ACADÉMICAS/ DIDÁCTICA

 

El aprendizaje basado en problemas en la apreciación de las artes plásticas

 

The Problem based learning in Apreciation in Visual Art

 

 

Yuriet Verde Trujillo¹, Tomás Cañas Louzau², Alexander López Padrón³

¹ Departamento de Ingeniería Biomédica. Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría. La Habana, Cuba.
² Dirección de Ciencias Sociales e Historia. Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría. La Habana, Cuba.
³ Centro de Estudios de la Educación Superior Agropecuaria. Universidad de Alicante, España.

 

 

---

RESUMEN

Se aborda la temática del uso del método del Aprendizaje Basado en Problemas (ABP) en la apreciación del arte como una vía de lograr que el estudiante gestione su propio aprendizaje y a su vez se sienta motivado en la búsqueda del conocimiento y la información de obras de arte que contribuyan a enriquecer su desarrollo cultural.

Palabras clave: aprendizaje basado en problemas, apreciación del arte, métodos, desarrollo cultural.

---

ABSTRACT

The following work approaches the thematic of the use of the method of the Based Learning in Problems in the appreciation of the art like a road of achieving the student to negotiate her own learning and in turn be motivated in the search of the knowledge and the information of works of art that contribute to enrich her cultural development.

Key words: problems based learning ,in appreciation of the art, method, cultural development.

---

 

 

INTRODUCCIÓN

Durante el paso del tiempo el arte ha formado parte de la existencia humana ya que el hombre a través de sus creaciones trasmite sus necesidades emocionales.

El arte está integrado por tres fuerzas: el artista o creador, la obra en si y el público que la disfruta, constituyendo una forma de comunicación entre el artista y el espectador que somete la obra a una serie de criterios y juicios estéticos por lo que el arte tiene un carácter polifuncional. La apreciación está relacionada con cualquier manifestación artística.

Para realizar una correcta apreciación se requiere conocer determinados aspectos que facilitan la lectura de la obra y permitan al espectador decodificar el mensaje transmitido por su autor; entre ellos, la época en que fue realizada la obra, el estilo al que pertenece, algunos elementos de la vida del creador –su personalidad, las relaciones con su época y con otros artistas, su postura ideológica, etc.– Esto lleva intrínseca la habilidad de valorar la producción artística, de emitir un juicio. Por ejemplo, cuando el pintor realiza un paisaje ofrece su visión peculiar de acuerdo con su propia percepción. Esa visión está condicionada por la ideología, originalidad, libertad de expresión, influencias artísticas presentes en la personalidad del creador. Luego, el espectador intentará desentrañar muchos de estos aspectos para los cuales debe tener un conocimiento previo, además de su sensibilidad y las emociones que le transmiten la obra.

Según J. Dewey, cada persona se deleita con la obra de manera personal. [1]

Cada persona puede apreciar, independientemente de su nivel de conocimiento acerca del tema. La apreciación es importante porque es capaz de permitir el conocimiento del arte en todas sus manifestaciones, (de las artes plásticas en este caso) contribuyendo al desarrollo del nivel cultural de la humanidad y en particular, de nuestros estudiantes, posibilitando el disfrute estético de las obras y a su vez interrelacionando las diferentes manifestaciones.

En ocasiones encontramos que este proceso se dificulta en estos últimos, siendo necesario buscar alternativas y métodos que contribuyan a formar a un futuro profesional que dé respuesta a las necesidades con su modo de actuación y aproveche óptimamente la riqueza espiritual que brinda la cultura de la humanidad; profesionales integrales, multifacéticos y creativos, capaces de enfrentarse a su realidad, interpretarla y transformarla en función del desarrollo de la comunidad y que tengan la capacidad para interpretar el contexto en que se desarrollan, generar cambios en las comunidades y entidades donde intervengan socioculturalmente.

La educación tradicional desde los primeros años de estudios hasta el nivel de posgrado ha formado estudiantes que comúnmente se encuentran poco motivados y hasta aburridos con su forma de aprender; se les obliga a memorizar una gran cantidad de información, mucha de la cual se vuelve irrelevante en el mundo exterior a la escuela o bien en muy corto tiempo se presenta el olvido de mucho de lo aprendido y gran parte de lo que logran recordar no puede ser aplicado a los problemas y tareas que se les presentan en el momento de afrontar la realidad.

