alimentaria y energética; la capitalización de la infraestructura; el cambio de patrón de conexión con la economía internacional, a partir de una disminución de importaciones e incremento de exportaciones; la sostenibilidad económica del proyecto social; la disminución de las tendencias a la centralización, verticalismo, paternalismo e igualitarismo; el mejoramiento de la calidad y efectividad de la estructura y funcionamiento institucional, entre otros.
Entre los años 2010 y 2011, en las organizaciones políticas, los centros laborales y espacios comunitarios, comienza el proceso de discusión de los Lineamientos de la política económica y social para el quinquenio 2011-2015 para la actualización del modelo cubano.
En este contexto, los trabajos refieren procesos significativos de Cuba que marcan un antes y un después respecto a la producción y la distribución de recursos y oportunidades. Por lo cual constituyen referentes importantes a explicar con lógicas causales o condicionales los cierres, las apreturas o reconfiguraciones de brechas de equidad (Tabla 4). Entre estos procesos hacen alusión a:
Procesos socio-económicos: Decreto Ley 259 con la entrega de tierras ociosas; la potenciación del trabajo por cuenta propia; el pluriempleo y permiso de incorporación laboral a estudiantes universitarios de cursos diurnos; proceso de reordenamiento laboral; cambios en la inserción laboral juvenil: Proyección de la formación de profesionales en correspondencia con las demandas de empleadores.
Procesos socio-políticos y jurídicos: Nuevo Código del Trabajo; Política de Atención a la Dinámica Demográfica; transformaciones político-normativas realizadas en el año 2009 que permitieron a los ciudadanos cubanos la posibilidad de contratar los servicios de hotelería y excursiones.
Procesos tecnológicos: Profundización de la informatización de la sociedad cubana. Nueva Política del MINCOM.
Procesos sociales y culturales: la reorganización, compactación y regionali-zación de los Servicios de Salud, VIII Congreso de la Federación de Mujeres Cubanas (donde se debate la presencia femenina en la vida económica, en cargos de dirección, el trabajo comunitario, etc.)
Para profundizar en esta información, se recomienda la lectura del estudio de migración, turismo y desarrollo en Cuba (Gutiérrez, 2012, p. 5), que aborda el tema de restitución de derechos individuales en el acceso a recursos sociales y culturales. Para el análisis sobre recursos políticos se encuentra el estudio de caso sobre redes y Estrategias Municipales de Desarrollo en Cabaiguán, Villa Clara (Rodríguez, 2015, pp. 56-57) que describe elementos sobre la descentralización y el empoderamiento de actores locales; así como el empoderamiento femenino. Por otra parte, el estudio de casos de familias usuarias de servicios de salud en los municipios de Playa, Cerro, Marianao, Arroyo Naranjo, 10 de octubre en La Habana (Fuentes, 2016, pp. 78-79) refiere experiencias positivas en la atención a las desigualdades a partir de estrategias de universalización y focalización en el acceso a los servicios de salud.
Respecto al acceso inequitativo a recursos económicos, los estudio de caso de entrega de tierras ociosas en Quivicán (Figueroa, 2012, 49); de prácticas de consumo en el vestir en Facultad de Economía, Universidad de La Habana (Sarduy, 2014, p. 63, 74); de interculturalidad y diálogo intergeneracional en Pinar del Río (Camejo, 2009, 77) y de espacios de producción y consumo de jazz en La Habana (Bayona, 2009, p. 95); así como el estudio de migración, turismo y desarrollo en Cuba (Gutiérrez, 2012, pp. 41, 44, 45); abordan fenómenos como las desigualdades de género por patrimonio; y las desigualdades en el consumo e ingresos por tipo de familia, sectores socio-ocupacionales y espacio geográfico (Tabla 5).
En el acceso a servicios de salud, el estudio de casos de familias usuarias de servicios de salud en los municipios de Playa, Cerro, Marianao, Arroyo Naranjo, 10 de octubre en La Habana (Fuentes, 2016, pp. 78, 80, 89, 92, 99) hace alusión a las desigualdades entre familias por nivel socio-económico. Como un factor importante relacionado con la salud, se encuentran las condiciones del hábitat, las cuales son problematizadas desde un enfoque de desigualdad en los resultados del diagnóstico con población cercana a la cuenca de La Bahía de La Habana (Rivero, 2015, pp. 38-39).
En cuanto a recursos políticos, un análisis novedoso lo aporta el estudio de caso sobre redes y Estrategias Municipales de Desarrollo en Cabaiguán (Rodríguez, 2015, pp. 58, 60, 63-65, 66), que refiere desigualdades de poder según escala territorial y desigualdades en el acceso, uso y control de recursos entre actores centrales y periféricos en contextos locales. Por otra parte, el estudio de García (2015, p. 33), refiere desigualdades en el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación y a los propios recursos informacionales.
Respecto al consumo cultural y el uso del tiempo libre, los estudios de caso en espacios de producción y consumo de jazz en La Habana. (Bayona, 2009, pp. 59, 87) y de consumo de literatura en Cayo Hueso (Jiménez, 2009, pp. 59, 79, 64) hacen alusión a las desigualdades por niveles de ingresos y tipos de espacios.
Cabe destacar que tras la revisión de las tesis seleccionadas se identifica la necesidad de seguir profundizando teórica y metodológicamente en el enfoque de equidad desde una perspectiva interseccional. Unas tesis se plantearon el uso de este enfoque desde su concepción y otras lo incorporan parcialmente, al no ser un tema central del objeto de estudio. Sin embargo, a pesar de la diferencia de objetivos de cada trabajo, se evidencia que el propio análisis del desarrollo desde una perspectiva multidimensional, hace que el tema cobre una relevancia en el análisis crítico constructivo de la realidad.
