Introducción
Durante siglos en numerosos pueblos se ha conocido que pinchar o quemar ciertos puntos de la oreja produce algunas acciones terapéuticas. De hecho, en la medicina tradicional china se considera que la oreja está relacionada con cada parte del cuerpo, o sea, que la oreja y el cuerpo son una unidad que no puede ser separada, lo que constituye las bases teóricas de la auriculoterapia, cuyo origen -aunque incierto- se remonta al Oriente.1,2
Así pues, la auriculoterapia (del griego “terapia” que significa curar y del latín “aurícula” que quiere decir oreja) consiste en el tratamiento de diferentes afecciones a través de la oreja y se presenta como una rama de la acupuntura porque se emplean agujas chinas y semillas.3
Los microsistemas de acupuntura de la oreja, tal como se comprenden en la actualidad, surgieron en Francia entre los años 1954 y 1956, gracias a Paul Nogier, quien fue el primero en crear una cartografía, o mapa detallado, del pabellón auricular. Cada individuo presenta características propias en sus orejas en cuanto a la forma, anchura, longitud y posición respecto a la cabeza.4,5
Los puntos acupunturales que se encuentran en la aurícula sirven para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades, pues estabilizan los desequilibrios energéticos. La estimulación de ciertas terminaciones nerviosas que se encuentran en la oreja produce un efecto en la parte del organismo relacionada morfológicamente con la zona estimulada; existen 200 puntos energéticamente activos a través de los cuales se pueden tratar numerosas afecciones.6,7,8
En otro orden de ideas, la queratitis punteada superficial es la inflamación corneal que se caracteriza por pequeños puntos dispersos de pérdida o lesión del epitelio corneal. Sus síntomas son enrojecimiento, lagrimeo, fotofobia y visión ligeramente disminuida, y se diagnostica mediante un examen ocular con el uso de la lámpara de hendidura, que posibilita la observación de lesiones inflamatorias de dicho epitelio y del estroma superficial adyacente, las que se tiñen con la fluoresceína. Esta enfermedad suele tener diferentes causas, pero principalmente se origina por procesos infecciosos, aunque también pueden ser tóxicos, alérgicos o degenerativos.9-12
Las enfermedades corneales son frecuentes y abarcan varias alteraciones, especialmente epiteliales y endoteliales, que se manifiestan como una queratitis punteada, con disminución de la adherencia a la membrana basal e hipoestesia corneal.11 En determinadas ocasiones los tratamientos en pacientes con queratitis punteada superficial presentan resultados limitados; de ahí la necesidad de encontrar nuevas estrategias terapéuticas.
Con esta investigación se buscó demostrar la eficacia del tratamiento local convencional combinado con auriculoterapia en pacientes que padecían dicha oftalmopatía.
Métodos
Se realizó un estudio de intervención terapéutica no controlada en el Policlínico Docente 28 de Septiembre de Santiago de Cuba, de enero a julio del 2019, a fin de evaluar la evolución de pacientes con queratitis punteada superficial luego de ser tratados con medicamentos convencionales más auriculoterapia.
La muestra se seleccionó aleatoriamente de un universo de 200 pacientes que asistieron a la consulta de Oftalmología y quedó conformada por 92 con el diagnóstico, fundamentado por el cuadro sintomático y el aspecto de la córnea.
Para ello se determinaron como criterios de inclusión la disposición a recibir el tratamiento (previo consentimiento informado) y la edad de 16 y más años. Se excluyeron los pacientes con otras oftalmopatías, con enfermedades generales sistémicas no compensadas o entidades malignas. También se determinaron criterios de salida: deseo de abandonar la investigación y cambio de domicilio fuera de la ciudad o el país.
Se crearon 2 grupos de trabajo con igual número de pacientes: el A, con tratamiento local convencional más auriculoterapia, y el B, con tratamiento local convencional solamente.
Los pacientes fueron chequeados por cuatro períodos de 1 semana cada uno, tomando en cuenta las siguientes variables:
Sociodemográficas: edad y género.
De respuesta al tratamiento: Para evaluar la respuesta individual de cada paciente se emplearon las categorías mejoría y no mejoría y para el análisis integrado de todas las variables de respuesta se creó una variable sintética que tendría las categorías: cicatrizado y no cicatrizado.
La respuesta individual se dio en 2 categorías:
Mejoría: Cuando desapareció o disminuyó el infiltrado inflamatorio corneal al realizar el examen con la lámpara de hendidura a las 2 semanas de evolución.
