CARTA AL EDITOR

Editoriales predadoras: publicar "y" perecer


Predatory Publishers: publish "and" perish

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Estimada Directora:

Los profesionales que logran publicar artículos científicos, cada vez con más frecuencia son objeto de correos electrónicos con la ignominiosa propuesta de publicar fácil y rápido. Aunque los manejos ilegítimos de la Editora Académica Española fueron debatidos en interesantes materiales publicados en el primer número del año 2012^1-4 de esta revista, esa es solo la punta del iceberg.

¿Qué hay de malo en publicar fácil y rápido? Muchos pueden pensar que sería lo ideal para sobrevivir a la sentencia: publish or perish, publicar o perecer. Pero existen circunstancias en las que ese adagio cambia su significado y puede convertirse en publicar "y" perecer, lo cual ocurre cuando el esfuerzo en forma de artículo científico y dinero, termina en poder de una editorial predadora.

El término editorial predadora deriva del anglo predatory publisher, y es, por razones obvias, en ese idioma en el que más se ha comentado sobre el tema.

Detrás de una computadora, un sitio Web con acceso abierto y la habilidad necesaria para inventar títulos atractivos de revistas, en apariencia científicas, existe hoy un gran número de individuos disimulados como editoriales o revistas. Estos sitios prácticamente no son leídos ni referidos, salvo por los propios autores, a quienes se les cobra cientos y hasta miles de dólares, enarbolando pretextos tales como que se necesitan fondos para el mantenimiento del soporte informático, o para facilitar la publicación a profesionales de países en desarrollo, etcétera.

Este tipo de fraude es causa de preocupación en medios científicos, no solo de las ciencias médicas, sino de todas las ramas del conocimiento, pues dichas editoriales comprenden colecciones y revistas de tantos perfiles como sean necesarios para aumentar las posibilidades de engaño y obtener mayores utilidades.

¿Cómo proliferan las editoriales predadoras? Publicar es sinónimo de notoriedad, prestigio y crédito profesional, lo cual constituye una gran ventaja para estos timadores que obtienen utilidades por un proceso editorial supuestamente acreditado que no es más que pura falacia, pues el autor pierde su prestigio junto con su dinero y con el derecho de autor de su artículo.

Es lógico que los profesionales de países en desarrollo aspiren a publicar en las revistas que más se referencian, pero esto muy pocas veces es posible, por lo que se convierten en presas fáciles de las editoriales y revistas predadoras, las cuales han incrementado su presencia en zonas de actividad científica emergente, como en la India, por ejemplo, donde el promedio de aparición de nuevas editoriales con estas características es de una semanal.⁵

Si se cuenta con un resultado que mostrar, no se desprecia la invitación a publicar en una editorial anglófona, pues sugiere mayor divulgación. En todo caso, el principal problema sería el pago, el que ocasionalmente corre a cargo de proyectos con presupuestos para publicaciones o la colaboración entre colegas que ante la posibilidad de que su trabajo aparezca en una "revista internacional" o en una compilación en forma de "libro", caen en el engaño de un sitio Web con buena apariencia, con ISSN o ISBN, según el caso, logos de supuestas indexaciones acreditadas y la promesa de una revisión por pares inmediata y de calidad, previa a la rápida publicación.

Aunque existen algunos precedentes, quizás el hecho de circular en idioma hispano haya limitado hasta ahora la proliferación de tal tipo de invitaciones en los medios académicos cubanos. No obstante, quienes han publicado en revistas en inglés, reciben con bastante frecuencia correos de estas editoriales engañosas, que no solo desacreditan a los autores que publican en ellas, sino también a los supuestos revisores y miembros de sus comités de revisión, quienes muchas veces, o bien son ficticios, o no pueden ser contactados, o son verdaderos especialistas en la materia; pero ni siquiera han dado su consentimiento para tales fines.

¿Cómo identificar una editorial predadora? Jeffrey Beall, bibliotecario de Denver, Colorado, opera un blog creado con el fin de mantener un monitoreo y análisis critico de las editoriales académicas de acceso abierto. Beall publica una lista de editoriales predadoras que en su última actualización, en octubre de 2012, tenia 199 editoriales y 87 revistas individuales.⁶

En el mismo blog se muestra un conjunto de más de 40 criterios para la identificación de editoriales predadoras. Algunas características del modus operandi, según tales criterios son: promover sus títulos por medio de correos electrónicos masivos con énfasis en la revisión y publicación rápida; las direcciones electrónicas terminan en gmail.com, yahoo.com y otros proveedores de correo gratuitos; representan gran cantidad de publicaciones para las cuales usan una plantilla común que sirva para crear cada sitio específico; las revistas abarcan temas muy diversos y mantienen el mismo comité editorial; se enfocan en los autores, no en los lectores; presentan vínculos vacíos o incorrectos en las secciones "política de privacidad", "términos de uso" y "contáctenos" y falsean el verdadero lugar de base de la editorial; inventan factores de impacto; alegan la indexación en bases de datos reconocidas utilizando sus logos; entre muchas otras.

