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Introducción
Cuba vive momentos excepcionales, los profundos cambios que hoy sufre el planeta, vinculados a fenómenos objetivos muy necesarios para que la humanidad se vea involucrada como parte activa de este desarrollo que hoy solo compete a sectores seleccionados en el mundo. Todo esto tiene su repercusión directa e indirecta en las diferentes esferas de la vida política, social, cultural e ideológica que sustentan la infraestructura macroeconómica de los países fundamentalmente en vías de desarrollo.
El tema del desarrollo sostenible ha sido abordado por estadistas, eventos internacionales y especialistas entre los que se pueden citar: Castro Díaz-Balart, (1991a, 1991b); ONU (1992); Castro (1992) entre otros. En la mayoría de los casos reconocen la necesidad de buscar alternativas viables que propicien un avance real.
Al respecto se requiere aprovechar la fortaleza que significa la universidad en los territorios con la presencia del Centro Universitario Municipal (CUM) para fomentar una cultura económica agrícola. En tal sentido se debe profundizar en los conocimientos que marcan las pautas a nivel internacional y en particular el contexto cubano actual. Este análisis posibilita identificar dos posiciones, la primera relacionada con el desarrollo económico a nivel mundial, en particular los países desarrollados. En esta se potencian los procesos inversionista sin tener en cuenta la política de ahorro. En segundo lugar, ubicar a Cuba en condición de país en vía de desarrollo condicionada por el férreo bloqueo del imperialismo yanqui, al cual ha sido sometido por décadas. Factor que impide el desarrollo económico de la nación, donde la política de ahorro como política es un elemento clave para sustentar nuestra economía.
Las razones anteriores propician que la misión declarada por el Ministerio de la Agricultura (MINAGRI) en Cuba sea: contribuir a garantizar la seguridad alimentaria del país, el desarrollo sostenible y la competitividad, del sector agrario en beneficio de la sociedad cubana. Tarea que se debe realizar, entre otras cuestiones, con garantizar la producción de alimentos que satisfagan las necesidades de la población. Esto requiere la incorporación de nuevas formas de producción que impliquen la participación de todos. Para lo cual es necesario hacer un uso eficiente de los adelantos científicos y tecnológicos sin daños colaterales al medio ambiente.
En tal sentido, las universidades y otras instituciones de investigación científica de conjunto con el Minagri, se encuentran desarrollando alternativas que permitan contribuir de manera eficiente y efectiva a garantizar la seguridad alimentaria del pueblo cubano. Es por ello que la capacitación que se realiza por los CUM en este sector, debe ir orientada a temas fundamentalmente de cultura económica agrícola. En tanto, los directivos de las bases productivas estén llamados a un cambio de mentalidad, que posibiliten la generación de nuevos conocimientos, actitudes, valores y prácticas agroecológicas. Aspecto que debe favorecer el perfeccionamiento de esa gestión hacia la elevación de las competencias laborales. Cuestiones que deben plantearse el objetivo de provocar impactos positivos en los resultados productivos y económicos. Esto es, adecuar el modo de actuación de los sujetos a las necesidades sociales.
El empleo de métodos empíricos como la entrevista; la encuesta y la observación, en la etapa exploratoria de la investigación, unido a las visitas de inspecciones de los especialistas de la Delegación Municipal de la Agricultura, así como las propias vivencias de los autores permitieron detectar las insuficiencias siguientes:
Insuficiente dominio de métodos por parte de los miembros de las Juntas Directivas y Administrativas de las Bases Productivas para impulsar producciones agrícolas más eficientes, teniendo en cuenta las potencialidades de su entorno.
Insuficiente preparación de los miembros de las Bases Productivas en los clones de semillas que sean más resistentes a las plagas y enfermedades, así como su nivel de rendimiento en un período de tiempo más cortó.
El no estudio de mercado para conocer en qué etapa los productos agropecuarios suben su demanda para de esta manera percibir mejores ingresos.
Insuficientes acciones con sustento científico realizadas desde el CUM Yateras. Atendiendo a lo analizado anteriormente sobre el asunto de la capacitación en cultura económica agrícola, se plantea como objetivo la elaboración de una alternativa de capacitación para fomentar esta en los miembros de las juntas directivas y administrativas de las bases productivas del municipio Yateras.
Desarrollo
En el análisis resulta necesario partir de la definición del concepto: Desarrollo sostenible: se define como el proceso mediante el cual, de forma sistemática, se crean todas las condiciones materiales, culturales y espirituales que favorecen la elevación de la calidad de vida de la sociedad, sobre la base de la equidad y la justicia. El desarrollo sostenible tiende al logro de una verdadera relación armónica entre la totalidad de los procesos naturales y sociales, garantizando las mejores condiciones de existencia para las actuales y futuras generaciones. En la actualidad este concepto trasciende los límites de la ecología y del pensamiento puramente ambientalista, y constituye en sí un paradigma general (ONU 1992, p.13).
