Introducción
La interdisciplinariedad a través del proceso de enseñanza aprendizaje es una de las cuestiones que preocupan a la educación de hoy y que se refleja en los currículos de las disciplinas, las asignaturas y en las diferentes estrategias didácticas.1 Según Fiallo Rodríguez,2 se manifiesta mediante las relaciones interdisciplinarias, como condición didáctica que permite cumplir con el principio de la sistematización de la enseñanza.
En las carreras de las Ciencias Médicas, la interdisciplinariedad se concreta con el establecimiento de la Disciplina Principal Integradora (en lo sucesivo DPI) y de estrategias curriculares. Como resultado en la carrera de Estomatología el Plan D declara a la Estomatología Integral como DPI, eje conductor de la formación del estudiante, que procura alcanzar la integración básico-clínica y básico-clínica-comunitaria en distintas áreas del conocimiento, para abordar desde una perspectiva integral el proceso salud-enfermedad.3
No obstante, desarrollar un proceso de enseñanza aprendizaje interdisciplinario es responsabilidad de todas las disciplinas y asignaturas que integran el currículo de la citada carrera. En la consecución de este encargo desempeñan un papel importante la unidad curricular Farmacología y las asignaturas clínicas de la DPI.
En relación con la Farmacología, el Plan D la concibe como una asignatura independiente que se imparte en el ciclo preclínico (segundo año), y tiene como objetivo proveer los conocimientos, las habilidades y los valores esenciales para que el futuro egresado, el Estomatólogo General Básico (EGB), efectúe con bases científicas la prescripción de medicamentos, sea capaz de superarse y autosuperarse de manera constante en esta materia y fomente estilos de salud favorables en los pacientes en contra de la automedicación y el empleo innecesario de medicamentos.4 Constituye el sustento científico de la terapéutica medicamentosa abordada en las asignaturas clínicas de la DPI.
Estas últimas, en cambio, se imparten en el ciclo clínico (tercer y cuarto años) y en la práctica preprofesional (quinto año) y tienen como objetivo garantizar la adquisición y consolidación de los modos de actuación profesional del futuro egresado. Por tanto, en el proceso de enseñanza aprendizaje de estas asignaturas, resulta esencial establecer nexos con la Farmacología para sistematizar sus contenidos, en función de lograr en los estudiantes un mayor desarrollo de habilidades para la prescripción de medicamentos y, por consiguiente, de competencias terapéuticas como parte de su formación integral.
Teniendo en cuenta que la percepción es un permanente acto de conceptualización, donde los eventos del mundo externo son organizados a través de juicios categoriales que se encargan de encontrar una cualidad que represente de la mejor manera posible a los objetos;5 y que en la Educación Médica constituye un indicador de calidad, pertinencia y equidad del proceso formativo6 de los estudiantes, se impone la necesidad de investigar las relaciones interdisciplinarias que establecen las asignaturas clínicas de la DPI con la Farmacología, desde la perspectiva estudiantil.
De ahí la realización del presente trabajo, que asume la siguiente interrogante como problema científico: ¿qué percepción tienen los estudiantes sobre las relaciones interdisciplinarias que se establecen con la Farmacología en el proceso de enseñanza aprendizaje de las asignaturas clínicas de la DPI? Las autoras proponen como objetivo valorar la percepción que tienen los estudiantes sobre las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología en el proceso de enseñanza aprendizaje de las asignaturas clínicas de la DPI en la carrera de Estomatología.
Material y Métodos
Se realizó una investigación observacional descriptiva y transversal, entre noviembre y diciembre de 2020, en la Facultad de Estomatología, Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
La población estuvo constituida por estudiantes que cursaban el primer semestre de 3er, 4to y 5to años de la carrera de Estomatología en el curso académico 2020-2021; seleccionándose por muestreo simple aleatorio una muestra (n=82), distribuidos como sigue: 3er año (25), 4to año (32) y 5to año (25).
