INTRODUCCIÓN
El movimiento cooperativo en el contexto internacional ha asumido determinadas particularidades en correspondencia con las condiciones concretas de cada país, a pesar de la existencia de regularidades generales que permiten constatar la viabilidad del mismo, en los marcos de una variedad de modelos que se presentan como alternativas frente a la crisis global.
Las experiencias internacionales resaltan la importancia de algunos de los aspectos de desempeño socioeconómico de cooperativas, tales como: gestión integral, marco jurídico, ambiente institucional, acceso a financiamiento, asistencia o acompañamiento integral, educación cooperativa, estrategias y planes viables y consecuentes, así como la intercooperación y su proyección hacia la comunidad. 1
En el proceso de actualización del modelo económico y social cubano han ocurrido cambios significativos que deben asentarse sobre la base del reconocimiento de la heterogeneidad socioeconómica como un rasgo característico de los procesos de construcción del socialismo. Uno de ellos ha sido extender la creación de cooperativas en sectores no agropecuarios, lo cual constituyó un avance en la concepción del cooperativismo en Cuba.
El desarrollo del cooperativismo en Cuba se ha organizado en 4 etapas: la 1ra desde la década de los años 60 con la creación de las Cooperativas de Crédito y Servicios (CCS), la 2da etapa comenzó en los 70 con la organización de las Cooperativas de Producción Agropecuarias (CPA), la 3ra coincidió con los años 90 en un período convulso con el fin de buscar mecanismos para elevar los niveles productivos, en esta etapa fueron creadas las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC). En el año 2013 comenzó la 4ta etapa con la constitución de las Cooperativas no Agropecuarias, lo que demostró que al cooperativismo le correspondía un lugar importante en el desarrollo socioeconómico nacional.
El problema científico al que se le da solución en esta investigación es: ¿Cómo puede la cooperativa, con su potencial humano, económico-productivo, social y tecnológico, posicionarse como actor clave del desarrollo local a través de sus vínculos con los gobiernos territoriales y otros actores?
El objetivo general consistió en perfeccionar la gestión de empresas cooperativas y su contribución al desarrollo local en Cuba sobre la base del diseño e implementación de un conjunto de aportes teórico-metodológicos y prácticos.
Los objetivos específicos que permitieron el cumplimiento del objetivo general son los siguientes:
Elaborar y difundir nuevas concepciones (enfoques, conceptos, teorizaciones, metodologías, tecnologías, programas de formación) sobre la gestión de empresas cooperativas y su contribución al desarrollo local.
Fortalecer el papel del sector cooperativo en los procesos de desarrollo local a través de la introducción de tecnologías de gestión, que propiciaron su vinculación con los gobiernos territoriales y otros actores.
Incidir en el diseño de políticas públicas territoriales, sectoriales y nacionales orientadas a la consolidación del sector cooperativo y su contribución al desarrollo local en Cuba.
MÉTODOS
En el desarrollo de la investigación se aplicaron los siguientes métodos:
Métodos teóricos:
Método histórico-lógico: se utilizó para determinar las tendencias de la gestión de empresas cooperativas y su vinculación con el desarrollo local. Se aplicó para analizar los modelos, procedimientos y mecanismos que antecedieron a las propuestas de esta investigación. Su aplicación permitió reconocer experiencias nacionales e internacionales referidas al tema y analizar sus contribuciones y principales limitaciones teórico-metodológicas en función de las necesidades de la presente investigación.
Método sistémico: se empleó en función de fundamentar los modelos y metodologías.
Método de modelación: se utilizó con el propósito de fundamentar y estructurar la representación artificial de los modelos, metodologías y procedimientos propuestos.
Métodos empíricos:
Método de medición: se empleó en los diagnósticos cualitativos y cuantitativos que se realizaron para la constatación empírica de las diferentes problemáticas que fundamentaron la necesidad de esta investigación.
Método de expertos: se aplicó en la validación teórica de algunas de las propuestas de modelos generados en la investigación.
Asociados a los métodos teóricos y prácticos se utilizaron los siguientes procedimientos:
Análisis y síntesis: se utilizó para la descomposición del funcionamiento del objeto en sus diversos componentes y el establecimiento de las relaciones entre ellos. En sentido general posibilitó interiorizar la esencia de cada una de las partes que componen los modelos, metodologías y procedimientos propuestos.
Abstracción: se utilizó para el estudio y la descomposición de la gestión de empresas cooperativas en sus partes integrantes (planificación, organización, implementación y evaluación) y su vinculación con el desarrollo local y los gobiernos territoriales.
Inducción-deducción: se empleó para determinar generalidades y regularidades de la gestión de empresas cooperativas y su contribución al desarrollo local. Además, se aplicó para establecer las ideas a defender, el diseño de los modelos, las metodologías y los procedimientos y la formulación de indicadores de evaluación.