En tal sentido, desde una perspectiva sociológica, se debe hacer alusión a que los miembros de las juntas directivas y administrativas de las formas productivas cooperativas de producción agropecuaria, cooperativas de crédito y servicio y unidades básicas de producción cooperativa desarrollen habilidades que les permita una explotación eficiente de las tierras sobre bases agroecológicas. Cuestión que debe permitirle la preservación del medio ambiente.
Para ello se requiere mantener una actitud consecuente ante la vida de las especies, caracterizada por el amor a la naturaleza. Aspecto a que está llamada la universidad en cada territorio, como fortaleza para alcanzar metas superiores en el conocimiento que se reflejen en resultados prácticos en la sociedad.
Ante tal circunstancia la aplicación de los principios de la agricultura y el desarrollo agrario sostenible, requiere da la atención de la universidad en el avance científico-técnico. Al respecto las actuales circunstancias del mundo moderno exigen de cada actor, una orientación activa y transformadora de los hombres y mujeres que laboran la tierra, (Castro Díaz-Balart, 1991a) en las que los dirigentes de las juntas directivas y las organizaciones de base ANAP de las bases productivas, tengan la tarea de lograr la eficiencia productiva. A estas dos últimas les corresponde imprimirles un sentido de transformación a la vieja mentalidad, para lo cual deben incorporar lo nuevo y retomar lo valioso creado por el pasado.
En consecuencia, con la eficiencia productiva que se logre quedará atrás la rutina y el tradicionalismo. En tanto, los centros universitarios municipales junto a las personas que dirigen el tipo de proceso productivo referido, deberán de incentivar la formación y capacitación. Dicha pretensión favorecerá que los sujetos vinculados a las labores agrícolas, se conviertan en activos, críticos y creativos capaces de convertirse en los protagonistas que necesita el territorio.
Lo anterior justifica que el personal universitario del territorio juntos al vinculado a la agricultura, necesiten prepararse para asimilar las nuevas tecnologías. En tal sentido se puede lograr un agricultor competente, que se la estimule altos índices de autogestión y una orientación adecuada hacia la de educación económica. Ello le permitirá enfrentar la Competitividad y otros indicadores de eficiencia productiva que necesita la sociedad. Por tanto, este personal debe de adquirir una preparación científica técnica que estimule su modo de actuación en función de adaptarse las nuevas exigencias del mundo actual.
Para ello el nivel de conciencia de cada persona debe ser el punto inicial. En tal sentido desde la psicología se aprecia el valor de la diversidad sociocultural donde se desarrolla cada persona. En este sentido es hacia ese especio que debe tributar su respectivo compromiso y educación. Por consiguiente, es válido tener en cuenta el enfoque histórico-cultural de Vygotsky (1981). Este investigador, en sus aportes explica la relativa independencia que existe desde la ley de doble formación y desarrollo de la psiquis humana. Cuestión que en la práctica se fundamenta en la diversidad de agricultores que hoy laboran en las diferentes cooperativas. Son sujetos con diferentes grados de motivación y posibilidades de reorientación de sus esferas de actuación a partir de las necesidades individuales y colectivas, así como del medio familiar y social.
Desde esta perspectiva se requiere de una constante evaluación de la categoría actividad, la cual difunde por su naturaleza la actuación de los directivos de las juntas directivas y administrativa de las bases productivas, requeridas por un cambio de conducta y la incorporación de una cultura generacional desde la intencionalidad formativa de los productores y de una ubicación de cambio esperado en los que dirigen en su radio de acción hacia el redimensionamiento socializador de lo que se aprende para poder transformar no solo el presente; sino los procesos venideros con una garantía de auto perfeccionamiento propiciando una mejoría en sus estilos de vida.
Al potenciar la cultura económica agrícola en los cooperativistas desde el Centro Universitario Municipal, se propicia la posibilidad de lograr valores en las que se integran los conocimientos. Esto, entre otras cuestiones, constituye la plataforma categorial en que se basa el desarrollo económico agrario. Desarrollo en el que se debe tener en cuenta los principales problemas que limitan el desempeño de la economía para la producción de alimentos. Al respecto es necesario precisar los siguientes elementos:
Los centros universitarios deben realizar un sistema de autogestión del conocimiento en relación con los últimos avances de la ciencia y la técnica, conformes a la gestión económica en la agricultura que permita entronizarse de manera hábil e inteligente en ese contexto productivo.
Poner en explotación las tierras ociosas, al elevar de esta manera los rendimientos agrícolas.
