SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.7 suppl.1Organizational culture in media institutions: Research study in Guerrillero newspaper of Pinar del Río, CubaPodcasting in Cuba? Emergencies of a revolutionary format author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

My SciELO

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

  • Have no cited articlesCited by SciELO

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Alcance

On-line version ISSN 2411-9970

ARCIC vol.7  supl.1 La Habana  2018

 

Itinerarios de Investigación

Periodismo especializado en Prensa Latina: una mirada diferente [1]

Specialized Journalism in Prensa Latina: a different perspective

Dra. María de los Á González Borges1 

Lic. Glenda Arcia Socorro2 

1Universidad de La Habana, Facultad de Comunicación. Cuba. Correo electrónico: angeles@fcom.uh.cu

2Agencia Prensa Latina. Correo electrónico: glenda466@gmail.com.

Resumen

Con el dinamismo impuesto por Internet a la producción informativa mediática, las agencias de noticias no se quedaron detrás, se adaptaron a la nueva situación tecnológica con la creación de portales propios y la continuación de la función de surtidoras del resto de los medios-clientes, de este nuevo soporte.

Su incorporación a la red con los portales donde presentan parte de su producción, o a los portales de los clientes; el empleo del correo electrónico para trasladar sus paquetes informativos, o comunicarse con sus fuentes; el aprovechamiento de las redes sociales como fuentes o como potenciales clientes, el envío a celulares, han sido recursos empleados por unas empresas informativas que desde su surgimiento, establecieron un pacto matrimonial con las tecnologías de la época. Sin embargo, en la producción periodística no parecen tener la misma capacidad de respuesta.

El presente artículo se ocupa de analizar las mediaciones estructurales-organizativas, culturales, cognitivas y externas, entre otras, que intervienen en el proceso productivo de periodismo especializado en la agencia Prensa Latina y que limitan a esta entidad informativa en sus mensajes.

Palabras Clave: agencias de noticias; mediaciones; producción periodística especializada de agencias

Abstract

With the dynamism imposed by the Internet on media production, the news agencies were not left behind, they adapted to the new technological situation with the creation of their own portals and the continuation of the function of suppliers of the rest of the media-clients, of this new support. Its incorporation into the network with the portals where they present part of their production, or to the portals of the clients; the use of e-mail to move your information packets, or communicate with their sources; the use of social networks as sources or as potential clients, the sending of cell phones, have been resources used by informative companies that since its inception, established a marriage pact with the technologies of the time. However, in journalistic production they do not seem to have the same response capacity. This article aims to analyze the Structural-organizational, cultural, cognitive and external mediations, among others, that intervene in productive process of specialized journalism at Prensa Latina agency and limit this informative entity in its messages.

Keywords: news agencies; mediations; agency news specialized production

1. Introducción

1.1. Acercamiento a la teoría del periodismo especializado

La especialización es el resultado del desarrollo. La evolución de los procesos sociales y los cambios a los que ha estado sometida la humanidad desde su aparición, demandan la adquisición de nuevos conocimientos a los hombres, quienes tratan de interpretar sus realidades, para de esta manera llegar a satisfacer parte de sus necesidades. La necesidad de delimitar esferas de trabajo y contar con profesionales capaces de profundizar en los contenidos mediante el desarrollo de nuevas habilidades y métodos distintos a los empleados en la producción generalista, es cada vez más urgente.

Para entender lo que sucede en las sociedades es tan importante la información como su apropiada selección, análisis, valoración e interpretación, lo que implica una especialización en la profesión periodística (Ferrer, 2002).

Las nuevas tecnologías de la información (TIC) acrecientan la segmentación de la audiencia, la interactividad, investigación y consulta de información, así como la especialización de canales, contenidos y receptores, lo que ofrece a los usuarios mayores posibilidades de escoger los contenidos especializados, para transformar el periodismo de masas a uno más individualizado y elitista (Ferrer, 2002).

Las instituciones mediáticas obligadas a lograr una mayor calidad informativa, amplitud y profundidad en los contenidos, acuden a la metodología del periodismo especializado (P.E).

El surgimiento de la radio a mediados de los años 20 del pasado siglo y el auge de la televisión como medio de comunicación durante y después del segundo gran conflicto bélico, disminuyó el interés del público por la prensa escrita, que realizó un esfuerzo por retomar su anterior posicionamiento, con la publicación de trabajos más extensos y profundos.

Para Quesada (1998), la incorporación de elementos valorativos, documentales, interpretativos y de opinión, propició una sólida base para el desarrollo de lo que fue definido como periodismo especializado. El proceso se complejizó con el surgimiento de Internet en 1983 y la utilización de la web como vía de intercambio de información, función sumamente ampliada en los últimos años.

Diversos son los objetivos que se propone cumplir este nuevo modo de hacer, como el servir de traductor e intermediario entre los expertos en determinada temática y el público, labor ampliada con la exigencia de una adaptación analítica de los mensajes.

Ramírez (1999) plantea que frente a la globalización e internacionalización de la cultura se impone una política de desarrollo de las identidades culturales y en este sentido,

(…) la Información Periodística Especializada ofrece una plataforma de gran utilidad para prestar este servicio a la sociedad a través de sus áreas de especialización informativa sobre contenidos culturales, políticos, económicos, etc. Por ello, el periodismo especializado es, ante todo, un periodismo de servicios que busca dar una respuesta eficaz a las necesidades reales de los usuarios de la información (p.79).

En América Latina, el periodismo especializado favorece la interpretación de la realidad, necesidad social actual, trata de cumplir una función educativa y de no reproducir patrones de exclusión de los públicos no especializados deseosos de información, orientación, explicación y educación sobre diversos temas, y de sus vinculaciones con los contextos locales, regionales y globales (Ferrer 2002).

El P.E es herramienta para enfrentar el desequilibrio informativo internacional que atenta contra el desarrollo de las diversas identidades culturales de la región. Su empleo se ha extendido a medios alternativos como la agencia Prensa Latina (PL), cuyo propósito fundamental está encaminado a la defensa, mediante el periodismo, de los intereses y derechos de las naciones del área en que se circunscribe y del mundo en general.

Según Mauro Wolf (cit. por Cesáreo, 2007), las agencias “se configuran ya como empresas especializadas, dentro del sistema de información, y llevan a cabo un trabajo que es ya de confección (…); proporcionan unidades-noticias; se colocan por tanto en un estadio avanzado del proceso productivo” (p.135).