A todos los estudiantes se les explicó el objetivo de la investigación y la importancia de su participación, se les garantizó la confidencialidad de la información aportada por ellos, y su consentimiento para participar fue solicitado verbalmente y por escrito.
Para cumplir con el objetivo trazado se incluyeron las variables: opinión estudiantil (entendida como el criterio de cada estudiante sobre las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología mediante los componentes didácticos) y percepción estudiantil (entendida como la apreciación de cada estudiante sobre dichas relaciones).
La opinión estudiantil se obtuvo mediante un cuestionario formado por siete preguntas cerradas o ítems (Anexo), previamente validado por expertos y posteriormente calculado el coeficiente Alfa de Cronbach, verificándose la confiabilidad interna del instrumento; para lo cual se consideró una correlación importante si el coeficiente alcanzó valores iguales o superiores a 0,65, el test fue más homogéneo si se acercó a 1.
En el cuestionario, de los ítems dos al siete, se integró una escala de Likert con tres alternativas de respuesta (a cada una se le otorgó una puntuación): siempre (3), a veces (2) y nunca (1). Posteriormente se realizó la sumatoria de las puntuaciones alcanzadas por el estudiante en cada ítem y se promedió. Por último, teniendo en cuenta el promedio de las puntuaciones, la percepción estudiantil se valoró como: favorable (entre 3,0 y 2,4), poco favorable (entre 2,3 y 1,7) y desfavorable (entre 1,6 y 1,0).
Se asumió como método general de la investigación el dialéctico-materialista y, de manera particular, métodos teóricos (analítico-sintético, inductivo-deductivo y sistematización), empíricos (encuesta) y estadísticos (porcentaje como medida de resumen).
La información obtenida se procesó con el paquete estadístico SPSS (Statistical Package for Social Sciences) versión 21.0, y se empleó el porcentaje como medida de resumen. Finalmente, para identificar la existencia de diferencias estadísticamente significativas en las categorías extremo de la variable percepción estudiantil, se testaron las siguientes hipótesis estadísticas: H0: P=P1 y Ha: P≠P1; siendo P, la proporción esperada de percepción estudiantil favorable, P=50 %.
En la identificación de la posible asociación entre la percepción estudiantil y el año académico, fueron testadas las siguientes hipótesis científicas: H0: existe independencia poblacional entre la percepción estudiantil y el año académico y Ha: no existe independencia poblacional entre la percepción estudiantil y el año académico. Se aplicó el test estadístico Ji al cuadrado de Independencia con un nivel de significación (α) de 0,05.
El trabajo muestra resultados parciales de un proyecto de investigación ejecutado en la Facultad de Estomatología de la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba, que devino en un tema doctoral en Ciencias de la Educación Médica.
Resultados
El cuestionario diseñado tuvo una confiabilidad interna importante, lo cual garantizó su aplicación. En la primera pregunta, que indaga si los estudiantes consideran necesario que en las actividades docentes (clases y Educación en el trabajo) de las asignaturas clínicas de la DPI, se establezcan vínculos con la asignatura Farmacología para su formación como futuro EGB, el 100 % de los encuestados respondió afirmativamente.
Al analizar la opinión estudiantil sobre las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología mediante los componentes didácticos (Tabla) se observó que el mayor por ciento de los encuestados marcó la alternativa de respuesta a veces en cinco de los seis ítems.
El estudio arrojó que la proporción esperada de percepción estudiantil favorable sobre las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología en el proceso de enseñanza aprendizaje de las asignaturas clínicas de la DPI fue 15,8 % (Figura). De esta forma se rechaza la hipótesis nula, pues la proporción fue menor que el 50,0 %.
Por otro lado, la percepción estudiantil poco favorable se evidenció en el 22,0 % y 18,3 % de los estudiantes que cursan el 5to y 4to años, respectivamente. Asimismo, el 19,6 % de los que cursan el 3er año, la perciben como desfavorable.