Recuperar la capacidad importadora en rublos tradicionales, al incrementar sostenidamente la diversificación de los productos con el propósito de ir reduciendo la elevada independencia importadora con la intención de revertir la situación financiera.
Otorgar mayores facultades en los marcos del plan de siembra para potenciar de manera sostenible su desarrollo económico.
Incrementar la productividad del trabajo, elevando la disciplina y el nivel de motivación para ser más eficientes desde las propias potencialidades que poseen las bases productivas.
Pasos metodológicos a tener en cuenta para el fomento de una cultura económica agrícola como parte de la capacitación que se les debe de brindar a los miembros de las Juntas Directivas y Administrativas de las Bases Productivas desde la relación entre el Centro Universitario Municipal y las juntas directivas con las asociaciones de base de la ANAP.
Tanto en los encuentros de extensionismo agrario, como en las diferentes acciones de capacitación llevadas a cabos por el Centro Universitario Municipal, la empresa Agroforestal, la Delegación de la Agricultura y los técnicos de las Bases Productivas deben diseñarse actividades dentro de la propia Alternativa que propicien una cultura económica. Estas actividades han de concebirse sobre la base de que el conocimiento no se restringe solamente en la teoría, sino que debe traspasar los límites del tradicionalismo y fortalecer en gran medida toda la esfera de la vida social. Para ello es importante comprender que toda actividad agrícola que se realice debe de contribuir al cumplimento de la demanda de la población como parte de la seguridad alimentaria de un territorio determinado.
Evaluar los impactos de las acciones desarrolladas con perspectiva de lograr su perfeccionamiento, para ello, el diseño de las actividades planificadas, debe evaluarse en la propia práctica, donde los técnicos de las bases productivas y la propia Junta Directiva y Administrativa empleen métodos que les permitan evaluar resultados, para ello emplearán fundamentalmente la observación directa, así como los resultados del orden económico.
Etapas para el desarrollo de la alternativa de capacitación de una cultura económica agrícola en los miembros de la junta directiva y administrativa de las bases productivas.
Etapa 1: Diagnóstico de la situación actual del nivel de preparación que poseen los miembros de la Junta Directiva y Administrativa de las Bases Productivas para el fomento de una cultura económica agrícola.
Objetivo:
Diagnosticar el nivel de preparación que poseen los miembros de la junta directiva y administrativa de las bases productivas para el fomento de una cultura económica agrícola a partir de diferentes instrumentos que propicien la determinación de sus necesidades y potencialidades.
Acciones.
Aplicar los instrumentos para medir los niveles de preparación cognitivo en cuanto a los contenidos que sirven como base para el fomento de la cultura económica agrícola.
Constatar empleando instrumentos diagnósticos las condiciones materiales propicias que posibiliten materializar la cultura económica agrícola en los miembros de las Juntas Directivas y Administrativas de las Bases Productivas.
Caracterizar a cada miembro de la Junta Directiva y Administrativa de las Bases Productivas atendiendo a las actuales exigencias de la cultura económica.
Etapa 2: Planificación delas acciones metodológicas para la transformación de la situación inicial en cada miembro de la junta directiva y administrativa de las bases productivas.
Acciones.
Concebir en el plan anual de capacitación del Ministerio de la Agricultura en el municipio acciones que promuevan el conocimiento y desarrollo de una cultura económica agrícola en los miembros de la Junta Directiva y Administrativa de las Bases Productivas.
Intencionar desde las propias visitas que realizan los técnicos agrícolas a las producciones agrícolas, así como en las propias asambleas de asociados y otros espacios como los encuentros técnicos, se conciban acciones con vista a incentivar la cultura económica agrícola en los productores.
Propiciar que en las asambleas de asociados se dé a conocer el plan de siembra según la época de cada cultivo a partir de las potencialidades productiva de la base productiva según lo establece la contratación económica y los resultados económicos en cuanto a los ingresos que ha tenido la entidad como producto de la entrega de las producciones según la demanda planificada, así como los niveles de satisfacción de los productores como resultados finales de la producción.
Etapa 3: Ejecución del accionar metodológico para la implementación de la alternativa de capacitación para el fomento de una cultura económica agrícola.
Objetivo:
Aplicar procedimientos metodológicos para el fomento de una cultura económica agrícola en los miembros de la Junta Directiva y Administrativa de las Bases Productivas.
Acciones:
Aplicación de las acciones de capacitación concebidas en el plan, garantizando la base orientadora para que se concreten los procedimientos metodológicos a seguir para la adquisición de conocimientos teóricos y prácticos para el fomento de una cultura económica agrícola.