Aun cuando se pueda observar en estas instituciones una especialización temática, no todas realizan trabajos de carácter profundo, portadores de los rasgos considerados por Quesada como propios de la información periodística especializada (IPE).

2. Desarrollo

2.1. Prensa Latina desde el proceso productivo del periodismo especializado

La emisión diaria de noticias es la labor priorizada en la agencia PL, pero en los últimos años, se ha incrementado la confección de materiales de mayor profundidad y elaboración, que conforman los servicios especiales. Sin embargo, aun la información periodística especializada representa el tres por ciento del total de Prensa Latina. Mientras en un día se transmiten seis o siete trabajos especializados, los generalistas alcanzan la cifra de 300. Los periodistas entregan dos servicios especiales mensuales y cuatro despachos informativos diarios.

De los datos anteriores y la observación del proceso productivo de la agencia, se deduce el predominio de un proceso mayormente generalista con la inserción de lógicas de producción especializadas. Los principales rasgos de ese proceso, son resultado de la mediación de una serie de factores como las rutinas laborales, los condicionantes estructurales-organizativos, profesionales y externos, que determinan en gran medida las características del mensaje.

La asignación de roles y el otorgamiento de una responsabilidad determinada dentro de la labor colectiva permiten un funcionamiento coordinado, enfocado hacia la consecución de los objetivos de la entidad. A la vez, se perfilan modos de interpretar el mundo desde lo individual, hasta la totalidad del grupo de trabajadores, marcados por rutinas, desempeños, ideologías compartidas y fines comunes.

La Vicepresidencia para la Información, organiza y controla la producción informativa y está conformada por un vicepresidente, editores jefes, editores, jefes de redacción y redactores, distribuidos entre las Redacciones Políticas (divididas por regiones y corresponsalías coordinadas entre sí), las Especializadas (Deportes, Cultura, Ciencia y Técnica, Economía), Nacional, Lenguas Extranjeras. Este último departamento está integrado por tres editores que se encargan de la revisión y emisión de los trabajos con ese nombre.

La distribución en redacciones por áreas temáticas y geográficas responde a criterios organizativos y favorece una visión generalista de los acontecimientos. Cada departamento debe cubrir en su totalidad una esfera o región y los profesionales deben estar preparados para escribir sobre los más diversos tópicos.

El estudio sistemático y el tratamiento de un tema determinado son requisitos fundamentales para la consecución de un conocimiento profundo, por lo que la permanencia en un área durante períodos prolongados de tiempo permite que los periodistas adquieran mayor preparación. Sin embargo, en Prensa Latina, como en otras instituciones de su tipo, el trabajo es muy dinámico y se rota de redacción con alguna asiduidad.

Los entrevistados coincidieron en que la rotación regular puede afectar la especialización de los periodistas, por su necesidad de permanencia, estabilidad y constancia. Mientras algunos directivos consideraron que la rotación permite la aprehensión de saberes para enfrentar el trabajo en una oficina en el exterior.

Esta dinámica se lleva a cabo, fundamentalmente, en los primeros meses de un profesional en la agencia.

La estructura de la agencia resulta factible para su funcionamiento como entidad centrada en el periodismo generalista, al cual tributan tanto redacciones de la casa matriz como de las corresponsalías. Las oficinas en el exterior responden a las Redacciones Políticas que atienden su área geográfica desde la sede en La Habana, pero realizan también despachos informativos en temáticas específicas como cultura, ciencia y técnica, deportes, economía, perfiles propios de las especializadas.

El desglose temático de las redacciones no implica especialización de contenido ni de métodos empleados y la dinámica de trabajo continúa priorizando la información por encima del análisis o la interpretación.

La estructura organizativa, unida al desempeño por los profesionales de las funciones que les son asignadas y el establecimiento de niveles hacia el interior de la institución, definen las rutinas productivas, el camino que siguen los materiales elaborados y la calidad de estos.

El flujo de la información especializada de la agencia se organiza de la siguiente manera: una vez elaborados por los periodistas de las Redacciones Políticas, los trabajos concebidos como servicios especiales deben ser revisados por los jefes de la redacción a la que pertenecen, antes de ser editados por el departamento que los emitirá (Dpto. Especializado).

En el caso de las llamadas redacciones especializadas, por su perfil temático, el jefe de cada una de ellas es responsable de la revisión y publicación de esos trabajos. Por su parte, los corresponsales envían por correo electrónico sus trabajos a servicios especiales, donde son editados. La revisión realizada por los jefes de las redacciones garantiza que no se cometan errores que quizás un editor no pueda detectar, pues no es especialista en el tema.

Una vez editados, los trabajos se transmiten por el cast o flujo diario o por publicaciones de Prensa Latina y se envían a suscriptores específicos según la lista de difusión. Los destinados solamente a los clientes que pagan por ellos se denominan “exclusivos”. El resto aparece en la página web de la agencia distribuida en esferas. Cada uno de estos sectores tiene un día específico [2] de emisión, de manera que se trasmita toda la semana y también teniendo en cuenta acuerdos establecidos con organizaciones como la UNESCO [3].

Los fines de semana el flujo de esos servicios aumenta considerablemente y, de acuerdo con el análisis de contenido cualitativo realizado como parte de esta investigación, se acerca más a la tipología de IPE propuesta por Montserrat Quesada (1998).

Dentro del departamento de Servicios Especiales, los editores se distribuyen la revisión de los trabajos de acuerdo con las esferas antes mencionadas, de manera que se dedican a un mismo tema lo cual posibilita su mayor conocimiento.

El resto de la producción de la agencia, o sea, la orientada hacia el generalismo, tiene otros editores, quienes se encargan de revisar los despachos informativos de todas las redacciones.

Para el control y articulación del funcionamiento se implementan normas y pautas que determinan un comportamiento relativamente estable del trabajo, acorde con la política editorial de PL.

La exigencia de dos especiales mensuales a cada redactor y corresponsal obliga en cierta medida a incursionar en el periodismo especializado. No todos los servicios especiales responden a este tipo de periodismo, pero sin dudas es una orientación que lo favorece.