Dichos criterios son polémicos, pues existen publicaciones legítimas que incurren en algunos de ellos. Además, según los que opinan en el propio blog, son demasiado y en ocasiones se reiteran; otros opinan que son poco específicos, pero lo cierto es que si bien necesitan ser revisados, es un material valioso para reconocer el terreno que se camina en términos de legitimidad editorial.

Como ejemplo para ilustrar lo anteriormente expuesto, se escogió una editorial predadora denominada Intech, por ser accesible desde la intranet nacional de Infomed.⁷ En la página de inicio proclama tener 1 934 libros, 12 revistas y mas de 70 000 autores, mientras que un contador que cambia continuamente va sumando los archivos que, según la editorial, han sido descargados. En octubre de 2012 el número superaba la cifra de 15 000 000.

Por azar se escogieron dos libros de los anunciados en el sitio: Effects of Antidepressants y Prenatal diagnosis. Ambos son compilaciones de artículos particulares sin orden lógico ni fuerza de relación interna que demuestre que son capítulos de un libro. Al intentar consultar a los supuestos editores, solo se disponía de los nombres, los vínculos comunicaban que el Dr. Ru-Band Lu, y el Dr. Richard Choy, respectivamente, no habían ingresado ninguna información adicional.

Todavía algunos escépticos podrían preguntarse ¿y qué gana Intech con diseminar supuestos libros y artículos de dudosa calidad si lo hace de forma gratuita? La distribución es libre de costo, pero no lo es el hecho de publicar, y allí está el timo. En la sección inferior, en el vínculo que declara los principios de publicación, se explica textualmente: "este modelo no es exento de costos (de revisión, producción, archivo, y hospedaje en línea), por lo que se requiere que los autores paguen un modesto importe de procesamiento (Article Processing Charge). Este importe de procesamiento, el cual promedia los 590 €, es menor que la mayoría de las editoriales de acceso abierto". Y continúa con la explicación de cómo efectuar el pago.

A manera de consideraciones finales, para evitar el infortunio de tales seducciones, se recomienda publicar en el mismo espacio en que se lee y se cita, asumiendo que sea legítimo.⁵ Mientras más se divulgue y se informe sobre esta modalidad fraudulenta, menor será la posibilidad de que los autores sean engañados. La alfabetización informacional debe incluir herramientas para el reconocimiento del fraude publicitario. Se exhorta a los tribunales de otorgamiento de segundo grado de especialidades médicas, de categorías docentes, investigativas y de grados científicos, a que presten especial atención a los requisitos exigidos para las publicaciones de los candidatos y descalificar las provenientes de editoriales ilegítimas.

No es difícil presagiar que, además de la Editorial Académica Española, otras editoriales o revistas oportunistas caigan en avalancha y pretendan, por medio del engaño, hacerse con el fruto de los esfuerzos de los profesionales cubanos. Es necesario ser muy agudos al elegir a dónde enviar los resultados de investigación y estar atentos para publicar y no perecer.

MSc. JOSÉ ANGEL CHÁVEZ VIAMONTES,
MSc. JUDITH QUIÑONES HERNÁNDEZ
Universidad de Ciencias Médicas de Camagüey
[e-mail]

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Silva Ayçaguer LC. Asechanzas en el mundo editorial. Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud (ACIMED). 2012 [citado 20 octubre 2012];22(1). Disponible en: http://www.acimed.sld.cu/index.php/acimed/article/view/266/210

2. Silva Ayçaguer LC. Acerca de una modalidad editorial espuria. Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud (ACIMED). 2012 [citado 20 octubre 2012];22(1). Disponible en: http://www.acimed.sld.cu/index.php/acimed/article/view/265/189

3. Trinchet Soler R. Comentarios sobre la nota "Acerca de una modalidad editorial espuria". Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud (ACIMED). 2012 [citado 20 octubre 2012];22(1). Disponible en: http://www.acimed.sld.cu/index.php/acimed/article/view/314/216

4. Silva Ayçaguer LC. Aclaraciones necesarias sobre las modalidades editoriales. Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud (ACIMED). 2012 [citado 20 octubre
2012];22(1). Disponible en: http://www.acimed.sld.cu/index.php/acimed/article/view/313/215

5. Beall J. Predatory publishers are corrupting open access. Nature [Internet]. Sept 2012 [citado 20 octubre 2012];489(7415):[3 pantallas]. Disponible en: http://www.nature.com/news/predatory-publishers-are-corrupting-open-access-1.11385

6. Beall J. Scholarly Open Access Blog [Internet]. Denver: Jeffrey Beall. 2012 [citado 20 octubre 2012]. Disponible en: http://scholarlyoa.com

7. Intech [Internet]. 2004 [citado 20 octubre 2012]. Disponible en: http://www.intechopen.com