Los tipos de formaciones; los tipos de acceso a la información; los niveles de sensibilización de los y las maestrantes y tutores, a partir de sus identidades y el condicionamiento de sus posiciones epistemológicas; las áreas de interés de las instituciones de procedencia y las personales, pueden ser factores que influyen en las diferentes formas de abordar la temática.
Teniendo en cuenta la cantidad y calidad de datos levantados, hay tesis que pueden ofrecer información para nuevas interpretaciones a partir de una lectura con “lentes de equidad”, pues la información ofrecida no agota todo el potencial desde la perspectiva de análisis de las desigualdades cuando estas no son un objetivo en el diseño de la investigación.
Por otra parte, la defensa de los derechos culturales es un área polémica (Hernández, 2009, p. 59), al entrar en contradicción con la igualdad de género y con otros derechos humanos como las condiciones de salud y laborales de la población que opera en territorios mineros. Ello requeriría lecturas más problematizadoras frente a enfoques que se inclinan por la defensa a ultranza de la conservación de la identidad cultural, en consecuencia con un enfoque de desarrollo humano más integral.
ALGUNAS PROPUESTAS DESDE UNA PERSPECTIVA GENERAL
Los trabajos trascienden la descripción y el análisis crítico de los diferentes contextos, para elaborar propuestas que en diferentes medidas, pueden contribuir a cambios positivos en las brechas de equidad.
En el nivel estructural se propone la reorganización institucional; el perfeccionamiento de marcos legales y cambios en la estructura de los mercados con la incorporación del enfoque de equidad (mayor descentralización y participación; incorporación de enfoque de género, etc.).
En el nivel de políticas y programas se proponen acciones gubernamentales más focalizadas en familias en desventaja social y económica; el trabajo social preventivo; el fortalecimiento de la calidad y accesibilidad de los servicios sociales; el perfeccionamiento de políticas empresariales con mayor atención a las condiciones de vida de trabajadores y trabajadoras (vivienda, estimulación salarial); diversificación del tejido productivo de las localidades y uso de las zonas de silencio para la creación de empleos atractivos para la fuerza laboral excedente; la promoción de programas ambientales; el fomento de estrategias para la preservación de la identidad cultural en zonas de reconversión económica, entre otros. Una recomendación, de profunda reflexión, la aporta Susset Fuentes, tras el análisis del sistema de salud y las estrategias familiares:
(…) se precisa una visión más integral en el diseño de la política social, que supere la tradicional parcelación de “esferas priorizadas” (como salud y educación) y “rezagadas” (como vivienda y empleo‐salarios), y que ‐de acuerdo a la naturaleza de los principales mecanismos generadores de desigualdad, pobreza y vulnerabilidad en el caso cubano actual‐ le dé una significativa importancia, dentro de las prioridades del gasto social, a aquellas áreas que impacten directamente en el ámbito doméstico‐familiar, ampliando la capacidad electiva familiar/individual a partir de la generación de activos e ingresos propios. (Fuentes, 2016, p. 111)
En el ámbito metodológico, proponen la necesidad de mayor participación profunda y con perspectiva multiactoral para el diseño e implementación de estrategias de desarrollo local y comunitario, programas de desarrollo y planes de acción; el uso del diálogo intergeneracional para el desarrollo sociocultural desde la interculturalidad; y el diálogo con la diáspora para el diseño de estrategias de turismo familiar.
En el ámbito formativo, se propone el repensar estrategias de formación dirigidas a diferentes grupos (trabajadores de empresas, estudiantes universitarios, comunidades, teleaudiencia), tanto por vías formales como informales, para la incorporación del enfoque de género, el enfoque ambiental y la Educación Popular principalmente; así como formaciones técnicas en la agricultura y en tradiciones culturales. También se recomendó la continuidad de las investigaciones y el trabajo científico que retroalimente los procesos formativos y el diseño de políticas.
Otro grupo de propuestas están relacionadas con estrategias de comunicación para un acceso más equitativo a la información; con productos comunicativos que aborden los temas de equidad y atiendan a la pluralidad de audiencias a los que van dirigidos; más participación en las propuestas que se diseñan y elaboran en los diferentes medios de comunicación; acceso equitativo a las tecnologías para una mejor distribución de los usos de la comunicación; y la facilitación de más intercambio e igualdad de condiciones entre los telecentros y la televisión nacional.
CONCLUSIONES
Existen diferentes niveles de identificación y problematización de las brechas de equidad. Prevalecen los estudios sobre brechas territoriales, las etarias y las de género. En un nivel medio las socio-económicas y en menor medida las asociadas al racismo y la discapacidad.
Los trabajos abordan realidades invisibilizadas que permiten profundizar el análisis de las desigualdades, desmontando discursos triunfalistas como la erradicación de la pobreza y las desigualdades de género, o la diversidad de grupos vulnerables.
Los trabajos también develan que no todas las brechas se deben atribuir a los cambios recientes, pues existen inequidades pre-existentes relacionadas con la estratificación social por ocupación e ingresos; la pérdida de la capacidad adquisitiva del salario; la dualidad monetaria y los patrones inequitativos de selectividad territorial.
Los cambios estructurales como la reorganización institucional, el perfeccionamiento de marcos legales; la participación; de conjunto con cambios en políticas, estrategias de comunicación, formaciones y actividades de investigación, se distinguen como contribuciones significativas de los estudios del desarrollo social a la construcción de un sistema más inclusivo.