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Conrado

Print version ISSN 2519-7320On-line version ISSN 1990-8644

Conrado vol.14 no.64 Cienfuegos July.-Sept. 2018  Epub June 08, 2019

 

Artículo Original

DESARROLLO DE HABILIDADES SOCIALES A TRAVÉS DE ACTIVIDADES LÚDICAS EN LOS NIÑOS DE 3 AÑOS EN EL CENTRO INFANTIL CUMBAYA VALLEY

DEVELOPMENT OF SOCIAL SKILLS THROUGH PLAY ACTIVITIES IN 3-YEARS-OLD CHILDREN IN THE CUMBAYA VALLEY CHILDREN'S CENTER

Dra. C. Marigina del Carmen Guzmán1 

1 Universidad Metropolitana. República del Ecuador. E-mail: mariginaguzman@gmail.com

RESUMEN

Las habilidades sociales son aspectos concretos de las relaciones interpersonales. La capacidad de poder relacionarse con los adultos y los iguales de manera gratificante y mutuamente satisfactoria, en la cual la empatía y la capacidad de adecuarse a distintos contextos juegan un papel importante. Cuando se estudian las habilidades sociales, es imprescindible hablar acerca de la importancia e incidencia que tienen los centros infantiles porque en ellos se inicia el niño en la capacidad de relacionarse con sus iguales y adultos de su entorno, así como también, poder actuar de manera apropiada ante distintas situaciones que les serán de utilidad a lo largo de toda su vida. Las habilidades sociales, es uno de los componentes de la inteligencia emocional, por medio de ellas se controlan las emociones como los sentimientos propios y de los demás. Al ser las habilidades sociales aprendidas, los docentes por medio de las actividades recreativas lúdicas y adecuando sus conocimientos sobre inteligencia emocional pueden planificar situaciones donde el niño consiga aprender sin imposiciones las conductas aceptadas y adecuadas en su entorno, es decir, el juego le va a permitir apoyarse para mejorar la socialización en los niños que asisten a este nivel; contribuyendo así en la formación de un futuro ciudadano seguro, independiente y respetuoso a las normas sociales (Caballo, 1998).

Palabras clave: Habilidades sociales; actividades lúdicas; inteligencia emocional

ABSTRACT

Social skills are specific aspects of interpersonal relationships. The ability to interact with adults and the same rewarding and mutually satisfactory way in which empathy, and the ability to adapt to different contexts play an important role. When social skills are studied, it is essential to talk about the importance and impact that have the children's centers because they start the child in the ability to interact with peers and adults in their environment, as well as, they can also act appropriately to different situations that will be useful throughout their entire life. Social skills, is one of the components of emotional intelligence, through which emotions are controlled as one's own feelings and those of others. Being the social skills learned, teachers through playful recreational activities and adapting their knowledge about emotional intelligence can plan situations where the child can learn without impositions accepted and appropriate behaviors in their environment, ie, the game will allow support to improve socialization in children attending this level; thus contributing to the formation of a future citizen safe, independent and respectful of social norms.

Keywords: Social skills; recreational activities; emotional intelligence

INTRODUCCIÓN

En variados estudios se ha demostrado e identificado la importancia de las habilidades sociales en el éxito o el fracaso de las personas en la sociedad; como también se ha estudiado la necesidad e importancia que tenga mayor conocimiento y control de sus emociones para poder expresar de manera adecuada sus sentimientos y así pueda proyectarse en una mejor calidad de vida. De allí que a lo largo de toda la historia de la humanidad, las fortalezas de las diferentes sociedades han girado en torno a ellas. La escuela, después de la familia es el espacio donde los niños adquieren valores, creencias y costumbres importantes que le ayudaran como individuo a vivir en sociedad.

Las habilidades sociales no son más que la capacidad que adquiere el individuo desde la escuela y su núcleo familiar para resolver sus propios problemas y los de su medio sin perjudicar a los demás. También son definidas por Monjas & González (1998) como “las conductas o destrezas sociales especificas requeridas para ejecutar competentemente una tarea de índole interpersonal. Se trata de un conjunto de comportamientos aprendidos que se ponen en juego en la interacción con otras personas”, (p. 25)

De acuerdo con Prieto, Illán & Arnáiz (2001), las destrezas sociales incluyen conductas relacionadas con los siguientes aspectos, todos ellos fundamentales para el desarrollo interpersonal del individuo, entre ellas:

  1. Las conductas interpersonales.

  2. Las conductas relacionadas con el propio individuo.

  3. Las conductas relacionadas con la tarea.

  4. La aceptación de las personas que le rodean.

De lo anterior se desprende que las habilidades sociales están presentes en todos los ámbitos de la vida de un individuo. Son conductas concretas, de complejidad variable, que permite que la persona se sienta competente ante diferentes situaciones y escenarios, así como obtener una gratificación social. Hacer nuevos amigos y mantener sus amistades por largo plazo, expresar a otros las necesidades que se tienen, compartir experiencia, ser empático con las vivencias de los que le rodean y mantener posiciones ante situaciones que se presentan.