Las regulaciones tanto organizativas como estilísticas que el medio implementa provocan relativa estabilidad y su acatamiento define, en gran medida, el producto final. Estas orientaciones pueden aparecer o no en el libro de estilo y responden a la política editorial de la institución y media todo el proceso de elaboración de materiales tanto especializados como generalistas.

En la XI Edición de las Normas de Prensa Latina (2011) se plantea que el objetivo de la agencia “debe ser informar, educar y facilitar la comprensión humana, preservando y difundiendo nuestra identidad cultural en un mundo cada vez más globalizado” (p.2-3).

En cuanto a la intencionalidad, el documento refiere:

Se entiende que Prensa Latina debe ser veraz, trabajar con la finalidad de servir a la causa del progreso social, la verdadera democracia con la participación de las masas, la independencia y liberación de los pueblos, con énfasis en su imagen latinoamericana y tercermundista, propósitos a los cuales se subordina cualquier tipo de norma profesional o técnica (XI Edición de las Normas de Prensa Latina, 2011, p.2-3).

La proyección e inserción de la agencia en el ámbito internacional se enfoca hacia la concepción de productos informativos que le permitan competir a escala global al tiempo que difundan una visión propia de los acontecimientos, lo que la distingue del resto de las instituciones de su tipo y se manifiesta tanto en su producción periodística como en la ideología de sus profesionales.

Para la conformación de la agenda temática de la agencia se tienen en cuenta los criterios y sugerencias de sus profesionales. En la producción de servicios especiales, semanalmente se realiza una proyección de estos trabajos con las opiniones de redactores, corresponsales, editores del departamento de Servicios Especiales, la dirección de la agencia y la comisión de análisis. Esta última propone los temas de mayor relevancia, verifica la publicación de la competencia, y la de PL y sugiere modos de tratamiento. Los corresponsales participan a través del envío de las previsiones semanales o diarias.

No existe verticalidad para proponer los servicios especiales del mes y hubo coincidencia entre los entrevistados en que todos los actores del proceso en los diversos espacios formales o informales están facultados para proponer el tratamiento de una temática desde este tipo de servicio que emite la agencia.

Existen usuarios y receptores que se interesan en un tema específico y solicitan a la agencia servicios de este tipo, lo que se planifica en la producción periodística. Lo anterior forma parte del proceso de construcción de la agenda, mediado por la intencionalidad editorial, las estructuras de organización, la ideología profesional, las rutinas productivas y factores externos que se analizan más adelante.

Tanto en la concepción como en el desarrollo de todo proceso productivo median las condiciones materiales y los recursos humanos con los que cuenta el medio de prensa, los que pueden favorecer enormemente el trabajo u obstaculizar su desenvolvimiento.

Durante el proceso productivo los periodistas interactúan entre ellos y con sus superiores. El tipo de relaciones que se establecen depende de la estructura organizativa y permite el establecimiento de jerarquías que controlan y dan estabilidad al funcionamiento del medio. El intercambio con los compañeros y directivos favorece la aprehensión de normas, prácticas y valores propios de la institución. También se comparten y afianzan conocimientos, experiencias, modos de hacer, estilos e ideologías.

En el caso de Prensa Latina, una parte de estos espacios de socialización tiene lugar hacia el interior de las redacciones durante el trabajo diario y en locales menos formales como el comedor, los pasillos y salones de la agencia. Otras formas de socialización son los contactos editoriales diarios en los que participan el presidente, vicepresidente, los editores jefes, algunos jefes de redacción y el del departamento de Análisis. En estas reuniones se analiza el trabajo de la jornada anterior y se elabora la agenda temática diaria con las previsiones enviadas por los corresponsales y las elaboradas en cada redacción.

Al finalizar estos encuentros se circulan las principales instrucciones por correo, de manera que los periodistas, incluidos los que trabajan en el exterior, obtengan la información. Durante el resto del día los editores jefes recorren las redacciones y establecen una comunicación más fluida y directa con los periodistas.

En el caso de los corresponsales, el intercambio es constante, fundamentalmente entre estos y los editores de turno, con sus respectivos jefes de redacción, quienes les pueden indicar los temas a abordar, incluidos los géneros que deben trabajar. También se comunican con las redacciones especializadas y las publicaciones de la agencia, principalmente por la solicitud de sus trabajos.

Otro momento de interacción ocurre los viernes cuando se celebra una reunión general a la que asisten los periodistas de la agencia, representantes de las vicepresidencias Comercial y Editorial y la administración, donde se realiza una revisión del trabajo realizado, se ofrecen orientaciones generales, se escuchan las opiniones que tengan los periodistas, los criterios sobre coberturas u otros tópicos y se planifica la semana siguiente.

Mensualmente se realiza un colectivo técnico en el que se reúne cada redacción con los directivos para analizar su funcionamiento interno y la labor de los corresponsales que tributan a ellas. Además de esto, los martes y los viernes circula el boletín de la comisión de Calidad, en los cuales se publican críticas y elogios de los trabajos periodísticos.

A través de todos estos espacios de socialización, los periodistas asumen las normas de Prensa Latina y van incorporando en su quehacer diario aspectos vinculados a la política editorial y la ideología del medio, de manera que su desenvolvimiento ocurre de acuerdo con los parámetros de la institución y los trabajos elaborados son portadores de una visión del mundo compartida.

Para González Fajardo (2009), la ideología profesional en el campo de la comunicación remite al conjunto de doctrinas, rituales, códigos ético-morales, valores, compartidos y adoptados como inherentes dentro de la organización, que simbolizan todo el engranaje que debe fluir entre los periodistas para la asimilación y ejecución del proceso productivo.

La ideología profesional constituye un factor de gran relevancia que media cada una de las fases de la labor periodística, generalista o no. En su conformación influyen los espacios de socialización donde se incorporan normas, habilidades y concepciones compartidas por los miembros del medio. Las reuniones con los superiores, el intercambio hacia el interior de la redacción y con los periodistas de otras áreas, la rotación por varios departamentos de la agencia y sus corresponsalías, propician que el periodista adquiera y haga propios, rasgos y concepciones que lo conduzcan en la realización de sus trabajos desde el momento de la selección del tema.

En el P.E cambia el paradigma, se amplía el concepto de noticiabilidad, más distanciado de la actualidad de los hechos que impone el generalismo. Los entrevistados coincidieron en que la elección de un tópico o idea para la realización de un servicio especial depende, fundamentalmente, del seguimiento de la temática por parte del periodista, la información acumulada y el conocimiento de base que se posea, a partir de lo cual se determina la relevancia y el interés que pueda despertar un asunto específico.