Con un valor de probabilidad asociada menor (p=0,001) que el nivel de significación establecido (α ˂ 0,05), se constató que existen evidencias muestrales suficientes para afirmar que la percepción estudiantil sobre las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología depende del año académico en que se encuentre el estudiante.
Discusión
En la carrera de Estomatología, las relaciones interdisciplinarias que establecen las asignaturas clínicas de la DPI con la Farmacología son esenciales para sistematizar, consolidar y actualizar los contenidos farmacológicos que posteriormente serán aplicados por el futuro EGB en la prevención y el tratamiento de enfermedades del complejo buco facial en la Atención Primaria de Salud (APS). De ahí que el 100 % de los encuestados consideren necesario la concreción de tales relaciones en las actividades docentes (clases y Educación en el trabajo).
Ahora bien, lo anterior debe manifestarse en el sistema de los componentes didácticos dentro del proceso de enseñanza aprendizaje (objetivo-contenido-método-medio-forma-evaluación) a partir de la reflexión crítica y problematizadora de la realidad docente.7 De modo que, en las actividades docentes de las asignaturas clínicas de la DPI, se pueden establecer nexos con la Farmacología mediante los objetivos, pues estos se formulan para lograr en los estudiantes transformaciones graduales, que garanticen un modo de actuación profesional que tribute a la solución de los problemas de salud bucal de las personas.8
Igualmente, se pueden establecer nexos mediante los contenidos, teniendo en cuenta que en la práctica clínica estomatológica se utilizan y se prescriben medicamentos, bien como tratamientos de primera elección o bien como facilitadores de los procedimientos dentales. Asimismo, el paciente puede estar recibiendo otros tratamientos medicamentosos que originan efectos adversos a nivel bucal, o interaccionar con aquellos prescritos por el estomatólogo.9
Acerca de las relaciones que se establecen con la Farmacología mediante los métodos de enseñanza, las autoras consideran que aunque en las asignaturas clínicas de la DPI el método de enseñanza por excelencia es el clínico, que también forma parte de su contenido,10 el empleo del método de la terapéutica razonada resultaría útil para sistematizar los contenidos de Farmacología. Este ha sido recomendado por la Organización Mundial de la Salud para la enseñanza de la farmacoterapia racional, pues enfatiza más en el desarrollo de habilidades para la prescripción de medicamentos que en la adquisición de conocimientos farmacológicos; además de incorporar la Medicina basada en la evidencia y el enfoque por problemas.11
Llama la atención el insuficiente establecimiento de relaciones interdisciplinarias con la Farmacología mediante los medios de enseñanza. Estos, como componentes activos en el proceso de desarrollo del aprendizaje, facilitan la información entre el profesor y el estudiante, y su adecuado uso, en estrecha relación con el objetivo, contenido y método, garantiza la calidad del proceso de enseñanza aprendizaje y un aprendizaje duradero que contribuya a elevar la cultura general integral de los estudiantes.12 También, aumentan los incentivos para el aprendizaje, se hace más productivo el trabajo del profesor y favorecen la asimilación y la retroalimentación del proceso, así como estimulan la participación creadora del estudiante.13
En opinión de las autoras, para la sistematización de los contenidos de Farmacología, podrían emplearse recursos educativos basados en las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones como: imágenes, audios, videos, software educativo y los entornos virtuales como el aula invertida.14 Solo los estudiantes de 3er año hicieron alusión al empleo de una cápsula educativa sobre el llenado de la receta médica en una de las asignaturas que estaban recibiendo.
Asimismo, específicamente en la Educación en el Trabajo (consultas y guardias estomatológicas), podrían emplearse las soluciones antisépticas, desinfectantes y anestésicas, para consolidar los principales aspectos farmacológicos de estos medicamentos (formas farmacéuticas, composición, vías de administración, dosis, farmacocinética, acciones, efectos, reacciones adversas, interacciones medicamentosas, indicaciones, contraindicaciones y precauciones); e igualmente, los modelos de receta médica y método para ejercitar uno de los pasos establecidos en el método de la terapéutica razonada.