Axiomático-deductivo: se utilizó en la definición del problema científico y su posterior constatación, a partir de la identificación de las limitaciones existentes en la gestión de empresas cooperativas y su contribución al desarrollo local, las cuales sustentaron la necesidad de su perfeccionamiento.
Para la captación, procesamiento y análisis de la información se utilizaron las técnicas de entrevista individual y grupal, encuesta y análisis documental.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La investigación abordó una problemática de importancia estratégica para Cuba, a partir de las prioridades definidas en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030 y los Lineamientos del Partido y la Revolución para el período 2016-2021. Las concepciones científicas y aportes prácticos que se generaron contienen relevancia internacional a partir de la validez de sus contribuciones al desarrollo de la teoría del cooperativismo.
Uno de los temas en debate a nivel global es el de la gestión de empresas cooperativas y su vinculación al desarrollo local y los gobiernos territoriales. En relación con lo anterior se discutió qué cambios deben realizarse en la gestión económico-productiva, social y tecnológica, en función de contribuir al posicionamiento de las cooperativas como actores claves del desarrollo local.
La conexión entre esos 3 asuntos: la gestión de empresas cooperativas, el vínculo entre los gobiernos territoriales y las cooperativas y el desarrollo local, constituyó la guía principal de la investigación para explorar la realidad internacional, nacional y territorial y sustentar los aportes teórico-metodológicos y prácticos.
Para el caso específico del sector cooperativo es necesario, al abordar la gestión pública, considerar las particularidades de su administración de acuerdo a los siguientes factores: 2
En primer lugar, las cooperativas y en general las diferentes formas asociativas nacieron dentro de un marco donde los valores de justicia y solidaridad condicionan la obtención de beneficios económicos y sociales. En general las empresas que funcionan bajo el esquema de estos principios, tienen la oportunidad de desenvolverse en mejores condiciones y son más eficientes y eficaces, constituyendo una fortaleza para la administración cooperativa.
En segundo lugar, la administración democrática. El máximo órgano de gobierno de las cooperativas debe estar representado en la Asamblea General de Asociados (AGA). Este órgano debe intentar reproducir constantemente su capital social y mantener la confianza de los asociados, los empleados, la familia, la comunidad y la sociedad en general. Por tanto, en la toma de decisiones jugará un papel esencial.
Como tercer elemento, la forma de distribución de los excedentes o resultados en los que se tiende más a la igualdad y a la equidad.
Como 4to y último elemento, destacar la responsabilidad social que tienen las cooperativas para con sus asociados y empleados, sus familias y la comunidad, donde se entrelazan el aspecto económico como base y su aspecto social como finalidad. Estos elementos obligan a dar un enfoque propio a los procesos de administración que aquí se generan, con el propósito de poder enfrentar los problemas presentes en las empresas cooperativas, específicamente el deficiente esquema de relaciones entre el Estado y las cooperativas, constituyendo uno de los problemas que desde el punto de vista externo afecta la gestión de las mismas, tema que cuenta con un deficiente soporte teórico y práctico.
Las cooperativas, como actores del desarrollo local, por su naturaleza y origen han contribuido al desarrollo de los territorios donde se encuentran insertadas, a partir de los siguientes elementos: 3
La dedicación al acopio, la industrialización y la comercialización de producciones locales.
La posibilidad de contar con una importante infraestructura, equipamiento, tecnología, en comparación con otras formas de actividad empresarial, particularmente notorio en el medio rural y en las pequeñas comunidades.
Alto grado de organización y control interno y externo, brindando una formalidad relativamente mayor que las pequeñas empresas tradicionales ya sean familiares o de capital.
La posibilidad de actuar como entidad representativa o testimonial de los intereses del sector o de la comunidad.
La incidencia en temas tan importantes como el trabajo o el empleo digno, la atención a los problemas de la salud y la participación en la vida sociocultural, así como en el conjunto de las actividades locales.
Sensibilidad social y manejo de una cierta cultura económica que han favorecido la comunicación, la relación y la cooperación con otros actores sociales, económicos, políticos y gubernamentales.
Un elemento discretamente tratado hasta el momento lo ha constituido la inserción de la empresa cooperativa como ente generador del desarrollo local, a partir de sus fortalezas, vinculadas a los principios y valores por los cuales se rigen. Siendo portadora de independencia y autonomía, estos elementos le permiten paliar las barreras que en la actualidad presentan las políticas públicas. 4
Existen marcos referenciales teóricos que han permitido delinear aspectos presentes en la relación favorable entre las cooperativas y el desarrollo local, en virtud de que dichas organizaciones se identifiquen y pertenezcan al tejido local de los entornos donde surgieron, con un sentido humano en función de resolver los problemas de la comunidad.