Otro aspecto relevante en la concepción y desarrollo del trabajo periodístico es la competencia profesional, la preparación y capacidad del periodista para trabajar eficazmente. En el especializado este elemento desempeña un papel fundamental para alcanzar calidad y efectividad en el mensaje y el cumplimiento de los requisitos necesarios en el tratamiento de un tema en profundidad.

Durante la investigación se tuvo en cuenta la formación académica de los profesionales, la asistencia a cursos de superación, el conocimiento sobre la temática que abordan, en correspondencia con el dominio de los rasgos de la información especializada, de su lenguaje y estilo, así como el manejo de las TIC.

En el periodo estudiado, el 67% de los periodistas entrevistados son Licenciados en Periodismo, mientras que el resto proviene de carreras como Historia, Física, Filología, Ciencias Farmacéuticas y Biología.

La mayoría de los últimos se incorporaron a la agencia después de realizar cursos de reorientación o diplomados, lo que fue destacado por muchos entrevistados como una fortaleza, porque permite abordar la actualidad desde miradas multidisciplinares.

De los entrevistados, alrededor del 42% ha realizado cursos de postgrado como Historia, Relaciones Internacionales, Derecho Internacional Humanitario y Deportes. Mientras el 87% conoce otros idiomas y los emplean en la consulta de fuentes.

El dominio del tema por parte del periodista se refleja en los despachos analizados mediante la presencia de juicios categóricos, analíticos y, en menor medida, hipotéticos. También aparecen argumentos causales, por ejemplificación y por analogía. La capacidad de elaborar estos juicios y argumentos denota un conocimiento de base, explicitado además, en párrafos portadores de background y antecedentes.

En algunos despachos, el empleo de un lenguaje figurativo y la alusión a referentes literarios o históricos para caracterizar una situación demostró el conocimiento del autor y un nivel de especialización que le permite establecer comparaciones. Asimismo, el empleo de frases explicativas y la definición de términos propios de una esfera, poco manejados por un público medio, evidencia estudio y conocimiento sobre el área de trabajo, así como interés por la comprensión de la audiencia.

Todos estos elementos, junto a la contraposición y refutación de las fuentes, permiten lograr profundidad en el análisis, la cual se detectó más nítidamente, en despachos interpretativos y analíticos, predominantes en los especiales transmitidos los fines de semana.

En algunos de los trabajos emitidos como servicios especiales se identificó un estilo informativo descriptivo. En esos casos predominaban las referencias excesivas a fuentes, la narración de los acontecimientos, el escaso uso de antecedentes y contenidos informativos a manera de background; tampoco incluían juicios ni argumentos.

Dos entrevistas en profundidad mostraron dominio del tema por las preguntas e intervenciones de los periodistas, la conducción de la conversación y el tratamiento de elementos específicos.

En ocasiones fue difícil identificar si las aseveraciones eran propias del autor o de las fuentes, debido a la ambigüedad en su empleo.

Según la XI Edición de las Normas de Redacción de Prensa Latina (2011), un servicio especial es “un trabajo para el periodista demostrar su dominio de un tema” (p.20), que no debe exceder las 120 líneas; pero no abunda en otros rasgos de este tipo de servicio. La extensión de los despachos analizados oscila entre las 70 y las 120 líneas.

Se plantea que los párrafos deben ser cortos, con no más de cuatro líneas, excepto el lead que puede alcanzar las cinco, pero lo establecido es que no sobrepase las 40 palabras, lo que se cumple en la mayoría de los trabajos seleccionados. Solo en unos pocos el exceso de líneas atenta contra la síntesis, la exactitud y claridad en el planteamiento de las ideas, rasgos propios del estilo cablegráfico.

El lenguaje empleado en la mayoría de los trabajos es sencillo, directo y claro, con algunos elementos descriptivos y, en ocasiones, calificativos como adjetivos y frases explicativas. Estas últimas se emplearon mayormente para aclarar términos propios de la materia abordada y hacerlos comprensible a todo tipo de lector.

En menor medida, los despachos emplearon recursos expresivos como el símil y la metáfora para valorar una situación y establecer comparaciones, lo cual le otorga un sentido figurativo al lenguaje y demuestra conocimiento, dominio por parte del periodista.

De los trabajos analizados, 64 en total, el 63% pertenece al estilo interpretativo, el 17% al opinativo, el 13% al informativo descriptivo y el resto posee un carácter histórico. El interpretativo es el estilo propio de la Información Periodística Especializada. En los despachos de este tipo se encontró mayor análisis del periodista a través del empleo de juicios, argumentos, background, antecedentes y la contraposición de fuentes. En el 15% de los interpretativos, se identificó un matiz opinativo, que resultó contraproducente, por la ausencia de documentación y fuentes expertas que respaldaran los planteamientos.

Los despachos con un estilo informativo descriptivo son propios del periodismo generalista, por lo que no cumplieron con los requisitos de un trabajo especializado. En cuanto a los géneros, en la muestra seleccionada se identificaron 25 despachos interpretativos, 11 explicativos, ocho analíticos, dos entrevistas en profundidad, tres crónicas, una reseña, siete relatos históricos, un despacho contextualizado y seis informativos. Los cinco primeros géneros son los más comunes en el P.E y, de ellos, los despachos interpretativos, explicativos y analíticos son los más propicios para profundizar en los temas, analizar, demostrar una hipótesis o fundamentar una tesis, con predominio de la documentación, antecedentes y contextos, juicios, argumentos, refutación y contraposición de fuentes.

En los despachos informativos abundan el lead sumario, las referencias a las fuentes, la descripción de los hechos, los elementos de background y antecedentes. En ocasiones, el empleo de las fuentes es excesivo y el periodista se limita a describir, no ofrece explicaciones ni contextualiza para sustentar juicios.

En las dos entrevistas analizadas, la profundidad se logra a través de las preguntas y las respuestas. Mediante las primeras el periodista muestra dominio del tema, contextualiza, orienta el diálogo con el fin de comprobar o analizar, y realiza aseveraciones que manifiestan seguimiento de la temática y conocimiento de fondo.

