EDITORIAL

 

 

Discurso pronunciado por el Dr. Castell-Florit en ocasión de celebrarse el Día de la Odontología Latinoamericana

Speech delivered by Dr. Castell-Florit on the occasion of the Day of Latin American Stomatology

 

 

Compañeras y compañeros:

Lo primero expresar en este acto nuestro sentimiento de pesar por la muerte de dos de los estomatólogos que han escrito para la posteridad una historia de dedicación plena al surgimiento y consolidación del Sistema Nacional de Salud de Cuba y en particular del sub-sistema de Estomatología. Me refiero a los Profesores Wenceslao Martínez García y Orlando de Cárdenas Sotelo. Para ellos nuestro sincero homenaje de recordación en este 3 de octubre, Día de la Odontología Latinoamericana.

En solo dos cuartillas quiero expresar mi sentir en lo que ha representado la Estomatología en la historia de la salud pública cubana. El poder clausurar una actividad de este tipo representa un privilegio y a su vez un gran honor, razón por lo cual le doy las gracias a la directiva de la Sociedad Cubana de Estomatología por esa designación.

Cuántos héroes de la Estomatología cubana han recibido el reconocimiento de "la huella histórica de la salud pública cubana" en la tarde de hoy, cuánto orgullo poder compartir con ustedes.

Esta distinción, además de representar el reconocimiento al esfuerzo durante años de ustedes, servirá de acicate y aliento para los más jóvenes, para que sigan su ejemplo perecedero, contribuyendo así al constante desarrollo de la salud pública y en particular la Estomatología cubana.

La Estomatología en Cuba tiene una historia muy rica. Uno de los profesionales que han escrito esta historia lo es el Dr. Antonio Recasens Garrido, promotor principal de la celebración del Día de la Odontología Latinoamericana en nuestro país a partir del año 1929, como todos conocemos. La biblioteca de la Facultad de Estomatología de La Habana desde ya hace muchos años lleva su nombre como homenaje a este preclaro hombre de sus tiempos.

Con letras doradas se inserta también en esta rica historia, la vida y la obra de numerosos odontólogos y estomatólogos cubanos que como Federico Poey Aguirre, hijo del sabio naturalista Felipe Poey, desarrollaron una fecunda labor científica dentro y fuera de nuestras fronteras dándole prestigio y relieve a esta linda e importante profesión. Algo similar podemos decir de otros muchos que han representado todas las epopeyas libertarias de nuestro pueblo, solamente destacar que en las luchas independentistas del siglo XIX existieron cuatro odontólogos que alcanzaron los grados de General.

En este 3 de octubre, mirándoles las caras a extraordinarias figuras de esta ciencia de la salud pública, apreciamos y recordamos a todos aquellos estomatólogos que entregaron sus consultas privadas al triunfo de la Revolución, los que fundaron el Sistema Médico Rural, los que fueron a Argelia en la primera misión internacionalista, los que participaron en las misiones de Angola y Etiopía, los que asumieron altas responsabilidades en el Sistema Nacional de Salud en el Nivel Central desde su constitución, en provincias, en regiones y municipios, así como en Institutos Superiores de Ciencias Médicas, y los que dentro y fuera de nuestra querida Patria dan lo mejor de sí para continuar llevando con la frente muy en alto esta historia de heroísmo, de perseverancia, de patriotismo que cada trabajador de la salud en general y cada estomatólogo o técnico relacionado con esta disciplina lleva consigo, y a la cual nunca renunciarán.

Compañeras y compañeros:

Los estomatólogos cubanos y todos los trabajadores que se desempeñan en este sub-sistema del Sistema Nacional de Salud con mucha humildad y decoro, han hecho posible con su esfuerzo y dedicación la concreción de la proyección social de la Estomatología en Cuba, una de las conquistas más notables del proceso revolucionario, lo cual ha posibilitado alcanzar notables indicadores de salud en el campo de la Estomatología, con énfasis en las acciones de promoción y prevención desde las más tempranas edades en la población cubana.

En esta nueva celebración del Día de la Odontología Latinoamericana, felicitamos a todos los que abrazan esta noble profesión, jóvenes y ya no tan jóvenes, y rendimos tributo a las generaciones que no han dejado caer ni dejarán caer las banderas enarboladas, así como a las nuevas generaciones, que sabrán transitar con dignidad y patriotismo por la huella histórica de la Estomatología y de la Salud Pública cubanas en el camino desbrozado por los precursores.

Muchas gracias.

 

Discurso pronunciado el 3 de octubre de 2008.