Ante lo anterior, que aún es vigente en buena medida, es necesario dirigir el proceso de enseñanza-aprendizaje no solo a la escueta transmisión de los conocimientos sino también a la asimilación de los mismos para dar respuesta a los problemas reales que giran en torno al que hacer diario de estos profesionales.

Reorientar el aprendizaje permite formar profesionales creativos, independientes, capaces de poner en práctica lo aprendido ante determinadas situaciones. Para este propósito se requiere estudiantes que participen activamente en la búsqueda de conocimientos, capaces de aprender por si mismos y de aplicar lo aprendido a la solución de problemas de su profesión (figura 1).

Un método que contribuye a dicha formación es el Aprendizaje Basado en Problemas (ABP), donde es el alumno quien asume el aprendizaje que considera necesario para resolver los problemas que se le plantean, conjugando diferentes áreas de conocimiento. [2]

En los últimos treinta años el ABP ha sido adoptado por escuelas de medicina en todo el mundo. Más recientemente ha sido aplicado en una persidad de escuelas profesionales y el interés en su incorporación en la educación superior en general ha ido incrementándose día a día. El ABP “es un método mediante el cual los alumnos construyen su conocimiento sobre la base de problemas de la vida real. Tradicionalmente primero se expone la información y posteriormente se busca su aplicación en la resolución de un problema, en el caso del ABP primero se presenta el problema, se identifican las necesidades de aprendizaje, se busca la información necesaria y finalmente se regresa al problema”. [3]

El ABP no se plantea como objetivo prioritario la adquisición de conocimientos de la especialidad, sino un desarrollo integral del profesional en formación. Por tanto, la misión primera y principal del ABP debe ser la de facilitar a este profesional en formación la creación de sus propias categorías intelectuales. En el ABP un grupo pequeño de alumnos se reúne, con la facilitación de un tutor, a analizar y resolver un problema seleccionado o diseñado especialmente, tomado de la vida real, para el logro de ciertos objetivos de aprendizaje. Durante el proceso de interacción de los alumnos para entender y resolver el problema se logra, además del aprendizaje del conocimiento propio de la materia, que puedan elaborar un diagnóstico de sus propias necesidades de aprendizaje, que comprendan la importancia de trabajar colaborativamente, que desarrollen habilidades de análisis y síntesis de información, además de comprometerse con su proceso de aprendizaje. [4]

“El ABP incluye el desarrollo del pensamiento crítico en el mismo proceso de enseñanza–aprendizaje, no lo incorpora como algo adicional sino que es parte del mismo proceso de interacción para aprender. Busca que el alumno comprenda y profundice adecuadamente en la respuesta a los problemas que se usan para aprender abordando aspectos de orden filosófico, sociológico, psicológico, histórico, práctico, etc. Todo lo anterior con un enfoque integral. La estructura y el proceso de solución al problema están siempre abiertos, lo cual motiva a un aprendizaje consciente y al trabajo de grupo sistemático en una experiencia colaborativa de aprendizaje”.[4]

Dentro de la experiencia del ABP los alumnos van integrando una metodología propia para la adquisición de conocimiento y aprenden sobre su propio proceso de aprendizaje. Los conocimientos son introducidos en directa relación con el problema y no de manera aislada o fragmentada. Los alumnos pueden observar su avance en el desarrollo de conocimientos y habilidades, tomando conciencia de su propio desarrollo. [3]

Se trabaja en equipos de seis a ocho integrantes con un tutor/facilitador que promoverá la discusión en la sesión de trabajo con el grupo. El tutor no se convertirá en la autoridad del curso, por lo cual los alumnos solo se apoyarán en él para la búsqueda de información. Es importante señalar que el objetivo no se centra en resolver el problema, sino en que este sea utilizado como base para identificar los temas de aprendizaje para su estudio de manera independiente o grupal, es decir, el problema sirve como punto de partida para que los alumnos cubran los objetivos de aprendizaje del curso. (Figura 2).

Dentro de las características que tiene este método podemos señalar las siguientes: es un método de trabajo activo donde los alumnos participan constantemente en la adquisición de su conocimiento; se orienta a la solución de problemas que son seleccionados o diseñados que tienen que ver con aspectos de la vida real en la que el estudiante interactúa para lograr el aprendizaje de ciertos objetivos de conocimiento; el aprendizaje se centra en el alumno y no en el profesor o solo en los contenidos, estimula el trabajo colaborativo en diferentes disciplinas; se trabaja en grupos pequeños. Los cursos con este modelo de trabajo se abren a diferentes disciplinas del conocimiento, el maestro se convierte en un facilitador o tutor del aprendizaje.