Otro elemento importante dentro de la competencia de un profesional de estos tiempos es el manejo de las TIC y el aprovechamiento de las posibilidades que estas brindan mediante su aplicación en el trabajo que realizan. En PL, los periodistas cuentan con computadoras conectadas a Internet, un programa denominado PLnet para la edición y publicación, televisores que transmiten canales internacionales, entre otros, recursos que facilitan su labor, favorecen la inmediatez, la mayor difusión y variedad de los productos periodísticos, el acceso a las fuentes de información y el seguimiento de los hechos al tiempo que ocurren o con muy poca diferencia. Durante la observación realizada se percibió el empleo de estas herramientas y la consulta de datos en la web.

La ideología profesional comprende también las concepciones, juicios y valoraciones acerca de la función de la labor que se ejerce. Los periodistas entrevistados destacaron la importancia y propósitos del periodismo especializado, y el respeto hacia el público y las fuentes.

Otro de los propósitos atribuidos por los entrevistados a la especialización consistió en la posibilidad de difundir la intencionalidad y los objetivos de Prensa Latina de una manera más amplia y reposada, con mayor cantidad de argumentos y posibilidades de respaldarlos.

Asimismo, valoraron la oportunidad de incrementar el prestigio y la credibilidad de esta institución. Aun cuando algunos refirieron que para la agencia lo fundamental es la producción noticiosa, la mayoría coincidió en la necesidad de realizar trabajos de carácter más profundo, propios del periodismo especializado.

Durante todo proceso de producción periodística, tanto generalista como especializado, ocurre la mediación de factores de carácter externo como instituciones políticas o no, clientes y fuentes informativas.

Durante los períodos de observación para esta investigación no se presenció directamente la intervención de ninguno de estas condicionantes.

El acceso del periodista a las fuentes, sobre todo las expertas, y la relación que establece con estas adquiere gran relevancia para el desarrollo de un producto especializado. De ello depende la profundidad con que se aborde el tema y la calidad de lo que se escriba.

Otra condicionante externa a tener en cuenta son los clientes de la agencia, quienes solicitan servicios específicos de temas con fotografías, o los reciben a través de contratos establecidos con la agencia. Así, la emisión de estos trabajos se organiza en función de dichas peticiones. Esto ocurre con Por la ruta del esclavo, servicio que se publica los jueves por un acuerdo con la UNESCO.

Los contratos, la oferta de servicios y los acuerdos son supervisados por la vicepresidencia Comercial encargada de las negociaciones y transmite las solicitudes a la redacción de Servicios Especiales. Publicaciones de la propia agencia como la revista Cuba Internacional y el semanario Orbe solicitan trabajos específicos a redactores y corresponsales.

Las condicionantes analizadas determinan el desenvolvimiento de las rutinas productivas y en conjunto con estas, definen el producto final. Las rutinas productivas propias del P.E están determinadas en gran medida por las fases de un proceso productivo distinto al generalista, basado en la aplicación de la metodología periodística de investigación. El desarrollo de dichas etapas ocurre en estrecho vínculo con las condicionantes antes explicadas, por lo que es necesario destacar la imbricación de las diversas mediaciones durante la elaboración de mensajes de este tipo.

Teniendo en cuenta la propuesta de la catedrática Montserrat Quesada (1998), habíamos identificado entre las fases de la producción periodística especializada las siguientes: el inicio de la investigación documental, que comprende la identificación de la idea susceptible de ser desarrollada, la aplicación de técnicas para el seguimiento y acumulación de información en torno al tema elegido y la concepción de la hipótesis.

Un segundo momento lo dedica esta autora al diseño del plan de trabajo, con el estudio de viabilidad y la elaboración del plan metodológico; seguidamente es considerada la fase de elaboración de la información especializada con la puesta en práctica del plan metodológico y la aplicación de técnicas de investigación tales como el proceso de documentación del tema, las observaciones directas y las entrevistas con las fuentes exclusivas. Por último, incluye la presentación de la información periodística especializada.

Al analizar las diversas fases en el proceso de producción especializada en Prensa Latina es necesario tener presente que dicho proceso se encuentra supeditado al proceso productivo del periodismo generalista. Ello, unido a la mediación de la estructura organizativa del medio, la ideología profesional y factores de carácter externo, provoca que no todas las fases se cumplan en su totalidad o como se debería. Un aspecto importante es que nos referimos a una agencia internacional, con un proceso productivo singular al de este tipo de medio y características de su lenguaje y estilo distintas al del resto de las instituciones mediáticas.

Por tales razones y debido a las particularidades de la elaboración de los trabajos periodísticos especializados, la observación de las distintas etapas resultó complicada. No obstante, se concertaron con los redactores días tipo, para aplicar esta técnica, la cual, junto a las entrevistas, nos permitió obtener la siguiente caracterización.

En relación con el inicio de la investigación documental y la identificación de la idea susceptible de ser desarrollada, de acuerdo con varios entrevistados, existen en muchas ocasiones solicitudes de tópicos provenientes del departamento de Servicios Especiales, los cuales tienen en cuenta las peticiones de los clientes y la agenda temática de PL, o se colegian opiniones hacia el interior de cada redacción. Estas últimas realizan además, pedidos a los corresponsales vinculados a ellas por la temática. También se parte de la iniciativa individual, basada en la preparación y el conocimiento adquirido durante el tiempo en que trabajan determinadas esferas, o de la realización de coberturas, que facilita el acceso a las fuentes.

Algunos de los entrevistados explicaron que la identificación de la idea es resultado del seguimiento de los hechos que considera más importantes según el perfil editorial de su medio. Otros consideraron que el servicio especial es la continuidad de una secuencia de trabajos, porque si el hecho trasciende crece en importancia en la escala informativa y se redacta un principal que es una nota más ampliada. Le sigue el enfoque y en lo último de la cadena se encuentra el servicio especial, el cual funciona como la conclusión de todo el trabajo realizado durante el mes. Es el seguimiento de una noticia en desarrollo, explicó en entrevista uno de los periodistas.

Una vez determinada la idea a abordar, el periodista pasa a una primera etapa de búsqueda y acumulación de información que le permita delimitar las aristas no tratadas anteriormente y concebir la hipótesis a defender durante el desarrollo del trabajo.