En las asignaturas clínicas de la DPI el proceso de enseñanza aprendizaje se desarrolla en estrecha relación con la práctica estomatológica mediante la Educación en el Trabajo, forma organizativa fundamental y principio rector de la Educación Médica cubana, con el objetivo de contribuir a la formación de habilidades y hábitos prácticos que caracterizan las actividades profesionales del egresado de la carrera de Estomatología.15
Al analizar las relaciones interdisciplinarias que se establecen con la Farmacología mediante esta forma organizativa, se apreció el empleo de la discusión diagnóstica clínico-farmacológica; sin embargo, esta modalidad de la Educación en el Trabajo no está concebida en el Plan D de la carrera de Estomatología, a pesar de ser esencial para la sistematización, consolidación, profundización y aplicación de los contenidos de Farmacología, garantizando la integralidad del conocimiento terapéutico.16
Al respecto, autores como Zayas et al.17 consideran que mediante la discusión diagnóstica clínico-farmacológica los estudiantes se preparan en la aplicación del método de la terapéutica razonada, lo cual permite fortalecer los vínculos con el método clínico y desarrollar una concepción, conducta y actuación que contribuyan a la educación en el uso racional y científico de los medicamentos, basados en la mejor evidencia de eficacia y efectividad. Por otro lado, Cala Calviño et al.18) manifiestan que con el vínculo teoría-práctica el estudiante tendría una participación activa y consciente, logrando una mejor asimilación de los contenidos de Farmacología sobre la base de una práctica sistemática y asequible.
En cuanto a las relaciones establecidas con la Farmacología mediante las evaluaciones, las autoras consideran que es insuficiente, teniendo en cuenta que la evaluación, principalmente la formativa, es el componente didáctico que refleja el estado de todo el proceso; implica el control y la valoración de los conocimientos, las habilidades y los hábitos, así como de los modos de actuación que los estudiantes van adquiriendo a través del proceso docente educativo.19
Con respecto a la relación de dependencia que se constató entre la percepción estudiantil sobre las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología y el año académico, se observó que en la categoría desfavorable prevalecieron los estudiantes de 3er año, lo cual pudiera estar asociado al hecho de que a medida que van elevando su nivel académico, la apreciación que tienen sobre tales relaciones se hace más evidente.
No obstante, es preocupante la forma en que los estudiantes, de manera general, perciben las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología. Según Díaz y Valle,20 la percepción de los estudiantes resulta esencial en el logro de la calidad en el proceso de enseñanza aprendizaje, teniendo en cuenta que ellos son observadores permanentes de la actuación de su profesor. Su opinión es válida para fomentar el perfeccionamiento continuo e identificar el grado de satisfacción con la docencia que reciben.
Por otro lado, Gómez Aguado et al.6) plantean que la carencia de relaciones interdisciplinarias tiene consecuencias negativas en la calidad de la formación de los estudiantes, puesto que la esencia de la interdisciplinariedad radica en su carácter educativo, formativo y transformador. De modo que resulta necesario un cambio de actitud por parte de los profesores en la forma de impartir la docencia y fomentar el empleo de métodos más dinámicos y activos en el proceso docente educativo con un enfoque integrador de los contenidos.21
Como limitación de la presente investigación se declara que solo participaron estudiantes que cursan la carrera de Estomatología en la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba, curso académico 2020-2021; de ahí que los resultados obtenidos no puedan ser extrapolados a otras Universidades de Ciencias Médicas del país donde se desarrolle la referida carrera.
Conclusiones
La percepción que tienen los estudiantes sobre las relaciones interdisciplinarias con la Farmacología se valora como poco favorable, lo cual apunta hacia la necesidad de ejecutar acciones didácticas para favorecer dichas relaciones en aras de perfeccionar el proceso de enseñanza aprendizaje.