Aprovechamiento de las potencialidades que poseen las Bases Productivas para propiciar la técnica de trabajo grupal que promuevan un aprendizaje cooperativo, teniendo en cuenta los siguientes elementos:
Intencionar el conocimiento desde las visitas integrales realizadas por los técnicos de las Bases Productivas, las acciones de capacitación desde un enfoque de extensionismo agrario, así como las visitas de inspección realizadas por los inspectores de la Delegación de la Agricultura, escuchando atenta y respetuosamente el aporte, opinión y sugerencias en aras de adquirir conocimientos en función de enriquecer la cultura económica agrícola.
Brindar a cada cooperativista y usufructuario la información y orientación oportuna, resaltando conceptos relevantes, así como estimular sus estilos y prácticas agrícolas siempre y cuando lo establezcan como está indicado.
Ejemplos de actividades metodológicas para la capacitación de los miembros de las Juntas
Directivas y Administrativas de las Bases Productivas del municipio Yateras con la participación del Centro Universitario Municipal.
En la CPA Congreso Campesino, se le entregó a un usufructuario de la 300 un área de 2 caballerías para potenciar la siembra de fríjol de la variedad Velazco Largo por sus altos rendimientos.
¿Qué métodos de medición de distancia de siembra consideran ustedes sea el más apropiado? ¿Por qué?
¿Qué cantidad de libras de esta variedad se necesitan para sembrar el área designada, si el peso por semilla es igual a 250g?
Si se conoce que la libra de semillas de esta variedad se vende a un precio de $ 9.50. ¿Cuántos pesos necesita el usufructuario para comprar la cantidad de semillas que necesita el área destinada para este fin?
Si la base productiva hubiese almacenado la variedad de este frijol. ¿cuánto se ahorrarían por este concepto?
El estimado del plan de siembra del cultivo de Boniato de la variedad Yabú - 8 Censa, en la finca de uso colectivo de la UBPC “10 de octubre” para el año 2017, en los meses de enero-abril es de 30 quintales, contando para ello con 1 hectárea.
¿Qué cantidad de rejos de boniato aproximado se puede establecer para esta área teniendo en cuenta los marcos de plantación establecidos?
Para la roturación de esta área con un tractor se necesita de 90 litros de petróleo en 8 horas. Si la base productiva contara con medios de tracción animal. ¿Cuántos litros de petróleo se ahorrarían por este concepto?
Teniendo en cuenta que la cantidad de litros asignados a esta cooperativa es de 350 litros. ¿Cuántos pesos se ahorraría la cooperativa por este concepto? Como parte de la implementación de estas actividades los técnicos agrícolas y los jefes de producción de cada entidad deberán tener en cuenta los componentes de la cultura económica, precisando en los siguientes elementos:
Conocimientos relativos a la política de nuestro país sobre la actividad económica y el uso de los recursos humanos, materiales y financieros, comparando la situación económica internacional, beneficiando al hombre como centro de atención.
El ahorro como necesidad histórico social, no solo de los recursos materiales y financieros; sino desde los recursos naturales hasta los renovables y no renovables como parte indispensable de la supervivencia humana, evitando el derroche y el consumismo.
El ahorro desde su dimensión económica y el uso de la planificación estratégica con los planes de desarrollo hasta el 2020, logrando de esta manera la eficiencia y eficacia en la actividad económica agrícola desde las bases productivas.
La significación del trabajo para la producción de bienes y servicios en el fomento de los valores de responsabilidad y compromiso con la sociedad.
El aporte significativo en la implementación del modelo económico cubano en las adecuaciones de los lineamientos aprobados en el 6to Congreso del Partido.
Conclusiones
La cultura económica agrícola constituye un proceso formativo e integrador, enriquecido con el aporte de diferentes enfoques teóricos para su instrumentación en las bases productivas, caracterizada por la evolución hacia una concepción del desarrollo sostenible siendo necesario precisar sus posibilidades para contribuir a un comportamiento positivo en sus cooperativistas y usufructuarios en todos los contextos y espacios, en consecuencia, con la problemática existente.
La concepción teórica -práctica que se proponen a través de la alternativa diseñada para el fomento de una cultura económica agrícola se corresponde con los lineamientos aprobados en el Sexto y Séptimo Congresos del Partido, y se fundamenta en el enfoque Histórico-Cultural de Vygotsky. Ello posibilitó el establecimiento de relaciones esenciales entre: el Centro Universitario-los cooperativistas y usufructuarios. En ellas se integran los conocimientos y la práctica. Esto constituye la plataforma categorial en que está basado el desarrollo económico agrario. En él se ha tenido en cuenta los principales problemas que limitan el desempeño de la economía para la producción de alimentos y las potencialidades con que cuenta el CUM.