Las cooperativas son consecuencias de lo local y se deben a ese nivel. Lo local forma parte estructural de todas y sólo considerándolo como punto de partida hacia espacios de mayor dimensión, y sin perder de vista lo mundial, es posible un desarrollo cooperativo con bases apropiadas.
En la construcción de nuestra sociedad socialista la unión de esfuerzos y acciones en pos de un objetivo afín debe apuntar a una marcha común con el debido respeto a la diversidad. Todo proyecto debe ser un estado de ánimo de equipo, que surge de la participación colectiva y se concreta en la interacción de todos los actores de la localidad, ese conjunto debe estar dispuesto a realizar esfuerzos, desbloquear conflictos, construir en lo posible una identidad colectiva en aras del desarrollo local sostenible.
Los elementos descritos han sustentado la necesidad y pertinencia de la investigación a nivel internacional y nacional. Los principales resultados obtenidos fueron los siguientes:
Concepciones teórico-metodológicas y aportes prácticos asociados al proceso de institucionalización del sector cooperativo en Cuba y su vinculación a la gestión pública del desarrollo local, que lograron incidir en políticas públicas nacionales, sectoriales y territoriales.
Introducción de tecnologías de gestión de diferentes subsistemas de empresas cooperativas y sus encadenamientos productivos, en contribución a la consolidación del sector cooperativo como actor clave en el desarrollo local.
Instrumentos metodológicos para el control y evaluación de la gestión económico-financiera de empresas cooperativas y su contribución al desarrollo local.
Respecto al primer resultado, se obtuvieron como aportes en el marco de la investigación: una propuesta de institucionalización del sector cooperativo en función del redimensionamiento de las relaciones entre el Estado y las cooperativas en Cuba; una metodología para la constitución, organización y funcionamiento de las Cooperativas no Agropecuarias en Cuba; un procedimiento para la constitución de cooperativas de II grado en Cuba; un modelo de gestión pública para el sector cooperativo a escala municipal y la incorporación del sector cooperativo al diseño y gestión de las estrategias de desarrollo municipal (EDM) y provincial (EDP).
La institucionalización del sector cooperativo en Cuba se ha fundamentado en la creación de una estructura institucional que fomente, apoye, asesore, fiscalice y contribuya al logro de una real autonomía. Esta estructura, debe establecer los procesos de gestión pública mediante el cual el Estado garantice el cumplimiento de los compromisos económicos y sociales, y el reconocimiento pleno del sector cooperativo sin distinción entre el agropecuario y no agropecuario. 5
La valoración teórica y metodológica realizada al proceso de gestión pública y de la naturaleza y esencia de la empresa cooperativa, así como de las particularidades de su administración a partir de la utilización de los métodos teóricos, permitió definir la gestión pública para el sector cooperativo (GPSC). Constituye un proceso dinámico, participativo y de conciliación de intereses, encaminado al desarrollo y aumento del nivel y calidad de vida de la población, a partir de la instrumentación de políticas públicas en función de potenciar las particularidades de la gestión y consolidar el papel de la empresa cooperativa como actor directo en dicho desarrollo. 6
La definición de la GPSC ha concebido las funciones, etapas y ciclos del proceso de gestión pública, con un enfoque específico al considerar las particularidades de las empresas cooperativas. El funcionamiento de GPSC debe quedar sustentado en un instrumento de gestión, en este caso el Modelo de Gestión Pública para el Sector Cooperativo (MGPSC), definido teóricamente como el conjunto de premisas y principios a través de las cuales se debe planificar, organizar, ejecutar y controlar el proceso de gestión pública para el sector cooperativo. 7
Como parte del primer resultado, se diseñaron y estructuraron instrumentos metodológicos para la vinculación de las cooperativas con el resto de las formas de gestión estatal y no estatal; 8 así como su inserción en el diseño y gestión de las Estrategias de Desarrollo Municipal y Provincial. 9
El logro del segundo resultado se fundamentó en la introducción y generación de tecnologías para la gestión de empresas cooperativas, en contribución a la consolidación del sector cooperativo como actor clave en el desarrollo local. Como parte de dichas tecnologías, han destacado: el sistema integrado de gestión para las UBPC; la metodología para el perfeccionamiento del sistema de gestión empresarial de las CPA; el sistema para la distribución de utilidades de las Cooperativas no Agropecuarias; el procedimiento para la gestión de la intercooperación cooperativa como contribución al desarrollo territorial y la estrategia de formación y capacitación para el sector cooperativo.
Se fundamentó un sistema integrado de gestión con enfoque estratégico, adecuado a las particularidades de las UBPC, sobre la combinación de su filosofía, compromiso político, visión estratégica y responsabilidad social con la excelencia gerencial, en correspondencia con las particularidades que el proceso cooperativo le imprime.