Todos los individuos requieren crecer en un entorno socialmente estimulante, porque el crecimiento personal en todos los ámbitos necesita de la posibilidad de compartir, de ser y estar con los demás: familia, amigos, compañeros de clase, entre otros. De allí la importancia de conocer la forma de cómo interactúan los niños (as) con su mundo, teniendo en cuenta las habilidades que poseen y que van a influir en su capacidad para afrontar nuevos conocimientos y experiencias que inciden directamente en el logro de sus éxitos como adulto. Hoy en día la formación y desarrollo de las habilidades sociales es cada vez más importante en la interacción del individuo con su entorno, del mismo modo que no se puede negar el papel tan importante que juega la escuela en este aspecto.

Los primeros años de vida en un niño son considerados como la etapa más importante de su existencia y la ayuda que le proporciona los centros infantiles debido a las características que le acompañan, le permite desarrollar sus habilidades sociales, por medio de variadas actividades y situaciones muy propias que se dan dentro y fuera del aula, siendo el juego una herramienta que tiene la posibilidad valiosa de interacción y aprendizaje para trabajar en este nivel, ya que parte de la motivación, el disfrute, las necesidades e intereses que sienten los niños se puede canalizar por medio de la diversión. Consiguiendo así, que el niño sociabilice y establezca relaciones con quienes les rodean (Secadas, Román & Sánchez, 2000).

El Centro Infantil Cumbayá Valley, es una institución educativa privada que atiende a una población de 24 niños (as) en edades comprendidas entre 2 a 4 años de edad. Sus instalaciones están acordes al servicio que prestan y los profesionales que les acompañan están formados en el área, sin embargo, se ha podido observar que las habilidades sociales en estos niños (as) no están desarrolladas acordes a su edad, presentándose en la cotidianidad del aula algunos comportamientos negativos como golpes, mordiscos, rasguños, entre otros, aspectos que dificultan la socialización y que no permiten una adecuada interacción entre los niños.

DESARROLLO

El primer aspecto a desarrollar tiene que ver con el desarrollo emocional, para ello se abordó la inteligencia emocional, que es el saber usar las emociones para que ayuden a guiar la conducta de cada individuo, y los procesos de pensamiento para lograr un bienestar personal con las personas que nos rodean. Jordán & González (2006), conceptualizan la inteligencia emocional como “la habilidad para supervisar los sentimientos y emociones propios y ajenos, con el fin de lograr discriminarlos y utilizar esta información en la orientación del pensamiento y el comportamiento propio” (p.8). La importancia que reviste para un individuo el desarrollo de su inteligencia emocional viene dada porque esta le permite diferenciar entre la información que viene del pensamiento y lo transforma en un comportamiento aceptado por el entorno que se vive. Es por ello, que se habla de dos tipos de mentes: una que piensa y otra que siente, la interacción de ambas son las que logran un equilibrio en el área emocional. Refieren los autores antes citados que la inteligencia es un aspecto complejo que debe ser mencionado desde diferentes puntos de vista, considerando los aspectos individuales, sociales y culturales. La inteligencia emocional traduce la capacidad para ejercer un adecuado autoconocimiento emocional, autocontrol y automotivación. Estos logros se verán reflejados en habilidades sociales como la empatía, la comunicación, la relación interpersonal, el liderazgo y la convivencia.

Con respecto a las habilidades sociales, se puede afirmar que juegan un papel fundamental en el desarrollo integral de la persona. A través de ellas, el individuo obtiene importantes refuerzos sociales del entorno más inmediato que favorecen su adaptación al mismo. En contrapartida, la carencia de estas habilidades puede provocar rechazo, aislamiento y, en definitiva, limitar la calidad de vida. Como se dijo anteriormente las habilidades sociales son las conductas o destrezas sociales específicas requeridas para ejecutar competentemente una tarea de índole interpersonal. Por su parte, Caballo (2002), refiere que

las habilidades sociales pueden ser aprendidas y/o modificadas de la misma forma que otros tipos de conducta. Ningún niño nace simpático, tímido o socialmente hábil. A lo largo de la vida desarrolla un comportamiento determinado, que caracteriza un tipo de personalidad según la forma de interrelacionarse con su entorno social, pudiendo presentar dificultades en este ámbito, las que pueden ser superadas o prevenidas. Se trata, entonces de un conjunto de comportamientos aprendidos que se ponen en juego en la interacción con otras personas. En los niños, las habilidades sociales están determinadas por la manera cómo actúa con sus pares y los adultos, es decir, están centradas en su convivencia, de allí la importancia de trabajarlas desde muy temprana edad, para que el niño se acepte a sí mismo y a los demás

.

