EDITORIAL

 

Para recordar a un maestro

 

To recall a teacher

 

 

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En las primeras horas de la mañana del día 26 de julio de 2014, nos sorprendió la triste noticia de la muerte del Dr. C. Eduardo Cutié León. Era algo esperado, dado su precario estado de salud, pero no por eso menos doloroso.

Se produce su fallecimiento a los 81 años de edad y de toda una vida dedicada a la lucha por la salud de la mujer en nuestra especialidad.

Ostentaba en ese momento las categorías de Profesor Titular Consultante, Dr. en Ciencias Médicas y profesor de Mérito de la Universidad de Ciencias Médicas de la Habana.

Miembro Titular y de Honor de la Sociedad Cubana de Obstetricia y Ginecología, cuya presidencia asumió exitosamente durante varios años.

Como miembro fundador del Grupo Nacional de Asesores del Ministro de Salud Pública, realizó una dedicada labor en todo el país y en las jornadas de normación de la especialidad, en las diferentes etapas de desarrollo de las mismas.

En sus responsabilidades docentes se destacó como jefe del departamento de la asignatura durante años y también realizó una excelente tarea en ese mismo periodo como Profesor Principal de la asignatura.

Miembro de varias sociedades de Ginecología y Obstetricia en diferentes países, también nos representó con excelencia en la Secretaría de la Federación Latinoamericana de Sociedades de Obstetricia y Ginecología (FLASOG) de 1978-1981 y en el Comité Ejecutivo de la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) de 1983-1985.

Recibió numerosas medallas, reconocimientos y condecoraciones, muchas relacionadas con su rango docente y científico y otros que mostraban la integralidad de su vida como médico revolucionario.

Este apretado recuento que permitió a muchos compañeros conocerlo y apreciar su valía en todas las responsabilidades que enfrentó en su labor de médico y profesor, no estaría completo, si no habláramos del hombre en toda la extensión de esa palabra.

Se caracterizó por su honestidad, modestia y su exigencia para lograr la excelencia en toda tarea que ejecutaba.

Asumió con dignidad y sentido humano todos sus compromisos en los diferentes periodos.

Como su compañera, amiga y siempre alumna, he recibido la invitación a escribir esta despedida con orgullo y la posibilidad de hacerlo, me hace pensar lo que como persona y profesional a él le debo.

Siempre decía “Obstetricia y Ginecología, puede aprenderse en los libros, la disciplina, la exigencia y un estilo incorruptible de trabajo, solo con el compromiso diario de ser mejor”.

Nuestra especialidad ha perdido uno de sus profesores más brillantes, Profesor de profesores que constituye un paradigma para nuestra medicina.

Nos deja su impronta, su ejemplo, como un reto permanente para ser cada día mejores.

 

Prof. Sonia Águila Setién
Presidenta de la Sección de Medicina
Materno Fetal y Perinatología de la SCOG

 

 

Recibido: 26 agosto de 2014.
Aprobado: 2 septiembre de 2014.