Dentro de las ventajas del Aprendizaje Basado en Problemas tenemos que los estudiantes se involucran más en su propio aprendizaje ya que se sienten motivados al interactuar con una realidad que les rodea en el contexto donde se desarrollarán profesionalmente. El estudiante se hace preguntas acerca de lo que va a aprender y busca el nexo de la realidad que le rodea y ese conocimiento y la dinámica de este proceso lo lleva a un pensamiento crítico, reflexivo y creativo al tener que dar soluciones al problema. Se desarrollan habilidades para el aprendizaje ya que el estudiante busca sus propias alternativas y estrategias para la búsqueda de la información, análisis de los datos recopilados, así como su solución, dando finalmente una evaluación de ese proceso.

El ABP lleva a los alumnos al aprendizaje de los contenidos de información de manera similar a la que utilizarán en situaciones futuras, fomentando que lo aprendido se comprenda y no solo se memorice. Al enfrentarse los estudiantes a situaciones reales del contexto donde en un futuro ellos actuarán hace que tengan una mayor retención de la información de manera significativa. Al estimular habilidades de estudio autodirigido, los alumnos mejorarán su capacidad para estudiar e investigar para afrontar cualquier obstáculo, tanto de orden teórico como práctico, a lo largo de su vida.

Los alumnos aprenden resolviendo o analizando problemas del mundo real y aprenden a aplicar los conocimientos adquiridos a lo largo de su vida en problemas reales, el ABP promueve la interacción incrementando algunas habilidades como; trabajo de dinámica de grupos, evaluación de compañeros y cómo presentar y defender sus trabajos.

Al trabajar con el ABP la actividad gira en torno a la discusión de un problema que es el eje alrededor del cual se desarrollan las actividades. ”El propósito implícito en el ABP es el utilizar una situación (problema) que sea capaz de activar el conocimiento previo, al tiempo de favorecer la construcción del conocimiento.”[5]

“En lo que al profesor concierne, la forma en que este puede ofrecer oportunidades al alumno para que viva las experiencias deseadas consiste en la estructuración de actividades; es decir, en establecer o promover situaciones de enseñanza–aprendizaje, en las cuales haya una alta probabilidad de que aquellas experiencias acontezcan realmente” [6]. (Figura 3).

M. Martínez Llantada valora que “la forma más concreta de expresión de la contradicción es el problema. La capacidad de plantear y resolver problemas es la característica más clara del pensamiento creador”. [7]

Los autores de este artículo valoran de esencial lo expresado anteriormente, pues consideran que el problema es un elemento fundamental dentro del proceso de enseñanza-aprendizaje y por ende elemento clave del ABP, entendiendo la autora como problema a una situación que se desarrolla en un contexto, la cual sucede en un ambiente y condiciones similares a las situaciones reales en que sistemáticamente la solución de un problema engendra una nueva situación. De este modo, cada estudiante se desarrolla como un profesional al irse preparando para la solución de los problemas de su futura profesión.

El propósito que se pretende lograr durante las sesiones de trabajo es que a través del manejo de problemas diseñados ex profeso se estimule a los estudiantes a desarrollar las habilidades cognitivas necesarias para la generación de hipótesis, el razonamiento deductivo y el análisis de datos, al tiempo de determinar el conocimiento que necesitan construir para entender de manera más completa la situación presentada.

Para que el problema sea un reto cognitivo es necesario que sea elaborado de tal forma que contenga suficientes pistas para motivar a los estudiantes, debe plantear una situación con la que el estudiante se identifique y que motive la búsqueda independiente de información a través de todos los medios disponibles, dentro de un contexto relevante, parecido a lo que él enfrentará en su ejercicio profesional, y sobre todo, que genere la discusión fundamentada.

Por los elementos antes planteados y tomando en cuenta los aportados por la literatura que aborda el tema, existe consenso respecto a los aspectos a tener en cuenta al preparar un tema siguiendo el método del ABP:

1. El diseño del problema debe comprometer el interés de los alumnos y debe estar en relación con problemas o situaciones de la vida diaria para que los alumnos encuentren mayor sentido en el trabajo que realizan.