Y por último se hará referencia al juego, es muy importante en el desarrollo integral del niño, a través de él, el infante logra adquirir conocimientos habilidades y destrezas las cuales le brindan la oportunidad para conocerse así mismo a los demás y el entorno que lo rodea. Por otra parte, afirma, Sánchez, Secada & Román (2000),

al mismo tiempo, los juegos nos permiten iniciarnos en las normas, el respeto de las cuales resulta clave en nuestro desarrollo personal y sobre todo social

. (p.40)

El juego es un instrumento trascendente de aprendizaje de y para la vida y por ello un importante instrumento de educación. Para que pueda cumplir con su objetivo principal según Vigostky, citado en Salamanca (2012), debe:

  1. Permitir el crecimiento y desarrollo global de niños y niñas, mientras viven situaciones de placer y diversión.

  2. Constituir una vía de aprendizaje del comportamiento cooperativo, propiciando situaciones de responsabilidad personal, solidaridad y respeto hacia los demás.

  3. Propiciar situaciones que supongan un reto, pero un reto superable.

  4. Evitar que en los juegos siempre destaquen, por su habilidad, las mismas personas, diversificando los juegos y dando más importancia al proceso que al resultado final.

  5. Proporcionar experiencias que amplíen y profundicen lo que ya conocen y lo que ya pueden hacer. (f) Estimulación y aliento para hacer y para aprender más.

  6. Oportunidades lúdicas planificadas y espontáneas

  7. Tiempo para continuar lo que iniciaron.

  8. Tiempo para explorar a través del lenguaje lo que han hecho y cómo pueden describir la experiencia.

  9. Propiciar oportunidades para jugar en parejas, en pequeños grupos, con adultos o individualmente

  10. Compañeros de juego, espacios o áreas lúdicas, materiales de juego, tiempo para jugar y un juego que sea valorado por quienes tienen en su entorno.

El juego no es una actividad donde el adulto permite al niño hacer su voluntad sin ningún objetivo específico, muchas personas confunden el verdadero concepto y valor que tiene el juego y por ende no lo consideran como algo primordial en las primeras etapas de vida.

El nivel de investigación seleccionado para realizar el presente estudio es el tipo descriptivo de corte transversal. Se recolectaron los datos en un solo momento y en un tiempo único. El enfoque utilizado fuel el cuantitativo. La población estuvo conformada por 15 niños con edades de 3 años. En cuanto a la muestra, se decidió seleccionar la totalidad de los niños con la edad antes mencionada, para ser observados. En este sentido, es importante resaltar que no hay diseño muestral, por lo tanto fue un estudio censal. Para obtener la información, se aplicó como técnica la observación directa y como instrumento la ficha de observación (Tamayo & Tamayo, 2006).

Una vez recolectado los datos, los resultados se ordenaron, codificaron y tabularon utilizando para ello la metodología cuantitativa. Se utilizó la estadística descriptiva que según Tamayo (2003), “es aquella que presenta la información en forma conveniente, útil y comprensible; y se utiliza en conjuntos finitos, para representar, organizar y analizar los datos, comparar y luego comunicar” (p.35). En este sentido se emplearon técnicas convencionales de frecuencias absolutas y relativas. Las representaciones gráficas se muestran mediante el empleo de diagramas de pastel.

CONCLUSIONES

Las observaciones realizadas permitieron evidenciar lo siguiente:

Las habilidades sociales que se debe desarrollar en los niños de tres años son el autoconocimiento, el autocontrol, la empatía y la motivación las cuales les ayudan en el desenvolvimiento con sus pares, en el conocimiento de sí mismo y de los demás, en lograr resolver un problema de manera tranquila, poder entender que le pasa a su amigo(a), y lograr realizar las actividades de manera feliz y con ganas de aprender cada día.

Utilizar el juego como metodología de aprendizaje en los niños en edad preescolar permite desarrollar procesos de socialización e interacción que fortalecen relaciones interpersonales y generan aprendizajes a nivel social.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

Caballo, V. (1998). Manual de técnicas de terapia y modificación de la conducta. Madrid: Siglo XXI. [ Links ]

Jordan, L., & González, M. (2006). Haga de su hijo un gerente emocional. Bogotá: Gamma. [ Links ]

Monjas, I., & Gonzáles, B. (1998). Las Habilidades Sociales en el Currículo. Madrid: Mc Graw Hill. [ Links ]

Prieto, D., Illán, N., & Arnáiz, P. (2001).Programas para el desarrollo de habilidades sociales. Madrid: Pirámide. [ Links ]

Salamanca, L. (2012). Desarrollo de habilidades sociales en niños y niñas de grado 0 a través del juego. Bogotá: Universidad Pedagógica Nacional. [ Links ]

Sánchez, S., Secada, F., & Román, H. (2000). Desarrollo de habilidades en niños pequeños. Madrid: Pirámide . [ Links ]

Secadas, F., Román, J. M., & Sánchez, S. (2000). Desarrollo de habilidades en niños pequeños. Madrid: Pirámide . [ Links ]

Tamayo Tamayo, M. (2006). El proceso de Investigación Científica. México: Limusa. [ Links ]

Recibido: 01 de Noviembre de 2017; Aprobado: 02 de Febrero de 2018

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