No mejoría: Cuando no desapareció el infiltrado inflamatorio corneal o se mantuvo igual al realizar el examen con la lámpara de hendidura a las 2 semanas de evolución.
El análisis integrado de las variables de respuesta se ofreció en las siguientes categorías:
Cicatrizado: Se incluyeron aquellos pacientes en los que, al mes de evolución, había desaparecido o mejorado el infiltrado inflamatorio corneal luego de examinarles con la lámpara de hendidura.
No cicatrizado: Se consideraron los pacientes en los que, al mes de evolución, no había desaparecido o mejorado el infiltrado inflamatorio corneal al examinarlos con la lámpara de hendidura.
A todos los pacientes se le suministró el tratamiento convencional en ambos ojos: lágrimas artificiales (1 gota 3 veces al día), cloranfenicol (1 gota cada 2 horas), ketotifeno (1 gota cada 4 horas hasta las 10 p.m.) y tetraciclina, que se aplicó en ungüento antes de dormir. Al grupo A se le colocó además una semilla de cardo santo en los puntos acupunturales siguientes: shenmen, corazón, hígado, ojo 1 y ojo 2, como se muestra en la figura.13
Los datos fueron recogidos a partir de una planilla de vaciamiento elaborada a tal efecto y luego se computarizaron mediante el sistema Microsoft Windows.
Resultados
En ambos grupos de estudio el rango etario más frecuente fue el de 31 a 40 años (67,3 %) y predominó el sexo femenino (tabla 1).
Tabla 1 Pacientes con queratitis punteada superficial según edad y sexo

Fuente: planilla de vaciamiento
La causa más frecuente de queratitis punteada en ambos grupos fue la degenerativa, con 34,8 % para el A y 39,1 % para el B (tabla 2).
De los pacientes que recibieron auriculoterapia, 40 mejoraron (86,9 %) y 6 tuvieron cicatrización corneal (13,0 %) en la primera semana y en la segunda semana ya todos tenían cicatrización en la córnea.
Sin embargo, en el grupo B no se logró mejoría en paciente alguno en la primera semana y en la segunda semana de seguimiento terapéutico se obtuvo mejoría solo en 4 pacientes, para 8,7 % (tabla 3).
Discusión
La auriculoterapia es una técnica de la medicina tradicional china en la que se estimulan puntos específicos del pabellón auricular para generar un efecto en el organismo que favorezca y equilibre ciertas funciones corporales. Actualmente el principal microsistema utilizado como método terapéutico es el de la oreja porque no es invasivo y es de fácil manejo, además, permite prevenir, diagnosticar y curar numerosas enfermedades.9,10
Cabe añadir que en Oftalmología la auriculoterapia tiene un amplio rango de aplicaciones, entre ellas en la queratitis punteada superficial, que es el tipo de queratitis más frecuente y puede producirse por una amplia variedad de factores externos; sin embargo, en esta investigación predominaron las causas degenerativas, lo cual concordó con los resultados de publicaciones sobre el tema.11,12
El tratamiento local convencional solo en pacientes con queratitis punteada superficial es menos efectivo y resulta favorable solo en un periodo determinado;14,15 sin embargo, en los que integrantes de la actual serie que además recibieron auriculoterapia se logró la curación en corto tiempo, lo que demostró las ventajas de esta alternativa con la cual se obtiene mejoría e incluso cicatrización con magníficos resultados, de manera que resulta más efectiva y favorable, además de ser más asequible y de bajo costo económico.
Aunque existió cicatrización corneal en ambos grupos de estudio, se obtuvieron resultados satisfactorios más rápidos con el tratamiento local convencional más la auriculoterapia que con el tratamiento local convencional solamente.
Cabe señalar que otros investigadores han empleado la auriculoterapia en pacientes afectados por otras oftalmopatías, entre los que se pueden mencionar Li et al,16 quienes la aplicaron en niños con miopía y obtuvieron resultados favorables, y Gómez Martínez et al,17 que demostraron que esta puede ser utilizada con una alta efectividad como tratamiento en ancianos con glaucoma.
Para dar por concluido, en ambos grupos terapéuticos se obtuvo cicatrización corneal, pero resultó más eficaz el tratamiento con auriculoterapia al no producir efectos colaterales y lograr la respuesta en un tiempo más corto. Esta opción terapéutica es una nueva alternativa en la curación de pacientes con queratitis punteada superficial.