2. Los problemas deben llevar a los alumnos a tomar decisiones o hacer juicios basados en hechos, información lógica y fundamentada.

3. La cooperación de todos los integrantes del grupo de trabajo es necesaria para poder abordar el problema de manera eficiente.

Al tener a múltiples grupos explorando problemas diferentes o incluso examinando problemas semejantes, la labor de dirigir a estos grupos puede resultar agotadora para un solo profesor. Por ello, este puede muy bien tener en cuenta los servicios de asistentes de docencia o tutores familiarizados con los métodos y técnicas de ABP para que ayuden a los grupos. [2]

Tras completar la fase de investigación en la resolución de un problema, se puede solicitar a los grupos que redacten un informe y lo expongan al resto de la clase. (Figura 4).

Los problemas de estructura incompleta requieren más información de la que se haya inicialmente disponible para comprender el problema, contienen múltiples vías de solución, cambian mientras se va obteniendo nueva información, previenen a los alumnos de la certeza de tener la respuesta correcta, generan interés y controversia, y hacen que el aprendiz plantee preguntas, tienen un final abierto y son lo suficientemente complejos como para demandar colaboración y una capacidad reflexiva más allá de la simple memorización, contiene elementos teóricos auténticos de la disciplina.

En el ABP el profesor a cargo del grupo actúa como “un tutor en lugar de ser un maestro convencional experto en el área y transmisor del conocimiento. El tutor ayudará a los alumnos a reflexionar, identificar necesidades de información y les motivará a continuar con el trabajo, es decir, los guiará a alcanzar las metas de aprendizaje propuestas”[8]. La principal tarea del tutor es asegurarse de que los alumnos progresen de manera adecuada hacia el logro de los objetivos de aprendizaje, además de identificar qué es lo que necesitan estudiar para comprender mejor.

Se debe tener en cuenta entre otros aspectos el contexto donde se aplica la experiencia, la persidad del nivel de preparación de los alumnos que ingresan a las carreras. Los cambios son una adaptación necesaria a lo que está ocurriendo en la sociedad. Las realidades son distintas según el lugar. Hay pasos que una institución puede tomar por lo que se debe adaptar y evaluar para cambiar la realidad, teniendo una idea clara de a dónde se quiere llegar.

De acuerdo con lo planteado anteriormente un ejemplo para constatar esto puede ser el siguiente:

En las artes plásticas han existido diferentes períodos de tránsito donde muchos artistas tomaron para su desarrollo distintos elementos, en ocasiones desconocemos el potencial artístico de la zona donde desarrollamos nuestra vida. En la comunidad de La Salud existe evidencia de uno de los pocos pintores primitivos del país, en su casa natal encontramos que existen obras que le dieron un nombre. Américo Cruz es símbolo de un período de las artes plásticas en Cuba. (Figura 5).

En este caso los estudiantes van a plantear qué conocen acerca del tema, harán equipos y buscarán información acerca del artista y su obra. El objetivo de este problema a resolver es que los estudiantes investiguen la vida y obra del pintor primitivo Américo Cruz además que aprecien una de sus obras. (Figura 6).

Este problema se presenta en las primeras sesiones, para que los estudiantes reconozcan la importancia de resolver problemas. Para lograrlo van a utilizar su capacidad de observación, la necesidad de concebir supuestos fundamentados y la elaboración de modelos con los que pueda confirmar sus planteamientos iniciales o bien replantearlos. Posteriormente lo discuten con un equipo de trabajo seleccionado al azar, generalmente de 4 o 5 integrantes y hacen la propuesta de equipo. El profesor se apoyará en especialistas de la casa de Cultura del municipio y de los trabajadores de la Galería Municipal que lleva su nombre.

Las propuestas se presentan y los demás equipos preguntan, aclaran o discuten la validez del modelo. Finalmente se presenta y cada uno de los equipos en forma inpidual registra lo que en su concepción resultó de esta presentación.

Ventajas y desventajas de la aplicación del método del Aprendizaje basado en Problemas en el contexto universitario cubano,

La utilización del método es muy factible, se debe tener en cuenta, entre otros aspectos, el contexto donde se aplica la experiencia, la persidad del nivel de preparación de los alumnos que ingresan a las carreras.

Los cambios son una adaptación necesaria a lo que está ocurriendo en la sociedad. Las realidades son distintas según el lugar. Hay pasos que una institución puede tomar por lo que se debe adaptar y evaluar para cambiar la realidad, teniendo una idea clara de a dónde se quiere llegar.