En cuanto al seguimiento y acumulación de información en torno al tema elegido, declararon que entre sus rutinas se encuentra la recopilación y acumulación de información en un archivo que guardan en la computadora. Organizar datos que emplean posteriormente, es parte de la labor diaria que realizan, lo que les permite conformar un archivo en el que conservan publicaciones de otras agencias, de periódicos, etc.

Algunos complementan los pasos con el procesamiento y análisis de la información para su depuración antes de archivarla. A pesar del trabajo con las fuentes documentales e Internet como rutinas importantes, consideraron ir a las fuentes primarias y no conformarse solo con los documentos tanto en la preparación de la premisa rectora y la consolidación de conocimientos en aras de la preparación de las entrevistas.

Es necesario aclarar que la investigación que se realiza en este momento es inicial y será más profunda a medida que se avance hacia las demás fases del proceso productivo. La preparación del periodista determina en gran medida su capacidad para detectar el posible alcance de las temáticas y sus diversas aristas, así como su sagacidad para obtener la información necesaria.

Al comenzar a preparar un especial, explicaron, el periodista debe poseer cierto conocimiento de fondo. Para una parte de los entrevistados existen suposiciones que se quieren demostrar y cuyo análisis lleva hacia conclusiones parciales. Señalaron que eso lo proporciona el escribir todos los días o de manera continua sobre una temática hasta que del conjunto de datos, se proyecta una hipótesis y se comienza a manejar con la intencionalidad propia del medio.

Concebir la hipótesis resulta un momento fundamental para los periodistas entrevistados pues es el punto de partida de la investigación, la guía para posteriormente desarrollar el trabajo fundamentando lo planteado en esa hipótesis. Otros señalan que el planteamiento de la hipótesis evita que el análisis naufrague, pero que para que una hipótesis lleve a buen camino, debe haber lecturas y estudio sobre el tema en cuestión.

Algunos profesionales plantearon que para demostrarla es necesario acudir a la contraposición de fuentes y mediante este recurso dar a entender la posición del periodista, sin embargo, pocos aludieron a la necesidad de documentar la información con antecedentes, background, hechos colaterales y contextos.

Insistieron en que partir de una hipótesis para la búsqueda de información permite ir encontrando fuentes que realicen declaraciones y expongan sus opiniones, asunto que no es permisible a los periodistas, quienes no deben opinar en la agencia.

Este planteamiento es hasta cierto punto aplicable y responde a la política editorial del medio. Sin embargo, en los trabajos especializados son relevantes los razonamientos y criterios del autor, fundamentalmente, a la hora de apoyar la idea central sobre la que se escribe.

En torno al diseño del plan de trabajo todo periodista elabora, consciente o inconscientemente, un plan que le permite organizarse y estructurar su trabajo, definir sus necesidades informativas y materiales, contactar con las fuentes, planificarse hasta cierto punto, teniendo en cuenta siempre la imprevisibilidad de los acontecimientos. En el caso del periodismo especializado, tener una guía metodológica resulta de gran ayuda debido a la duración y amplitud del proceso de indagación, obtención y almacenamiento de la información, estudio y concepción del producto final.

Antes de la elaboración del trabajo periodístico, es conveniente valorar la viabilidad de la temática que se pretende abordar, teniendo en cuenta desde las posibilidades de acceso a los datos hasta la disposición del equipo necesario como computadoras, conexión a Internet, grabadoras y otros. Según los entrevistados, este es un paso inviolable, de manera que se ha convertido en un análisis incorporado por cada uno de ellos, aun cuando se realice mentalmente.

Prever las dificultades y potencialidades de un tópico es un modo de ahorrar tiempo y esfuerzos innecesarios, permite determinar el alcance de dicho tópico y la disposición de las fuentes de información.

Una vez determinada la viabilidad del tratamiento en profundidad de una temática, se necesita elaborar una guía o plan metodológico que permita organizar el trabajo, delimitar fuentes de consulta obligada y distribuir tareas en el caso de que se forme parte de un equipo.

Aun cuando el trabajo en una agencia resulta un tanto imprevisible, periodistas de experiencia señalaron que la planificación, tanto de la redacción en su conjunto como del periodista, es posible cuando se trata de un profesional especializado.

De acuerdo con los entrevistados, las coberturas se anuncian con uno o dos días de antelación, pero en ocasiones son inesperadas. Durante la observación realizada en la redacción Nacional se pudo percibir cómo los periodistas debían salir a cubrir eventos que no tenían previstos. En esos casos, el jefe seleccionaba a uno o dos de sus redactores, incluido él mismo.

Aun cuando los despachos son firmados por una sola persona, en ocasiones son resultado del trabajo en equipo en la redacción, durante la propuesta de temas e intercambio de conocimientos.

Durante la fase de elaboración de la información especializada se pone en práctica el plan metodológico, con la aplicación de técnicas de investigación como la documentación del tema, entrevistas con fuentes exclusivas y observaciones directas. Los periodistas entrevistados confirmaron la realización de las dos primeras. La tercera se dificulta por las dinámicas de trabajo y, en algunos casos, por la lejanía geográfica de los fenómenos a los que se refieren.

Dentro de las fuentes que declararon utilizar para la elaboración de la información especializada se encuentran tanto las documentales (diarios, noticieros de televisión, estaciones de radio, sitios web, informes, investigaciones, artículos de publicaciones especializadas, etc.) como las no documentales.

La mayoría destacó la importancia de acudir a instituciones y personas expertas en los temas abordados, a bibliotecas, centros documentación e investigación, coloquios, pero otros, más apegados a las tecnologías resaltaron la necesidad de aprovechar las facilidades que brinda Internet, tanto por la información, como por el intercambio con fuentes vivas mediante el uso del correo electrónico o la realización de preguntas online a través del chat).

Un periodista consideró la revisión bibliográfica en bibliotecas o archivos, limitado en las corresponsalías por la urgencia informativa con que se trabaja.

Hasta hace unos años, la agencia contaba con un centro de documentación propio, pero, tras el cambio de local de la sede en La Habana y el avance de las nuevas tecnologías, pasó a conformar un archivo digital que muy pocos de los periodistas entrevistados consultan.

Seguidamente el periodista pasa a la fase de la redacción del trabajo especializado en lo que se tienen presente tanto las normas de redacción y estilo como el conocimiento acumulado durante un largo período de estudio. Al cumplimiento de requisitos propios de un producto periodístico de este tipo como son el planteamiento y defensa de una hipótesis, la contrastación de fuentes, la documentación y la emisión de juicios y argumentos, se suma la adaptación a los rasgos de los géneros y el lenguaje de la agencia.