Se ofreció la fundamentación teórica del sistema de gestión empresarial de las CPA y su metodología de implementación a partir de un conjunto de etapas, pasos y métodos para gestionar integralmente sus subsistemas. 10
Se definió la intercooperación como las relaciones de cooperación establecidas entre 2 o más cooperativas con el objetivo de fortalecer la gestión y el cumplimiento de los principios cooperativos. Se fundamentó un procedimiento cuyo objetivo radicó en la contribución al desarrollo del proceso de intercooperación cooperativa a partir del diseño e implementación de líneas de intercooperación coherentes con la EDM y el aprovechamiento de recursos endógenos en función del desarrollo territorial. 11
Se aportó una definición de educación cooperativa y sus dimensiones o ejes estratégicos: la formación filosófico-doctrinaria y la formación técnica y científico-innovadora. Se fundamentó un procedimiento para la gestión de la capacitación basado en el aprendizaje estructurado en etapas y pasos. Se destacó el aporte práctico basado en la concepción de planes de formación e indicadores para evaluar la gestión de la capacitación para el sector cooperativo y su reflejo en la producción y los servicios. 12,13
El tercer resultado logró la instrumentación de metodologías para el control y evaluación de la gestión económico-financiera de empresas cooperativas y su contribución al desarrollo loca. El control y la evaluación han constituido procesos relevantes para analizar el proceso de perfeccionamiento de la gestión económico-productiva de empresas cooperativas y su contribución al desarrollo local.
Las tecnologías que han sustentado este resultado son las siguientes: un sistema de indicadores para evaluar la eficiencia y eficacia de la gestión económica, productiva y social de las empresas cooperativas; un sistema de contabilidad social para las empresas cooperativas agropecuarias; una metodología para la realización de auditorías de gestión social cooperativa; una propuesta de estructura y funciones del órgano de control interno de las cooperativas y una guía de autocontrol para las Cooperativas no Agropecuarias.
Se realizó una propuesta de sistema de indicadores, precisando la coherencia entre indicadores físicos, de valor y sociales, en función de la eficiencia y eficacia socioeconómica de las cooperativas y las peculiaridades de su gestión. 14
Se aportó la definición de contabilidad social cooperativa (CSC) como área o rama de la contabilidad social. La CSC permite a la empresa cooperativa la captación, el registro, la presentación, el análisis e interpretación de la información que se deriva de sus acciones sociales, enfocadas a la satisfacción de las necesidades de sus asociados y trabajadores, sus familias y los miembros de la comunidad donde se encuentra insertada la organización. La CSC debe contar con un instrumento contable, en este caso el sistema de contabilidad social (SCS), definido teóricamente como el conjunto de principios, características, procedimientos y métodos aplicables a la gestión social de las cooperativas agropecuarias y que se relacionan entre sí. El SCS se sustenta en un conjunto de premisas, principios, características, procedimientos y métodos aplicables a la gestión social de las cooperativas, lo que permitió su implementación y demostró su viabilidad. El Manual de Contabilidad Social elaborado, ha constituido una herramienta que facilitó la implementación del SCS. 15
Se formuló como nueva modalidad, la auditoría de gestión social cooperativa. Esta modalidad se conceptualiza como aquella auditoría interna que permite en una empresa cooperativa examinar y evaluar el proceso de gestión de la responsabilidad social cooperativa, con el propósito de contribuir a la elevación de los niveles de economía, eficiencia y eficacia, e impacto causado en las personas vinculadas a la misma, así como para verificar el cumplimiento de las disposiciones de AGA. Se aportaron los procedimientos generales para su aplicación, a partir de las diferentes técnicas y acciones a realizar por el auditor en cada etapa de este proceso; así como una propuesta de indicadores cuantitativos y cualitativos y los criterios para su evaluación. 16
Conclusiones
Se enriqueció la teoría y práctica del cooperativismo a partir de las definiciones de conceptos tales como gestión pública para el sector cooperativo, contabilidad social cooperativa, auditoría de gestión social cooperativa, sistema integrado de atención para las UBPC y sistema de gestión empresarial de las cooperativas, entre otros. Se integraron con enfoque sistémico y estratégico un conjunto de aportes teóricos, metodológicos y prácticos orientados al perfeccionamiento de la gestión económica, productiva y social de las empresas cooperativas en función de su contribución al desarrollo local sostenible, desde el aprovechamiento de recursos endógenos y la articulación con los gobiernos territoriales y demás actores locales en el proceso de diseño y gestión de las estrategias de desarrollo municipal y provincial.
Las líneas de aporte de esta investigación asociadas a la responsabilidad social cooperativa, la gestión pública para el sector cooperativo, la intercooperación cooperativa, los encadenamientos productivos y la financiación de proyectos de desarrollo local del sector cooperativo, encuentran aplicación en más de 60 cooperativas de 10 provincias y 32 municipios de Cuba, y en países tales como República Dominicana, El Salvador, Perú y Ecuador.