Dentro de las ventajas de la utilización del ABP tenemos las siguientes:

• El estudiante enriquece su propio aprendizaje buscando alternativas y soluciones a los problemas planteados, convirtiéndose en protagonistas.

• Logran una independencia cognitiva.

• Se desarrolla el trabajo en equipo, aspecto este muy importante para las relaciones interpersonales.

• Los estudiantes aprenden a autoevaluarse y a evaluar al resto de los compañeros de una manera provechosa y enriquecedora.

• Enfrentan problemas de la vida real y buscan sus soluciones.

Dentro de las desventajas tenemos las siguientes:

• El tiempo que está destinado para resolver los problemas.

• El contexto sociohistórico donde se desarrolla el estudiante.

• Los recursos necesarios como bibliografía, etcétera.

• El cambio de la mentalidad del profesor para la aplicación de este método.

• La falta de hábitos de estudio independiente y de trabajo colaborativo por parte del estudiante.

 

CONCLUSIONES

- El método propuesto puede permanecer a pesar de los cambios curriculares, ya que sus características son válidas y de gran utilidad para otras materias.

- El método basado en el ABP, en el contexto de la Apreciación del Arte desarrolla y enriquecen la teoría didáctica general, sistematizando regularidades del proceso e incorporando, nuevos elementos válidos en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

- El método del ABP contribuye a la vinculación teoría-práctica-investigación; el trabajo independiente y la autopreparación. Se contribuye, además, a la polémica y la reflexión durante el proceso de enseñanza-aprendizaje.

 

REFERENCIAS

1. DEWEY, J. El arte como experiencia. Barcelona: Ediciones Paidós Ibérica, 2008. p. 390.

2. MONRAD, C. and SLEMEYER, A. PBL workshop. La Habana: ISPJAE. Facultad de. Ingeniería Eléctrica, 2008.

3. INSTITUTO TECNOLÓGICO Y DE INVESTIGACIONES SUPERIORES DE MONTERREY. El aprendizaje basado en problemas como técnica didáctica. Monterrey: Instituto Tecnológico y de Investigaciones Superiores de Monterrey, Dirección de Investigaciones y Desarrollo educativo, 2007.

4. STANFORD UNIVERSITY. “Speaking of Teaching” [en línea]. Stanford University Newsletter on Teaching. Winter, 2001, Vol. 11, no 1. [Acceso 17 de octubre 2007]. Disponible en http://www.ub.es/mercanti/abp_traduccion.pdf

5. MONTEMAYOR FLORES, Georgina y ESCOBAR BRIONES, Carolina. Aprendizaje basado en problemas en ambientes de TIC. [en línea]. [Acceso 23 de octubre/2008]. Disponible en: http://bibliotecadigital.conevyt.org.mx/colecciones/documentos/somece/21.pdf

6. DÍAZ BORDENAVE, J. y MARTINS PEREIRA, Adair. Estrategias de enseñanza aprendizaje. San José, Costa Rica: IICA, 1982, p. 96

7. MARTÍNEZ LLANTADA, Marta. Calidad educacional, actividad pedagógica y creatividad. La Habana: Editorial Academia, 1998. p. 71

8. CAMACHO CONTRERAS, E. y FUENTES MORENO, F.J. El tutor efectivo en la dinámica del ABP. Colima: Universidad de Colima. Laboratorio de Habilidades Clínicas, 2000. p. 3.

 

 

Recibido: 28/01/2013
Aprobado: 21/02/2013

Yuriet Verde Trujillo. Licenciada en Educación, especialidad Biología. Profesora asistente. Departamento de Ingeniería Biomédica del Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría. E-mail: [e-mail]

Tomás R. Cañas Louzau. Doctor en Ciencias Filosóficas. Profesor de Historia, Filosofía, y Economía Política en el Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría. Vicepresidente del Tribunal Nacional Permanente para el otorgamiento del grado de doctor en Ciencias de la Educación. E-mail: [e-mail]

Alexander López Padrón. Profesor Titular. Centro de Estudios de la Educación Superior Agropecuaria. Doctor en Medicina Veterinaria. Doctor en Ciencias Pedagógicas. Estudios de Investigación Posdoctoral en Teoría y Métodos Educativos en la Universidad de Alicante, España. E-mail: [e-mail]