Con anterioridad explicamos la ruta que siguen los servicios especiales en Prensa Latina una vez elaborados hasta su salida.

La distribución establecida para la publicación de los servicios especiales en el sitio web de la agencia en ocasiones se dificulta porque los usuarios no encuentran la temática que les interesa. Los fines de semana se publica un por ciento mayor de especiales, los cuales corresponden a las esferas política y económica.

En uno de los meses seleccionados para desarrollar la observación en PL, se emitieron 83 materiales de esas temáticas y 81 sobre las otras áreas (Ciencia y Técnica, Cultura, Deportes, Pensamiento Latinoamericano, Por la ruta del esclavo, Crónicas, Mujeres del Tercer Milenio, Pueblos indígenas, Niños y jóvenes, Cuba) en conjunto, más cercanos a la tipología de IPE propuesta por Quesada (1998), pues se identificaron en ellos rasgos como: el planteamiento y sustentación de una hipótesis; el empleo de fuentes expertas, documentales o no; el predominio del estilo interpretativo y de géneros como el despacho explicativo, el interpretativo y el análisis.

Además, se advierte la existencia de un conocimiento sobre la temática por parte del periodista lo que se manifiesta mediante la aparición en los trabajos de elementos que ratifican ese conocimiento, además de información como cifras, datos background, juicios y argumentos, así como la contraposición y refutación de lo planteado por las fuentes informativas.

De acuerdo con el análisis de los trabajos de la muestra en los que se identificaron los rasgos propios de la PE (48 en total), la estructura de este tipo de trabajos consiste en: un título llamativo o genérico; un párrafo inicial o lead en el que se presenta la tesis a defender; la sustentación de esta en el desarrollo del cuerpo del despacho mediante los diferentes tipos de juicios, argumentos y la contrastación de fuentes; un cierre generalmente conformado por un juicio sintético o un argumento en los cuales pueden aparecer elementos predictivos. También aparecen en ocasiones, subtítulos que permiten organizar la información y hacerla más amena.

3. Conclusiones

Los rasgos identificados en los despachos especializados de Prensa Latina se derivan de la conjugación de dichas mediaciones que condicionan la producción final de la agencia. Las condicionantes antes mencionadas no pueden observarse de manera aislada, sino que son el resultado de la compleja concepción del proceso productivo de una institución de este tipo.

La mediación da cuenta no sólo de los componentes de la relación, sino también, de la manera en que se relacionan, y el sentido y la configuración resultante que dicha relación produce. El sentido que adquiere la articulación, así como sus resultados, son contingentes en cuanto son históricos. Giddens (cit. por Gamez, 2005) plantea que la relación mediadora está atravesada por momentos de estructuración/desestructuración/reestructuración.

Desde las condicionantes estructurales-organizativas, el proceso productivo de PL está concebido para la emisión al por mayor de despachos noticiosos, lo cual se orienta a partir de una cadena de dirección donde cada uno de los eslabones desempeña un rol que legitima y controla la producción informativa. La agencia está estructurada de manera que la confección, edición y emisión de los despachos se desarrolle de forma eficaz.

La conformación de las redacciones, divididas por esferas, supone un periodismo especializado en temáticas, que realmente responde más a la actualidad noticiosa y posterga la información más profunda para momentos de menor presión informativa. La constante rotación de los periodistas por las diferentes redacciones, sin permanecer un tiempo prolongado abordando el mismo tema, pudiera afectar la especialización, según expresaron algunos de los entrevistados.

La política editorial de la agencia y su intencionalidad, son condicionantes fundamentales para la selección y desarrollo de los temas e influye en la manera de abordarlos.

Desde el contacto diario, donde se organiza el proceso en las primeras horas de la mañana, los principales actores proponen la agenda del día y en muchas ocasiones, hasta la propia forma de presentarlo, información que se hace llegar a los clientes. En las previsiones o agenda diaria se anuncian los productos integrados fundamentalmente por aquellos acontecimientos que responden a la actualidad noticiosa y también aquellos que conforman el grupo de despachos de mayor elaboración.

Semanalmente, en los contactos, se hace una proyección de servicios especiales, los trabajos de mayor profundidad, que incluye las propuestas corresponsales, periodistas, la propia redacción de estos servicios, el departamento de Análisis y la dirección de la vicepresidencia para la Información. Esto se presenta los viernes en un espacio de socialización. Los despachos agendados como “exclusivos” son especialmente para usuarios que los solicitaron y los especiales en general responden al criterio de algunas secciones fijas de la entidad.

En los servicios especiales emitidos los fines de semana, cuando el flujo noticioso desciende, se encontraron los rasgos más acentuados del periodismo especializado y la metodología propuesta para su desarrollo, así como una mayor calidad. Los transmitidos durante la semana en menor escala, conservan de manera más acentuada, los rasgos del periodismo generalista. Esto expresa la concepción de medio generalista con la apertura a espacios de producción especializada, lo cual se hace evidente hasta en el libro de estilo, donde se le dedica muy breve espacio a ese último tipo de servicio.

La producción especializada no está limitada del todo por los recursos materiales, pues, aunque los profesionales no cuentan con las condiciones para una conexión permanentemente rápida, PL es el medio cubano que posee mejores posibilidades de acceso a la red.

El intercambio entre los profesionales se produce en los espacios de socialización planificados dentro del proceso y en las áreas de redacción que comparten, aunque esto se afectó por el traslado a otra sede, no concebida para alojar a una institución de este tipo.

Los corresponsales se vinculan con los editores y jefes de redacción a través del correo electrónico y PLNet que les permite intercambiar acerca de los envíos, recibir orientaciones, sugerencias y ubicar sus trabajos directamente en la mesa del editor.

La ideología profesional es una de las condicionantes de mayor relevancia en la producción especializada, pues de ella depende en gran medida la realización y calidad de los trabajos especializados. La asistencia a cursos de preparación vinculados a las temáticas abordadas, al aprendizaje de otros idiomas y de aspectos propios del periodismo como profesión, así como la preparación individual constante, dotan a los profesionales de Prensa Latina de un conocimiento que les permite realizar análisis de mayor profundidad.

Existe el criterio de que los periodistas de la agencia, al tener como meta cumplir labores como corresponsales, deben tener un conocimiento general del acontecer mundial, así como de diversas temáticas; sin embargo, muchos de los entrevistados le atribuyeron a la especialización un valor fundamental, sobre todo, en el contexto actual, en el que la sobreabundancia de información exige cada vez más la existencia de profesionales capaces de explicar los acontecimientos y llegar a un público muy heterogéneo.

La realización de trabajos de mayor profundidad se logra en la agencia como una consecuencia del hacer diario de los periodistas. Estos, entrenados en la confección de despachos informativos, versiones, despachos contextualizados, consideran la producción periodística especializada como resultado y seguimiento del proceso generalista. A la producción especializada se incorporan rasgos específicos del lenguaje cablegráfico, interiorizados como parte de sus culturas profesionales.

Aunque en menor medida, las condicionantes de carácter externo median también la producción periodística especializada de PL. La agencia defiende la ideología y principios de la Revolución Cubana, lo cual encuentra en los textos especializados mayores posibilidades de expresar con rigor y calidad informativa su intencionalidad editorial.

Otras instituciones o personas como clientes y fuentes informativas intervienen mediante la solicitud de trabajos o la necesidad de divulgar determinada información.

Las fases de la producción especializada en PL se caracterizan por un mayor dinamismo que las de otros medios, mediadas por las rutinas propias del generalismo que a diario desarrolla la agencia. La redacción cotidiana de despachos informativos permite a los periodistas acumular datos, crear sus archivos personales, para posteriormente apoyarse en fuentes propias, todo lo cual favorece el análisis y la búsqueda de la profundidad.

No obstante, durante la etapa investigada, la limitación para hacer coberturas por falta de transporte y el escaso tiempo para acudir a centros de investigación y otras instituciones informativas debido al horario de redacción diaria, afectan en ocasiones, según el análisis de contenido realizado y las declaraciones de los entrevistados, la profundización en los temas y por tanto, la elaboración de la IPE.

El acceso al correo electrónico y a Internet en general, permite a los periodistas contactar con fuentes distantes geográficamente y obtener el criterio de personalidades vinculadas a un tema o asunto; sin embargo, no ocurre lo mismo con la vía telefónica, muchas veces empleada en las corresponsalías, porque desde la central, resultaría muy costoso para la agencia.

El plan individual de preparación de los despachos especializados se hace, por lo general, en función de las rutinas profesionales, aunque algunos entrevistados remarcaron la necesidad de partir de una hipótesis, tesis o planteamiento, que les permita establecer un método de desarrollo.

Un bajo por ciento de los servicios especiales analizados, reflejó falta de congruencia entre el planteamiento inicial o introducción del trabajo y el resto del cuerpo del despacho. En este sentido se encontraron algunos trabajos que comenzaban sustentando una tesis y de inmediato pasaban a referir citas de fuentes seguidas unas de otras de forma reiterada y, en ocasiones, sin una debida atribución.

En otros casos también se detectó la ausencia de fuentes expertas identificadas y poco empleo de las documentales como investigaciones publicadas, libros sobre la temática, videos, u otras fuentes de este tipo, que admite el periodismo especializado.

El análisis del producto final, condicionado por gran parte de las mediaciones trianguladas anteriormente, evidenció que un conjunto de servicios especiales de PL, emitidos sobre todo, durante la semana, requerirían mayor tratamiento, no desde la temática, sino teniendo en cuenta la concepción del método de desarrollo de la IPE, el cual propone indagar en los porqués de los acontecimientos, contextualizarlos, fundamentarlos con información documental y el adecuado manejo de las fuentes.

Sin embargo, los despachos de esta misma jerarquía, transmitidos durante los fines de semana, se corresponden con la propuesta acerca de las características de la IPE, pues son mensajes de mayor calidad informativa por su documentación, profundización, equilibrada estrategia de fuentes y razonado análisis.

La mayoría de los entrevistados afirmó que vincular la producción noticiosa con la realización de despachos especializados contribuye a difundir la ideología e intencionalidad de Prensa Latina, pues son trabajos con mayor libertad creativa y posibilidades de expresión.

El periodismo especializado, con su metodología y la diversidad de formas de tratar los acontecimientos, proporciona a la agencia otra oportunidad de brindar una visión alternativa desde América Latina.

4. Referencias bibliográficas

Ferrer, A. (2002). La nueva modernización y las exigencias de especialización informativa. Recuperado de: http://www.saber.ula.ve/bitstream/123456789/18085/1/art4_am_n10.pdf. [ Links ]

Gámez, N. (2005). La mediación como objeto de estudio de la comunicación: crítica y perspectivas. (Tesis de Maestría). Universidad de La Habana, Cuba. [ Links ]

González, I. (2009). Viaje desde la semilla. Un estudio sobre el proceso de construcción de la noticia en el Noticiero Nacional de Radio. (Tesis de Licenciatura). Universidad de La Habana, Cuba. [ Links ]

Quesada, M. (1998). Periodismo especializado. Madrid: Ediciones Internacionales Universitarias S.A. [ Links ]

Ramírez, F. (1999). Comunicación especializada. Madrid: Ediciones Tucumán. [ Links ]

Wolf, M. (2005). La investigación de la comunicación de masas. La Habana: Pablo de la Torriente. [ Links ]

5. Notas

1[1] Los resultados expuestos aquí forman parte de la tesis de Licenciatura de Glenda Arcia. Un fragmento de este artículo fue presentado también por las autoras, como parte de la ponencia “Siguiendo la ruta de las agencias en el siglo XXI: mediaciones y producción periodística” en el VI Congreso Internacional Latina de Comunicación Social celebrado en Santa Cruz de Tenerife, España, del 2 al 5 de diciembre de 2014, auspiciado por la Revista Latina de Comunicación Social.

2[2] De viernes a lunes se publican los Políticos; los martes, el Servicio Cuba; los jueves, Por la ruta del Esclavo y Cultura; los viernes, Pueblos Indígenas, Niños y jóvenes y Pensamiento Latinoamericano; los sábados Ciencia y Técnica y Deportes; los domingos, Crónicas y Mujeres del Tercer Milenio.

3[3] Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

Recibido: 25 de Septiembre de 2018; Aprobado: 22 de Octubre de 2018

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons